WILL BYERS

Aun no entendía con exactitud a qué se refería el desuellamentes con todo esto, antes pensaba que solo era el odio que le tenía a Liz porque ella lo derrotó el verano pasado casi sola, pero con esas palabras... tenía bastantes dudas, dijo que nos mataría a todos, menos a ella y a mi

Camine afuera de ese lugar oscuro donde había visto a Liz, pero para mi sorpresa, mis amigos venían corriendo al lado de la chica que habíamos venido a buscar, Francine no se veía muy bien, tenía golpes y moretones

—¿Dónde carajos te metiste?— me preguntó Lucas mientras que nos apresurábamos a correr a la salida

—Por ahí— respondí mientras que lo seguía tranquilamente a la salida

—¡Corran antes que los oficiales nos atrapen y me corten el cabello!— grito Chandler

—¡Cállate, Chandler!— le reclamaron todos al unísono

Mientras que salíamos de ese bunker, no deje de pensar en las palabras tan extrañas que sacaba el desuellamentes por medio de Liz, como si la conociera mucho más antes de cuando ella lo derrotó el 4 de Julio

Cuando salimos de ese bunker, sugerí que fuéramos a mi casa, que era el lugar más seguro para escondernos, o al menos por el momento

(...)

—Muy bien solo le curamos la cara a Frank y... AHHHHHH— Chandler grito cuando abrió la puerta y se encontró al jefe Hopper, mi mamá, mis suegros y mi cuñado

—¿Cuarentena? ¿eh?— pregunto Hopper 

Jessie, Charlie, Rachel, Chandler, Joseph, Kali, Joy y Eleven bajaron inmediatamente la cabeza como si los hubieran regañado

—No hagan eso, da miedo— les dijo el señor Mortenson

—Dios ¿Qué te paso?— mamá y mi suegra miraron los golpes en la cara que tenía Francine

—Estoy bien, quien me preocupa es Steve— habló Francine señalando a Steve que lo sostenía con fuerza debido a que también tenía el labio partido y el ojos morado

En todo el camino Francine no soltó a Steve, ella dijo que lo estaba ayudando a caminar debido a la pelea que tuvo con uno de los oficiales del búnker, aunque yo creía que ellos eran más que amigos, Robin siempre lo dijo, solo que tengo entendido que las cosas entre ellos nunca se dieron

—Ahora los curamos a ambos— murmuró mamá llegando con el botiquín entre las manos

Los hermanos de Liz se sentaron en el sillón y enfrente tenían a Hopper, que por su cara no estaba contento, regañaba a los chicos frente a ellos, y ellos solo lo miraban con cara de lastima

Mamá decía que era como si Hopper tuviera siete hijos no oficiales, ya que la única oficial era Eleven

—Prometieron cuidarse, ustedes mismos sugirieron la cuarentena— hablo Hopper, ellos volvieron a bajar la cabeza en forma de regaño—Da miedo eso— volvió a hablar mientras hacia una mueca  

—Digo a mi defensa que estos tres se estaban volviendo locos y no dejaban de hablar con un balón que tenia una carita pintada— hablo Rachel mientras señalaba a Joe, Chandler y Joy

—En paz descanse Wilson— hablo Joy con una mano en el pecho, Joe y Chandler hicieron el mismo gesto

—Papá Hop, regáñala—Chandler señaló a Rachel acusatoriamente— ¡ella mató a Wilson!

—¿Al fin se deshicieron de Wilson?— preguntó el mayor hacia Rachel

—Si, al fin— Rachel sonrió orgullosa mientras que Hopper la atrojó hacia él en un abrazo que la rubia le respondió

—Muchas gracias, niña— suspiró aliviado

No tenía muchas ganas de oírlos a ellos, cada uno tenía sus situaciones, y en mi caso, me preocupaba más mi novia que estaba poseída por el desuellamentes, porque tenía mucho miedo de perderla

De un tiempo para acá, de verdad estaba dudando si quería estar con ella, él tuvo razón cuando me lo dijo, porque de verdad tenía dudas si de verdad la amaba, o solo me sentía bien a su lado porque me hacía sentir normal y que no soy un error, tenía miedo de que lo que sintiera por ella fuera agradecimiento y no amor

Y odiaba tanto haberme dado cuenta que de verdad estaba enamorado de Liz en este momento, odiaba que esto hubiera tenido que pasar para darme cuenta de todo lo que siento por ella, todo lo que ella significa para mí, de que no solo es agradecimiento, sino que haría lo que sea para cuidarla y mantenerla a salvo

Solo quería que ella estuviera bien y ya

Y así como ella me cuidaba, y como sentía que Liz me salvo, ahora yo debería hacerlo, porque me necesitaba, porque tal vez soy la única persona que la puede comprender en este momento

Tantas veces me había dicho que solo quería estar en paz, que se quería ir a vivir a una cabaña escondida en las montañas, donde nada la volviera a herir, y cuando me conto de eso y que le gustaría que en ese futuro, yo estuviera en él, no pude evitar pensar en que yo quería lo mismo a su lado, también quería tranquilidad

Mire en mi mesita de noche una foto que teníamos los dos juntos con unos sombreros de cumpleaños, Jonathan tomó la foto cuando fue el cumpleaños de mi mamá y Liz vino a comer pastel, mi hermano me la había regalado y planeaba regalarle una copia para navidad junto con un libro

Esa sonrisa que tenía en la foto y que me había cautivado desde el primer momento en que la conocí, ya había desaparecido al igual que el brillo que tenían sus ojos, ahora todo era negro

—¿Estás bien?— me pregunto Mike desde la puerta haciendo que dejará el marco de fotos en mis manos— perdón, es una pregunta estúpida... con todo lo que está pasando

—Ella no se lo merece— me limpie una pequeña lágrima rebelde que se me salió

—Lamento si casi no te he dicho nada sobre ella— Mike se sentó en el borde de mi cama con algo de cautela— yo y Liz no somos mejores amigos, pero debo admitir que nadie se merece ser la marioneta del desuellamentes... yo te vi a ti... y eso no se lo deseo a ella

—¿Por qué tuvo que ser ella, Mike? — trate de que mi voz saliera lo menos quebrada posible— daría lo que fuera por estar en su lugar

—No digas eso— Mike me miró como si me hubiera vuelto loco— además, sabes que ella es muy poderosa, a ti te salvamos, la podemos salvar a ella

—Él dijo que no la iba a soltar— hable con dificultad al recordar las palabras del desuellamentes— que acabará con todo... y nos dejará para el final

—¿Nos? ¿Tú y ella?

—Si

—Claro— Mike se levantó como si hubiera tenido una gran iluminación, se llevó las manos a la cabeza— Will, el desuellamentes no la va a matar, y a ti tampoco, podría matarnos a cualquiera de nosotros, menos a ti, tu eres el único que puede pararla, tú eres el único que la puede hacer volver

—¿En serio crees eso?

—Cuando tú fuiste desollado— empezó a explicar tragando seco— hubo un momento en que te estabas liberando, si intentas acercarte puedes hacerla volver

—¿Y quién me asegura que funcionara? — Pregunte con preocupación— tal vez se arrepiente, y también me intenta matar a mi

—No lo hará— me aseguró mientras tomaba mi mano— y si la queremos que todo esto pare, solo tú lo puedes hacer

—Lo haré— le asegure

Lo haría, de verdad lo haría, y no me importaba si me lastimaba en el proceso, si eso me aseguraba que tendría una oportunidad de recuperar a la chica que amo

(...)

JANE HOPPER

Todos me miraban con dudas al ver la tele encendida con el canal gris, mientras que me sentaba en medio de la habitación con la venda entre las manos. Quería intentar esto una última vez, lo pude hacer con mi madre hace un par de años, y ahora mi hermana me necesita

Primero pensé que Liz solo estaba enferma, pero cuando comprobé que en realidad era espía del desuellamentes, solo quise salvar, buscando de la manera convencional, pero podría hacerlo como con mamá, podría saber que hacer para salvarla

—Jane, sabes que...— hablo Joey, pero lo interrumpí antes de que siguiera

—Conozco la reglas Joey, estaré bien— le sonreí a mis hermanos— confíen en mí, sabré qué pasó con Liz, y sabremos cómo detenerlo

Me puse la venda en los ojos, logré notar como las luces parpadearon un segundo, y luego me encontré en aquello que nombramos como "El vacío"

Enfrente de mí estaba mi hermana sentada en una silla alta. Aún tenía esa ropa rara color negro y parecía estar mirando algo sin detenerse en un lugar específico, no decía nada, ni parecía pensar nada

—Liz...— la llame mientras me acercaba a ella, pero de nuevo seguía sin decir nada— quiero que me muestres que pasó, que aún eres tú, que aún eres mi hermana— tome su mano entre las mías

La mirada de mi hermana fue hacia a mí, pero era como si pudiera ver a través de ella, su mirada me decía que tenía miedo, pero era como si él no la dejará hacer nada, hasta que apretó la mano que sostenía, y a los segundos, ella se desvaneció con una niebla extraña, y fue como si empezará a ver en su mente

Estábamos en una habitación, enfrente estaba el pequeño Aarón en una cama recostado para irse a dormir, mientras que Liz lo arropaba y le desordenaba el cabello

—Cuéntame un cuento— Aarón puso sus manos en su barbilla

—Había una oruga, se durmió, fin— Liz estaba al pie de la cama mirando al pequeño con una sonrisa

—Ese cuento no me gusta para nada— Aarón se cruzó de brazos haciendo un puchero

—Porque no es tu cuento favorito— Liz se acercó a la frente de su hermano— te amo mil— le dio un beso en la frente

—Yo te amo tres millones— Aarón puso ambas manos en su barbilla

—Wow— Liz sonrió mientras se levantaba para irse— tres millones, eso es una locura— ambos rieron— ahora duérmete o vendo tus juguetes— Liz salió de la habitación

Esto no parecía nada malo, pensé que me iba a mostrar cuando esa cosa la atrapó, pero nada, era como si me quisiera mostrar aquello que le importaba. Una nube gris me rodeo de nuevo y de nuevo inicio ese recuerdo

—Cuéntame un cuento— pidió de nuevo Aarón

Todo esto no tenía sentido, era como si fuera lo único que estuviera pensando Liz, nada más.

Me quite la venda lentamente, vi a mis hermanos que me miraban sorprendidos ante lo rápido que salí del limbo

—¿Qué pasó? ¿Qué averiguaste?— me pregunto Charlie

—Nada importante, solo pasa en su mente el mismo recuerdo una y otra vez, como si eso fuera lo más importante para Liz— dije tratando de analizar mis palabras

—Estamos como al principio— hablo Jessie, asentí

—¿Cómo planeamos exactamente vencer esto?— preguntó Chandler— él la tiene, no sabemos que más hacer además de intentar meterla a un horno como si fuera un pato a la naranja

—Juntos— respondió Rachel

—Nos vencerán— habló Charlie mirándonos severamente

—Nos vencerán juntos entonces— volvió a decir Rachel— vamos con papá Hop para hacer el plan— habló Jessie

Se supone que yo soy la única hija de mi papá pero a todos mis hermanos se les hizo costumbre decirle papá, a excepción de Liz porque ella sí tiene el suyo.

Salimos de la habitación con algo de cautela y desanimados, seguíamos como al principio, sin saber dónde estaba la fuente

—¿Tienen algo?— nos preguntó Max

—Nada— respondí

—Sabemos que el desuellamentes odia el calor, solo tenemos que meter a Liz en alguna cámara de calor para que el desuellamentes salga de ella— habló Dustin

—No la controla físicamente, sino mentalmente— todos miramos a Francine— lo que sea que esté dentro de Liz, es más que solo ser su huésped, más que ser su títere, es como si se compaginará con ella

—¿No estarán pensando que ella es como el desuellamentes, no? — murmuró Max, todos nos quedamos callado

—Ella no es como él— Will y Mike se acercaron hacia la sala

—Y ya sabemos que hacer— completo Mike— recuerden, le gusta el frío, odia el calor

—Pobrecita de mi hermana— Rachel se llevó la mano a la frente de manera dramática— la vamos a rostizar cual pollo al honor

—Pero es la única manera— murmuró Joyce— tal vez sea la única manera de que la deje en paz

—Quiere lo que yo estoy haciendo— murmuró Francine— desactive la maquina una vez, puedo volver a hacerlo, solo que tendremos que entrar de nuevo a ese bunker— añadió

—Lo haremos— le aseguró papá

—Necesitamos una distracción— hablo Max— necesitamos una carnada, alguien a quien Liz nunca lastimaría

—¡Yo!—Aarón saltó 

—No, donde algo le pase a este peque me voy a morir junto con él— hablo Joy mientras tomaba a Aarón y lo sentaba en su rodilla 

—Pero ustedes siempre se llevan los trabajos importantes y yo me siento a mirar— Aarón nos sacó la lengua a todos

—Tú no vas a ser carnada de nada— tía Maddie le dio un pequeño golpe al pequeño— además, ya te intentó lastimar, por eso fue por ti al parque, no se va a detener

—Yo seré la carnada— Will dio un paso al frente aun cruzado de brazos

—Will— lo regaño Joyce

—Tenemos una especie de trato— el castaño suspiro pesadamente— me dijo que me dejaba ir a mí, pero ese no es el caso ahora, lo podría distraer mientras ustedes preparan el calor... ella nunca me lastimaría

—Ella no, pero esa cosa no es Liz— murmuro Lucas— y en estos momentos no es ella, y sabemos muy bien que con solo mover el dedo nos puede aniquilar a todos los que estamos aquí

—Niña...— papá me miró— tienes que enfrentarla, eres la única que le puede hacer frente a tu hermana

—No— negué rápidamente— no, eso no, yo jamás la lastimaría, sé que no es ella, pero su cara sigue siendo ella, y juramos nunca lastimarnos, no voy a pelear con mi hermana

—No tendrás que pelear con ella— Charlie me sobó los hombros para tratar de calmarme— si todo sale bien, el desuellamentes habrá salido de ella antes de que tengas que alzar la mano

—Las hermanas se cuidan— murmure mirando todos a mi alrededor— no la lastimaré

—No la vas a lastimar.

—Jane, tranquila, tranquilos todos.— Rachel miró a su alrededor dándonos una mirada tranquilizadora— no nos atacaremos entre nosotros, pero ahora, Will— lo llamó mientras sacaba del bolso del suéter una jeringa y un frasco de vidrio pequeño— vas a usar esto en caso de que se ponga agresiva— le entregó la jeringa a Will que la recibió algo dudoso

—¿De dónde sacaste eso, Rach?— preguntamos viendo a la rubia de coleta estupefactos

—Lo compre en caso de que Charlie comenzara a roncar— Rachel miro a Charlie

—¿Me ibas a drogar, Rachel?— pregunto Charlie indignado hacia nuestra hermana

—No, solo ibas a tomar una siesta de ocho horas— Rachel le lanzo un beso a Charlie que solo hizo que el pelirrojo rodará los ojos— solo ten cuidado— le dio unos golpes en el hombro para darle ánimos

—Esa cosa no se va a apoderar de Liz— compartimos una mirada preocupada mientras que Will guardaba la jeringa— ella aún sigue ahí y va a volver

De verdad esperaba que fuera así, porque extraño a mi hermana, y la quiero de vuelta, y solo quería que todo acabará

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—Ellis