En la noche, Taehyun regresó al descampado junto al lujoso edificio y estacionó su caravana en el mismo lugar de siempre.

Apagó el motor y apoyó la cabeza en el volante, sintiendo un profundo cansancio del que duda poder deshacerse.

El breve e inesperado reencuentro con Beomgyu lo dejó emocionalmente abatido. Ni siquiera tenía ánimos para llamar a alguno de sus follaamigos y despejar su mente con sexo que probablemente no iba a disfrutar porque nunca lo hace, pero le ayudaba a perder un poco la cabeza.

Tampoco quería beber, y volver a las drogas no era una opción sabiendo lo mucho que le costó salir de esa mierda, así que se pasó toda la tarde dando vueltas en moto a una velocidad demasiado imprudente por carreteras poco transitadas para evitar una multa que no puede pagar.

Ahora que la adrenalina del trayecto en moto se disipó, volvió a sentirse miserable recordando lo confundido y afligido que estaba Beomgyu cuando le gritó que se marchara.

Sabe que es mejor así. Beomgyu tiene que alejarse de él cuanto antes y no volver jamás, por lo que era conveniente hacerle odiarlo. Sin embargo, había algo tan puro, inocente y roto en la mirada cristalina de Beomgyu que lo dejó devastado.

Tratarlo de esa manera tan cruel se sentía como maltratar a un perrito. Taehyun nunca sería capaz de hacer algo así, por lo que la culpabilidad le carcome a niveles insoportables, y una parte de él quería correr hacia donde estaba Beomgyu y rogarle entre lágrimas que lo perdonara, tanto por haberlo abandonado como por haberlo tratado tan mal cuando él no tiene la culpa de nada.

Pero no. Actualmente, las cosas serían mucho peores si hubieran permanecido juntos, así que se mordió el labio con frustración y apretó el volante en un desesperado intento por controlar el impulso de correr hacia él.

Anhelaba volver a tener a Beomgyu entre sus brazos, acariciar su piel, besar sus labios, pasar los dedos por esas hebras rubias más largas y claras de lo que solían ser, volver a analizar cada centímetro de él para mantener su imagen tatuada en sus retinas y que su piel nunca olvide lo que se siente estar en contacto directo con el que fue adorable novio.

Hace unos años, había desarrollado una dependencia severa a las drogas que le costó muchísimo tiempo y esfuerzo superar. Finalmente, lo ve como una adicción pasajera a la que no piensa volver a caer, no después de haber hecho pasar a Hueningkai por un momento de angustia terrible cuando casi pierde la vida debido a la intoxicación por cocaína mezclado con un montón de mierda que no recuerda, pero se lo habían administrado malas influencias con las que solía salir para escapar de la triste realidad.

Su amigo ha sido una figura muy importante para él durante este tiempo alejado de Udo. Ya no solo porque le ayudó a salir de las drogas, sino porque es la única buena influencia que tiene alrededor y, en cierto modo, tomó el rol de su tutor legal, pues es a quien llaman cada vez que se mete en un lío. Algo lo cual agradece, pues Kai es alguien que no tiene el cerebro lavado como su madre.

Actualmente, no puede vivir sin alcohol ni nicotina, pero Hueningkai es más permisivo al no ser tan dañinos e ilegales como las drogas; así que no insiste tanto en que lo deje, aunque sí ha intentado convencerlo varias veces.

Taehyun no tiene mucha confianza en sí mismo, pero está muy seguro de que si pusiera el mismo esfuerzo que hizo para superar las drogas, podría abandonar poco a poco el consumo excesivo de alcohol y el hábito de fumar.

Al final, todo eso son vicios a los que se volvió adicto para llenar el vacío que dejó la ausencia de Beomgyu en su vida, algo que fue su decisión, pero eso no quita lo dolorosamente tristes y solitarios que fueron sus días desde que regresó a Seúl, extrañando cada maldita hora al rubio. Incluso guardó aquel audio que Beomgyu le había enviado hacía muchos años atrás desde el teléfono de Yeonjun, donde le decía: «Te quiero mucho», y luego se puso nervioso al no saber cómo eliminarlo para que Yeonjun no lo escuchara.

Nunca pensó que algo tan simple como un audio que, milagrosamente, el Taehyun del pasado decidió guardar en su carpeta de Drive de recuerdos, se convertiría en lo único que le ayudaba a mejorar el ánimo cada vez que tenía un mal día, lo cual suele ser prácticamente todos los días.

Beomgyu fue, es y siempre será su mayor adicción hasta el momento.

Es ese vicio del que, no importa cuánta terapia o esfuerzo haga, jamás podrá desengancharse, porque su amor siempre fue intenso, pero sincero. Nunca podrá encontrar a alguien como Beomgyu, porque solo existe uno en el mundo y tuvo la suerte de haber sido alguien importante en su vida antes de que todo diera un giro de 180 grados.

Lo amó fervientemente. Aún a día de hoy lo sigue amando, y es precisamente por eso que debe alejarlo de su lado.

A veces, uno no puede estar con la persona que más quiere en el mundo, y ese es su caso. Por mucho que duela, por mucho que lo desee, por mucho que lo ame, no pueden volver a estar juntos. O al menos, no mientras cierta persona siga viva.

Y, aun así, cuando notó las luces de las ventanas del piso 25 encendidas, sintió un pequeño rayo de esperanza que nubló su sentido de la seguridad, la responsabilidad y la sobreprotección, a sabiendas de que Hueningkai suele llegar mucho más tarde del trabajo.

Tenía que ser Beomgyu. Estaba a solo un ascensor de distancia. Tan cerca y tan lejos a la vez, pero fácilmente accesible.

Sus dedos hormigueaban, al igual que sus piernas. Sentía el estómago apretado y comenzaba a faltarle el aire.

Finalmente, cedió a esa incontrolable necesidad. Se bajó de la caravana torpemente y corrió hacia el edificio, donde ni siquiera se dignó a mirar al conserje, sino que se adentró en el ascensor y sacó su propia llave para encajarla en el botón 25.

A su parecer, el ascensor subía dolorosamente lento, mientras que su corazón aceleraba cada vez que la pantalla mostraba su ascenso piso por piso.

A la mierda todo, necesitaba urgentemente ver a Beomgyu. Tenía que comprobar si estaba bien y vigilar que no se quedara sin agua mientras estuviera en Seúl, lejos de Udo, lejos del mar que necesitaba para sobrevivir.

Preocupado y desesperado, salió del ascensor tan rápido como se abrió, pensando que se encontraría con el chico al que tanto amaba. Pero se llevó una gran decepción cuando, en su lugar, estaba Kai, con su uniforme de trabajo, una nota en una mano y el teléfono en la otra.

━Woah, hace siglos que no te pasas por aquí ━comentó el menor, sorprendido de verlo en el apartamento. No es que no se vieran a menudo, pero es extremadamente raro que Taehyun suba, y es consciente de que el motivo de su visita de hoy es cierto chico de cabello rubio, lo que le hizo reprimir una sonrisita pícara.

━¿Qué haces aquí? ¿No deberías estar trabajando?

━Yo también me alegro de verte ━comentó Hueningkai sarcásticamente luego de rodar los ojos━. Vine temprano porque pedí unos días libres.

━¿Y Beomgyu?

━Te lo robé. Mañana nos casamos en Las Vegas. Estás invitado ━viendo cómo Taehyun frunció el ceño, visiblemente enojado, agregó: ━No me mires así, hombre, estaba bromeando. Para querer que se marche, te ves muy desesperado por verlo.

━¿Regresó Udo? ━esta vez Taehyun se escuchaba algo triste y decepcionado. Ciertamente, estaba desesperado por verlo aunque sea una última vez.

━No, debe estar en algún hotel de la zona, pero me dio su número ━respondió Kai, alzando la nota que había dejado Beomgyu. Taehyun se la robó al instante para romperla en pedazos, impidiendo que fuera legible━. ¡¡Oye!! ━gritó el menor, mas no le dio mucha importancia━. Bueno, ya lo había agendado. Tu noviecito no se va a librar de mi tan fácilmente. La cagó desde que apareció frente a mi.

Taehyun se presionó el puente de la nariz con puro estrés. En parte, le agrada saber que Hueningkai va a estar atento a él y probablemente se hagan amigos. No le gusta la idea de dejar a Beomgyu completamente solo en Seúl cuando nunca ha salido de Udo, o al menos, no que él sepa. Es ligeramente tranquilizador que el rubio tenga al menos una persona local a la que pueda llamar en caso de emergencia.

━Hueningkai, por lo que más quieras, convéncelo de que vuelva a Udo ━rogó, más tranquilo en esta ocasión.

━No creo que haga falta. Solo se quedará el fin de semana. El domingo regresa a la isla.

Acto seguido, Taehyun se dejó caer en el sillón, aliviado de que la estadía de Beomgyu en la ciudad fuera tan corta━. Gracias a Dios… ━murmuró.

━No te entiendo. ¿Lo amas o lo odias? ━preguntó Hueningkai, muy confundido por los contradictorios sentimientos que muestra Taehyun. Puede jurar que su amigo muere por volver con Beomgyu y, sin embargo, se ve demasiado satisfecho sabiendo que el amor de su vida regresará a Udo en dos días y que probablemente no se volverán a ver en sus vidas porque Taehyun no parece querer solucionar lo que haya ocurrido entre ellos.

Como era de esperar, el mayor lo ignoró descaradamente para revisar las notificaciones que acababa de recibir en su teléfono. Siempre evita el tema cada vez que Kai trata de saber más sobre lo que ocurrió entre ellos y por qué Taehyun ha estado esquivando deliberadamente cualquier mínima oportunidad de volver a contactar a Beomgyu; como cuando no se presentó en el aeropuerto aquella vez que le compró un viaje de regreso a Udo, o cuando rompió la nota con su número de teléfono hace unos segundos, y en múltiples ocasiones más donde Taehyun, ebrio, se ponía tan nostálgico que estuvo a punto de llamar a su abuela solo para preguntar por Beomgyu.

Por algún motivo que Hueningkai desconoce, su amigo se volvía excesivamente cobarde en todo lo que involucra a Beomgyu, quedándose solo con el recuerdo de la persona a la que más amó, mientras aún conserva el álbum de fotos repleto de recuerdos de Udo, una carpeta de Drive con muchísimas más fotos y vídeos, y una flor de loto de cristal que, según le explicó Taehyun una de las veces donde se encontraba completamente alcoholizado, fue una especie de promesa de amor.

Al parecer, esa flor de loto de cristal era el objeto más preciado de Beomgyu, el último tesoro que encontró con su madre antes de que esta falleciera por motivos que Taehyun no mencionó; pero sí dijo que fue una muerte bastante grotesca. Al escuchar la historia, Hueningkai supuso que el hecho de que Beomgyu le entregara algo tan significativo era una gran muestra de confianza hacia Taehyun.

Afortunadamente, su amigo se vuelve un tanto hablador a partir de la quinta cerveza, así que Kai también pudo descubrir que esa “promesa de amor” era un intercambio mutuo. Taehyun no le dio a su amado un tesoro porque probablemente no tenía nada tan significativo; en su lugar, había creado una pulsera que, al parecer, en la cultura de Udo tenía un bonito mensaje sobre el amor eterno representado con caballitos de mar.

Si Hueningkai insiste en que esos dos deben hablar las cosas, reconciliarse adecuadamente y recuperar el tiempo perdido, es porque Taehyun atesora la figura de cristal con sumo cuidado, llegando incluso a molestarse con todo aquel que se atreva a tocarla, como ocurrió en una ocasión en que Kai simplemente la había movido a un lado para sacar una caja de la caravana.

En ese momento no comprendió por qué un simple trozo de cristal desgastado era tan importante hasta que escuchó el trasfondo. Y ahora que finalmente conoce al famoso Beomgyu del que siempre había oído hablar, se percató de que este llevaba una pulsera que encajaba perfectamente con la información que Taehyun había dado sobre su “promesa de amor”.

Son un par de chicos torpes que no han podido superar su relación a pesar del tiempo, y no cabe duda de que la llama que solía haber entre ellos sigue encendida. Quizás no con tanta fuerza como antes, pero mientras exista un pequeño destello, Hueningkai se encargará de ser el combustible que ayude a mantenerla encendida con tal de hacerlos felices.

━Habla con Beomgyu si quieres. Enséñale un poco de Seúl, pero por favor, nunca permitas que se quede a solas con mi madre o el conserje, ¿sí? Mucho menos permitas que los vecinos lo vean ━comentó Taehyun luego de leer y responder algunos mensajes con el ceño fruncido.

━¿Por qué? ━preguntó Hueningkai, curioso por las especificaciones. Viendo cómo Taehyun volvió a ignorarlo, esta vez no lo dejó pasar y siguió insistiendo━. ¿A qué se debe tanto secretismo? ━trató de sonar serio y persistente, dejando en evidencia su frustración ante la poca información al cruzarse de brazos y alzar la barbilla con indignación.

No es la primera vez que su amigo omite información. De hecho, casi siempre da respuestas ambiguas. Solo se le va la lengua cuando está ebrio, y aun en ese estado es muy cuidadoso con sus palabras, a menos que el tema de conversación sea Beomgyu. En ese caso, parlotea sin cansancio sobre cuánto lo extraña, comentando todo tipo de anécdotas que, por algún motivo, algunas también suenan ambiguas, como si quisiera evitar mencionar algunos detalles.

La cosa es que Kai respeta mucho la privacidad de Taehyun, por eso nunca se molestó en incomodarlo tratando de sacarle más información de la que expresa. Sin embargo, ahora que Beomgyu ha hecho acto de presencia, ha llegado a un punto donde la actitud sospechosa de su amigo le comienza a preocupar, temiendo que este esté metido en algo oscuro de nuevo.

Hueningkai no es estúpido. Desde que Taehyun regresó repentinamente a Seúl después de haberse esforzado mucho para vivir en Udo, las cosas han sido extremadamente raras, y es consciente de que esa rareza fue lo que llevó a Taehyun a juntarse con los drogadictos que le suministraban las sustancias.

Solamente los vio una vez cuando fue a recoger a Taehyun, después de ser avisado por uno de ellos sobre su sobredosis.

En ese grupo habían jóvenes bien educados que, al igual que su amigo, recurrieron a meterse mierda en el cuerpo como método de escape luego de haber pasado por una situación que no pudieron controlar.

Cada uno maneja el dolor de distintas maneras, así que no puede juzgar tanto a esos chicos porque quizás él también podría acabar ahí si pasa por algún trauma horrible y no tiene a nadie a su lado que le ayude a manejarlo; algo que no es su caso, afortunadamente, pero sí el de Taehyun.

El problema de ese turbio mundo de los estupefacientes es que, al igual que hay gente rota, también hay muchos hombres verdaderamente horripilantes que consumen por vicio, y son ellos los que suelen ser los más peligrosos al tomar el rol de traficantes o principales compradores.

Cada cierto tiempo, obliga a Taehyun a hacerse una prueba para comprobar que sigue limpio, y la última tuvo un resultado excelente. Tampoco percibe síntomas de consumo en su amigo, por lo que quiere creer que sigue limpio. Sin embargo, algo que no puede controlar es si Taehyun sigue viéndose con esa gente.

Nunca supo si Taehyun recibía la droga como regalo o la compraba. En cualquier caso, tiene pinta de ser algo sumamente caro que le dejaría con una deuda enorme, por la cual ve muy probable que estuviera siendo coaccionado y/o amenazado por gente mala, pues sabe que su amigo no tiene tanto dinero para pagar las causas de su sobredosis.

Eso es algo en lo que siempre ha pensado, pero Taehyun nunca habló de ello, por lo que asumió que todo estaba bien. No obstante, su insistencia por alejar a Beomgyu lo ponía muy nervioso, porque encajaba con su teoría. Quizás no quiere que su oscuro pasado como drogadicto afecte al rubio.

━Son mis mierdas. No quiero que te veas involucrado en todo esto ━fue la corta respuesta de Taehyun, lo que le dejó aún más nervioso por lo mucho que confirmaba su teoría.

━¿Te das cuenta de que ya me he involucrado totalmente en tu vida de manera voluntaria? Eres de esas amistades que son para toda la vida. Y sabes que cuando se trata de amigos, soy leal hasta la muerte ━aclaró en menor con firmeza. No se habría molestado en ayudar a Taehyun si no fuera tan importante para él; por eso le molesta que no sea tan honesto como le gustaría━. Si es dinero lo que necesitas, puedo dártelo.

━No necesito dinero. Es solo…━Taehyun observó cuidadosamente el uniforme de cirujano plástico que su amigo aún no se había quitado, viendo con especial irritación el logo de Kim's Corp. Evidentemente, Hueningkai no es consciente de las prácticas oscuras que lleva a cabo la compañía para la que trabaja. Sabe que puede confiar en él, pero tiene miedo de hacerlo, por lo que prefiere mantenerlo ajeno a la cruda realidad━. No puedo contarte, en serio. Pero te juro que no tiene nada que ver con algo monetario.

La honestidad y pena con las que lo dijo, como si no tuviera permiso para hablar del tema, hicieron a Kai sentirse más aliviado. Sigue inquieto sabiendo que su amigo está en una situación tensa, pero mientras no tenga que ver con deudas, puede sentirse más tranquilo.

━Vale, no me cuentes ━accedió Hueningkai con resignación━. De todos modos, pienso insistir más adelante.

Taehyun no se quejó al respecto porque, en parte, le agrada saber que su amigo se preocupaba por él; es la señal que necesita para saber que la amistad aún perdura a pesar de todo. Aunque a veces siente que exagera, es capaz de ponerse en su piel y comprender que su perspectiva, repleta de información inconclusa, puede dar lugar a frustración y múltiples hipótesis alocadas, más aún cuando ya le había demostrado cuán bajo puede caer.

El Taehyun de hace más de seis años, el que fue antes de regresar a Seúl, era lo suficientemente civilizado como para tener unos límites morales bastante claros que le permitían pasar por todo un proceso de reflexión y autocontrol antes de cruzar la línea. En la actualidad, esos límites están tan difusos que ni siquiera son visibles, y que llevara un estilo de vida repleto de malos hábitos demostraba lo mucho que se habían deteriorado sus valores como persona, como el novio que alguna vez fue, como amigo y como hijo.

Es consciente que su actitud es inadecuada e irresponsable en todos los sentidos de su vida, tanto a nivel personal como laboral, pues su única manera de conseguir dinero es haciendo trabajos de contratos hablados donde le han estafado más de una vez al no pagarle lo que prometieron en un principio, todo en metálico porque se trata de algo informal ajeno al estado. Sin nómina. Sin jefes. Sin tener que firmar nada. Sin tener que enseñar su documentación o antecedentes. Sin tener que dar el número de su cuenta bancaria para que le ingresen el dinero.

Básicamente, como un fantasma que no aparece en el sistema debido a la falta de documentación.

Tiene razones para que su vida sea de esta forma, y son razones bastante válidas.

Sus manos están atadas, legal y metafóricamente. Un movimiento en falso y todo irá cuesta abajo sin posibilidad de remontar. Ahora más que nunca debía tener mucho cuidado, especialmente con Beomgyu alrededor.

Por mucho que le duela, tiene que ser cruel con él, no porque quiera, sino para espantarlo por su bien. No está a salvo en Seúl. No está a salvo fuera de Udo. Para empezar, ni siquiera hay un mar cerca en el que pueda resguardarse en caso de que surja algún problema o se seque, y en la ciudad no es tan fácil encontrar fuentes de agua con la que hidratarse.

Debe alejarlo. Quiere mentalizarse con esa idea porque sería lo más responsable en su caótica situación, y eso es exactamente lo que su cerebro le está recordando sin cesar. Sin embargo, su corazón se encuentra en un conflicto completamente opuesto. Está jodidamente preocupado por Beomgyu y, dios, amó verlo de nuevo, por supuesto que lo hizo, porque, para bien o para mal, toda su vida orbita alrededor del rubio al que tanto amaba.

Ahora mismo, se siente bastante bipolar. Dominado por el sentido de la responsabilidad y sobreprotección que le insta a alejarse de Beomgyu por seguridad, mientras el anhelo de volver a estar con el amor de su vida choca con esa idea en una intensa batalla donde ambos están a la par, dejándolo en un mar de dudas donde no sabe si debería fingir odiarlo o ser sincero y amable con él.

━¿Sabes… ━habló con duda, analizando tímidamente si debería terminar la pregunta━… si Beomgyu tenía agua? ━necesitaba asegurarse de que se estaba cuidando, y Hueningkai era el mejor informante para conocer su estado mientras no supiera qué hacer.

━Me pareció ver un pulverizador en su mochila, pero no sé si estaba lleno ━esa respuesta no fue lo suficientemente satisfactoria para Taehyun, algo que Kai notó; pero antes de seguir insistiendo, quiso aliviar un poco el ambiente━. Sigo sin entender cómo conseguiste conocer a un supermodelo como él. Ni tus descripciones ni las fotos le hacen justicia a cómo se ve en la vida real. Si tiene operaciones estéticas, he de admitir que no se notan nada.

Taehyun puso los ojos en blanco, incrédulo por lo que acababa de escuchar━. ¿Qué centro estético habría en una isla pequeña con solamente un pueblo repleto de ancianos y campos kilométricos de cosechas?

━Yo qué sé. Es lo primero que un cirujano plástico como yo piensa al ver un rostro tan armonioso. ¡Y dijo que solo usaba agua! Es frustrante que no explote sus genes naturales ━estuvo a punto de agregar «vistiendo de manera elegante», pero recordó que la simpleza de su atuendo hacía que su apariencia destacara más, por lo que no podría juzgar su elección de ropa━. ¿Es alguna tradición de Udo usar lentes de contacto de colores? Él también tiene los ojos azules.

━Algo así ━respondió Taehyun vagamente. Como sus propios ojos se habían vuelto de un azul claro repentinamente, tuvo que mentir diciendo que eran lentes de contacto porque no sabría cómo explicar ese rasgo sin destapar el gran secreto por el cual Udo se encuentra estrictamente cerrado al público. Quizás pueda contárselo a Hueningkai algún día, pero será en un futuro muy lejano, cuando ese secreto no sea la principal razón de tener su libertad tan limitada━. Si Beomgyu necesita algo como sal, por muy extraño que suene, no preguntes por qué, solo se la das, ¿vale? Tiene que ver con las tradiciones de allí ━soltó al dirigirse al ascensor, dando por finalizada tanto la visita como la conversación.

Sin embargo, Kai no estaba dispuesto a dejarlo ir todavía y rechinó los dientes, frustrado de nuevo por no comprender qué pasaba por la cabeza de su amigo━. En serio, no hay quien te entienda. Te ves claramente preocupado por él, pero lo alejaste de ti tan pronto como lo viste. ¿Qué está pasando contigo, Taehyun? Ni siquiera me habías contado lo de tu padre; ¿es por eso que tu madre y tú se pelearon? ━es muy permisivo con él, así que no le enoja la falta de comunicación. No obstante, admite que se siente un poco dolido porque esa falta de comunicación pueda provenir de una falta de confianza cuando no cree haber hecho algo que hiciera a Taehyun dudar de él.

━¿Cómo sabes lo de mi padre? ━preguntó Taehyun volteando de nuevo hacia él, con expresión perpleja en su rostro.

━Beomgyu se enteró a través de tu abuela, quien, por cierto, te envía una carta que se supone que él debía entregarte en persona, pero ni siquiera le dejaste tiempo para dártela ━su tono de reproche hizo que Taehyun bajara la cabeza, visiblemente avergonzado. Tal y como Hueningkai supuso, si su abuela estaba directamente involucrada, este iba a mostrarse más razonable y receptivo, y no iba a desaprovechar esta oportunidad━. Encuéntrate con Beomgyu, hablen tranquilamente y recoge la carta. Es de mala educación ignorar a los ancianos. Recuerda, son los veteranos de la vida.

━Vale... ━accedió Taehyun sin rechistar, para su gran sorpresa━. La pelea con mi madre no fue exactamente por la repentina muerte de mi padre, sino por las consecuencias de ella y las decisiones que tomó después ━explicó sin entrar en muchos detalles, simplemente porque sintió que al menos le debía un breve resumen a Hueningkai━. Por eso, no quiero que Beomgyu se encuentre con ella, así que debo alejarlo…

━Pero tú no quieres alejarlo ━sonó como una pregunta a pesar de ser una afirmación, porque Kai estaba un poco dubitativo al respecto. Sin embargo, al ver cómo los músculos de su amigo se tensaron y en su rostro se instaló una mueca triste, supo que estaba en lo cierto, lo que le hizo sentir mucha pena por él a pesar de no conocer todos los detalles. Esa frustración por no estar correctamente con el rubio es real, se nota━. Oh, Taehyun, sabes que yo no diré nada; puedes juntarte con Beomgyu. Sakura no se tiene por qué enterar ━alentó.

━El problema es que hay ojos en todos lados. Esta situación es más densa de lo que puedo soportar. No me puedo fiar ni de las ratas de la calle.

Por muy exagerado que sonara, Hueningkai le creyó. Ciertamente, no tiene ni idea de lo que ocurre con el tema de Beomgyu y por qué Taehyun se había vuelto tan cerrado en sí mismo, pero sí conoce su situación familiar porque, hasta cierto punto, está involucrado.

Para empezar, esa vivienda no es exactamente de Taehyun. Sí, está a su nombre, pero la compró su madre para que viviera ahí, protegido y vigilado por un conserje que no es tan competente como parece porque bastaron unos pocos billetes para que dejara de informarle a esa mujer de los movimientos sospechosos de Taehyun.

De hecho, la idea principal que ella tenía en mente era enviar a Taehyun a un reformatorio, y lo habría hecho de no ser porque Hueningkai intervino en defensa de su amigo, más aún sabiendo que ese tipo de lugares son muy susceptibles al maltrato tratándose de instituciones privadas que utilizan la mala conducta de sus jóvenes como un argumento razonable por el cual abusar física y mentalmente de ellos sin consecuencias.

Hueningkai había escuchado demasiadas cosas negativas sobre esas instituciones y no iba a permitir que Taehyun pasara por eso. Y menos mal que intervino, porque su presencia había calmado a Sakura, quien de repente sintió un poco de misericordia por su hijo y cambió el plan a algo más sencillo: Taehyun viviría donde ella decidiera, bajo las normas que ella estableciera y con la vigilancia de las personas que ella escogiera.

Por suerte, la tarea de "vigilante principal" se le concedió a Kai, y le pidió que viviera junto a su hijo, creyendo que haría bien su trabajo en vista de lo mucho que se preocupaba por Taehyun. La realidad es que Hueningkai está totalmente en contra de toda esta vigilancia y restricciones hacia un hombre que se encuentra más cerca de los 30 que de los 20.

Es el único involucrado en esa extraña situación que le cubre las espaldas a Taehyun y le permite total libertad, siendo esta la razón por la cual accedió a la loca idea de Taehyun de vivir en una autocaravana para no sentirse tan atrapado en este lujoso apartamento de extrema seguridad. Sabía que se sentía muy mal en ese piso porque sufría muchos ataques de pánico cuando dormía ahí.

Pero eso no significa que Kai no le echara un ojo. Lo hace, mas no para informarle a la madre de Taehyun. A ella siempre le dice que todo está bien. No sabe que su hijo ha estado metido en drogas con malas compañías, ni que vive en la caravana, mucho menos que recientemente su “algo inconcluso” vino a Seúl.

Su deber como mejor amigo es vigilar que no recaiga y cuidarlo como pueda; pero la vigilancia que tiene hacia Taehyun es algo sano y personal. Eso de darle informes semanales a Sakura le parece perturbador y muy ajeno a lo linda y liberal que era la mujer hace unos años.

Hueningkai no está de acuerdo con las inquietantes prácticas de Sakura. Ya no solo por lo malditamente inmoral que es tener a una persona tan cohibida, sino que es consciente de que esa nueva faceta de la mujer es la causante de que Taehyun esté en constante estrés y una de las razones por las cuales bebe y fuma en exceso, y empezó desde mucho antes de tener la autocaravana.

No conoce los detalles, pero ver cómo los vecinos y el conserje lo miraban atentamente cada vez que se cruzaban en el vestíbulo era suficiente para que Kai entendiera lo complicada que era la situación de Taehyun. Más ahora que Beomgyu está en Seúl.

Entiende por qué no quiere que nadie de aquí lo vea. De hecho, antes de irse a trabajar, asumió que Beomgyu se marcharía y, sutilmente, le dijo al conserje que se trataba de un viejo conocido, precisamente para que lo relacionaran más con él que con Taehyun, añadiendo algún comentario clasista digno de los estúpidos que viven en ese edificio para dar a entender que ve al rubio como inferior simplemente por enfatizar que no son tan cercanos.

Tampoco quería involucrar al pobre Beomgyu en todo esto. Sin embargo, le da pena que rechazara su oferta de quedarse ahí. Al fin y al cabo, todo es seguro de puertas para adentro, pues él no va a ser quien le vaya a informar a Sakura sobre su inesperada visita.

━¿Y si se ven en un lugar lejos de este edificio? ━propuso. No se quedaría tranquilo hasta que la pareja hablase adecuadamente.

Taehyun se quedó pensativo durante unos largos segundos, analizando los pros y los contras de su propuesta━. Eso… podría estar bien ━sigue pensando que no debería, pero si es delito querer ver aunque sea una última vez al amor de su vida, entonces que le detengan. Al menos, ahora tiene una razón para hacerlo gracias a su abuela. Tiene una carta que recoger, y no es su culpa que, casualmente, sea Beomgyu quien la tenga.

━Perfecto ━soltó Hueningkai con una amplia sonrisa, y no perdió el tiempo. Rápidamente, sacó su teléfono y abrió el chat con el rubio━. Te organizaré una cita con él para mañana por la mañana.

Taehyun rodó los ojos ante el uso de la palabra "cita" en vez de "reunión", mas no se quejó. Al contrario, su corazón se aceleró emocionado hasta que vio un bote extrañamente familiar sobresaliendo del bolsillo de donde Kai había sacado su teléfono.

━¿Qué es eso? ━preguntó, señalándolo con el ceño fruncido.

━Oh, ¿esto? ━Hueningkai sacó el bote y, efectivamente, era lo que Taehyun sospechaba━. Me dieron una de esas cremas milagrosas en el trabajo. Quería probarla, pero es demasiado aceitosa para mi piel grasa. ¿La quieres?

━Sí ━contestó, se la arrebató de las manos antes de adentrarse en el ascensor, cuyas puertas se cerraron justo en el momento en que Hueningkai abrió la boca para quejarse de su falta de educación por no despedirse correctamente, algo que a Taehyun no le importaba mucho.

En lo que bajaba, se sintió irritado al ver la etiqueta de la «crema milagrosa», el producto estrella de Kim's Corp, la fuente de sus dolores de cabeza estos últimos seis años; esta vez con un envase nuevo, mucho más pequeño que antes.

De nuevo, no le dirigió la palabra al conserje cuando pasó por el vestíbulo para salir del edificio. La reducción del tamaño de la crema lo puso de muy mal humor porque era la señal de que pronto iba a tener a un grupo de imbéciles pegados como garrapatas a su trasero.

Soltó un sonoro gruñido nada más llegar al descampado, sintiendo la gran necesidad de beber hasta el coma etílico.

Sí, eso haría. Pero antes, sacó su barbacoa portátil y se encargó de quemar la crema hasta que no quedara rastro de ella, observando atentamente cómo se derretía el bote mientras se palpaba uno de los tatuajes de su brazo: el de un pez, para ser más específicos.

Se había hecho varios tatuajes por pura impulsividad, estando bajo la influencia del alcohol; pero ese en específico es significativo. Oculta una cicatriz que obtuvo tras un incidente con Kim's Corp, y a su vez, es el único tatuaje que escogió estando sobrio y pensando bien en su significado.

No es nada profundo, en realidad. Recibió un corte en la piel por una razón horrible y tapó la cicatriz con un pez simplemente porque le recordaba a Beomgyu. Él siempre fue su pilar, su felicidad; el que ponía una tirita en las heridas emocionales que tenía en el pasado. Si nos ponemos cursis, la explicación sería un rollo romántico de "la persona que amo tapando mis heridas". No es algo en lo que Taehyun estuviera pensando cuando las agujas inyectaban la tinta en su epidermis. Sin embargo, tiene mucho sentido para él.

El mensaje de Kai, donde especificaba la hora y el lugar de su “cita” con Beomgyu, lo sacó del trance, pero no se molestó en abrir el chat. Tenía toda la noche para hacerlo.

En su lugar, aprovechó que la barbacoa estaba encendida para usarla como estufa y abrió la primera lata de cerveza de muchas, disfrutando de la tranquilidad de la noche con el cálido fuego haciendo el aire fresco más soportable.