Dilema 42
Jungkook ni siquiera había sentido pasar la noche, quedándose dormido al lado de Jimin aunque Karrell le había ofrecido una gran habitación, ni siquiera fue consciente del momento en que Jin había abandonado la habitación para irse a tomar su turno de noche en el hotel. Solo supo que debía levantarse cuando la alarma sonó, encontrándose con que Jimin ya se había levantado.
Cada uno realizó sus actividades matutinas con calma mientras Karrell se encargaba de preparar el desayuno y Namjoon preparando el almuerzo de ambos chicos, teniendo el cuidado excesivo de no colocar ningún tipo de licor por equivocación.
─Mamá, ya nos vamos─ avisa Jimin cuando terminan de comer, llevándose a rastras a Jungkook─. ¡Adiós, Joonie!
─¡Adiós, señora Karrell, Namjoon!─ grita Jungkook desde la puerta, apresurando su paso al de Jimin.
─Vayan con cuidado─ la mujer y el Alfa asoman las cabezas por la puerta que da al pasillo, viendo cuando ambos muchachos se van.
─Karrell, necesito hablar algo importante contigo─ susurra Namjoon tan pronto cree que la distancia es suficiente para no escucharlo─. Es sobre estos tres muchachos.
Jungkook maneja por las calles que ya conocía en dirección a la universidad de Jimin, que se encontraba medianamente más lejana de lo que él había calculado. Jimin había encendido la radio del viejo auto de Taehyung, moviéndose por las emisoras, buscando algo específico.
─¿Y Hoseok? ¿No va a ir hoy a la universidad?─ pregunta de forma casual, pero se arrepiente al notar la forma en que Jimin se tensa.
Jungkook recordaba la forma terriblemente triste en la que lucía el día anterior, nada había conseguido animarlo después de ello e incluso regresó al apartamento para cuidar de Taehyung con Yoongi.
Se veía desesperado por pasar tiempo con él.
─Ah─ alarga Jimin, viéndose las manos mientras piensa─. Es algo complicado.
─Aún queda un poco de camino─ le anima, pensando que a lo mejor se les ocurriría algo para ayudarlos.
─Verás... Iba a decírselos la noche de la película, pero luego llegó Yugyeom y el tiempo se pasó volando...─ Jimin suspira con pesadez, mordisqueando sus labios─. Sé que viste lo tristes que están, tienen un buen motivo para estarlo.
─No te sientas obligado a decirme si no puedes o no quieres─ intentó cortarle Jungkook, viendo todas las trabas que el Omega colocaba a soltarle la verdad─. Hoseok no me lo dijo por algo.
─Es que no sé como decírtelo─ dando un pequeño grito de frustración, Jimin se deja caer contra el sillón, jalando su cinturón de seguridad─. Su padre firmó un contrato con una familia de su mismo estrato social, como Hoseok no le presentaba ningún Omega, terminó por ofrecerlo... Y su ceremonia de enlace será junto con la nuestra.
Jungkook se queda con la mente en blanco, su piel tornándose fría de golpe por la cruda sensación que le provoca saber que su padre podría llegar hasta ese extremo con tal de tenerlo enlazado a alguien, por lo que él comprendía, eso estaba relacionado con que el señor Jung deseaba que su hijo se hiciese cargo de su empresa. Pero debía tener un compañero para que los demás Alfas se lo tomaran en serio.
─Se quedan sin tiempo y opciones─ murmura Jimin, su ánimo bajando enormemente─. Hobi va a faltar esta semana porque quiere pasar un poco más de tiempo con Yoongi antes de que la noticia llegue a ser pública.
─Esto está bastante jodido─ Jungkook no quería aceptar ese destino para el Alfa, aunque no le conocía de tanto, su aura de confianza le había ayudado bastante y sabía que era una gran persona, del tipo que se merecían el mundo entero, sin excusas─ ¿Crees que podríamos ayudarles en algo?
Jimin niega, su pequeña mano regresando a la radio.
─Hobi dijo que no me preocupara, que si era lo que debía pasar él simplemente lo aceptaría. Ya no quiere pelear con su padre, aunque tampoco quiere perder a Yoongi.
─No sé como las personas no notan que son el uno para el otro─ menciona Jungkook, molesto, sin notar lo que los ojos de Jimin se encontraban expresando por él.
─No, las personas no suelen aceptar lo que resulta más que obvio─ lanza Jimin, una indirecta que rezaba porque el Beta tomase al vuelo.
Tampoco se sorprendió mucho al notar que la conversación no se tornaría del modo que él deseaba.
─Parece ser que la sociedad estará eternamente cegada por lo que nos inculcan desde pequeños─ se lamenta, más sumergido en sus sentimientos.
La antigua forma en que creía que estar con Yugyeom era algo malo, algo prohibido, pero que ahora tomaba un color totalmente diferente. La situación entre Yoongi y Hoseok parecía estarle abriendo los ojos (y, en parte, el corazón), pero las heridas del pasado no se la dejarían tan sencillo.
El auto se detiene justo en la misma entrada donde lo habían recogido para ir al consejo, Jungkook espera pacientemente a que el Omega baje para despedirse de él, pero gira y le sonríe de una forma desoladora.
Hay más sentimientos dolorosos escondidos en ese gesto.
─Tú sigues estando un poco cegado ante estos temas, Kookie─ murmura antes de dejar un beso sobre su mejilla y salir corriendo del auto.
La voz en su interior intentó comenzar a hablarle sobre ello, pero su parte racional terminaba por silenciarla, llevándole de nuevo al lúgubre pasillo mental donde las cosas parecían estar saliéndose de control.
Una bocina lo saca de la ensoñación, apresurándose a manejar en dirección a su trabajo. No le toma mucho tiempo llegar allí, notando que aún llevaba buen tiempo antes de la entrada, llegaría incluso unos cuantos minutos antes de lo habitual.
Su jefe también se había sorprendido de verlo por allí, sonriéndole con un toque picaresco que Jungkook no comprendía realmente. No había hecho nada para recibir ese gesto, no había vuelto a dormir con nadie luego de Yugyeom, pensamiento que en ocasiones le avergonzaba ahora que le volvía a ver.
─¡Jeon Jungkook! Es bueno verte tan temprano al inicio de la semana, ¿cómo vas con tus proyectos?─ es la pregunta con la cual lo saluda.
El Beta sabía lo que se avecinaba y no le agradaba para nada, pero era el trabajo, solo debí acatar órdenes.
─Está casi terminado─ acepta Jungkook, a la espera de una nueva tanda de trabajo.
─No me veas así— pide el Alfa, pasando su brazo por los hombros del muchacho para llevarlo hasta otra sala a largos pasos─. Tengo un proyecto nuevo para el que creo que eres el indicado. En serio, tienes libertad creativa para lo que estás a punto de recibir.
─¿Qué se supone que es?─ pregunta, sin desear lanzarse al abismo sin una advertencia antes.
El Alfa sonríe con emoción que se ve reflejada en sus ojos.
─Una editorial quiere que nos hagamos cargo del lanzamiento de un libro en el que apuestan toda su fe. Necesitan que se realice todo: la portada del libro, el empaque del libro junto con algunos regalos, separadores, algún anuncio, la página de fans y alguna que otra cosa que se te ocurra para llamar más la atención del público objetivo que, curiosamente ¡Tiene tu edad! Lo bueno de ser tan joven.
Algo desorientado, Jungkook es empujado dentro de la sala, topándose de frente con el sonriente rostro de una mujer acompañada por otras tres mujeres con expresiones más serias.
─¡Aquí está el prodigio del que les hablé!─ alaba su jefe, como era de esperar, nadie diría nada malo de uno de sus empleados frente a sus futuros clientes─. Jungkook, ella es la autora del libro, Reyoner LaLaurie, y los representantes de la casa editorial.
─Un gusto─ intentó ser cordial, a veces no eran tan sencillo frente a otras personas.
─Amé tu portafolio─ comenta la mujer cuando sueltan sus manos─. Tus ilustraciones son preciosas.
Detrás de él, Jungkook siente como el aura avariciosa de su jefe crece junto con su sonrisa.
─Él hará un gran trabajo solo con que le digan de qué va el libro─ afirma el hombre, abriendo la puerta─. Regreso en unos minutos.
Genial.
─Bueno, me emociona bastante hablas sobre mi libro─ confiesa la mujer mientras se sienten frente al otro alrededor de la larga mesa de la sala de reuniones─. Siento que podría cambiar al mundo.
─Tenemos mucha esperanza puesta en este proyecto, señor─ admite una de las mujeres, tendiéndole un bloque de hojas engrapadas por un costado.
En el centro, escrito en negritas, se encontraba el título: "Un Beta".
¿Un Beta? ¿En serio?
─El título puede cambiarse si piensas que es demasiado tonto─ acepta la mujer, sonrojándose ligeramente─. Podrías ayudarme mucho con eso. La historia trata de un Omega que se enamora de un Beta, pero este no corresponde a sus sentimientos porque cree que es algo erróneo, más cuando se entera de que el Omega se encuentra comprometido con un Alfa que parecer ser su destinado ¡Es un drama total!
Jungkook traga saliva, repentinamente nervioso. La trama sonaba conocida, pero el tema resultaba realmente impactante.
Tal vez ese trabajo no era necesariamente para él.
¡Y llegamos al final de la maratón con un Clearke exhausto! Espero que hayan disfrutado del maratón tanto como yo♥ Justo la historia llegó a los 4.01 k de votos y 3 k de comentarios TuT ya no sé cómo agradecerles todo el apoyo y el amor que le dan a la historia♥
¿Qué les pareció este Dilema? ¿Muy vacío sin la presencia de Taehyung? TuT no se preocupen, dentro de poco vuelve a aparecer, ¿qué creen que dirá Namjoon? ¿Hoseok y Yoongi tendrán alguna solución al nuevo problema? ¿Jimin terminará por decirle a Jungkook lo que siente?
Y, la pregunta importante: ¿Qué título creen que le quedaría mejor a la historia que Jungkook ayudará a sobresalir?
Pido disculpas de nuevo por no poder contestar a sus comentarios en el Dilema anterior T_T me muero por hacerlo, pero hoy debía de terminar algunos detalles de mi proyecto final, pronto estaré respondiendo a sus lindas palabras♥ Muchas gracias por su apoyo, en verdad, amo leer sus comentarios, desde los más ocurrentes hasta los más tiernos♥
¡Cuídense mucho y nos vemos el próximo viernes en el Dilema 43!
ΔClearke Al PoderΔ
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