El bosque parecía aullar enfurecido a su alrededor, las ramas de los árboles siendo azotadas con violencia por el viento mientras él solo podía observarlas desde su recoveco sobre la tierra. Apenas podía distinguir el cielo, pero sabía que la Luna debía encontrarse resplandeciendo por encima de las copas de los árboles.

Su cuerpo entero parecía ser aplastado por una roca que no le permitía mover más allá de las puntas de sus dedos. Suspirando, Yoongi decidió que lo mejor sería calmar la ansiedad que comenzaba a tomar forma dentro de la oscuridad en su mente, respirando lentamente para regular el movimiento de su pecho.

Él estaría bien, solo se trataba de otra pesadilla.

Se encontraba a punto de cerrar los ojos en un vano intento por sacarse a sí mismo de los parajes más desolados de su mente cuando el sonido de pasos y pequeñas ramas siendo aplastadas llamaron su atención.

─¿Yoongi? ─la voz de Jungkook consiguió que forzara su rostro a ladearse, tomando un ángulo justo para observar al preocupado muchacho que se acercaba sorteando el terreno escabroso─. Dime que te encuentras bien.

No pudo articular palabra, por lo que al chico no le quedó de otra más que decidir acercarse hasta el cuerpo inmóvil del Alfa, dispuesto a ayudarlo para recobrarse. Su instinto tensó todos los músculos de su cuerpo entonces, el retazo de una epifanía surcando su mente.

Jungkook debía irse de ese lugar antes de que el lobo llegase de nuevo, listo para engullir a Yoongi, cumpliendo de esa forma el deseo que materializó el primer día que debió cuidar de Taehyung durante la semana de celo.

Sudor frío cubrió su cuerpo cuando volvió a intentar moverse, consiguiendo con mucho esfuerzo sentarse, sus manos levantándose intentando realizar un ademán que le diese a entender al muchacho que debía marcharse inmediatamente.

Apenas había alcanzado a ver que aquella majestuosa criatura ya se encontraba a las espaldas de Jungkook, agazapado, listo para atacar.

─¡No, Jungkook, no! ─un grito que se perdía en la vastedad del bosque.

Inmensos ojos brillantes lo reciben tan pronto despierta, el cabello castaño de Beta cayendo suavemente a los costados del rostro, enmarcándolo y contrastando con su piel. Pocas son las palabras con las que podría argumentar sobre el sentimiento que comienza a golpear dentro de su pecho. Sus movimientos ansiosos, las manos temblando al levantarse para sostener las mejillas del muchacho.

Jungkook estaba bien, solo había sido otra terrible pesadilla que, si no conseguía controlar, se tornaría en una forma recurrente para atormentarlo, como si no tuviese suficiente con lo que le sucede día a día al recordar el desdén de Hoseok.

El chico se encontraba a punto de soltar alguna palabra cuando los brazos de Yoongi se cuelgan alrededor de su cuello, aferrándose a él como si su vida dependiese de eso. El aroma humano de Jungkook consiguió que tanto él como su Alfa se tranquilizaran, inhalando y exhalando con fuerza, como si su tratase de un ataque de pánico repentino.

─¿Qué pasó? ¿Fue muy malo? ─con voz suave, Jungkook le pregunta, devolviendo el abrazo.

La cabeza le palpita, un dolor agudo tomando forma en sus sienes mientras el mundo se le desestabiliza y náuseas que escalan poco a poco por su garganta.

─O pueden ser efectos del alcohol ─susurra Jungkook, que no puede más que esperar el trágico momento en que Yoongi suelte algo con lo que su estómago se encuentre resentido.

Dos puños golpean la puerta entonces, de modo que a Yoongi y Jungkook no les queda más que esperar por su cruel destino si Jimin y Taehyung los descubrieron. El sonido de la puerta abriéndose fue lo que les hizo aferrarse con más fuerza uno al otro, mientras que al Alfa no le queda de otra que tragarse el amargo e inesperado contenido gástrico.

─¿Chicos? ─Jimin es el primero de los dos en hablar, pueden escuchar sus pisadas acercarse a la cama de forma dubitativa─. Ya es tarde, ¿qué hacen todavía dormidos?

Yoongi, adolorido y mareado, toma un poco de tiempo para comprender en totalidad las palabras del Omega, siendo Jungkook quien se separa de él corriendo.

─¡Yoongi, es lunes!

Siente que el mundo entero explotará en cualquier momento, no simplemente su cabeza. Todo parecía dar tantas vueltas que ya ni siquiera podía distinguir bien lo que se encontraba frente a él.

Necesitaba café.

─Tu padre notará que bebiste toda la noche, Yoongi ─canturrea Taehyung al ritmo de la canción que se escucha a través de los altavoces por todo el vehículo, las manos sobre el volante mientras sus dedos daban leves golpes como acompañamiento─. Jimin encontró los cristales de una botella de vino esta mañana, ¿qué demonios estaban haciendo Jungkook y tu ayer?

Soltando una risotada que le destrozó aún más los sentidos, Yoongi se cubrió los ojos antes de buscar las palabras adecuadas para responder a la cuestión del Alfa más joven.

─Yugyeom nos visitó anoche con unas botellas de vino ─confiesa, su dulce e inocente sonrisa siendo una fachada provocada por los rezagos del alcohol─. Honestamente no recuerdo nada de lo que ocurrió. Sé que estábamos bien en la primera botella, pero la única imagen que tengo de anoche es una segunda botella siendo descorchada por Yugyeom.

Aunque Taehyung había abandonado la canción al inicio de la conversación, su golpeteo sobre el volante continuó su marcha, bailando alrededor de las palabras de Yoongi como si un remolino de emociones no estuviese aglomerándose en su interior, miles de preguntas volando de un lado al otro de su cabeza. De todas formas, parecía que nadie podría otorgarle una sola respuesta.

─¿Crees poder sobrevivir hasta las 6 hoy? ─pregunta con genuina preocupación bruñéndole la voz─. Podrías hablar con tu padre para salir temprano, no tengo problemas en quedarme arreglando papeles y citas.

─No voy a obligarte a trabajar más por una estupidez mía ─asegura, el dolor en la parte lateral izquierda de su cráneo martilleando con fuerza─. Gracias de todas formas, Taehyung.

─¿Qué tal si te quedas durmiendo unas horas en...?

─Estaré bien, cariño ─se mofa un poco el Alfa, colocando una de sus manos sobre las de Taehyung, que simplemente suspira.

─No sé por qué siempre me preocupo tanto por ti, amor.

La sonrisa se mantiene en el rostro de ambos chicos, el ambiente relajándose mientras Yoongi iba recuperando poco a poco sus sentidos, aunque la cabeza parecía poder explotarle en cualquier momento. Sabía que sería un problema, pero era lo suficientemente mayor como para poder lidiar con ello sin sobrecargar a Taehyung con trabajo de oficina. Había sido un completo imbécil por beber demasiado un domingo por la noche, de modo que no le quedaba más que simplemente hacerse cargo de sus errores.

─¿Qué tal les fue con los ancianos? ─es la pregunta que suelta mientras el auto se sacude al pasar sobre un pequeño túmulo.

─Mejor de lo esperado, cada uno de ellos tiene una idea muy diferente y costosa para nuestra ceremonia de enlace... Están emocionados por la idea de una pareja destinada en Navatsy ─aunque la mueca que realizó no denotaba del todo felicidad.

Llevándose ambas manos al regazo, Yoongi piensa en una manera de abordar el tema tan complicado que su amigo llevaba entre manos, decidiendo al final que su situación actual no se prestaba en nada para ser sutil con las palabras.

─Siendo honestos, ¿Jimin sabe que estás enamorado de Jungkook? ─la pregunta flota en el ambiente un par de segundos mientras todos los músculos del cuerpo de Taehyung se tensan debajo de la camisa blanca del uniforme─. Merece saberlo, tanto como tú merecerías enterarte de algún amante que tuviese antes de embarcarse dentro de esta situación tan... engorrosa.

Sacando la mirada del camino un par de segundos, Taehyung levanta una ceja en dirección a Yoongi, que comienza a sonrojarse furiosamente al pensar de nuevo en la cantidad de palabras que salían por su boca.

─Papá, esta situación engorrosa se complicó más cuando descubrí que a Jimin también le gusta Jungkook. Raro, bizarro, un chiste del destino, dile como prefieras con esa elección tan catastrófica de palabras. En serio, Yoongi, ¿crees que no lo notó? Prácticamente su lobo puede percibir mis sentimientos alrededor de Jungkook.

Hundiéndose en el asiento, el Alfa se da unos cuantos golpecitos a un costado de la cabeza con la mano derecha, reprendiéndose por lo que ocurría en su cabeza con los rezagos del alcohol que abandonaban su sistema poco a poco aún.

─Deberías escribir un libro, tal vez incluso consigas que Jungkook te diseñe una portada ─ríe Taehyung al mismo tiempo que ingresan en el parqueo para empleados del inmenso edificio del padre de Yoongi─. Un escritor Alfa atraería bastante público si no se trata de negocios.

─Intentaré escribir un libro sobre como dos Alfas terminan en los brazos del otro ─murmura antes de morderse la lengua por sus desatinos esa mañana─. Ya deja de hacerme hablar, ¿me vez en buenas condiciones para ser serio en este momento?

─Como gestor de tu agenda para el día de hoy, mejor es que te encuentres listo para las 10 de la mañana, porque tienes una junta con tu padre y algunos directivos más.

Mordiéndose los labios con intención de no soltar ni una sola palabra más, Yoongi termina por ceder a sus caprichos mientras Taehyung consigue estacionar el auto, que se apaga tan pronto los vocablos saltan fuera de su boca.

─¿Podrías ir por un café para mí?

Riendo de forma escandalosa, Taehyung baja del auto, apresurándose para ir hasta la otra puerta con intenciones claras de ayudar a Yoongi a andar hasta el elevador que separaría sus trayectos.

─Pensaba ir aunque no me lo pidieras, tu expresión es demasiado graciosa en este momento como para negarte un café ─afirma el chico, uno de sus brazos alrededor de la cintura del mayor para servirle de apoyo mientras caminan por el inmenso estacionamiento desolado a esas horas de la mañana.

Se deja hacer hasta el momento en que las puertas de metal se abren frente a ellos, Yoongi apresurándose a sacarse de encima al más joven para subir con dignidad. Agradeció a la madre Luna que nadie más se encontraba utilizando el elevador, por lo que llegó a su destino en el piso 8 sin alguna parada imprevista.

Siguiendo su habitual camino por el pasillo bordeado con oficinas hasta la suya, Yoongi saludó con la mano a algunos de los trabajadores que se cruzaban con él, intentando ser amable bajo el intenso dolor de cabeza, las punzadas apenas desapareciendo.

Cuando consiguió traspasar las puertas de su oficina suspiró, lleno de alivio, prestando poca atención a la disposición de sus objetos personales antes de dejarse caer como un peso muerto contra el largo sillón marrón que ocupaba una de las esquinas. Sondeando la diversa magnitud de pensamientos que surcaron por el balde de su mente, Yoongi se permitió burlarse un poco de lo que imaginaría serían las condiciones de Jungkook y Yugyeom en sus propios horarios laborales.

Eran unos imbéciles.

─Yoongi ─la voz de Hoseok a sus espaldas lo sobresaltó un poco antes de decidir que probablemente solo se tratara de otra broma masoquista de su cerebro─. Yoongi, no me ignores.

Sobresaltado, abre los ojos, aunque ni siquiera había notado en qué momento los había cerrado, apoyándose en sus codos para elevarse, buscando con la mirada desenfocada la procedencia de aquella melodiosa voz, la voz de su más grande amor.

Allí se encontraba Hoseok de carne y hueso, llenando la oficina con el aroma de su lobo mientras se levantaba de la silla donde Yoongi solía sentarse por horas para trabajar manipulando palabras dentro de su pequeña laptop.

Surrealista y hermoso, los ojos de Hoseok relampaguearon rojos en el momento en que Yoongi se colocó sobre sus pies.

Aún no comprendía si deseaba golpearlo o besarlo.

¡Aquí un Clearke de nuevo luego de un par de semanas! En verdad, perdón por la demora TuT

¿Qué les pareció este Dilema? ¿Alguna idea de por qué surgen los sueños recurrentes de Yoongi? ¿Creen que Yoongi consiga recordar algo de lo que dijo Yugyeom? ¿Un poco de YoonKook y TaeGi para alegrar la vida? ¿Qué creen que pasará con Hoseok esta vez?

Muchas gracias por leer♥ a pesar de que esta vez me tardé mucho más en actualizar debido a prácticas en la Universidad y un bloqueo creativo terrible TuT espero poder traer pronto una pequeña maratón de Dilemas de un Alfa para compensarlo.

¡Cuídense mucho y nos vemos pronto con el Dilema 12!

ΔClearke Al PoderΔ