Dilema 36
Jimin había tomado su mano al salir de la habitación, arrastrándolo con él hacia la cueva del lobo (literalmente). Karrell solo les había echado una mirada antes de encogerse de hombros y guiarlos, mostrándose demasiado silenciosa para una situación como aquella.
En pocos minutos se encontraron ingresando al hotel de la mujer, dirigiéndose a los elevadores con pasos firmes. Jungkook solo podía maravillarse con el aspecto del lugar, tomando nota de algunos objetos que podía usar de referencia en el futuro si le pedía a Karrell que le dejase fotografiarlos.
─Jungkookie, ¿qué piensas?─ la pregunta le saca de la ensoñación, viéndose reflejado en el limpio cristal del elevador, su mano aún sosteniendo la de Jimin.
Lo cuidaría, porque era su amigo y el prometido de su mejor amigo. Lo cuidaría porque le tenía un cariño enorme.
─En que me gustaría fotografiar algunas partes del hotel─ decide ser honesto, sonriéndole ampliamente, derritiendo el corazón de Jimin sin siquiera proponérselo.
─No tengo ningún inconveniente en que tú tomes fotos del lugar, Jungkook─ la mujer habló, colocando su mano con suavidad sobre su hombro, un gesto cálido─. Eres un buen chico, aunque me lastima que no hicieras algo para intervenir en el enlace─ lloró falsamente la mujer, dramatizando─. Ahora debo entregar a mi muchacho en tres meses.
─Mamá...─ Jimin comenzaba a quejarse.
─No me digas nada, Jiminie, el que se llevó peor la noticia fue Namjoon─ se carcajeó la mujer─. Cayó de espaldas y ya no revivió, Taehyung y Hobi tuvieron que llevárselo cargado hasta su habitación de hotel.
Las puertas del elevador se abren en ese momento, mostrándoles el largo pasillo bien iluminado frente a ellos, Karrell sale antes, guiándolos hasta la habitación 323 que se encontraba en ese nivel. Jimin continuaba sin soltar su mano, casi parecía que lo hacía de forma inconsciente.
─Prepárate, hijo mío, porque papá hará un drama enorme─ se burló la mujer mientras daba dos golpes firmes contra la reluciente puerta.
Primero fue el sonido de pisadas acercándose, algo que solo consiguió acelerar el corazón de ambos chicos, comenzando a sentir ansiedad por lo que les deparaba detrás de la puerta que poco a poco fue siendo abierta. La cabeza roja de Taehyung se asomó, exagerando la sonrisa cuadrada al ver que ambos chicos se encontraban allí.
─Me dejaron solo─ se queja, quitándose del lugar para dejarlos pasar─, y se perdieron todo lo que Karrell nos dijo antes de que Namjoon entrara.
La mujer empuja a ambos muchachos contra la puerta, obligándolos a entrar a la habitación del Alfa. Taehyung terminó pasando sus brazos por los hombros de ambos chicos, disfrutando en silencio del aroma que cada uno podía otorgarle. Eran la calma que él necesitaba.
Jungkook notó que no importaba si Taehyung los abrazaba, Jimin no soltaría su mano. Extrañamente ser consciente de eso le hizo sentir bastante bien durante algunos segundos. Taehyung era su mejor amigo desde hace ya 6 años, era normal que estar a su lado fuera cómodo, pero la presencia de Jimin lo reconfortaba tanto que no podía negarlo.
Se sentía completo cuando los tres se encontraban juntos, el pasillo de su mente en calma, con ambas conexiones desbordando paz y sentimientos cálidos. Ese era su lugar seguro.
Pronto se encontró ingresando a la habitación del Alfa, topándose con la funesta escena: todas las cortinas de la habitación corridas, una única lámpara encendida sobre la mesita de noche, oscureciendo todo aún más, y la enorme cama sobre la que se encontraba tendido el desfallecido cuerpo de Kim Namjoon, Hoseok sentado en una silla a su lado, tomando una de sus manos mientras que la otra sostenía su barbilla con la expresión de gran sufrimiento. Seokjin se encontraba aplicando compresas de hielo en la frente del hombre, su expresión sombría.
Todo parecía digno de ser inmortalizado en un cuadro al óleo.
Taehyung los empujó hacia al frente, pero ambos dejaron que fuese Jimin quien se sentara sobre la orilla de la cama cuando Seokjin le cedió el lugar. El Alfa había mantenido su brazo alrededor de Jungkook, solo posando su mano en el hombro del Omega, mientras que este y el Beta continuaban tomados de la mano.
Los ojos de Namjoon se abrieron lentamente en ese momento, intentando enfocarse en el rostro de Jimin, su expresión dormida cambiando drásticamente a una llena de dolor.
─No puedo creerlo, Park Jimin─ murmuró el Alfa, soltando sollozos lastimeros─. Te dejé ir solo a la reunión porque unos clientes necesitaban que me presentara en la empresa y cuando regreso lo primero que escucho es que ya no te enlazarán con Hobi, pero sí con un Alfa que no llevas ni un mes de conocer.
─Namu...
─No, no intentes eso─ le regañó, apartando la mirada del Omega para dirigirla hacia el Alfa a sus espaldas─. Lo peor del caso es que decidiste enlazarse a un Alfa con los cabellos del color representativo del demonio─ una que otra lágrima rodó por su mejilla─, incluso fue lo suficientemente rudo como para retarme por la pata de tu lobo. ¡No, Diosa Luna!
Jimin gira su rostro para dedicarle una mirada llena de enojo a Taehyung, que solo sonrió con inocencia. Jungkook ya no sabía si quería continuar con la puesta en escena o dejar escapar toda risa que intentaba contener.
─Dime, Minie, ¿qué te dijo este lobo? ¿Qué endulzó tus oídos, mi niño?─ continuó Namjoon─. Lo comprendería de Hoseok, porque es tu mejor amigo desde hace ya más de dos años, pero ¿él?
─Namjoonie─ Jimin utilizó la voz más suave que podía, controlando su sonrisa─. Es el poder del verdadero amor, ese Alfa con los colores representativos del demonio es mi Destinado.
Los sollozos se reanudaron, esta vez fallando un poco con esconder la risa del Alfa, pero consiguiendo que algunas lágrimas continuasen cayendo por su barbilla.
─Es una desgracia, Minie─ intentó sonar más herido, si algo así se pudiese conseguir─, yo aposté todo mi dinero a que te quedarías con Jungkook.
El aludido, sintiéndose perdido, inclinó la cabeza a un costado. Sabía que se trataba de una dramatización, pero no podía controlar la sangre que ahora cubría su rostro entero debido a la vergüenza. Hoseok levanta la vista para ofrecerle una sonrisa cálida y un guiño cómplice.
─Podría quedarme con ambos─ el Omega no mentía con ese deseo─. Jungkookie es demasiado lindo como para dejarlo ir.
Miles de sentimientos explotaron en su interior, corriendo de un lado al otro sin saber por dónde debían de explotar. Krishna, era difícil seguirles el hilo.
─No alteres más el viejo corazón de tu padre, hijo mío─ con voz ronca, Namjoon comenzó a cerrar los ojos─. Moriré y así no podré llevarte hasta el altar.
─¿De qué demonios hablas? Yo llevaré a Jimin hasta el altar─ interrumpe Karrell, apresurándose a colocarse al otro lado de la cama, justo junto a Hoseok─. Es mi niño.
─Él siempre ha preferido a su padre, ¿verdad, muchacho?─ sus ojos vuelven a abrirse, fijándose en Jimin con gran intensidad.
Jungkook puede ver como Jimin coloca los ojos en blanco, soltando al fin una carcajada por la dramatización de los adultos. El Beta le sigue por mera inercia, ganándose que Taehyung terminara recostado sobre ellos, sin control sobre su risa.
─¡Mira como evade la pregunta!─ se indigna Namjoon, sentándose para verlos mejor─. Me desmayé por tu causa, ¿Y así me pagas?
─Ah─ Karrell se queja─, déjalos ya, Namjoon, da gracias a la Luna que nos dijeron en lugar de huir para enlazarse.
─Bueno, por lo menos que admitan que ha sido una gran escena la de hoy─ se impulsa para salir de la cama, rasgando parte de las sabanas en el proceso─. Oh, mierda.
─Qué sorpresa─ la mujer gira para ver a Jin con la disculpa impregnada en los ojos─. Jin, perdona, ¿podrías?
─Ya estoy en ello─ el chico ya se encontraba buscando en uno de los armarios de la habitación, dándoles la espalda mientras rebuscaba más sábanas─. Es la cuarta del mes.
Karrell se acerca a él, tomando las sábanas de entre sus manos mientras le agradece y agrega:
─¿Podrías traernos la cena, muchacho? Comeremos aquí mismo.
─A sus órdenes, señora─ la emoción que desborda al chico deja a Jungkook admirado, eso hasta que el mismo se acerca a su lado, jalando de su brazo─ ¿Me acompañas, Kook?
El Beta asiente, comenzando a dar unos pasos en dirección a la puerta. El brazo del Alfa se aparta y la mano de Jimin da un último apretón antes de aflojar su agarre, separándose de ellos lentamente. Resultaba doloroso hacerlo, deseaba quedarse enredado con ellos, pero debía de hablar con Jin sobre Chung Hee.
Ambos chicos esperan a que se encuentran dentro del elevador para comenzar a hablar al mismo tiempo.
─¿Por qué hueles a viejo?
─Me encontré con un anciano de la manada.
Los ojos de Jin se abren con sorpresa, el rosado sustituyendo al celeste de sus ojos.
Al ingresar de nuevo al apartamento del Alfa todo se encontraba ordenado para comer, Jungkook ayudando a Jin a servir los platos mientras notaba como este le daba vueltas al asunto del anciano dentro del Consejo en Navatsy.
─¿Pasó algo?─ Taehyung se sienta a su lado cuando todo se encuentra listo─. Te conozco, pasó algo, dime qué es.
Jungkook lo piensa un par de segundos, repasando la forma en que Jin y él hablaban con miedo sobre un lobo anciano con conocimientos sobre el ocultismo, el único capaz de arrebatarle su lobo a cualquier persona.
─Te diré llegando a casa─ promete, seguro de que podrá encontrar alguna historia creíble de camino al apartamento para que no se preocupara.
Todos se encontraban alrededor de la mesa, codo con codo, en un cómodo silencio que Jungkook comprendió como el inicio de una rutina familiar.
Taehyung pronto sería parte de ese círculo familiar en términos formales.
─Bueno, chicos, solo quiero que me expliquen bien lo que creen que harán en la ceremonia de enlace─ pide Karrell luego de unos minutos.
─¿No es solo que uno de los ancianos terminará de unir nuestro enlace?─ tantea Taehyung.
Jimin se golpea la frente con la mano, cubriéndose el rostro luego de eso.
─Sí─ concede Karrell─, un anciano terminará de unir su enlace, pero este se fortalecerá con la segunda parte de la ceremonia.
─La mordida─ completa Namjoon, sonando extraño mientras observaba a Karrell.
Jungkook también desvió su mirada hacia la mujer, notando la bonita bufanda que se encontraba enrollada alrededor de su cuello, la textura simulando a las escamas de una serpiente. La mano de la mujer se interpone en su campo de visión, resaltando también un brillante anillo que adornaba su dedo anular.
─Así es─ Karrell pasea su mirada por los tres chicos─. La ceremonia de enlace termina con la mordida que debes de darle a Jimin, Taehyung─ su mirada resplandeciendo entre rojo y rosado.
¡Clearke reportándose con el Dilema 36 para dar inicio a la semana del maratón!
¿Qué les pareció este Dilema? Ya comenzamos a adentrarnos en temas más difíciles, cuando Yugyeom esté de regreso las cosas van a cambiar bastante ¿Qué les pareció la actuación de todos? ¿Encontraron las nuevas pistas o ya son demasiado obvias? ¿Cómo creen que se tomarán los chicos el asunto de la mordida? ¿Piensan que Chung Hee sería capaz de arrebatarle el lobo a alguno de nuestros muchachos?
En fin, espero que les vaya bien esta semana TuT que yo estoy a una de terminar el semestre y a lo mejor y termino publicando capítulos más seguido luego de que terminen los exámenes.
¡Cuídense mucho y nos vemos mañana con el Dilema 37!
∆Clearke Al Poder∆
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top