➹ Cap. 25
Una vez que llegaron a la mansión donde Elena fue secuestrada por Tyler, Elijah detuvo su camioneta al frente del lugar.
─ Lo lamento ─ se disculpó Elijah de repente hacía la doble de Petrova.
─ ¿Por qué? ─ preguntó Elena mirándolo confundida.
─ Por haberte atacado ─ recordó Elijah.
Elena suspiró, no lo culpaba por haberla atacado ya que sabía que Elijah no fue consciente de sus acciones en ese momento al tener veneno de licántropo en su sistema.
─ No te preocupes, ya pasó, además, lo hiciste inconscientemente ─ dijo Elena.
Elijah la miró por un momento en silencio antes de hablar de nuevo.
─ Lo que viste en mí mente... ─ murmuró Elijah.
─ Ya lo olvidé ─ mintió Elena deteniendo sus palabras.
Elena no quería hablar de las ex novias de Elijah con quiénes él la había confundido en medio de su estado de fiebre, por lo que prefería fingir demencia.
─ Bien ─ Elijah le dio una mirada antes de bajarse de la camioneta.
Elena también se bajó con lentitud observando la mansión delante de ella.
─ Quédate un momento aquí, Niklaus está discutiendo con Rebekah, es mejor que no escuches nuestra drama familiar ─ dijo Elijah antes de entrar a la mansión.
Elena suspiró sentándose en los escalones de afuera.
─ Parece que se olvidan que soy vampira y puedo escuchar todo ─ susurró Elena.
Elena se mantuvo quieta y en silencio escuchando la pelea de los originales inevitablemente, enterándose que Rebekah se había unido con Marcel para derrotar a Klaus pero su plan no salió como esperaron y él les ganó volviendo a ser de nuevo el rey del Barrio Francés, también escuchó a Klaus reclamándole a ambos por diferentes situaciones y éstos también a él por su comportamiento.
─ ¡Qué familia! ─ dijo Elena al escuchar la pelea verbal.
Cuando se aburrió de escuchar tanta pelea y discusión, Elena dejó de oírlos y puso su mirada al cielo un momento.
Minutos después la puerta se abrió de golpe sacando de sus pensamientos a Elena quién vio a Klaus ir hacía ella.
─ Entra a la camioneta ─ mandó Klaus mirándola mientras abría la puerta.
Elena lo miró confundida sin saber bien lo qué había pasado al final ya que no había escuchado el resto de la discusión.
─ ¿Elijah y Rebekah? ─ preguntó Elena.
─ Ellos se quedan aquí y tú te vienes conmigo, amor ─ mencionó Klaus.
Elena levantó sus cejas al escucharlo, de inmediato negó con su cabeza, ella no se iba a quedar a solas con Klaus con lo temperamental que él era y con lo mal que ellos se llevaban.
─ Yo no iré contigo ─ le dijo Elena.
Klaus se acercó al doppelganger tomándola de su brazo luego de oírla.
─ No te estoy preguntando si quieres o no venir conmigo, te doy una orden, entra a la camioneta ─ bramó Klaus.
Elena lo miró mal, odiaba cuando Klaus se creía con el derecho de darle órdenes.
─ Bien ─ Elena se acercó a la camioneta entrando de mala gana en está.
Segundo después Klaus arrancó la camioneta saliendo con rapidez del lugar alejándose de la mansión donde habían quedado sus dos hermanos.
─ ¿Cómo te fue con mí hermano en el pantano, amor? ─ preguntó Klaus iniciando una conversación de nuevo.
Elena lo miró de reojo al escucharlo, el tono de voz de Klaus era demasiado burlesco molestando a Elena más que antes.
─ ¿Sabes qué? Pudrete ─ deseó Elena.
Klaus se rió entre dientes al suponer que Elena no había pasado una linda estadía en el pantano.
─ Por lo visto no fue lo que esperabas, me gustaría decir que lo lamento por ti pero estaría mintiendo ─ dijo Klaus.
Elena se inclinó un poco en su lugar girando su cuerpo para ver mejor a Klaus.
─ Eres tan insoportable que me sorprende demasiado que tus hermanos te aguantaran tantos siglos sin intentar dejarte, oh, cierto, les ponías las dagas cuando querían huir lejos de ti ¿Verdad? ─ soltó Elena molesta.
La sonrisa anterior que había tenido Klaus en sus labios se borró al escuchar las palabras de Elena haciéndolo enojar.
─ No me quites la paciencia ─ advirtió Klaus apretando sus manos en el volante.
─ ¿Acaso la tienes? ─ preguntó Elena mirándolo sin importarle su advertencia.
─ Te sorprenderías cuánta paciencia tengo para no arrancarte el cuello por tu insolencia hacia mí ─ dijo Klaus.
Elena se cruzó de brazos blanqueando sus ojos en el proceso, no siguió con la conversación ya que no quería seguir discutiendo con él.
[...]
El nuevo lugar donde viviría de ahora en adelante mientras estuviera embarazada era demasiado grande algo que no le sorprendió mucho a Elena ya que sabía que Klaus estaba acostumbrado a grandes lujos.
─ Está será tu habitación ─ Klaus entró en una de las tantas habitaciones de la plantación mostrándosela a Elena.
Elena miró la habitación en silencio, era espaciosa por lo cual le gustó.
─ Bien, quiero dormir un rato, estoy cansada ¿Te puedes ir? ─ pidió Elena.
Ella quería dormir un poco después de la incomodidad que había pasado en el pantano.
─ Dormirás después, ahora irás conmigo, te presentaré a mis nuevos vampiros, quiero que te conozcan ─ dijo Klaus.
Elena ni siquiera tuvo tiempo de aceptar ya que Klaus la tomó de su brazo llevándola a la planta baja de la residencia dándose con varios vampiros alrededor de una mesa.
─ Elena ─ susurró Marcel al verla de nuevo después de un tiempo.
Marcel se había sorprendido bastante cuando Tyler le había dicho que Elena estaba embarazada de Klaus, al principio él no le creyó ya que Elena era una vampira y por lo tanto imposible que estuviera embarazada hasta que supo que hicieron una transferencia del bebé de la verdadera madre al vientre de Elena.
─ Hola ─ saludó Elena al verlo nuevamente.
Klaus los miró a ambos en silencio por unos segundos antes de hablar.
─ No hace falta presentaciones entre ustedes dos cuando ya se conocen bastante bien ¿Verdad Elena? ─ Klaus fingió una sonrisa.
Marcel sonrió de costado observando por un momento a Klaus
─ Si, nos conocemos muy bien ─ dijo Marcel volviendo su mirada a Elena.
Elena se atragantó un poco con su saliva al entender las palabras de Marcel, en ese momento recordó su etapa sin humanidad cuando se acostó con Marcel.
Klaus miró con seriedad a Marcel al saber perfectamente el significado de sus palabras.
─ ¿Ella es la vampira embarazada? ─ preguntó uno de los vampiros presentes.
Klaus sonrió desviando su atención al escuchar al vampiro, atrajo el cuerpo de Elena hacía él tomándola de sus hombros y poniéndola en el centro del lugar.
─ Si, está es Elena, la vampira que tiene a mí hija dentro suyo ─ comentó Klaus.
Klaus la presentó hacía sus nuevos vampiros para que éstos la conocieran bien y así evitar problemas.
Después de esa corta presentación, Elena tomó asiento con los demás vampiros y Klaus, escuchó al híbrido dar órdenes al ser quién controlaba el Barrio Francés ahora en adelante al ser el nuevo líder después de derrotar a Marcel.
La conversación llegó a aburrir un poco a Elena hasta que Klaus le ordenó a los vampiros cazar a los licántropos del pantano para que estuvieran más tranquilos.
Elena no pudo evitar preocuparse al escuchar tal órden de Klaus, ella sabía que los licántropos no le hicieron nada como para que él mandará a sus vampiros a matarlos como si no fueran nada.
Realmente la preocupó y a la vez la sorprendió ya que Klaus sabía perfectamente del orígen de la madre verdadera de su hija, él prácticamente había mandado a matar a una manada que también era parte del bebé que ella esperaba.
Con esa decisión de parte del original, a Elena ya no le sorprendía nada viniendo de Klaus de ahora en adelante, si antes tenía un mal concepto de él, ahora mucho más.
─ ¿Por qué tan callada? ─ preguntó Klaus mirándola una vez que los vampiros se fueron a cumplir sus órdenes.
Elena se levantó del lugar donde Klaus prácticamente la obligó a sentarse.
─ Eres peor de lo que creí ─ dijo Elena.
Klaus frunció su entrecejo al escuchar a Elena decirle eso.
─ ¿Y ahora de qué me acusas? ─ preguntó Klaus cruzándose de brazos.
Elena no podía creer lo descarado que podía ser Klaus al fingir demencia.
─ Mandaste a matar a una manada que es parte de tu hija ─ recordó Elena.
La mirada de Klaus se oscureció por un momento al escucharla.
─ ¡Yo soy su única familia! ─ dijo Klaus con seriedad.
─ Pobre de tú hija entonces por tener un padre como tú ─ soltó Elena.
Klaus no era de demostrar sus sentimientos pero inevitablemente al escuchar las palabras de Elena, le afectó bastante.
Al saber que había dado en un lugar sensible de Klaus, Elena se arrepintió por un segundo de haberle dicho eso aunque en realidad era lo que ella pensaba realmente.
─ Cuando mí hija nazca seré su única familia, no necesitará de nadie más, ni siquiera de una madre sustituta como tú ─ dijo Klaus.
Elena apretó sus labios al escucharlo mientras lo veía irse, al no querer seguir ahí, intentó irse de la plantación pero dos vampiros la detuvieron en la entrada.
─ No puedes salir de aquí, son órdenes de Klaus ─ informó uno de los vampiros.
Elena gritó maldiciones mentalmente hacia Klaus al saber que pretendía dejarla como una prisionera en ese lugar, cuando estuvo a punto de irse a su nueva habitación, Elijah llegó justo matando a los vampiros temporalmente.
─ Elijah ─ pronunció el doppelganger al verlo.
─ Debemos irnos de aquí ─ dijo él mirándola.
Eso era lo que más quería pero aunque tuviera la oportunidad de irse, no podía hacerlo, no era bueno molestar más de lo que ya lo había hecho a Klaus.
─ No puedo, si me voy de aquí Klaus se molestará demasiado y va a encontrarme dónde quiera que esté ─ supuso Elena.
Elena no quería estar huyendo de Klaus para siempre, esa no era vida para ella.
─ Elena...
─ Klaus mandó a sus vampiros a una casería de licántropos al pantano ─ contó Elena.
─ ¿Y eso qué? ─ preguntó Rebekah llegando al lugar.
Elena los miró.
─ Los lobos que Klaus quiere que los vampiros maten son parte de la manada de Hayley y por lo tanto de éste bebé ─ dijo Elena al recordar la conversación con Eve.
Rebekah y Elijah se miraron mutuamente por un momento al escucharla.
─ Ayuden a los lobos ─ pidió Elena sintiendo compasión por éstos ya que habían sufrido bastante por causa de la maldición que Marcel hizo poner en ellos ─ yo estaré bien aquí ─ aseguró.
─ Está bien, trata de no molestar a Niklaus o estará más enojado ─ recomendó Elijah.
Elena suspiró al escucharlo ya que antes de que Elijah fuera allí, ella había tenido una discusión con Klaus haciéndolo enojar más de lo que ya estaba.
─ Bien ─ murmuró Elena.
Elijah le dio una última mirada antes de irse con Rebekah dejando a Elena en la residencia.
¡CAPÍTULO 25!
Aquí les dejo un nuevo capítulo de está historia.
Elena volvió nuevamente con Elijah al lugar donde vivía con los originales pero no tardó mucho en irse de nuevo.
Klaus y Elena tuvieron de vuelta una discusión después que Klaus mandará a sus vampiros a matar a la manada de licántropos en el pantano.
¿Qué tal el nuevo capítulo?
JAJAJA, SE LA PASAN PELEANDO.
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