Capítulo 48.
—Lo siento Jungkook... pero es que fuiste el primero en el que pensé en venir. —Jin se sorbió la nariz.
Jungkook suspiró pesadamente, no quería sentir el contacto de Jin en él, ya Jimin había pensado quien sabe qué. Palmeó un poco fuerte la espalda del alfa y lo miró.
Quizás Kim había ido en busca de Jeon porque ellos fueron novios. Aunque nunca compartieron un solo beso, nunca tuvieron sexo, o Jungkook nunca le dio una muestra de cariño, ellos fueron "cercanos" al menos una semana.
—¿Qué pasó Jin? —no importaba que el otro alfa estuviera llorando, él estaba molesto porque no podía ir a abrazar a su omega.
—M-Mi omega me dejó...—lloró. —S-Se fue...
—¿Y por qué? —dijo frunciendo el ceño. —¿Hiciste algo? —y Jin lloró más fuerte.
—F-Fui un idiota... él aceptó mi nudo y por lo tanto, el lazo comenzó. —dijo abrazando más a Jungkook. —L-Luego quedó embarazado...
—Entonces...
—Lo traté mal, porque te amo.
—Ay pendejo, ya hablamos de esto.
—No me dejas terminar. —hipó el alfa. —Entonces lo utilizaba como mi polvo pero mi parte animal lo reclamaba.
—¿Y...?
—Jungkook no seas así. —se quejó el alfa.
—No estoy entendiendo nada Jin. Si fuiste un imbécil con él entonces, ¿por qué no lo buscas? —dijo obvio.
—Porque no tengo i-idea de donde puede estar.
—¿No tienes dinero? Contrata a alguien que pueda encontrarlo.
Entonces el castaño lo miró a los ojos. ¿Cómo no se le había ocurrido antes? Asintió repetidas veces sin dejar de llorar. Tomó las mejillas del pelinegro y juntó sus frentes.
—Gracias.
—Suéltame. —dijo serio.
Jin hizo ademán de besarlo pero Jungkook lo empujó fuertemente, haciendo que casi se cayera al suelo.
—En serio, que si vuelves a intentar sobrepasarte conmigo, no dudaré en tirarte por la ventana. —dijo amenazante. —Ahora ve y busca a tu omega, antes de que te saque a patadas.
Jin asintió y se limpió las lágrimas. Se arregló el traje y suspiró profundo tratando de calmarse.
—Gracias Jungkook, te amo. —dijo antes de voltearse. El mismo Jin se sorprendió de como su parte animal se removió en disgusto y enojo cuando dijo esas palabras. Dándole una mala sensación.
—¡Vete ya! ¡Fúchala!
Jin siguió caminando y salió de la oficina. Cuando Jungkook se aseguró que se fue, llamó a Yoon Gi. Los pitidos del teléfono lo ponían nervioso, necesitaba saber dónde estaba Jimin. Se mordió las uñas hasta que la voz del omega se escuchó.
—Señor. —dijo con respeto.
—Jimin. ¿Dónde está? —preguntó rápidamente.
—No lo sé... pensé que estaba con usted...
—Mierda. —dijo y colgó.
Salió de la oficina y caminó por el edificio. Sus ojos buscaban alguna señal de una cabellera pelirubio pero no había nada. No pudo creer que recorrió las veinte plantas del edificio entero. Joder, el omega no estaba por ningún lado. Sus padres lo veían corriendo de aquí para allá. Ya no sabía ni dónde buscar a su omega.
Cayó en el suelo de la oficina de su madre tomándose del cabello. Mierda, no entendía, no sabía dónde podía estar su chico. Miró la hora y ya era tarde, exactamente las cinco. Suspiró y se frotó los ojos. Chung Hee se acercó y le frotó el hombro a su hijo, quien tenía la mirada perdida en un punto ciego; ido en sus pensamientos. Se sentó al lado de su hijo y le sacudió un poco el hombro en señal de apoyo, el alfa jugó con sus dedos sin saber qué hacer.
—¿Sabes? —dijo Chung Hee. —Cuando tenía peleas amorosas con tu madre, iba al parque, eso me relajaba.
Jungkook puso su atención en el alfa.
—Pensaba sobre la vida, razonaba sobre el error que cometía, e incluso me daba el lujo de comerme un helado. —sonrió. —No fue tu culpa hijo, en cualquier momento llegará a ti, el lazo los une.
—Aún no tiene la mordida. —dijo suspirando.
—Sabes que el nudo es como la señal de Wi-Fi, entre más cerca estés de la fuente, mejor te llega la señal.
—Es la comparación más rara que he escuchado. —sonrió Jungkook por primera vez en un rato.
—Anda, ve y relájate.
Jungkook asintió y se puso de pie, quizás el consejo de su padre no era tan malo. Llevó sólo su teléfono y su billetera antes de salir por su auto. Ya no trabajaría más por hoy, así que salió al estacionamiento para poder arrancar su auto y salir del edificio.
Condujo hasta llegar al parque. Estacionó su vehículo en un espacio disponible, viendo por la ventana a varias personas caminando, otros jugando, parejas tomadas de la mano, entre otras.
Salió de su camioneta, suspiró pesadamente. Quería a Jimin, su alfa quería llorar con tan solo pensar que su omega estaba enojado con él.
Todo era culpa de Jin, era culpa de él. Su alfa se resintió con el otro imbécil, quizás ahora Jimin lo odiaba.
Caminó varios minutos alrededor del parque, sus manos metidas en sus pantalones, sus zapatillas sonaban un poco y una brisa refrescante pasaba por su rostro. Su padre tenía razón, quizás el sonido de los pájaros ayudaba, el viento y a lo lejos vio un puesto de helados. Decidió comprar uno, tuvo que esperar a que varios niños hicieran sus pedidos.
Pero no fue sólo eso lo que vio, si no también a un chico pelirubio, sentado en el pasto y arrancando un poco de éste. Reconocería esa figura donde sea, era él, su omega. Compró dos helados y se fue con una pequeña sonrisa amenazando con salir de sus labios, pues Jimin se veía muy tierno.
Llegó al lado del omega y se agachó para poder sentarse. Jimin vio hacia arriba para ver de quién se trataba. Bajó la mirada al ver al hombre que amaba pasarle un helado de fresa, el pelinegro lo tomó, pero seguía sin verlo a los ojos. Escuchó el suspiro del ojimiel y lo miró.
—Sé que me amas...—dijo bajito el omega. —P-Pero...
Jungkook pasó un brazo por sus hombros y lo atrajo a su cuerpo.
—E-Es inevitable... no soy un alfa, no tengo dinero, no tengo nada que él pueda ofrecerte pero...—Jungkook lo escuchó con atención. —Tengo un pequeño corazón y un inocente amor para darte.
El alfa se quedó en silencio, sus latidos aumentaron de sobre manera. Jimin se apoyó en su hombro y suspiró.
—Te amo Jungkook.
—Y yo más a ti Jimin. Te amo como no sabes cuánto amor, te lo diré siempre porque una vez no me basta, te amo demasiado. —Jungkook lo besó con cariño. —No hay lugar donde quiera estar si no es contigo, si no es a tu lado.
¿Por qué la vida los había juntado? ¿Acaso ellos eran almas gemelas? No importaba, porque Jimin era de Jungkook, era su omega. Sin importar qué.
—Por eso...—dijo el alfa buscando algo dentro de los bolsillos de su traje. —Quiero que...—una pequeña caja estaba en las manos del alfa. —Te cases conmigo...
Los ojos del omega comenzaron a liberar lágrimas al ver el anillo que sostenía el alfa. Jungkook sonreía nervioso, esperando por cualquier movimiento o palabra de su hombre. Se colocó frente a Jimin antes de susurrar:
—Park Jimin. ¿Quisieras casarte conmigo? —dijo sonriendo.
Y los labios del omega se curvaron con una sonrisa, la manera en la que su boca se posicionó y su lengua murmuraba las palabras con ayuda de sus cuerdas vocales hizo al alfa acelerar su corazón y liberar una pequeñísima lágrima.
—Sí.
Actualicé 15 capítulos solo porque estoy de buenas y quería complacerlas también a ustedes.
Usualmente solo actualizo 4 capítulos y ni siquiera este día es el día en el cual actualizo está historia, ya que son todos los sábados.
Pero de igual forma muchas gracias por el apoyo a la adaptación.
Voy a hacer esta pregunta solo una vez : ¿Alguien quiere que le etiquete en la próxima actualización?
L@s amo, Bye.
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