𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝐒𝐄𝐕𝐄𝐍.

TAL VEZ LA TERAPEUTA ESTABA EN LA RAZÓN Y CRYSTAL tenía un serio problema cuando se trataba de la toma de decisiones, cuando elegía algo se arrepentía y volvía al inicio o a probar otro camino. ese fue el caso con su bonito cabello.

una mañana no le gustó como se le veía el cabello corto, fue al salón de belleza, se tiñó de rubió y pagó por unas extensiones que le "recuperaran" la longitud de su cabello; no iban a durar mucho pero el dinero es dinero y podía costearse los tratamientos y cambios de look que le vinieran en gana. no la tomen a mal, su juventud le permite disfrutar de toda clase de destinos diferentes. 

pero a pesar de eso y de que fei estaba en buen momento de su relación con shen, cosa que obviamente la hacía feliz, no pudo evitar sentirse deprimida tan pronto como tomó asiento junto a lei en la azotea. tras el anuncio de jing sobre su renuncia a la herencia de sus progenitores y el hecho de que volvería a parís tenía al grupo algo melancólico. 

sentada y casi que acurrucada sobre el hombro de lei, suspiraba de vez en cuando mirando al cielo; las palabras de ximen le paseaban por la mente cada dos por tres. 

"a todos nos espera un futuro dentro o fuera del país".

ella sólo quería que todos estuvieran juntos siempre, poder verles los rostros todos los días y compartir los pocos espacios que bastaban para que sonriera, ¿era mucho pedir?. 

afligida, volvió los ojos a huaze lei quien también estaba concentrado en el panorama, atento a este tomó la mano izquierda de crystal en la suya, entrelazando sus dedos para darle a entender que estaba con ella y podía empatizar con el malestar que le pesaba en el corazón. cualquiera que les viera diría que parecían una auténtica pareja, pero quien en verdad los conocía sabía lo mucho que lei amaba a crystal como su hermana, como su soporte y su confidente; crystal amaba a lei como una hermana ama a su hermano, como una persona estable ama a quien no lo es tanto. 

shancai, bueno, shancai estaba tan confundida porque creía que a lei le gustaba jing, pero besó a fei y ahora se mostraba cariñoso con crystal. todavía le faltaba mucho por aprender. la más bajita apareció de repente por la azotea, tomando asiento junto a la caja de madera que conectaba el asiento con el de lei. 

a xia le agradaba shancai, pero a veces le parecía condenadamente entrometida. 

─ ¿están bien?. ─ afortunadamente generalizó la pregunta, aunque la mayor no iba a responder. 

─ ¿me veo mal?. ─ 

─ seguramente a los dos les impactó la decisión de jing, ¿no?. ─ christie cerró los ojos exasperada, sus preguntas tontas acompañadas del poco tacto la estaban sacando de quicio. ─ ¿la dejarás ir?. ─ interrogó ésta vez directamente a lei.

─ no me corresponde decidir eso. ─ hizo una pausa tomando una gran bocanada de aire. ─ jing siempre ha sido tenaz, elige su propio camino, no le gusta que le den órdenes, es exactamente una decisión que ella tomaría. ─

─ pero sí se marcha estará en parís y tú en shanghai. ─ la rubia evitó responder para no sonar grosera. ─ ¿y sí se enamora de alguien más?, ¿qué haras entonces?. ─

─ detenla, quieres que se quede, ¿no?. ─ a ese paso im crystal terminaría privada de la libertad con razón de agarrar a golpes a shancai por imprudente y metiche. ─ quizá se quede por ti. ─

─ no, cuando jing toma una decisión, nada ni nadie la hará cambiar de parecer. ─

por primera vez xia no dijo nada ni abrió la boca para absolutamente nada, estaba de acuerdo con que jing estaba en su derecho de partir y que nadie debía meterse en ello.

KUN SE OFRECIÓ A LLEVARLA AL AEROPUERTO al día siguiente, pero ciertamente ella quería estar sola y se negó, cosa que al chico no le molestó y comprendió más que amable. por primera vez en mucho tiempo, crystal no tenía ni una gota de maquillaje, ni su labial rojo, ni sus hermosas pestañas resaltaban, nada. 

estaba tan triste que a duras penas probó bocado del plato de sushu que fei le ofreció al almuerzo, estaba allí de pie sin caerse porque la leche de plátano coreana sí tenía altos niveles de glucosa y eso evitaba algún desmayo. desde su forma de vestir, que no era más que un par de jeans desgastados acampanados y un suéter rojo que parecía más navideño que otra cosa.

fei le recordó por el camino al aeropuerto que se veía horrorosa y que así no se comportaba una verdadera bichota, pero tras protestarle porque sí iba a usar sus converse verdes y le valía cinco pepinos lo que ella pensara, wu fei guardó silencio. ambas bajaron del coche, llegando hasta el ala de embarque internacional, donde ximen, meizuo, qinghe y shancai estaban esperando. 

ximen la observó preocupado, su estado era en realidad muy poco usual en su persona y lo último que quería era ver acongojada a crystal. nadie quiere ver cómo la chica de la que llevas años enamorado parezca no tener ganas de vivir. fei se hizo a un lado de meizuo con quien entabló conversación rápidamente y ella se colocó entre ximen y qinghe. 

fue de extrañar la presencia faltante de shanseo, pero pensó que tal vez tenía turno en su trabajo y no era tan cercano como para ir a despedir a jing. 

el chico de lentes la cubrió con su abrazo, crystal consintió el dulce acto, buscando refugio bajo su calor corporal por el frío y la necesidad urgente de sentirse protegida, sin muchas palabras el tonto de potter la hacía sentir comprendida, apreciaba el hecho de que no la forzaba a contarle nada y respetaba sus espacios en momentos así. 

─ ¿aún no puedes comunicarte con lei?. ─ meizuo le preguntó a ximen, que no apartaba su vista del frente, todos se notaban afectados. 

─ no se ha conectado desde ayer. ─ afianzó el brazo sobre los hombros de crystal, ocultando con su faceta neutral lo rojas que estaban por ponerse sus mejillas. ─ sabe que jing se marcha hoy. ─

─ no me respondió. ─ interrumpió fei mostrando la pantalla de su móvil.

─ quizá yo pueda. ─ qinghe muy entusiasta sacó el aparato de su bolsillo, enseñándolo. ─ ¿lo llamo?. ─ ximen, meizuo, fei y hasta crystal voltearon a verlo con extrañeza. él guardó su móvil abatido. 

segundos después ah-si hizo acto de presencia, con una cajita café de detalles dorados bajo su brazo bastante bonita.

─ si, ¿lei no vino contigo?. ─ 

─ ¿no está aquí?. ─ inquirió con el ceño fruncido, tomó posición junto a shancai acompañado de la típica expresión socarrona. 

─ ¿qué es esa caja?. ─

─ ¿la caja?, es un regalo para jing. es algo especial y no se lo mostraré a nadie. ─ 

en ese preciso instante el intenso de qinghe se empeñó en saber qué había dentro de la caja, forcejeando un poco con ah-si hasta que pudo, victorioso, retirarle la caja de los brazos. crystal frunció el ceño, daoming si no daba el brazo a torcer jamás cuando no iba a dar puntada sin dedal.

el chico abrió la caja emocionado, saliendo de ésta una especie de peluche azul con un resorte, hizo una expresión de susto en lo que ah-si reía. todos voltearon a ver, incluso crystal sonrió un poco, cosa que hizo reconfortar a ximen sobre su estado. 

la teñida dejó de prestar atención por algunos segundos, no estaba de humor para tolerar las idioteces de su ex novio para con shancai; no perduró mucho porque a los minutos jing apareció frente a ellos.

─ jing. ─ no pudo evitar sentirse peor, tragó grueso intentando que sus ojos no se cristalizaran porque tenía jaqueca de tanto llorar. 

─ ya me voy. ─ fue la única palabra que dijo al inicio; crystal seguía sin asimilar que una de sus mejores amigas, a quien consideraba su hermana junto a fei se marchaba. 

jing siempre fue la hermana mayor, ese ejemplo feroz de que ambas podían hacer lo que desearan, que nada podía detenerlas, que eran poderosas, fuertes y hermosas. los recuerdos de su infancia junto a jing, su partida y regreso, todas las risas, momentos de furia, molestia y sobre todo, de felicidad, inundaron su mente y corazón.

sus orbes se empañaron por las lágrimas acumuladas que amenazaban por salir, no estaba lista para dejar ir a nadie que amara.

─ cuídense. ─ silenciosa como ella sola, sus lágrimas saladas bajaron lentamente por sus mejillas, marcando un camino de transparencias brillantes. la mayor se sintió miserable por unos momentos, hacer llorar a crystal no era algo que estuviera en sus planes. 

─ cuídate. ─ habló meizuo sonriendo de costado.

─ mucha suerte. ─ ximen estaba consternado, pero no quería que se notara. tan él.

aprovechando la ocasión, pasó frente a jing quien la tomó de las dos manos para estrujarlas entre las propias. sus ríos salados no dejaban de correr, sí que necesitaría un analgésico después de eso.

little, no llores. ─ era fácil decirlo pero no hacerlo.

─ prométeme que no me dejarás de lado, promete por favor que serás muy feliz y no me olvidarás. ─ su voz era más un susurro, le importaba poco que la vieran llorar.

─ no me olvidaré de ti jamás. ─ declaró sonriéndole, secándole una mejilla con el dorso de la mano. ─ llegará el momento en el que debas tomar decisiones radicales y no podrás arrepentirte de eso; mientras tanto, rodéate de los que te aman. ─ finalizó observando discretamente la figura de ximen detrás de la chica. 

─ te quiero, jing. ─

─ también te quiero, xia. ─ las dos se fundieron en un fugaz abrazo, cediéndole el paso ahora a fei que estaba algo deprimida también. crystal volvió a su lugar entre los brazos de ximen, él ahora la apretó contra su torso, intentando consolarla. 

tras fei, shancai también se despidió.

─ díganle a lei que se cuide. ─ 

─ no te preocupes, lo golpearemos por ti. ─ le costaba admitirlo, pero los comentarios malos de ah-si pudieron ayudarla un poco.

─ dejen de molestar a shancai. ─ ah-si se sintió aludido.

─ nadie tiene tiempo para eso. ─ jing sonrió. 

─ entonces tendrán tiempo para cuidar de crystal, cuídenla mucho. ─ de nuevo, quiso llorar pero tuvo que centrarse en respirar pausadamente para que no le doliera más su cabeza.

daoming si acercó la caja sorpresa a jing, que la iba tomar pero qinghe apareció en el campo visual, metiéndose. 

─ ten cuidado jing, ésta caja tiene... ─ no pudo concluir, pues el líder le tenía la boca cubierta por su mano.  ─ tómala. ─

─ la apreciaré sin importar lo que tenga dentro. ─ 

pasajeros del vuelo af520 a parís por favor regístrense para embarcar, tengan listos sus pasaportes... ─ anunció la voz mecánica a través de los parlantes. 

─ debo irme, adiós. ─ se despidieron con la mano y jing, su mejor amiga, la voz de la razón de su proceder se estaba yendo.

─ adiós. ─

dispuestos a irse, dieron media vuelta para caminar por el pasillo. 

─ es increíble, jing se fue. ─ ximen tomó la palabra, esa frase todavía estaba en asimilamiento por parte de crystal. ─ y lei no vino. ─ terminó meizuo analizando la pantalla de su móvil.

─ lei. ─ cuando la menor levantó la vista del suelo, sus ojos se abrieron como dos canicas. ese desgraciado llegó tarde, lo peor era que estaba bastante fresco tras perderse la despedida de una de las tres chicas que lo toleraban.

crystal pasó de tristeza a molestia.

─ ¿cuándo llegaste?. ─

─ hace una hora. ─ xia tuvo ganas de matarlo y se separó del abrazo de ximen, en condiciones de plantarle su buen bofetón. 

─ hey, relájate. ─ el de lentes arrastró del brazo a crystal hasta volverla en su posición orignial. 

─ pero no te vimos. ─ tranquilo meizuo, no eras el único confundido.

─ estaba detrás de la columna. ─

─ ¿por qué te escondías?. ─ y shancai volvió a intevenir, a ese paso acabaría metida en más problemas de los que pudiera contar. ─ ¿no te molestó verla irse así?. ─ la chica se estaba tomando muchas libertades que no se ganó.

─ ¿qué clase de hombre eres?. ─ crystal miró a fei, quien le devolvió la mirada, tan conectadas como siempre. ─ la gente como tú, que tiene todo, no sabe lo que es esforzarse por algo. ─ los puños de fei se apretaron a los costados. 

─ jing es valiente para descubrir su propio camino, ¿por qué no actúas como un hombre y vas tras la persona que te gusta?. ─ ximen se tomó en serio esas palabras, ¿el que no se confesara con crystal lo hacía menos hombre?. ─ ve por ella sí realmente te gusta, síguela a donde quiera que vaya. ─ lei sonrió, cosa que descolocó a todos. de su gabardina sacó un billete de avión y su pasaporte.

─ tomaré el próximo vuelo a parís. ─ unos ruiditos de exclamación acompañados de sonrisas satisfactorias surcaron a todos; el enojo de crystal cesó y fei no podía estar más orgullosa. los tres chicos avanzaron hasta lei, abrazándolo y dándole palmaditas amistosas.

él se acercó a shancai, sin quitar la sonrisa.

─ shancai, tenías razón, no puedo seguir así. ésta vez me arriesgaré. ─ y bajo la atenta mirada de todos, le plantó un beso corto sobre la frente cubierta por su flequillo. ─ gracias. ─

luego se posó frente a crystal, ensanchando más su sonrisa.

─ gracias por tus silencios, he aprendido que cuando hablas menos entiendes más. ─ se inclinó ahora para besarle dulcemente la mejilla. ─ eres la mejor amiga que pude pedir, te quiero. ─ esas sí que eran declaraciones fuertes.

lei no era de demostrar cariño con nadie, sólo las personas especiales tenían ese lujo. con el paso de los días, lei se percató de que la única persona con la que realmente contaba era con crystal, acompañada de sus consejos, silencios, chistes malos o simplemente su presencia.

huaze lei partió sin despedirse de nadie más, ni siquiera de fei.

meizuo se vio en la obligación de sostener a daoming si, que parecía querer ir corriendo tras lei por el beso que le dio a shancai. ximen veía la situación divertido, él sabía que lei no era un jugador tramposo y que sobre todo, conocía de sus sentimientos por la chica.

fei la tomó de la mano, sonriéndole de manera reconfortante, caminando juntas hasta la parte superior del aeropuerto. los chicos las siguieron desde lejos. todos acabaron viendo cómo la aeronave con destino a europa que tomó lei, emprendía vuelo.

shancai y daoming si estaban de pie, meizuo se sentó junto a ximen que estaba también de pie, y crystal acompañada de fei estaban sentadas en el suelo, en pose de indio.

─ lei parece tímido, pero a veces puede ser tenaz. ─ dijo ximen viendo al cielo por donde acababa de pasar el avión.

─ shancai le llegó. ─ en eso no mentía meizuo.

─ no me lo esperaba. ─ habló crystal contando las nubes que se agolpaban en el firmamento.

─ ¿no estará encaprichada con él, ¿por qué insistió en que la siga?. ─ ahí estaban dos hombres que se decían no ser chismosos.

─ además no discutió cuando hablo con si hace un momento. qué raro. ─ crystal le tiró en la cara una de las scrunchies de satín rojo que tenía.

─ en vez de estar haciendo de detectives, alguien que me ayude con el proyecto de empresarial. ─ a pesar de estudiar música, debía presentar un tipo de ensayo y proyecto sobre la regulación financiera y esas estupideces.

─ dame tu libreta y lo tendrás listo para el jueves. ─ ximen respondió a la velocidad de la luz, christie le respondió sonriendo agradecida.

─ tal vez ese sea el poder del amor, es un misterio. ─ meizuo estaba muy erudito ese día, tanto por lei, daoming si, y shancai, como por ximen y crystal.

otro avión pasó por encima de sus cabezas, después daoming si se alejó de shancai para salir por la puerta en aparente estado de molestia. fei la ayudó a ponerse de pie y caminaron después de él.

─ necesito un analgésico. ─ susurró tocándose las sienes con una mueca de dolor en los labios, fei asintió volviendo a tomarle la mano como una madre toma de la mano a su hija para que no se pierda.

era el día más triste de sus últimos dos años.

MIENTRAS XIMEN Y MEIZUO LE DABAN CONSEJOS a daoming si para invitar a una chica a una cita, que claramente era shancai aunque lo negara, fei y crystal bebían la leche de plátano clásica sentadas en el porche de la casa de crystal mientras veían el cielo. crystal todavía se encontraba afectada, le dolía el pecho de la tristeza pero sabía que no podía continuar así la semana entera. 

─ ¿quedaste con shen más tarde?. ─ su mejor amiga asintió en silencio sin verla. 

─ eso es bueno, creo que aunque suene cruel estará más tranquilo de saber que lei no se encuentra aquí. ─ fei terminó su pequeña botellita, dejándola junto a la montaña de casi treinta centímetros donde el resto de botellitas estaban acumuladas. 

─ sí lei no estuviera enamorado de jing, también creería que le gustas. ─ soltó de improvisto, tomando a crystal por sorpresa. ella rió incómoda, ¿por qué se estaba portando así?. 

─ no lo creo, lei y yo nos volvimos inseparables desde que ocurrió lo que ocurrió contigo. ─ xia bebió hasta que se terminó el líquido, marcándole un pequeño bigote amarillo sobre sus labios. ─ además, naturalmente es muy protector, jing les dijo a todos que cuidaran de mí. ─

─ ¿nunca pensaste en lo que pasaría sí hubieras tomado otra decisión?. ─ fei estaba más rara que de costumbre. 

─ no, soy muy mala tomando decisiones pero no me cuestiono sobre lo que pasaría por fuera de ello. ─ ambas se quedaron en un silencio sepulcral que fue irrumpido por el sonido de una motocicleta acercándose. wu fei se levantó del suelo, sacudiéndose el pantalón y tomando su cartera.

─ nos vemos más tarde, recuerda cenar bien. ─ crystal asintió como niña pequeña. 

su mejor amiga salió por verja, usando el casco y subiéndose a la moto. 

im se quedó completamente sola y se dedicó hasta bien entrada la noche a observar las estrellas como sí fueran lo único en el mundo. 

ESA MAÑANA CRYSTAL TOMÓ EL AUTOBÚS hasta la universidad, no queriendo encontrarse con nadie que le hablara o que le mirara distinto. afortunadamente se sentía un poco mejor, así que volvió a maquillarse pero extrañamente sin su lipstick rojo, no tenía ánimos para usarlo así que con un lipbalm bastaba. ya en el aula de su clase que reinaba vacía, un mensaje del consejo de la universidad llegó a su móvil haciéndolo vibrar.

al parecer daoming si mencionó a qinghe y shancai en el tablero de la universidad.

─ "para: todos. mañana a las diez de la mañana, f4 en compañía de iang crystal desafiará a chen qinghe y dong shancai en bridge". ─ leyó entre murmurllos, recapitulando la situación. el idiota de si no parecía querer cesar con sus planes hacia shancai y ahora la arrastraba a ella con eso.

no pudo hacer más que suspirar y sacar su cuaderno de apuntes, no iba a participar por obvias razones y no tenía ánimos de discutir con daoming si. 

la clase dio inicio con los principios de la economía básica y el señor adam smith de hace varios siglos. 

TENÍA ACOSTADA EN EL SILLÓN DE LA SALA DE BRIDGE alrededor de media hora, daoming si la hizo llegar al menos dos horas antes de la partida porque estaba ansioso y crystal era buena calmando la ansiedad. ella le dio un par de palmaditas y lo puso a leer un libro cualquiera que encontró en la estantería. al parecer funcionó porque dejó de joderle la vida, logrando dormir media hora. 

dormida lo suficiente y con la pancita llena del almuerzo que le llevó meizuo, se dispuso a esperar a shancai y qinghe para el duelo; consiguió afortunadamente que no participara pero sí mediara en el juego.

ellos bajaron las escaleras hasta situarse frente a ella, quien estaba junto a ximen. 

─ bienvenidos a la sala de bridge. ─ saludó potter a los visitantes, con una solemnidad que a crystal le causó más gracia que otra cosa.

─ hola, chicos. ─ saludó xia con una sonrisa apenada. ─ hoy yo seré el árbitro. ─ todo es posible, es decir, ella sería parte de eso para que la pobre shancai saliera bien librada. en la mesa central, daoming si estaba sentado ya con dos sillas frente a él, meizuo a un lado de su persona.

─ que partida extraordinaria. ─ 

─ para ser sincero, ahora estoy un poco nervioso. ─ crystal rodó los ojos divertida por la inmadurez del comentario. 

─ ¡da tu mejor golpe, f4!. ─ qinghe y sus comentarios medio extraños. ─ shancai y yo, chen qinghe, haremos lo que sea necesario. sí pierden hoy, quedarán a mi merced, cargarán mi bolso un día. ─ el grupo soltó una risita ahogada, crystal enrojeció por el esfuerzo de ocultarla.

─ ¿sólo un día?, que sean diez años. de todas formas no ganarán. ─

─ tú, no nos subestimes. ─ la verdad era que crystal no era de subestimar a nadie, pero el bridge era un juego en donde cada quien tenía tiempo desarrollando una técnica exacta que nadie podía vencer. o bueno, ella venció dos veces a meizuo, una a ximen y una a lei; pero jamás jugó con ah-si.

─ y sí yo gano, harán lo que yo quiera. ─ la rubia estaba no al tanto de ese plan idiota por parte de los chicos, más guardó silencio como siempre.

antes de que qinghe protestara, shancai se apuró a responder.

─ de acuerdo. ─

─ trato hecho. ─

─ qinghe. ─ le reclamó en voz bajita, tirando de su sudadera.

─ no temas, estoy aquí. ─ 

─ tomen asiento, por favor. se dará inicio a la partida. ─ la dulzura en la voz de xia calmaba un poco el ambiente turbio por elección. tras segundos de tirarse la pelota para ver quién tomaba asiento primero, daoming si habló.

─ es mejor que se rindan ahora. ─

─ nunca nos rendiremos. ─

─ no pierdas el tiempo con ellos, aprovecharse y ganarle a la gente que no sabe jugar póker no debería ser motivo para jactarse. ─ algo dentro de la chica gritó "eso mamonaaaaaa".

iba a ser una partida bastante divertida, sí tomamos en cuenta que a crystal la divertía todo ese asunto de los sentimientos negados de daoming si hacia shancai. 
 















































































AUTHOR'S NOTE: 

bueno, como no fuimos capaces de llegar a los cuatrocientos votos aquí les tengo otro cap para que vean q no soy mala leche y soy una pana chimba 

el cap está dividido en dos partes así q no se afanen, mañana o el lunes lo publico pq hay que agradecer las 1,3k vistas, los amo y gracias por todo !!♡

prontito jugaré con su estabilidad emocional, no se preocupen por eso :v

aquí puede que se considere un cap aburrido, pero es necesario que se entienda los sentimientos de crystal por aparte, ella es un libro abierto que es más que todo lo que los chicos creen; siento que ella se sacrifica para mantenerse estable por los demás ):

toda chiquita, toda pendeja

recuerden votar y comentar, igual sí no lo hacen voy a seguir actualizando pero el chiste no es ese mrk, no sean lectores fantasmas TT

sin más que decir, cuídense mucho y besos donde no llega el sol ˘͈ᵕ˘͈

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