LIZ MORTENSON

El contacto físico no era mi favorito

Nunca me gustaba la idea de tocar a nadie que no conociera, ni tampoco que me tocaran sin mi permiso, irónico, mamá decía que eso se debía a un pequeño trauma debido a lo que pase los primeros años de mi vida

Pero no importaba el tiempo, no me gustaba que extraños me tocaran, personas que no fueran conocidas, solo con mi familia me sentía cómoda en los abrazos, ellos tres, que eran mis papás y mi hermano, pero cuando extendí los brazos ofreciéndole un abrazo a Will, fue algo impulsivo, y cuando él acepto mi gesto rodeándome la espalda con sus brazos, no sentí miedo, sino calidez, tanto que no sabía cuantos segundos había durado 

Me gusta como estoy con Will, por la posición escuchaba como latía su corazón, estaba latiendo muy rápido a decir verdad.

—Te quiero— eso salió de mi boca antes de que pudiera controlarlo, me arrepentí al instante cerrando los ojos y apretando los labios

Nos separamos muy lento del abrazo, sentía como mi cara estaba roja por esas dos palabras que se me salieron

—Lo siento— dije y baje la cabeza— perdón, yo no sé porque dije...

—Lizzie...— cuando dijo mi nombre con ese diminutivo, sentí un deje de emociones en el estómago, o eran las famosas mariposas en el estómago, como dice la metáfora, o los intestinos se me estaban reacomodando— por favor perdóname por lo que voy a hacer

Estuve a punto de preguntarle a que se refería, pero cuando alce la vista, me perdí en cómo me miraba con los ojos brillosos, y sin siquiera darme cuenta si estaba haciendo algo bueno, empecé a acercarme hacia su rostro en dirección a sus labios

Me tomo del mentón y me besó... Nunca había dado un beso pero solo me deje llevar, nos separamos un poco por el maldito aire.

Mi primer beso...

El pequeño espacio que quedaba entre nuestros labios lo volví a acortar cuando pase mi mano por su nuca sin querer que se apartara de mí, no quería apartarme, no sabía ni siquiera como hacerlo, pero si sabía todo lo que estaba sintiendo al sentir el roce de nuestras bocas

Todas las canciones de amor que había escuchado hasta ahora, cada palabra que había leído en algún libro de romance desde que aprendí a hacerlo, cada palabra de amor que había escuchado de mis padres y de las películas románticas, deseando algún día tener a alguien a quien decírselo, todo tomo sentido en este momento, absolutamente todo.

El aire me empezó a faltar de nuevo, por lo que me vi obligada a soltar su nuca y apartarme de él, mi cara estaba tan roja que estoy seguro que parezco una fresa, las manos me temblaban y preocupaciones terceras empezaron a llenarme

¿Beso bien? ¿Mi bálsamo le molesto? ¿Mis labios no están agrietados? Tantas cosas que me ponían nerviosa, y Will no decía nada ya que tenía la cara pegada al suelo

—Lo siento... no debí...— al fin levanto la cara del suelo mirándome con una sonrisa, me di cuenta que estaba igual de sonrojado que yo, tome valor para lo que iba a preguntar esperando que no creyera que soy una lanzada o una rogona 

—¿Puedo volver a besarte?— dije con algo de timidez

No me respondió eso, simplemente se me acerco tomándome de las mejillas causándome un pequeño deje de sorpresa, pase mis brazos por sus costillas hasta su espalda esperando que esto durara un poco más, carajo, ni siquiera me entiendo a mí misma en este momento, pero estar así, con nuestros labios juntos, a su lado, era tan adictivo

Sus labios estaban tan suaves, no sabía cómo dar un beso pero aún así lo disfruté.

Pero todo eso se acabó cuando una pelota de soccer nos revoto cerca, por lo cual perdimos todo el contacto físico que teníamos, nos separamos con la cara roja, y sentí que más roja me puse cuando los idiotas que andaban jugando se nos quedaron viendo burlones

Malditos chismosos, cómprense una vida.

<<No pueden, porque son pobres>>

Al poco tiempo también la campana sonó, dando a entender que debíamos volver al salón

—Deberíamos volver— hable tan rápido que apenas y me entendí,

—Si— me respondió mientras que tomaba su mochila

Camine lo más rápido que pude por las escaleras entrando a la puerta y empezando a caminar lo más rápido que me permitían mis piernas, no sabía si tenía más vergüenza por el beso, o por los idiotas que se habían dado cuenta de esto

Will tampoco me miraba, no sabía si pensaba lo mismo que yo, pero aun no decía nada

Por el pasillo se oían los murmullos como ⟨⟨La bruja y el niño zombie⟩⟩ ⟨⟨Son tal para cuál⟩⟩ ⟨⟨Ambos son igual de raros⟩⟩.

Llegamos al salón y por suerte estaba el profesor Clark, es de los maestros que le he tomado más confianza en estos días, no tanto con la química porque aún se me dificultaba un poco, pero él era agradable y uno de los pocos maestros que de verdad parecía interesado en que aprendiéramos algo, a veces me hacía sentir mal porque merecía que le pusiera más atención a sus clases

—Liz, Will. ¿Por qué tan tarde a clases?— dijo en un tono neutro, ya era la tercera vez que nos regañaba ya que siempre llegábamos tarde, no solo a su clase, pero así era

—Lo sentimos— murmuramos al unísono juntando las manos en forma de súplica, el profesor suspiro derrotado y negando ligeramente con la cabeza

—Solo siéntense y por favor, suéltense las manos— hice una cara confundida ante su comentario pero luego me di cuenta que veníamos agarrados de las manos

A pesar de la orden del profesor no nos soltamos hasta que llegamos a nuestro asiento.

Sacamos nuestro libro cada quien y el tema que estábamos viendo era sobre la los seres vivos, en este caso, las plantas.

Mi mamá es la señora de las plantas así que más o menos sabía algo de las plantas.

Sentí un pequeño golpe en la cabeza, cuando mire mi banca me di cuenta que era un papelito que me había lanzado Max. Desdoble de este y sentí que me volvía a poner como fresa cuando leí lo que estaba escrito

«¿Que pasó hace un rato?»

Sonreí al recordarlo, y también me dio algo de vergüenza porque Max haya sido uno de los tantos que se dieron cuenta del beso, pero a pesar de saber eso, no me moleste con ella, solo escribí una respuesta

«No tengo idea de que estás hablando»

Hice bolita ese papel de nuevo, tome un ligero impulso en mi mano lanzándoselo a Max, cuando vio que le reboto en su banca, desdoblo el papel, lo leyó por unos segundos, y levanto la vista para darme una mirada acusatoria negando ligeramente que hiciera que me pusiera más roja, si eso fuera posible

Ella sabe cosas

Volvió a tomar el papel escribiendo de este, me lo volvió a lanzar, cuando lo tuve en mi mano y lo desdoble, en efecto sentí una mezcla de vergüenza y algo que no identifique

«No te hagas, te besaste con Will. 2 veces»

Escribí rápido una respuesta

«Si, y fue tan lindo, fue mi primer beso»

Con ese último papel, Max me miro emocionada y dando un pequeño aplauso que me hizo sonreír

No se me ocurrió que más hacer, así que tome otro pedazo de papel de mi libreta escribiendo algo para Will

«Hola, solo quiero disculparme si te hice sentir incomodo hace un rato»

Doble el papelito y se lo lance para su banca, me miro algo extrañado ante el papel que le lance, al parecer también escribió algo, a los segundos me regreso el papel arrugado

«No, no lo hiciste, fue muy lindo de hecho»

Sonreí al leer eso, y cuando leí lo último, una pequeña sonrisa se me curvó en la cara, sentía que mi cara iba a explotar por lo roja que estaba

«¿Beso bien?»

Me atragante con algo, dios, no sabía porque tantos nervios, no sabía que pasaba conmigo últimamente, y claro que tenía una respuesta a su pregunta que escribí rápidamente y doble el papelito para volver a lanzárselo

«Si, me gustó mucho... era mi primer beso»

Su respuesta me llego a los segundos en el papel 

«Tambien me gustó y también fue mi primer beso»

Intercambiamos miradas cuando le pase el ultimo papel, le di una última sonrisa y volví mi vista al frente al pizcaron tratando de poner atención a la clase del profesor Clarke, pero no dejaba de pensar en nuestro besó... fue de los más tierno, casi como siempre lo imagine mientras oía Te quiero de Hombres G 

(...)

Las clases acabaron al fin y me fui corriendo a mi casa para contarle a mi mamá, hace unos días le conté que Will me gustaba mucho y se sabe todos los detalles.

La verdad no iba caminando, iba corriendo, pero llegue muy rápido, talvez tenga que ver qué como no fue mi hermano a la escuela y me vine sola el tiempo se me fue volando.

Abrí la puerta y mi hermano estaba dormido en el sillón con un peluche, él le decía babas.

Mi mamá estaba en el otro sillón leyendo, estaba muy concentrada en el libro, dejé mi mochila en el suelo y me aventé al sillón al lado de mi mamá poniendo mi cabeza en sus piernas sin borrar la sonrisa de oreja a oreja.

—¿Cómo te fue? ¿Hablaste con Will?— me sonroje de nuevo de solo recordar cómo me tomo de las mejillas mientras me besaba— ¿Qué pasó?— dejó el libro aún lado y se quitó los lentes que usa para leer

—¡Lo besé!— grite un poco y luego me tape la boca con la cara roja

—¿Lo besaste? ¿Y como fue? ¿Qué sentiste? ¿No fue inapropiado, verdad?— lo último negué

—Sentí muy lindo, nunca había besado a nadie y fue muy lindo— dije suspirando

—Al menos diste tu primer beso con alguien que te gusta, a mí me lo robaron— dijo limpiando una lágrima imaginaria

—¿Quién?— dije acomodándome en el sillón

—El estúpido de...- hizo una cara de enojó pero luego le dio un poco de risa— de tu padre, cuando teníamos 8, el cabrón me dijo que quería reforzar la amistad y me dio un beso— se tapó la cara riendo— y luego nos casamos y tuvimos 2 hijos— lo último lo dijo suspirando

—Mamá, ¿Qué hago ahora?— pregunte eso que tenía tantas dudas en este momento— ¿Le podría preguntar si...?

—No— me respondió rápidamente— si Will quiere estar a tu lado, debería preguntarlo él

—Pero, ¿por qué no puedo preguntarlo yo? — Hice una cara confundida— estoy segura de mis sentimientos

—Hija, es bueno que sepas lo que quieres, pero si se lo preguntas, puede que crea que eres algo rogona, — mamá hizo una ligera mueca—y desgraciadamente eso puede que le dé una mala impresión de ti

—Pero Will no pensaría eso de mí— negué varias veces— él no es así.

—Lo sé— mamá me tomo de las manos— pero, espera un poco, además, si te ennovias solo con un beso...

—Que juzgona eres— la mire con un mohín

Mamá me pellizco la mejilla haciendo que me apartará con una mueca, ella se levantó del sillón diciendo que tenía sed y que volvía en un momento, sin embargo, mi vista fue a la mesita de centro de la sala donde había un folder marrón ahí

—Mamá, ¿Qué es esto? — pregunte mirando el folder en la mesa

—Lo encontré en las últimas cajas que quedaban de la mudanza, velo si quieres— me dijo desde la cocina

Me acerque a ese folder abriéndolo con nervios, mis ojos se abrieron cuando vi una ficha de ingreso algo extraña, trague en seco cuando vi el nombre, su nombre de soltera

Sloan, Madelaine

La foto de esa ficha era de ella tal vez de unos 20 años, llevaba datos personales, como nombres de sus padres, DNI, tipo de sangre, peso y esas cosas, había más papeles como exámenes médicos, radiografías, e incluso una carta escrita a caligrafía junto con una rosa roja seca que me hizo hacer una mueca

"Mi amada Maddie, lamento lo que paso hace unos días, solo quiero cuidarte, espero que lo entiendas con el tiempo, solo quiero que tú estés bien y nada más

Te amo, nunca olvides que lo hago, y que tú eres la única que me puede salvar, tú eres la única luz que ilumina mi vida 

Siempre tuyo, P. B."

Deje esa carta en su lugar con una mueca, bueno, si esa carta era de algún antiguo novio, era normal que hubiera tenido antes a alguien antes de casarse con mi papá, sin contar que nunca dudaría de ella en ese aspecto, sé que mis papás se aman, lo demuestran siempre, tanto que hasta en algún punto me gustaría tener algo parecido a lo que ellos tienen

Seguí leyendo los siguientes documentos, y mis ojos se abrieron en exceso cuando vi la cifra que le daban en ese lugar por ser "voluntaria" en una factura de banco

—Mamá, esto es una fortuna— alce la factura vieja que tenía en las manos, ya sabía que mamá tenía dinero, pero nunca tuve cifras exactas

—¿Por qué crees que ya no trabajo? — mamá volvió de la cocina con un vaso de vidrio entre las manos— de todos modos, esos miles de dólares no compensan nada de lo que paso

—¿Eso es agua?— dije señalando el vaso

—No— le dio un trago de varios segundos al vaso— es Vodka— abrí un poco los ojos, mi mamá nunca toma

—Pero tú no tomas— la mire preocupada, nunca recuerdo que mamá tomará más que una copa de vino y eso solo en navidad

—Pero necesito esto para darme valor— volvió a tomar del vaso— dicen que los niños y los ebrios siempre dicen la verdad— se volvió a servir más del Vodka

Estaba un poco tambaleándose y se sentó en el sillón con los ojos en los papeles que tenía en las manos

—Mamá, es muy temprano— dije viendo el reloj de la sala— no deberías beber, al rato viene papá y nos va a regañar, a ti por beber y a mí por permitirlo

—Tenía 3 meses desde que inicié en el Mk-ultra, me dijeron que entraría al tanque, me dieron una pastilla que no se que era— mamá dejó el vaso en la mesita de al lado y puso las manos en el estómago—tuve una visión, era como un cuarto o algo, tenía vendas en las manos y algo rojo salía de mis palmas, en el cuarto de al lado había un hombre que corría a grandes velocidades, ambos sufriámos. Yo estaba jugando con unos cubos de madera y luego aplaste uno contra otro...

—Mamá...— tome su mano, ella seguía con la vista al frente— ¿Quién es ese hombre?

—Peter...— murmuro en un tono apenas audible— él me cuidaba, siempre lo hacia

Vale, seguramente me iba a arrepentir de lo que iba a hacer, pero termine tomando la mano de mi mamá, me concentre un poco, y entre en su mente

No entendía que carajos pasaban, pude sentir como las luces fallaron un poco, sin embargo no abrí los ojos y seguí en lo que sea que estuviera intentando

Lo que me dejo más impresionada fue lo que veía frente a mí, parecía ser recuerdos y en esos recuerdos estaba un hombre, pero era extraño, porque en ninguno se le veía la cara, pero alcance a darme cuenta que era alto, cabello entre castaño oscuro y negro, tenía una ligera barba y los ojos claros

Pero eso no fue nada en cuanto empecé a ver varias cosas a la vez, imágenes muy rápidas de ese hombre al lado de mi mamá, gritos, el sonido de disparos y mucha sangre

Solté la mano de mi mamá asustada mientras que retrocedía tomando mi pecho ante todo lo que había visto

—Hija, hija— mamá se me trato de acercar cuando volvió en sí y me vio asustada contra el sillón— hija, estoy bien, tranquila, no era mi intención perdón

—Peter...— susurre con la cara repleta de lágrimas mientras tomaba mi pecho— se llamaba Peter

Mamá se me quedo viendo sin decir nada con los ojos abiertos, me quede con la boca abierta antes de hablar

—Mamá, tenías un hermano...

—No

—Si— afirme— y murió en el Mk-ultra.

—No— me dijo con una mirada más severa— yo no tengo hermanos y mucho menos se llama así.

Mamá se levantó del sillón dejándome ahí aun asustada, no, estoy segura que no es cierto, que mamá no tenía un hermano, ella lo hubiera dicho

Me pase las manos por la cara apartándome el cabello que tenía por la frente

¿Entonces quién era ese hombre?

--------------------------------------

-Ellis