Capítulo IX: I choose her (*)

LIZ MORTENSON 

Me aliste para ir a la escuela y de camino a la escuela me platicó mi papá que iba a contratar antena de satélite porque en una semana era el Live Aid y queríamos ver a Queen desde Wembley, claro que mi mamá no sabía nada de esto por qué si no nos regañaba por gastar dinero en cosas innecesarias y claro, Aarón era nuestro complice porque ya le pasamos nuestra obsesión por Queen.

—Anda, no seas tacaño— acerque la cabeza por en medio de los sillones de enfrente del auto extendiendo la mano

—¿Y en que te gastaste el dinero de toda la semana? — me reclamo mi padre mirando mi mano extendida

—Ayer mamá nos llevó al centro comercial y cuando vi el vinilo de "A hard day's night" no me pude resistir— respondí en un suspiro enamoradizo cuando recordé mi hermosa nueva adquisición, el álbum de The Beatles, que también me dejo pobre para el resto de la semana, y eso que apenas era Martes

—Me vas a prestar tu vinilo, eh— papá de mala gana me pasó un billete de 5 dólares que tome con una sonrisa

—Te amo— le deje un beso en la mejilla a mi papá mientras me terminaba de bajar del auto

Se me había hecho tarde, no solo por rogarle a mi papá por dinero, también porque me quede dormida, por lo cual no iba muy arreglada, apenas y tome unos pantalones, una blusa de rayas y ni siquiera me peiné, así que iba corriendo por el pasillo mientras que guardaba el billete en mi mochila y tomaba rápidamente mis guantes, ni siquiera encontraba el izquierdo, por lo cual rebuscaba en el fondo de mi mochila rogando que no se me hubiera olvidado

Cuando al fin encontré mi guante, empecé a ponérmelo, por lo cual no me di cuenta cuando choque contra alguien

—¡Ten cuidado, idiota!— cuando alce la vista y vi contra quien había chocado, cerré la boca y abrí mis ojos apenada— hola, Will— salude algo apenada debido al pequeño empujón y maldición que se me salió

—Hola, Liz— dijo algo nervioso— perdón, no me di cuenta que choque contigo, lo siento

—No, no, no, está bien— sonreí apenada— es que doña Alexandra no me dejaba en paz, primero porque estábamos hablando del Live aid ya que nuestra banda favorita se va a presentar, y luego porque el tacaño no me quería prestar dinero

—¿Doña Alexandra? — me miro con las cejas fruncidas

—Mi papá

—¿Tú papá se llama Alexandra? — dios, que vergüenza ahora debe pensar que soy rara

—Alexander pero le decimos Alex y mi banda favorita es su majestad, Queen— dije con una voz rara

—Queen, soy muy buenos

—¡Soy perfectos! — me obligue a mí misma a calmarme debido al salto y pequeño grito que solté— perdón, debes pensar que soy una groupie de las locas

—No, está bien— Will sonrió ligeramente

—Por cierto, ¿Qué clase te toca? — no termine de preguntar eso cuando me quede callada mordiéndome los labios, era una pregunta estúpida ya que estamos en el mismo salón

Últimamente ando muy distraída y estúpida cuando estoy cerca de Will, la idiotez fluye de mí haciéndome pasar vergüenza frente a él

—No sé, tu dime— ambos reímos— aunque todavía no quiero ir, anoche discutí con Mike y no quiero hablar mucho con él— dijo recargando en su casillero-

—¿Que pasó? Creí que tu y Mike eran mejores amigos— dije alzando una ceja 

En estas casi tres semanas me había dado cuenta que no le agradaba mucho a Mike Wheeler, más bien creo que me detesta, por eso prefería mantener algo de distancia, no quería convivir demasiado con alguien a quien no le agrado, aunque eso no era posible ya que Will, Max, Lucas, Jane y Dustin me dijeron que si me consideraban su amiga, por lo cual era algo medio incomodo, no era tonta para no darme cuenta las muecas que el pelinegro siempre hacia cuando yo estaba cerca

—No quiero hablar de eso— hice un cierre imaginario sobre mi boca, Will me miro divertido ante mi acción, ambos empezamos a caminar rumbo al salón ya que se me seguía haciendo tarde, pero no quería dejar de hablar con él, últimamente él era de los pocos con quien más hablaba— ¿tú qué opinas de lo que Mike tiene con Jane?

Hice un ademan señalando mis labios cerrados como si aún tuvieran el cierre imaginario, Will me miro riendo un par de segundos mientras que yo solo aleteaba las pestañas con una mirada de inocencia

—Ya puedes hablar— hice el mismo ademan sobre mis labios antes de hablar

—Es muy lindo, a mi el único que contaba las horas para verme era mi perico y eso por qué yo le daba de comer— me limpie una lágrima imaginaria

Ruperto, mi pobre perico o cotorro, o como carajos se pronuncie, nunca entendí bien la diferencia de su especie, sufrió mucho el pobre desde que me lo gane en una feria a los siete, en ese entonces apenas empezaba a hablar, creo que él hablaba más que yo, picaba a cualquier persona que metía la mano en su jaula y la cosa que más risa me daba era cuando le silbaba a mi mamá cada vez que la veía

—¿Y que le pasó a tu perico?— pregunto, hice una mueca al recordar el melancólico final de Ruperto

—Mi mamá lo dejo libre porque no le daba de comer— ambos soltamos una carcajada

En eso sonó el timbre e inconscientemente tomé la mano de Will para ir al salón, quise quitarla cuando me di cuenta de mi error pero entrelazó nuestros dedos, un tomate estaba pálido a comparación mía.

Cuando llegamos al salón, ya todos estaban en sus lugares, a pesar de que corrimos lo más que pudimos hasta el salón, y cuando la profesora de matemáticas vio que estábamos en la puerta tratando de tomar aire debido al pequeño maratón que corrimos para llegar hasta acá, su mirada severa cayó sobre nosotros

—Buenos días

—Tarde.

—Perdón, ¿podemos pasar? — ambos le dimos una mirada suplicando

—Siéntense donde puedan y saquen su libro— la maestra no dio una última mirada despectiva, no esperamos y corrimos a un par de asientos desocupados que Max me señalo detrás de ella

Sacamos nuestro libro de Matemáticas, odio todo pero hoy nada me va a poner de mal humor.

O eso pensé, hasta que vi que el tema de esta semana era sobre las ecuaciones lineales y que esto iba a ser más difícil de lo que pensé y que muy probablemente tendría problemas para aprobar los finales que eran en menos de una semana

La maestra llego y puso unos ejercicios mientras sacaba una bola de estambre para tejer, se supone que estábamos haciendo tarea pero yo sólo llegaba mi libro de garabatos, todos estaban haciendo todo menos la tarea, Max de vez en cuando me lanzaba miradas pícaras y yo me sonrojaba a más no poder, de reojo miraba a Will, es tan lindo....

WILL BYERS

La manera en que tome su mano me dejo suspirando, como mis dedos se entrelazaron con los suyos, como a pesar de que su cabello estuviera enredado, no le quitaba lo bonita que ya era, como estaba tan cerca de ella viendo de cerca el color verde de sus ojos y el rosado de sus mejillas 

Sé que no debo ilusinarme con Liz pero ya hasta tengo un dibujo de nuestra casa, nuestros perros y de nosotros con nuestros hijos, uno se llamaría Jonathan por mi hermano y una niña Alexandra cómo su papá.

No quería, de verdad no quería recordar todo lo que dijo Mike, quería pensar que esto podría durar un poco más antes de que inevitablemente tengamos que apartarnos, quería vivir en un cuento de hadas un poco más

—¿Almorzamos juntos? — ella me pregunto apenas termino la clase y llego el receso largo donde casi siempre comía

—Claro, me encantaría— le respondí mientras tomaba mi mochila para seguirla

—Will— me gire lentamente cuando vi a Mike detrás de mí, jugaba con sus manos y parecía arrepentido— ¿podemos hablar? Almorcemos juntos

No pude evitar mirar de reojo a Liz, que me dio una mirada señalando a Mike con la mirada como dando a entender que hablará con él, y sobretodo que no importaba que la dejará a ella sola

¿Pero, de verdad quería hablar con él?

¿Mike... o Liz...?

—Que sea luego— respondí luego de varios segundos— hoy almorzare con Liz.

Me acerque a Liz tan rápido antes de que me arrepintiera de lo que dije y de lo que estaba a punto de hacer, tome su mano como hace un rato empezando a caminar fuera del salón

La elegí a ella...

No dijo una palabra desde que salimos del salón hasta que llegamos a las escaleras que estaban cerca de la cancha de futbol, ambos nos sentamos sacando nuestros respectivos almuerzos

—¿Qué paso hace un rato con Mike? — Pregunto mientras mordía de su manzana— pudiste haber ido con él, seguro quería arreglar lo que sea que haya dicho

—Pero quise venir contigo— alce la vista cuando dije eso, ella me miro sonriendo

—¿Conmigo? — Se llevó su manzana a la boca de nuevo— ¿de verdad te parece interesante mi compañía?

—Claro, me gusta pasar tiempo contigo.

El silencio fue de un par de segundos mientras que ella terminaba su manzana y yo sacaba mi sándwich, pero no era un silencio incomodo, era un silencio que me daba tranquilidad, tranquilidad que muy pocas veces había experimentando

—Pero en serio, creo que deberías hablar con Mike— insistió mientras jugaba con sus manos— no sé qué haya pasado entre ustedes, pero hace unas semanas me he dado cuenta que ustedes parecen ser muy buenos amigos

—Si, pero él ha cambiado— dije dándole una mordida a mi sandwich

—Creo que los cambios son frecuentes, importantes— movió la cabeza muchas veces— como yo, antes no creían que soy una bruja y se alejaban de mi por miedo a que les lance alguna maldición imperdonable

Soltó una carcajada con nervios cuando menciono aquello de que todos ahora le decían bruja, desde el incidente de la semana pasada no dejaban de decirle así, algunos con burla y otros con miedo, creo que incluso se estaban pasando porque faltaba poco para que hasta los maestros le dijeran bruja

Parecía que le molestaba un poco, pero lo ocultaba con una sonrisa sarcástica

—Tú no eres una bruja— dije tomando su mano

 ⟨⟨Y si lo fueras ahora se porque no puedo dejar de pensar en ti⟩⟩

—No está tan mal eso de que crean que soy una bruja— sonrió ampliamente— las brujas fueron mujeres inteligentes, astutas, poderosas, no es un insulto, es un halago que me consideren así... al menos que crean que en las noches saco una escoba y mi cara se pone verde, creo que soy más bonita que eso

—Lo eres— le asegure mientras que sentía como mi cara empezaba a ponerse roja— muy bonita

—Gracias— sonrió— pero volviendo al tema de tu mejor amigo, deberías hablarlo, lo que sea que haya dicho, estoy segura que tiene solución 

Ay Liz si supieras lo que dijo...

Creo que tal vez me ponía más triste que lo que me dijo era verdad, absolutamente todo, y que la felicidad que tenía en este momento al lado de la chica que tenía al lado... era cuestión de tiempo para que se acabe y volviera a ser como siempre

Por eso elegí estar con ella en estos momentos, experimentar lo que sea que fuera la felicidad aunque solo durará poco y volviera a la realidad de manera abrupta

—Hablare con él, lo prometo— ella aplaudió levemente ante mi respuesta— y gracias, Liz, me ayudaste a pensar con claridad

—¿Un abrazo?— extendió los brazos, no pude negarme ante sus brazos extendidos, así que me acerque a ella pasando mis brazos por su cintura y ella paso sus brazos por mis hombros

Debía admitir que nos quedamos así tal vez más tiempo de lo que debía durar un abrazo... simplemente no quería soltarla 

~Unos momentos antes~

JANE HOPPER

Mike no dejaba de soltar protestas de que no sabía si disculparse con Will después de que él no hubiera aceptado su invitación a almorzar y parecía más ofendido que se hubiera ido junto a Liz

—Me disculpare cuando ella se vaya— Mike señalo con la cabeza las escaleras donde ambos almorzaban

—Entonces no creo que sea pronto— hablo Dustin ladeando ligeramente la cabeza— déjalos comer en paz, además, ni siquiera entiendo porque tanto alboroto

—Will está algo desanimado— murmuro Lucas— dice que ya nada es como antes, que es como si no nos importara, como si no importará ir al Arcade o jugar D&D

—Tal vez es un poco cierto— murmuro Mike— pero no puede enojarse conmigo solo porque ya no jugamos como antes

—Habla por ti, yo sigo teniendo el mejor puntaje en Dig Dug— dijo Max con una voz rara— Y no le afecto tanto lo que dijiste sobre el grupo, si no lo que dijiste de Liz

—¿Qué dijiste sobre Liz?— me gire hacia Mike, era muy probable que hubiera dicho muchas cosas sobre ella, no le agradaba mucho, él hizo cara de inocencia— Mike. 

—"No es mi culpa que Mortenson no te vaya a hacer caso"— dijo Mike apenado 

Dustin, Lucas miraron mal a Mike, mientras que yo bajaba la cabeza... ahora entendía porque Will se entristeció tanto, las últimas semanas estaba muy emocionado por acercarse a ella

—Pues no creo que eso sea la correcta definición de no hacerle caso— Lucas señalo las escaleras con una sonrisa

En las escaleras estaban Liz y Will pero rieron un poco antes de darse un abrazo, no había que ser un genio, lo que sea que pase con ellos, era mutuo... creo que esa era la palabra

—¿No que no le haría caso?— pregunto Max con sarcasmo 

—Está bien me equivoque, voy a disculparme— dijo Mike, pero Max lo detuvo del brazo para que no se alejara mientras que se acercaba un poco para ver mejor

—Tú no te vas a mover de aquí— Max seguía deteniendo a Mike del brazo— no vas a arruinar su momento, se lo merecen

Claro que se lo merecían, ambos merecían todo lo que sea que pasará, Liz era buena para Will, y a él muy pocas veces se veía así de feliz, y me ponía también feliz al verlos así 

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-Ellis

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