La puerta se abrió con un quejido lastimero que le hizo encogerse un poco, buscando la forma de cubrirse los oídos de aquel estruendoso sonido. No tenía motivos para ingresar con cuidado al apartamento, ya que Taehyung y Yoongi seguían en la casa de Jimin y pasarían allí la noche.

Obligó a sus pies a avanzar, uno tras otro arrastrándose con desgano hasta pasar la puerta entreabierta. Se rindió a la idea de estirar el brazo para encender la luz del salón principal, tampoco intentó encontrar el control de la televisión, solo era consciente de que deseaba silencio, toneladas de silencio que le asfixiaran mientras recordaba todas las cosas que había hecho mal esos meses.

Dejó que su cuerpo cayese pesadamente sobre el sofá, apenas acomodándose, sus nudillos tocando el suelo frío mientras la punta de su zapato izquierdo le hacía compañía.

Había pasado mucho tiempo desde la última vez que se el vacío lo acobijó entre sus brazos, llenándolo de desesperación y dolor, él sabía que era algo necesario: abrazarse al dolor para conseguir comenzar a sanar poco a poco. Ahora que podía, debía continuar ese proceso.

Sus lagunas mentales, esas que lo mantenían a salvo del pasado y su naturaleza, comenzaban a evaporarse, mostrando retazos de todo lo que intentó ocultarse durante siete años.

Estaba a punto de dejarse caer al abismo cuando su teléfono celular comenzó a vibrar dentro del bolsillo del pantalón, resultando insoportable por el dolor de cabeza y la ansiedad que le obstruía el pecho.

Tardó su tiempo en conseguir sacar el aparato de su bolsillo, extinguiendo la luz que lo atormentaba con el botón verde. No deseaba admitirlo, pero le haría bien escuchar una voz conocida.

─¿Kook?─ la voz de Yoongi disminuyendo la presión que se ejercía dentro de su pecho─. Solo quería saber si estabas bien, si ya estás en casa... Taehyung y Jimin están locos de angustia.

─Estoy bien─ su voz podría parecer adormilada para Yoongi, pero Jungkook sabía que no podía encontrar la voz correcta para dirigirse a él sin llorar y suplicarle que volviese a casa─. Yugyeom me trajo hace poco, no quería dejarme solo pero terminé convenciéndolo que era mejor venir a cuidar el apartamento.

─No te escucho muy bien...

─Estaba por irme a dormir, ya sabes, fue realmente agotador pasar tantas horas de diversión con Yugyeom y Jackson, gané algunas partidas de póker─ intentó explicar con rapidez, su tono de voz patoso y estrangulado─. Solo diles que los quiero y que los veo mañana, ¿sí?

Silencio lleno la línea unos cuantos segundos, Jungkook comenzando a suplicarle a la Luna que los alejase de él un momento, solo necesitaba un momento con él mismo para volver a la normalidad, para esconder de nuevo sus sentimientos para que estos no se interpusieran en el momento en que los viera de nuevo.

Solo unas horas, la voz río dentro de su cabeza, mañana seguirás pensando en que los deseas a ambos.

Esperó escuchar a la voz de su madre regañarlo, pero nada más sonó en el fondo de sus pensamientos, dejándose suspirar aliviado.

─Escucha, Kook─ Yoongi suspira del otro lado, incluso podría imaginárselo apretándose el puente de la nariz─. Lo que sea que haya pasado y consiguiera ponerte tan mal vamos a hablarlo cuando llegue a casa mañana temprano, enviaré a Jimin y Taehyung al otro lado de la ciudad en busca de flores o lo que sea, pero vamos a hablas, ¿sí? ¿No quieres que hablemos hasta quedarte dormido?

Sabía que le importaba al Alfa, pero nunca lo había escuchado tan... Desesperado.

─Bien─ accede, deseando que Yoongi también se relajara un poco─. No te preocupes por mí, te diré todo mañana, pero necesito ir a dormir ahora mismo. Te esperaré temprano.

─Puedes llamarme si lo necesitas.

─Te amo─ consiguió canturrear de forma graciosa, camuflando el vacío que se encontraba rodeándolo─. Gracias por todo.

Colgó sin esperar respuestas, colocando el teléfono en modo avión y lanzándolo sobre la pequeña mesa del comedor.

¿Por qué era tan difícil decirles eso a Jimin y Taehyung? ¿Por qué no podía decírselos de la forma que deseaba? Dejando de lado todo el asunto de la amistad, era aún más complicado comprender por qué era capaz de amarlos a ambos a la misma vez.

¿No decían que si se ama a otra persona es porque a la primera no se le amaba sinceramente? Vaya contradicción en su lugar, donde no podía ni siquiera distinguir a quién amó antes o con quién de los dos lo notó primero.

Estaba cansado de pensar en ellos, de pensar en que pronto se irían a vivir juntos y que lo dejarían con ese desolado lugar al que ambos habían llamado hogar con antelación. No deseaba arruinar su ceremonia de enlace solo porque sus sentimientos se entremezclaban, tampoco quería escoger a ninguno sobre el otro.

Los quería a ambos, eran los dos o no era ninguno, y comenzaba a pensar que sería esa última opción la que tomaría al final de la semana. Los vería caminar por el pasillo en dirección a Seung, sonreiría a su lado mientras sus lazos se formaban y fundían en uno solo. Estaría allí, deseando hablar, pero mordiéndose la lengua para no hacerlo, porque sería peor para él ser rechazado por ambos, tener que alejarse de ellos sería el peor castigo que podrían imponerle.

Conteniendo la respiración un par de segundo, el chico intentó calmarse al mismo tiempo que pensaba en qué podría hacer. Lo que menos deseaba era perderlos, pero se encontraba a unos pocos días de que eso sucediera si no se movía.

Tu lobo, el recuerdo de la voz de Yugyeom regresando a él como un golpe directo en el estómago.

Pero, ¿qué haría si su lobo le decía que solo podía amar a uno? ¿Qué pasaba si su lobo redirigía sus sentimientos a solo uno de los dos? O peor; ¿qué le esperaba si su lobo rechazaba sus sentimientos por ambos? Era una opción pensar que su lobo podría preferir a otra persona, probablemente otro Beta, ya que llevaban años sin el otro Jungkook no podía predecir lo que su lobo le indicaría.

Y tenía mucho miedo.

Debía admitirlo, aunque fuera para él mismo: Estaba aterrado de confesar sus sentimientos. No poseía el mismo nivel de valentía y confianza que otros podrían tener para arriesgarse a abrir su corazón.

─¿Debo arriesgarme a perder a alguien?─ murmuró, sintiéndose estúpido al segundo siguiente por preguntar el voz alta.

Consiguió reír un poco luego de eso, levantándose del sofá mientras una idea cruzaba su mente. Tardó poco en seguirla, siendo guiado por la necesidad inminente, un deseo casi olvidado por sus instintos.

La puerta de su apartamento fue cerrada bruscamente a sus espaldas, encontrándose en pasillo del edificio al mismo tiempo en que el dolor de cabeza comenzaba a hacerse presente por medio de punzadas en la parte posterior de su cabeza. Corrió hacia las escaleras de emergencias, subiendo las gradas de dos en dos, unas pocas veces se encontró a punto de perder el equilibrio antes de sostenerse de la barandilla y continuar su trayecto.

El instinto seguía allí, se sorprendió de que eso ocurriera, pero lo notaba como parte de su propia alma, algo de su propia mente.

En pocos minutos se encontró empujando la puerta de la azotea, consiguiendo moverla el espacio suficiente para entrar por ella. Viento helado chocó contra su cuerpo entero, un escalofrío placentero recorriéndole la espalda. Consiguió respirar profundamente antes de que sus ojos buscaran a la pálida Diosa que reinaba el oscuro cielo.

Ni siquiera las estrellas podrían opacar su belleza, nada podría, Jungkook se sentía completamente cautivado por aquella luz mortecina a la que se hallaban atados los lobos.

El abismo se desvanecía lentamente, toda la oscuridad abandonándolo en su camino al cielo eterno al lado de la Diosa Luna.

Sus pies repentinamente livianos se movieron gráciles sobre el cemento, apenas produciendo algún sonido, deseando encontrarse más cerca del resplandeciente astro que lo observaba con dolor. Sus manos se posaron sobre la pequeña brecha rugosa de la pared que cercaba la azotea, dándose impulso para subir a ella, equilibrándose para mantenerse firme en ese espacio.

Aquellos enormes ojos resplandecientes subieron de nuevo, buscando una respuesta por parte del único ser al que le confiaría su vida.

Diosa Luna, rezó en silencio, si existe la decisión correcta necesito que me guíes a ella, porque no puedo simplemente quedarme con uno de ellos y preferiría morir a perderlos.

Era un simple Beta con un anhelo imposible, pero la oscuridad en su interior se esfumaba poco a poco la lucidez comenzaba a ganar terreno. Solo hacia falta una afirmación por parte de la Diosa Luna para que los demás se hiciera posible.

Desde su trono en el cielo, la Luna le vio con los pálidos luceros grises desbordados por las resplandecientes lágrimas. Deseó poder abrazar a ese pequeño chico antes de otorgarle una respuesta.

Del fondo de su garganta dio inicio un sonido que había olvidado casi completamente, pasó desgarrando los músculos de su garganta hasta tomar la forma deseada. La fuerza del aullido resonando en sus oídos al abandonar sus labios, estremeciendo todo a su alrededor por la depresiva canción a la que daba inicio.

Al segundo siguiente de tomar su decisión; ya había dado el salto.

─Min Yoongi─ los fríos ojos de Jimin taladraban al Alfa frente a él al mismo tiempo que Taehyung lo retenía tomándolo por los hombros─, dinos qué te dijo Jungkook.

─Ya te lo dije─ gruñó el Alfa, cruzando sus brazos sobre el pecho mientras giraba los ojos con irritación─. Me contó que se la pasó increíble con Yugyeom y Jackson, por poco terminan haciendo un sándwich con él, al parecer.

Los colmillos no tardaron en mostrarse mientras la tierna sonrisa de Yoongi aparecía, mostrando las encías de forma angelical.

─Me alegro por él, después de estar obligado a ir con ustedes tantas veces a ver a Seung seguro que le venía bien un respiro, salir con amigos y ser un poco travieso. Ya saben, cosas que suceden a su edad cuando no tiene pareja.

Parecía broma, pero Yoongi en verdad disfrutaba de hacer rabiar esos dos con pequeñas mentiras. Sabía que, si decía algo relacionado con Jungkook y otros lobos, no tardaban nada en mostrar los colmillos y tintar sus rostros enteros de rojo.

─No digas estupideces─ murmuró Taehyung, sus ojos entrecerrándose mientras se contenía─. Solo fue con amigos, lo único que queremos saber es cómo se encuentra después de ver a Yugyeom con alguien más... Después de todo, él fue su primer novio.

Las mejillas de Yoongi se llenaron mientras contenía la risa: otro talón de Aquiles para ellos dos. Sabía que no debía continuar tentándolos, en verdad estaba preocupado por el tono de Jungkook, pero también deseaba molestar a esos dos por no tener la valentía de hablar con sinceridad sobre sus sentimientos.

─Escuchen, Jungkookie está bien. Fue a la casa de su amigo, conoció a su actual pareja, jugaron póker, bebieron un poco, Yugyeom lo regresó al apartamento por Jungkook quería volver, se besaron en el auto y ya, Jackson parece estar interesado en formar un trío porque ¿Para qué tener una pareja si puedes quedarte con dos personas? Tonterías del siglo pasado.

El agarre de Taehyung sobre los hombros de Jimin se debilitó luego de ese discurso, sus ánimos bajando a medida que comprendía el mensaje del Alfa. El Omega no tardó en darse la vuelta para salir de la habitación, igual de afectado por la situación.

─No deberías jugar con ese tipo de cosas, Yoongi─ susurró, comenzando a girarse para ir en busca de Jimin.

─Taehyung─ le detuvo con una sola palabra, su voz sonando repentinamente suave─, lo digo por los dos, en serio. Lo siento si fue muy brusco, pero ya no les queda tiempo y aún no le dicen la verdad al chico, él merece saberlo.

Congelándose, ni siquiera es capaz de verlo a los ojos, porque sabe a lo que se refiere. Pero ambos son cobardes, lo saben, temen alejarlo y perderlo para siempre.

─Él los ama─ concluye Yoongi, cruzando los dedos porque su intento de ser Cupido no salga mal.

─No de la misma forma─ pero la convicción de las palabras de Taehyung le muestran lo cegado que se encontraba en ese asunto.

Deja que el menor salga en busca de su pareja destinada, hundiéndose en el sillón de la sala de la misma forma que su positivismo. No quería que ellos se dieran por vencidos aún.

Taehyung encuentra a Jimin en el pequeño jardín de la casa, sentado sobre el césped mientras arrancaba pequeñas flores moradas. Justo en el momento en que iba a tocar su cabeza, un aullido lastimero cruza el cielo, calándoles en lo profundo a ambos chicos que no tardan en alzar las cabezas para responder, sumando más trozos a la canción.

En el interior de la casa, una planta más arriba, Karrel y Namjoon discutían en el despacho de la mujer sin importarles que fuese de madrugada, sus voces callándose únicamente cuando los aullidos interrumpieron el silencio de la noche.

─Mira, Namjoon─ reanudó la conversación con voz temblorosa la mujer─, si es lo que nosotros estamos pensando es mejor que dejemos que Jungkook termine de procesarlo solo─ desviando la vista y ocultando su rostro, Karrell continuó─. Ya pasó por mucho, yo lo sé, pero necesita terminar esto solo.

─Lo sé─ coincide el Alfa, escondiendo el rostro entre sus manos─, si uno de ellos interfiere el pasillo podría cerrarse.

Se mantuvo tendido sobre la dura superficie un par de segundos más, sonriendo a las estrellas mientras su boca se llenaba de sabor metálico de la sangre. La respuesta por parte de la Luna lo golpeó con la fuerza suficiente para hacerlo saltar y ahora no contaba con la convicción necesaria para levantarse, pero se sentía satisfecho con la resolución.

Lo recuperaría.

Luego de la ceremonia, iría por él.

¡Yop! Un Clearke que sigue respirando por aquí TuT sé que prometí traerlo antes, pero tuve dificultades consiguiendo que el Dilema quedara como yo quería, así que aquí está: Tarde, pero está.

¿Qué les pareció este Dilema? Es un poco más largo de lo habitual a mi parecer ¿Qué piensan de la revelación de Jungkook y su repentina salida de la oscuridad? ¿Creen que Yoongi pueda ayudarlo? ¿Creen que Taehyung y Jimin saben que el aullido es de Jungkook?

Y, la pregunta importante: ¿Qué piensan que saben Namjoon y Karrell?

De nuevo les agradezco mucho por leer la historia, todos sus comentarios me llenan de alegría aunque no he tenido tiempo para responderlos T_T

También traigo una pequeña noticia, no sé si les interesa, pero comencé a escribir un fic VKookMin en colaboración con mi mejor amiga, vamos a intentar llevarlo con capítulos semanales, escribiendo ella los capítulos de Jimin y yo los de Taehyung, se titula niño MECO y solo puedo decirles que:

Taehyung y Jimin son solo dos chicos universitarios con un crush.

Les dejo la portada, por si les interesa el romance y la comedia:

Perdón por hacer la nota tan larga;;;

¡Cuídense mucho y nos vemos pronto con el Dilema 54! Estamos cada vez más cerca del final♥

∆Clearke Al Poder∆