CAPÍTULO 12: THE TRAITOR
—— THE TRAITOR ——
—Mierda.— Murmuró Astrid mientras se despertaba con algo de dificultad y veía que estaba metida en el maletero de un coche, lo que hizo que empezara a dar patadas al cristal, con el objetivo de romperlo y huir, pero su plan se truncó cuando su secuestrador detuvo el coche y se bajo de él con el objetivo de detenerla.
—¿Enserio?— Inquirió Tyler incrédulo, haciendo que Astrid le mirase sorprendida.
—¿Tyler?— Dijo sin creer que hubiera sido él quien la había secuestrado, siendo sinceros lo hubiera esperado por parte de Marcel, pero ¿por parte de Tyler? Nunca.
—No te esfuerces, Astrid. Sabes que ahora no estás en condiciones de vencer a un híbrido.— Afirmó el híbrido al saber cuáles podían ser las intenciones de la rubia.
—Déjame, traidor, mestizo. Pedazo de...— Empezó a decir Astrid justamente cuando Tyler la cargaba a su hombro como si fuera un saco de patatas.
—¡Callate!— La ordenó Tyler enfadado. —O será mucho peor para ti.— La advirtió, haciendo que Astrid supiera que nadie se esperaría que Tyler la hubiera secuestrado, pero quien la preocupaba era Hayley, ¿dónde estaba?
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—¿Dónde estamos? ¿Y Hayley?— Preguntó Astrid justamente cuando Tyler la dejaba en el suelo y ella podía sentarse en el porche de una pequeña cabaña.
—En el culo de Luisiana, Hayley esta bien. Dormida ahí adentro.— La tranquilizó Tyler.
—¿Qué vas a hacer con eso?— Preguntó Astrid al ver la navaja que el híbrido tenía en sus manos, ya no confiaba en nadie. Menos en quien la secuestrada.
—Depende de ti.— Aseguró Tyler mientras rompía la cinta que impedía que la rubia pudiera huir.
—Oye, fuiste tu el que me atacó a mi, ¿recuerdas?— Alegó Astrid con obviedad. —Me abordaste en mi propio jardín.— Le recordó mientras le miraba con una expresión de pocos amigos.
—Ese no es tu jardín, es el de Klaus.— Puntualizó el híbrido, haciendo que Astrid supiera que él sabía todo. —Estas viviendo con ese pirado. ¿Dónde está la chica que conspiraba en su contra y ayudaba a los demás?— Quiso saber, haciendo que Astrid agachara la cabeza sin saber que responder, las cosas habían cambiado.
—Tyler lo siento, han pasado muchas cosas desde la última vez que te vi.— Garantizó Astrid dándose cuenta de que para su desgracia habían sido demasiadas.
—¿Cómo lo de tu embarazo?— Preguntó sorprendiendo a Astrid de qué él lo supera, porque entonces cualquiera podría saberlo. —Un bebé híbrido.— Comentó el híbrido incrédulo. —Sí, ya me he informado. Estuve por el pantano haciendo preguntas y sabes que he averiguado.— Tyler se acercó a Astrid y la bajo la chaqueta que llevaba señalando su marca de nacimiento, esa marca que compartía con Hayley y con Taylor. —Esta luna creciente indica que provienes de una gran familia, como Hayley, algo así como la realeza de los hombres lobo.— La informó sorprendiendo a Astrid con aquello. —Y justo aquí está lo que queda de ellos.— Añadió haciendo que Astrid se diera cuenta de que había más cabañas y tiendas escondidas.
—Oye, ayudame.— Pidió la híbrida al ver a una mujer rubia, la cual salió corriendo.
—No pueden ayudarte, están en los bosques escondidos por qué los vampiros llevan décadas persiguiendoles.— Explicó Tyler mientras se acercaba a ellos un hombre.
—¿Es ella?— Preguntó el hombre señalando a Astrid con la cabeza.
—Sí, Duein.— Respondió Tyler. —Llévala adentro.— Le ordenó, haciendo que el hombre agarrase a Astrid.
—Esto te va a salir muy caro, Tyler.— La amenazó la Original.
—No estás en condiciones de amenazarme, Astrid. Sobretodo por que no quieres que les pase nada malo a Hayley, al bebé y a Taylor, ¿verdad?— Sonrió Tyler haciendo que Astrid se quedará en silencio para después Duein meterla en el interior.
—¡Astrid!— Exclamó Hayley aliviada de que estuviera bien. —¿Estas bien?— La preguntó preocupada mientras Duein la dejaba al lado de la mujer lobo, atándola al pie de un viejo horno de metal.
—Lo estaré cuando mate a Tyler por lo que nos ha hecho, maldito traidor.— Murmuró entre dientes mostrando lo enfadada que estaba.
—¿No puedes...?— Empezó a preguntar Hayley sin terminar la frase ya que sabía que Tyler desconocía la nueva capacidad de la Original.
—Lo intento pero me han inyectado un tranquilizante y algo de verbena. Así que estoy algo delimitada, pero es cuestión de tiempo.— Garantizó Astrid sabiendo que las cosas no iban a quedarse así, se negaba a permitirlo.
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—Tyler, últimamente un lobo ha estado vigilando a Astrid. La protegía como si instintivamente supiera que es miembro de su manada.— Explicó Hayley sabiendo que tenía que hacerle aquella pregunta.
—Miembros, en plural, Hayley. No sólo me protegía a mi, también a ti y a Taylor.— La corrigió Astrid sabiendo que ese lobo cuidaba de ellas por qué sabía que eran familia y que las tres eran vulnerables.
—Tu eres un híbrido, puedes convertirte en lobo cuando quieras, ¿eras tu?— Prosiguió Hayley esperando que de alguna forma pudiera ser Tyler que solo quería ayudarlas.
—No.— Negó el chico. —Pero solo los híbridos pueden controlar la transformación, y soy el único que queda, aparte de Klaus y de Astrid, la cual está algo inservible. Por eso he venido.— Explicó Tyler con tranquilidad.
—No se que pretendes, pero te advierto que la familia Original ha hecho una especie de pacto para mantenernos asalvo a mi, a Astrid, al bebé y a Taylor. Si nos haces daño te mataran.— Garantizó Hayley mostrando que está vez sería ella la que lucharía por Astrid como todas las veces que la Original había luchado por ella, aún estando embarazada.
—A ellos les interesas por qué estas vinculada a Astrid, nada más. Cuando dejes de estarlo les darás igual.— Afirmó Tyler sin creerse que los Originales pudieran tener cariño o aprecio a otra persona que no fueran ellos mismos.
—Hayley es mi familia y yo no la voy a dejar de lado, eso es la diferencia entre tu y nosotras. Nosotras lucharemos la una por la otra incluso hasta la muerte. Tu, en cambio, traicionarias como un cobarde a cualquiera de los tuyos, incapaz de hacer algo. Debiste de ser tu el que debia de haber sentido la muerte de cada uno de los híbridos a los que Klaus mató, eso te haría saber lo que hay que hacer y lo que no.— Dijo Astrid mostrando que para ella, el aprecio que le tenía a Tyler había desaparecido, él las tenía allí por algo, quería hacerlas algo, y ella no iba a permitirlo, haría lo que fuera con tal de mantener asalvo a su hijo y a su amiga.
—¿Crees que me das miedo?— Preguntó Tyler riéndose al ver que en aquellos momentos las amenazas de Astrid no servían para nada.
—Soy una mujer lobo, cabreada, embarazada y hormonal. ¿Seguro que quieres provocarme, bastardo?— Inquirió la mujer lobo mientras encarnaba una ceja a la espera que él dijera o hiciera algo.
—¿Qué te hace pensar que me asusta morir?— Preguntó Tyler sorprendiendo a ambas chicas con aquella pregunta. —¿Estas preparado?— Le preguntó a Duein.
—Cuando quieras.— Respondió el hombre mientras Tyler sacaba una jeringuilla de sacar sangre de un maletín.
—¿Qué estáis haciendo?— Preguntó Astrid al ver como este se acercaba a ella. —Tyler, por favor, no.— Le pidió la Original asustada por lo que pudiera estar tramando.
—Klaus destruyó todo lo bueno de mi vida, así que voy a arrebatarle lo que más quiere.— Garantizó sabiendo que tenía mucha suerte de que la híbrida llevara a su hijo, porque mataría dos pájaros de un tiro.
—No, por favor, Tyler, por favor.— Insistió la rubia justamente cuando Tyler la clavaba en el vientre la aguja haciendo que soltara un quejido de dolor.
—¿Estas bien?— Preguntó Hayley preocupada.
—Sí, no te preocupes.— La tranquilizó Astrid mientras miraba al hombre lobo, al cual le inyectó la sangre que la había sacado para después romperle el cuello.
—No penséis mal.— Las pidió haciendo que Astrid encarnará una ceja con obviedad. —Duein sabía donde se metía, se ofreció voluntario.— Aclaró con obviedad.
—¿Para qué lo matarás?— Preguntó Hayley incrédula de lo que Tyler había llegado a hacer.
—Es un hombre lobo y ha muerto con la sangre de Astrid en su organismo, que comparte con su bebé híbrido.— Explicó Tyler sorprendiendo a Astrid con lo que estaba planeando hacer, él siempre juzgó a Klaus por lo que había hecho, y parecía ser que él estaba imitando los pasos de su creador, algo irónico e hipócrita.
—Estas intentando convertirle en híbrido, eso es imposible.— Garantizó Astrid incapaz de creerse que la sangre de su bebé pudiera hacer algo así, la suya seguramente, porque era una híbrida. ¿Pero su hijo? Tenía la esperanza de que no pudiera albergar tanto poder, principalmente porque sabía que Klaus se beneficiaria de ello, aunque tenía la esperanza de que no fuera así, de que aquel bebé pudiera cambiar las cosas.
—He recorrido el país con manadas de lobos, una de ellas muy unida a una bruja.— Las explicó mientras desviaba su mirada de Hayley para centrarla en Astrid. —Tenia visiones aterradoras de tu bebé y de Klaus usando su sangre para crear esclavos híbridos.— Afirmó Tyler haciendo que la expresión de la Original se mantuviera inmutable, no le iba a dar el beneficio de que supiera que ella también pensaba así aunque tuviera la esperanza de que las cosas fueran diferentes.
—Estoy más que harta de las brujas y sus premoniciones sobre mi bebé.— Alegó Astrid cansada de todo aquel tema, ¿que mal podía hacer una criatura que todavía no había llegado al mundo? —Es solo un bebé.— Garantizó la híbrida incrédula.
—Tal vez o tal vez no.— Comentó Tyler mostrando que podía o no haber posibilidades de que ese niño fuera mucho más poderoso de que ya se creía o que no tuviera poder alguno y fuera un bebé normal, pero nadie quería correr el riesgo. —Ahí es donde entra Duein, encantado de hacer de conejillo de indias.— Las explicó haciendo que Astrid le mirase decepcionada, sabiendo que el odio que tenía hacia Klaus le había llevado a aquello, a estar solo. —Por si no lo habéis notado, esta gente no tiene mucho en la vida. Todos querran convertirse en la especie superior.— Afirmó el hombre lobo con seguridad en sus palabras. —El problema es que todos los híbridos están vinculados a Klaus, siguen todos sus pasos.— Las recordó haciendo que ambas chicas recordarán a todos los híbridos que habían muerto a causa de Klaus, y el único que quedaba con vida era Tyler, que únicamente buscaba venganza. —Y no voy a permitirlo.— Sentenció con firmeza mientras dejaba en una mesa un cuchillo.
—¿Cómo estás tan seguro de que sabe el poder de la sangre del bebé?— Preguntó esta vez Hayley esperando, al igual que Astrid, que él desconociera aquel detalle, aparentemente, tan relevante.
—¿Tu que crees? Klaus Mikaelson, asesino de hombres, mujeres y cachorros, quiere ser papá o tiene otro motivo oculto.— Sugirió haciendo que la duda se instaurase en las dos chicas.—Los híbridos toleran el sol, su mordisco es letal para los vampiros, tomarán Nueva Orleans en una semana ¿y sabéis que detendrá luego a Klaus?— Las recordó haciendo que ambas intercambiarán una mirada admitiendo que tenía razón. —Nada.— Aseguró justamente cuando Duein despertaba. —Tendrás que beber su sangre.— Le informó mientras cogía un cuchillo y se acercaba a Astrid.
—¿Qué? No.— Negó la Original justamente cuando Tyler la hacía un corte en la yugular.
—Hazlo.— Le ordenó a Duein el cual se acercó a la Original y empezó a subcionar su sangre, hasta que finalmente Astrid se deshizo de él, sabiendo que ahora estaba vinculada a ella o al bebé, o tal vez a las dos. Y eso las daba una ventaja a ella y a Hayley frente a Tyler, detalle que parecía que él había olvidado, el vínculo con el creador, y Astrid era la creadora y esta vez agradecía tener su lado de híbrida por completo.
—Hijo de perra.— Murmuró con despreció mientras Duein empezaba a perder el control.
—Duein, calma.— Le intento tranquilizar Tyler mientras le sacaba fuera de la cabaña, haciendo que Astrid y Hayley se mirasen sabiendo que esta vez eran ellas las que iban un paso por delante.
★★★
Siendo sinceros este episodio en general es de los que menos me gustan.
El personaje de Tyler le veo tan innecesario, osea lo fue en su debido momento, pero ¿aquí? No.
Con respeto a lo que pasa en el capítulo, bueno predice lo que en un futuro no muy lejano va a tener lugar y eso es interesante, principalmente porque he alterado un par de cositas para mantener el drama y crearlo. Aún así considero que no os lo veréis venir.
Se, y lo digo mucho, que me centro demasiado en lo que es la temporada 1, pero os garantizó que a partir de la 2 no me centraré en ello. Os puedo confirmar que se resolverán varias preguntas, entre ellas el origen de los poderes de Astrid, osea el porqué es así y esas cosas; se sabrá de Adelaide; y de la muerte de Carina, un hecho que será MUY importante.
Aunque en esta temporada sabréis más del padre de Astrid, el cual... bueno ha visto cosas y no está muy contento con las acciones de su hijo político. De verdad os digo que me hubiera encantado hacer una escena entre Klaus y su suegro, bueno los dos, solo por el drama... Uff.
Como adelanto os diré, que el sábado lanzaré una pregunta. Donde podréis hacerme la pregunta que queráis de la historia e independientemente de cual sea la responderé con sinceridad, incluye la posibilidad de que queráis haceros spoiler.
¿Qué os ha parecido el capítulo?
Os leo ❤️
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