─¿Crees que debería despertarlos ya? Yoongi la pasó mal ayer.

Podía escuchar a Taehyung hablar por teléfono con Jimin aunque este se encontrara en la habitación del fondo, casi susurrando sus oraciones. No quería levantarse aún, sentía el cuerpo pesado y sus pensamientos nublados por una noche llena de pesadillas.

Decidiendo fingir estar muerto, Yoongi relajó el cuerpo lo mejor que pudo antes de recostarse contra la amplia espalda de Jungkook. El muchacho Beta era la mejor fuente de calor que podría haber encontrado nunca y, además, se trataba de un compañero maravilloso para sus noches más dolorosas.

Jeon Jungkook, ¿por qué el mundo había sido tan cruel con él?

Apenas fue consciente del momento en que el muchacho giró sobre sí mismo para quedar frente a él, sus brazos envolviendo su cuerpo en cuestión de segundos con una gentileza que resultaba familiar, cercana. Se encontró pensando en ese lugar como un tipo de refugio para su corazón.

─¿Quieres que te abrace? ─la voz ronca del chico resonó cerca de sus oídos, provocándole un escalofrío que recorrió su columna vertebral.

Ante esa pregunta, Yoongi solo pudo asentir un poco, pasando un brazo por encima de la cintura del chico, maravillándose con el tacto de la piel desnuda del chico. El Alfa apenas notó las suaves caricias que prodigó sobre ese pequeño tramo, ni siquiera podía ver el rostro sonrojado del más joven.

─¡Buenos días, señor sol! ─el grito de Taehyung acompañado por el cruel sonido de una cacerola siendo golpeada violentamente contra una paleta de madera terminó asustando a ambos chicos, siendo el más joven quien reaccionara primero al colocarse sobre el mayor, cubriéndolo con su cuerpo en un intento por «protegerlo» de lo que estuviera en el exterior─ ¡Levanten, levante, tulipanes!

Yoongi abrió los ojos entonces, consiguiendo observar el rostro de Jungkook a unos centímetros del suyo. Lo más extraño no sería la posición en la que se encontraban, sino la electricidad que comenzaba a llenar el poco espacio que los distanciaba.

Allí estaba ese chico, tomando el lugar que Hoseok había dejado abandonado.

Impresionado por aquel repentino pensamiento que sentía más perteneciente a su lobo que de él mismo, Yoongi sacudió la cabeza, intentando disipar todo recuerdo de aquella oración de su mente.

La puerta se abrió entonces, mostrando la figura de Taehyung que aún sostenía sus instrumentos de tortura mañanera al momento en que encendió las luces de la habitación, el cuerpo de Jungkook alejándose de el suyo para que el chico se sentara en la orilla de la cama mientras Yoongi se incorporaba torpemente, aun perdido en sus ideas erróneas.

Una ráfaga de arrepentimiento lo golpeó de lleno cuando deparó en el rostro confuso de Taehyung, que poco a poco pasó a perder el color, su piel contrastando bastante con la mata de cabello rojizo y desordenado que la coronaba.

─Ya... Ya es hora de levantarse o vamos a llegar tarde al prado ─bajando sus enseres, el Alfa pelirrojo abandonó la puerta.

¿Qué le diría a Taehyung ahora?

Todo el letargo se disipó de su cuerpo entonces, apenas pensando sus acciones en el momento en que corrió detrás de Taehyung. Era posible que Jungkook no supiera de los sentimientos del otro Alfa, pero Yoongi conocía lo terrible que resultaba el rechazo.

─¡Taehyung! ─sin aliento, Yoongi ingresó a la cocina, frenando apenas al agarrarse al marco de la puerta para ver al mencionado tomando una bolsa de pan.

─¿Qué pasa, Yoongi? ─le pregunta con voz suave, pero sus ojos mostrando la derrota que vivía en su interior─. Ve a alistarte, yo voy a preparar la comida mientras tanto.

La hermosa sonrisa cuadrada del chico resguardaba dos palabras que podrían hacer más sencillas las cosas para el extravagante trío de lobos. Pero el miedo al rechazo siempre sería más grande que cualquier otro sentimiento, comprendía eso también.

─¡Voy a bañarme primero! ─escucha gritar a Jungkook al final del pasillo, otorgándole a los dos unos segundo más de silencio antes de que Yoongi se acerque al Alfa con la cabeza baja, mostrando su cuello como una señal de sumisión ante él, su único instinto funcionando para reconocer que se había entrometido en un territorio de otro.

Aguarda hasta que escucha el agua correr para hablar al fin con Taehyung, que en ese momento contaba las rodajas de pan, el aroma a tristeza rodeándolo como una vaporosa nube de humo.

─Está bien, Yoongi ─intenta calmarlo el chico, meciendo sus caderas como si bailara alegremente por la mañana─. Jimin y yo hablamos sobre esto hace unos días, ¿sabes? Tenemos que dejar de ser tan egoístas con nuestros sentimientos.

─¿Van a decirle la verdad?

Taehyung entonces lo observó con cariño, aunque eso le sabía un poco amargo en ese momento, la mano del pelirrojo acariciando su cabeza antes de volver a su oficio de confeccionar el desayuno. Aunque la tristeza lo rodeaba, parecía tan tranquilo y resignado que Yoongi simplemente no podía terminar de creérselo.

─No ─suspirando, el Alfa giró sobre sus talones de forma teatral, una voltereta que tenía las intenciones de resultar graciosa para el que lo observaba con los ojos bien abiertos─. No vamos a atarlo de manos con nuestros sentimientos, no es justo. Lo que menos necesita Jungkook es que Jimin y yo lo atormentemos con nuestras cosas a pocos meses de la boda, ¿sabes? Él aún no se recobra totalmente de algo de su pasado.

─Pero nunca sabrán si no lo intentan, Jungkook es solo un poco despistado, pero...

Mentiría si decía que se esperaba el siguiente movimiento de Taehyung, pero Yoongi de verdad que no lo veía venir. El muchacho se encontraba abrazándolo, sus brazos rodeando tímidamente su cintura mientras ocultaba el rostro dentro del espacio del cuello del otro Alfa. Buscaba consuelo, algo que él mismo había hecho en el pasado.

─Solo quiero que Jungkook sea feliz. Solo queremos que Jungkook sea feliz con quien sea que pueda hacerlo feliz. Por encima de cualquier sentimiento, él sigue siendo mi mejor amigo.

Fueron esas las palabras con las que consiguió callar a Yoongi por completo, porque él comprendía mejor que nadie lo que quería decir con las mismas. Él pensó eso mismo en cuanto vio a Hoseok entre la espada y la pared.

Nunca permitiría que su mejor amigo sufriera por elegirlo, así que solo lo dejaría ir. Taehyung estaba haciendo eso mismo y, al parecer, Jimin también.

Se alejaron de los brazos de otro entonces, Yoongi observando al menor con los ojos colmados de lágrimas silenciosas.

─No hagas eso, Yoongi ─pide con una dulce sonrisa estirándole los labios─. Ve el lado bueno, ambos vamos a poder compartir el dolor, ¿no? O mejor aún, podríamos convertirlo en algún buen sentimiento para hacer la vida más llevadera.

Él ni siquiera había considerado aquella posibilidad, no hasta que Taehyung la mencionó.

Limpiando las lágrimas que no permitió derramar, Yoongi tomó lugar entonces frente al desayunador, al lado contrario en el cual se encontraba el otro Alfa, preparando sus suministros para la ida al bosque. Suspiró cansado, considerando que tal vez sacar el lobo al exterior podría ayudarlo para controlar sus emociones.

Un grito agudo los hizo dar un salto, haciendo que Taehyung lanzara el pan recién hecho al suelo mientras Yoongi se aferraba a la orilla del desayunador como su salvavidas para no caer de la silla. Cuando se recobraron del susto ambos comenzaron a andar rápidamente por el camino que los llevaría al baño, abriendo la puerta sin dudar.

Jeon Jungkook estaba allí, con el cabello mojado cayéndole sobre los ojos, una toalla envolviendo sus caderas, metros de piel desnuda y empuñando un zapato en dirección a una enorme araña que levantaba sus peludas patas en su dirección.

Yoongi se encontraba a punto de entrar para terminar con aquel intento de asesinato hasta que un peso se colgó de su espalda, gritando como si la vida le fuera en ello.

Llevaba tiempo sin reír de esa forma.

¡Yop, yop, yop, un Clearke aquí no tan tarde como tenía pensado!

¿Qué les pareció este dilema? ¿Tal vez ya es hora de pasar al arco de la superación? ¿Alguien recuerda las pesadillas de Yoongi? ¿Creen que Taehyung y Jimin dejen ir sus sentimientos para continuar con la ceremonia en paz?

De nuevo estoy publicando el Dilema entre semana, perdón por eso, pasé todo el sábado y domingo entre tareas, montañas de lana y cuidando de mi gata TuT pero estoy intentando adelantar con el otro Dilema para continuar con la rutina de subir capítulo los viernes o sábados.

Perdón por no contestar últimamente a los comentarios, pronto estaré en ello, me anima bastante leer que aún hay personas esperando las actualizaciones de este pequeño fic♥

¡Muchas gracias por leer, cuídense mucho y nos vemos pronto con el Dilema 17!

ΔClearke Al PoderΔ