Karlee

Chris termina llevándonos a un lugar, creo que es una zona de calles abandonadas. Me rasco la garganta y luego salimos del coche, el brazo de Isaac me rodea por la cintura y sonrío y luego miro el cuerpo de Jackson que ya no se movía, enarco una ceja e Isaac sigue mi mirada, mis ojos se entrecierran e Isaac, con su mano libre, estira la mano para picarme pero rápidamente aparto su mano, enviándole una mirada y él solo se encoge de hombros.—Creo que ha dejado de moverse...—,dice.

Los ojos de Argent se encuentran con los míos y luego sus ojos se dirigen al brazo que me rodea la cintura, levantando una ceja. Oh, odia a los hombres lobo. Me aclaro la garganta, quitando el brazo de Isaac alrededor de mi cintura y él me mira, con las cejas fruncidas, luego debe haber notado la mirada de Argents, lo que le hizo dar un paso atrás y poner los ojos en blanco.

—¿Dónde está Derek?—Como si fuera una señal, Derek comienza a correr hacia nosotros a cuatro patas y aterriza frente a nosotros, mirándonos a través de sus pestañas y cejas, con los ojos de un rojo amenazante.—Vine por Jackson, no por ti—.

—Temo decirte, que eso no me consuela—.Derek admite, siendo el lobo agrio que es. Se gira hacia Scott e Isaac. —Llévenlo adentro—.Dice, refiriéndose a Isaac y se gira hacia mí.—¿Qué estás haciendo aquí?—

—Lanzando un Scoppio del Carro—.Digo, permitiendo que mi acento sea marcado entonces veo que alguien me entrega algo. Miro para ver una navaja de hoja negra junto a Chris.

—La necesitarás—.Me dice y yo la acepto vacilante, metiéndola en mis joggers.

Derek frunce las cejas pero yo sólo me giro y miro hacia abajo para ver la bolsa de Jackson en el suelo.—¿Dónde están?—pregunta Scott.

—¿Quiénes?—

—Peter y Lydia—.

Derek sólo se acerca a la bolsa y empieza a abrir la cremallera.—¡Whoa! ¡Espera un poco! ¡Dijiste que lo salvarias!—

—Ya pasamos eso—.Mientras Scott comienza a protestar, Derek le interrumpe.—¡Solo piénsalo, Scott! Gerard lo controla ahora. Hizo de Jackson su propio perro guardián, y el puso todo esto en movimiento para que Jackson sea más grande y poderoso.—

Miro a Argent, que niega con la cabeza.—No. No, él no haría eso. Si Jackson es su perro, ya esta rabioso, y mi padre no dejaría un perro rabioso vivo—.

—Claro que no...—Aparece Gerard.—Algo así de peligroso, fuera de control... debe morir—.Derek va a matar a Jackson pero éste le pone las garras en el estómago haciendo que me ponga en tensión mientras se levanta, lanzando a Derek al otro lado.—Bien hecho hasta el fin, Scott. Como el buen amigo que eres, trajiste a Jackson con Derek para salvarlo. Lo único que no sabías es que estarías trayendo a Derek a mí también—.

Justo en ese momento, miro para ver una flecha que viene a por mi cabeza y lo mismo hizo Isaac porque rápidamente me empuja al suelo ya que golpea su hombro haciéndole caer a mi lado. Rápidamente me arrodillo junto a él, buscando ver a la persona que le disparó y Allison se acerca haciendo que la mire, horrorizada.—¿Allison?—

Scott se precipita hacia nosotros y le ayudo a llevarse a Isaac, ignorando mi herida. Lo dejamos en el suelo e Isaac murmura un montón de palabrotas en voz baja.—Sácalo, Karlee, de inmediato—.

Mis labios se fruncen y miro la herida, rodeándola con los brazos y sacándola. Él gruñe, poniéndose en pie, y yo veo cómo los dos cambian a sus formas de hombres lobo y se apresuran a salir. Asomo la cabeza para ver qué pasa. Todo el mundo se está lanzando y enarco una ceja.

—Boo—.Casi salto al ver a Peter detrás de mí y lo fulmino con la mirada antes de volver a mirar. Mis ojos se abren de par en par, viendo como Allison se acerca a Isaac, apuñalándolo con cuchillos y él se inclina mientras ella va detrás de él, apuñalando su espalda y sacando los cuchillos mientras él cae al suelo. Estaba a punto de correr pero una mano me tapa la boca y un brazo me retiene.—Todavía no, pero te dejaré ir más tarde...—

Veo como el Kanima se acerca, rodeando con su brazo el cuello de Allison.—¿Qué estás haciendo?—

—Justo lo que planeaba hacer...—susurra Scott. ¿Qué? ¿Me estoy perdiendo algo?

—Lo sabes—.

—¿De qué está hablando?—

—Fue la noche en el hospital, ¿cierto? Cuando amenacé a tu madre. Sabía que había notado algo en tus ojos. Pudiste olerlo, ¿o no?—.pregunta Gerard y mis cejas se fruncen.

—Está muriendo—.

—Asi es. Desde hace tiempo, lo malo, es que la ciencia aún no tiene cura para el cáncer...Pero lo sobrenatural sí—.Gerard dice y yo me congelo.

—Que monstruo—.escupió Chris.

—No aún.—Gerard dice con una sonrisa. De todas formas es viejo, podría morir en un día o dos, ¿por qué se molesta en seguir viviendo?

Mis ojos se llenan de lágrimas y me agito en los brazos de Peter, pero no me suelta.—¿Qué estás haciendo?—pregunta Allison.

Gerard mira al Kanima mientras su agarre se estrecha en su cuello.—¿La matarías a ella?—

—¿Si es para sobrevivir...? Mataría a mi propio hijo—.

Gerard admite y luego mira a Scott con ojos de advertencia.—Scott...—

—Scott, no lo hagas. Sabes que me matará después. Será el Alfa—.Grita Derek, paralizado.

—Es cierto...Pero creo que él sabe eso, ¿no es así, Scott? Sabe que el premio final seria Allison. Y si hace esta pequeña tarea por mí, podrán estar juntos. Eres el único aquí que no encaja, Derek. Por si no lo sabias, no se puede competir contra el amor de los jóvenes—.

—Ahora—.Peter susurra y me suelta, echándome fuera y tropiezo en mis pasos mientras todos los ojos se giran hacia mí y Derek se tensa. Aunque no éramos cercanos, nos preocupamos el uno por el otro y lo sabemos, es como un hermano mayor o algo parecido.

Gerard debió notar que Derek se tensaba.—Oh, te preocupas por ella, Karlee Russo. Mejor aún—.Asiente al Kanima -ni siquiera le llamo Jackson- y suelta a Allison, agarrándome en un instante e Isaac gruñe, levantándose pero Gerard le dispara casualmente haciéndolo gemir, cayendo de nuevo al suelo.

No deseo la muerte contra la mayoría de la gente pero él, simplemente desencadena algo en mí. Creo que es ang... Antes de que pueda continuar con mis pensamientos, me golpean contra la pared lo que me da un deja-vu con Jackson desde los vestidores.—Derek...Scott—.Gerard les dice a los dos.

Scott se acerca a Derek y le obliga a levantarse. Gerard se acerca y le levanta la manga mientras Scott obliga a Derek a abrir la boca mientras yo observo, sintiendo las garras de Kanima clavarse en mi cuello. Derek lo muerde y Gerard grita antes de sacar el brazo y sonreír ampliamente, levantando el brazo en señal de victoria, pero entonces la sangre negra rezuma de su herida.

—¿Qué? ¿Qué es esto? ¿Qué es lo que haz hecho?—pregunta Gerard con incredulidad.

—Gerard siempre tiene un plan...pero yo también tengo uno—.

Gerard saca una caja de pastillas y se la coloca en los brazos.—¡Wolfsbane!—

—¿Por qué no me dijiste?—pregunta Derek.

—Porque puede que seas un Alfa...pero no eres mío—.

Gerard aprieta las pastillas hasta convertirlas en polvo, llora sangre negra y luego la vomita. Como si usara toda su energía, grita:—¡Mátalos! Mátalos a todos!— Exige.

El Kanima clava sus garras en mi herida y yo gruño de dolor, echando la cabeza hacia atrás y apretando los ojos y siento que sus manos tocan mi corazón. Literalmente. Abro los ojos y miro al Kanima- Jackson. Jackson. Le miro y veo que sus ojos tienen lágrimas como los míos.

—¡No!—Grita Isaac.

La garganta me pica más y más por segundos y muevo las manos, agarrando la espada pero con su cola, la agarra y la lanza lejos así que con mis últimas energías, grito. Grito lo más fuerte posible.

Grito tan fuerte, que las paredes temblaron.

Grito tan fuerte, que se taparon los oídos.

Grito tan fuerte que me suelta.

Un coche entra y golpea a Jackson de Kanima mientras mi espalda choca con la pared, agarrando mi abriría y algo me lanzó. Miro para ver a Peter y envuelvo la chaqueta con fuerza alrededor de mi cintura para detener el flujo de sangre, resbalando por la pared. —¿Si pude darle?—grita Stiles y yo sonrío, respirando con dificultad, pero mi sonrisa no dura mucho porque Jackson salta sobre el coche.

Miro mientras se apresuran a salir del coche.—¡Jackson!—Lydia grita e Isaac se acerca a mí, mis ojos se agitan y me agarra la mano, las manos se vuelven negras por las venas mientras el dolor desaparece lentamente, pero no demasiado, sino lo suficiente para mantener mis ojos abiertos.—¡Jackson!—Muestra una llave.

Una llave. Qué salvavidas. Isaac se levanta, también apoyado en la pared, y mi cabeza se apoya en su hombro, apretando su mano con fuerza y realmente siento que no me estoy muriendo. Su cabeza se apoya sobre la mía y presiona sus labios contra mi sien mientras mis ojos se cierran con fuerza, un río de lágrimas abandonando mi mejilla.

No hemos cumplido nuestras promesas, pero estamos vivos.

Él toma la llave y vuelve lentamente a su forma humana sólo para que Derek y Peter le lancen sus garras a la espalda y lo levanten mientras se ahoga. Lo sueltan y Lydia se apresura a su lado y entonces miro hacia abajo para ver que la chaqueta no estaba ayudando, el charco de sangre a mi alrededor sólo había crecido.

Mis ojos revolotean y los cierro, sintiendo que la paz me invade, pero no se siente bien. Es como si, si cierro los ojos, esta vez no los volveré a abrir así que me obligo a abrir los ojos y miro para ver que Jackson se estaba transformando en un hombre lobo y luego Lydia lo abraza con fuerza.

Débilmente vuelvo la mirada hacia Stiles que mantenía una expresión de dolor.

—Mierda—.Un gemido escapa de mis labios y los dos se separan, los ojos se giran hacia mí y es como si se dieran cuenta de que me estoy muriendo porque se apresuran a acercarse a mí y me ayudan a levantarme con Isaac.—Esto es realmente, muy conmovedor pero me estoy desangrando así que ¿podemos continuar con esto de momento?—

❀

Pasan unos días y ahora, Isaac y yo estamos tirados en mi cama. Estoy leyendo un libro mientras él me observa, levanto la vista de mi libro, levantando una ceja cuando él deja mi libro a un lado, subiéndose encima de mí y apoyando su cuerpo sobre mí, con la cabeza acurrucada en mi cuello y me río, ignorando el dolor mientras jugaba con su pelo.

Mis labios se fruncen cuando levanta la cabeza.—Hola—.Sonrío ampliamente, inclinando la cabeza hacia un lado.

—¿Crees que esto durará mucho?—Isaac pregunta y mis cejas se fruncen en confusión.—Nosotros dos. ¿Me dejarás alguna vez o dejaré de ser suficiente? ¿Siquiera soy suficiente...?—

—¿A qué viene eso?—Pregunto, tomando su mejilla y besando su frente mientras él suspira, poniéndose de pie y levantándose, sin atreverse a mirarme a los ojos.—Nunca te dejaré, Isaac y eres más que suficiente para mí, creo que la pregunta debería ser al revés—.

Me siento, sin molestarme en ponerme de pie porque aún no tengo fuerzas. Él me mira.—Qué...siempre serás suficiente y no habría una razón para que te dejara. A menos que grites. Eso es ensordecedor. Malvado, pero ensordecedor—.

—No lo haré. Ya está. Problema resuelto, ahora ven aquí—.Extiendo los brazos y él sonríe, apagando la luz y acercándose a mí, rodeándome con sus brazos.

Mis labios se curvan mientras él toma mi mejilla, presionando sus labios contra los míos. Luego se separa.—Pero, ¿y si...?—

—Isaac, te quiero demasiado para dejarte—.Y lo arruiné. ¿Me importa? No, si me deja por su exceso de pensamiento, bien podría saber lo que siento, y lo fuertes que son mis sentimientos.

Isaac parpadea y luego pega sus labios a los míos, agarrando mi cintura y luego se separa, besando cada centímetro de mi cara.—Yo...te quiero...más—.Dice entre besos.

—¿Más?—Pregunto, rodando y apoyando mi cabeza sobre él con los brazos sobre su pecho.—Me has hecho esperar Lahey, me has hecho esperar demasiado—.