DECIR QUE CRYSTAL ESTABA MOLESTA ERA POCO, COMPARADO CON TODA LA IRA QUE LLEVABA ACUMULADA EN EL VIENTRE. respiraba profusamente para no darle un buen golpe a ximen ahí mismo, ¿acaso no le bastó con hacerle un teatro la otra noche y tratarla de mala manera?. 

se detuvieron bajo un kiosco hecho de madera y deshabitado, la música de la fiesta se oía desde muy lejos y el sonido de los grillos era el que predominaba. 

─ ¿qué está mal contigo?, ¿por qué hiciste eso?. ─ se soltó de su firme agarre, frotándose el antebrazo por la fricción. él le dedicó una mirada intensa, indescifrable. 

─ tengo una pregunta para ti. ─ genial, no esperaba nada de él y aún así logró decepcionarla. en el fondo guardaba esperanzas de que se disculpara tal como daoming si esa mañana. 

─ adelante. ─ inquirió sarcásticamente rodando los ojos. 

─ puedes tener a todos los chicos que quieras, la mayor parte de la comunidad universitaria suspira por ti, entonces, ¿por qué él?. ─ pasó de molestia a confusión, ¿de qué demonios le estaba hablando?. 

─ ¿qué estás diciendo?, ¿te golpeaste la cabeza?. ─ frunció el ceño sosteniéndole la mirada por encima de sus lentes. 

─ ¡eres la maldita afrodita de shangai y tú terminas saliendo con un motociclista sin mucha gracia!. ─ gritó pasándose las manos por el cabello en forma nerviosa; crystal se sintió aturdida porque de verdad no entendía el trasfondo de ese comportamiento repentino. 

─ ¡pues es mi jodido problema sí convierto a kun en mi ares o sí sólo quiero que sea mi adonis!, mi vida romántica no debería importarte. ─ devolvió la exclamación, haciendo gestos con las manos. 

─ me preocupa tu integridad, conozco a los de su tipo. ─ una risita irónica abandonó su garganta, de esas risitas que le aprendió a fei.

─ ahora quieres que te crea el rollo de preocupación. ─ se llevó una mano a las sienes para disminuir con un masaje la jaqueca de la noche. ─ jamás me molesté por la cantidad de chicas con las que salías, nunca te hice o un reclamo o te tomé del brazo para alejarte de esa persona. jamás hice lo que tú estás haciendo y me preocupas. ─ 

─ él me golpeó. ─ que interesante argumento infantil, ximen. 

─ sí él no lo hacía lo iba a hacer yo, ¿crees que puedes tratarme de una chica vulgar y reaparecer de esta forma?, déjame decirte que las cosas no son así. ─ 

el chico se quedó callado, agachando la cabeza. 

─ sí no me vas a hablar para ofrecerme disculpas, entonces mejor ni me dirijas la palabra. ─ caminó de forma eficaz por su lado hasta la fiesta de nuevo, sin voltearlo a ver ni una sola vez. 

suprimir su orgullo sería inclusiva más complicado de lo que planeó, y deshacerse de ese moretón también. 

LLEGANDO NO PUDO DIVISAR A SHANCAI, SÓLO A DAOMING SI CON SU SONRISA TONTA Y A LEI MÁS SERIO DE LO HABITUAL. 

─ fei, ¿dónde está shancai?. ─ su mejor amiga señaló con la barbilla el final de la playa, donde los complejos estaban. 

─ ¿qué sucedió?. ─ se sentó junto a ella en la arena, notando la falta de shen y kun. 

─ me dijo que no se sentía bien aquí y que iría a dormir, kun fue con él. ─ la voz de fei era normalmente baja varias octavas, pero ahora estaba sombría, sin ánimos. 

─ entiendo, pero, ¿por qué la cara larga?. ─ 

─ lei lo está haciendo sentir inseguro, como mucho antes de que nos fuéramos. ─ los ojos de su mejor amiga se cristalizaron, viendo al mar. ─ me siento culpable porque yo lo traje aquí. ─ crystal resopló, abrazándola y haciendo que posara la cabeza en su hombro. 

─ no es tu culpa, fei. ─ tomó la palabra mientras que buscaba su mano para entrelazarla con la suya. ─ es normal que se sienta de esa forma incluso sí no hiciste nada, después de lo que tuvieron que pasar por causa de lei cualquiera lo estaría; no te culpes. ─ fei asintió dejando por primera vez su rol de mamá lechuza y convirtiéndose en la bebé lechuza que necesitaba de su mamá. 

─ ya, te aseguro que mañana todo estará mejor, ninguno de los dos puede vivir sin el otro. ─ ambas rieron, abrazándose más cerca por el frío que surcaba la playa. 

─ vámonos de aquí rápido, que creo que las dos estamos de malas pulgas. ─

ambas esperaban que todo cambiara para bien. 

AL DÍA SIGUIENTE, TANTO FEI COMO CRYSTAL, QUE COMPARTÍAN DORMITORIO, SE LEVANTARON MUY TEMPRANO. eran eso de las siete de la mañana, fueron a ejercitarse un poco en el gimnasio del sótano, volvieron para ducharse y prepararse porque no iban a desaprovechar un lugar con sol, mar y buen clima. tras desayunar, volvieron a su habitación porque fei tenía una crisis al no saber qué usar.

era una genio de la moda pero usualmente le daban crisis de identidad, como a todos. 

─ rojo, morado. ─ alzaba los dos trajes de baño de colores diferentes al tiempo que nombraba el color. ─ rojo, morado. ─ seguía repitiendo sin parar, crystal ya estaba adecuadamente vestida con su bañador de dos piezas color azul cielo y cubierto en la parte superior por una camisa blanca que ató en la cintura con un moño. la camisa decía "hawaii" (donde se suponía que eran sus vacaciones en realidad). 

─ little, ¿cuál de los dos debería usar?. ─ preguntó viéndola atentamente. 

─ el rojo, te queda bien. ─ habló con cuidado de no arruinar sus labios, agradecía que su madre tuviera fórmulas de labiales a prueba de agua por sí terminaban metidas en el agua. 

─ pero sí el rojo es tu color. ─ se quejó cayendo sentada sobre el suelo de madera. 

─ no estoy usando rojo hoy, así que úsalo y punto. ─ finalizó complacida por el resultado sencillo de su maquillaje; antes muerta que sencilla. 

─ valeeeee. ─ alargó la última letra, entrando al baño para cambiarse. 

la conversación, sí es que a eso se le podía llamar conversación con ximen la noche anterior la tuvo bastante pensativa. no entendía por qué razón se comportaba de esa forma de repente, después de las fructíferas veces en las que la hacía sentir inferior sólo por su gusto al maquillake y notas promedio. empacó un par de cosas en el bolsito playero para las dos, su labial, polvos traslúcidos, una brocha y las barras energéticas de fei. 

─ fei, ¿ya vas a salir?. ─ vociferó a pesar de que la escuchaba perfectamente. 

─ sí, sólo necesito agregar unos toques finales. ─ cinco minutos después se dignó a salir; traía el bañador puesto y por encima de la parte superior como ella, tenía una especie de blusa de tela rosita que se amoldaba a sus hombros y se ataba en la parte de adelante; era mucho más corta que su camisa, de la longitud de su corpiño. 

─ definitivamente debes usar el rojo más seguido. ─ afirmó viéndola encantada. 

─ ya, vamos antes de que me sonroje y quede del color del traje de baño. ─ crystal agarró el bolso por la asa y le extendió a fei sus lentes de sol ésta vez de tonos café. 

bajaron usando las escaleras porque el elevador se estaba tardando demasiado, eran tres pisos nada más así que no requería mucho esfuerzo. bajando por las escaleras se toparon con shancai, su amigo qinghe y shanseo. y aunque el pobre shanseo quiso ignorar su presencia por lo decepcionado que quedó ayer de sus acciones, volteó a verla discretamente. 

─ ¡hey!, shancai primer beso. ─ la voz de ximen llamó su atención, entendiendo que le hablaban a la chica blanco de burlas. aunque ximen no podía hacer alarde de mucho, ya que no usaba maquillaje en su ojo derecho, descubriendo el moretón con espontaneidad. 

─ no me llames así. ─ replicó con fastidio. 

─ ¿qué primer beso?. ─ interrogó qinghe, impropio a a situación. todos los chicos rieron menos lei, sentado en una silla. claramente ninguno notó la presencia de las chicas. 

─ ella y si se besaron anoche. ─ eso lo sabían hasta en estados unidos, no era noticia nueva. 

─ shancai, ¿eso es cierto?. ─ shanseo no dijo nada, pues presenció todo en silencio la noche anterior, incluyendo el beso de crystal y kun. 

─ yo...─ se mordisqueó el labio inferior nerviosa. daoming si se puso de pie con las manos en los bolsillos. 

─ claro que lo es, estoy seguro que estuvo esperando por eso mucho tiempo. ─ shanseo apretó los puños a sus costados, christie supo que debía intervenir. se pasó por el frente de los chicos hasta estar cara a cara con su "grupo" de amigos. ─ ella me abordó y me dio su primer beso. ─ 

─ oh por dios. ─ exclamó el chico bastante constipado. 

─ ah-si, te levantaste más tonto de que de costumbre, ¿no lo crees?. ─ 

─ xia. ─ se le olvidó que iba a bañador y bastante bonita, eso dejó a todos pasmados, su cintura se veía más pequeña, el cabello atado en una coleta baja con el fleco ondulado y fuera de su rostro. 

qinghe se olvidó de todo, volviendo a replicar. 

─ ¿de verdad hiciste eso?. ─ shancai tomó fuerzas para acercarse a ellos, quedando justo frente a lei. 

─ no, no es verdad. estaba oscuro y no pude ver nada, es por eso que...─ lei la interrumpió. 

─ no necesitas explicar nada, sin importar a quién beses. ─ la sonrisa burlona de ximen se desvaneció, dando paso a la sonrisa satisfactoria de crystal. ellos entendieron la indirecta. shancai corrió escaleras arriba, su hermano y amigo la persiguieron rápidamente, pero el chico no se fue sin volver a mirar la figura de la pelinegra. 

─ bonito moretón en el ojo, potter. ─ wu fei comentó revisando sus uñas, divertida. ─ te da un toque más, rudo. ─ se rascó la barbilla en un intento de sacarle la paciencia; fei sabía de todo lo que ocurrió esa noche, igual que meizuo. 

─ vuelve y juega, cabeza de piña. ─ caminó a la par de fei para establecerse en un par de sillas reclinables donde se recostaron a tomar un poco de sol y revisar sus teléfonos. a ambas les hacían falta los chicos, pero shen estaba con kun y los otro cuatro idiotas las tenían fuera de sus casillas. 

─ a todo esto, ¿dónde estará jing?. ─ 

─ no tengo idea. ─ le restó importancia poniendo algo de crema solar en sus muslos, inclinada hacia adelante. lei estaba muy al pendiente de su proceder, cosa que crystal trató de ignorar pero que le diría cuando tuviese la oportunidad. 

PASEABA POR LA PLAYA PARA DESPEJAR SU MENTE, ERA UN TIP DE SU PADRE. cuando no podías callar a los demás debías callar tu mente, y eso hizo. abandonó de improvisto su habitación con un vestido fresco, corto y blanco, y ni una pizca de maquillaje. necesitaba de verdad ordenar su cabeza pues esta iba a estallar. no sólo literalmente, desde la tarde hasta la noche se sentía raramente exhausta, su cuerpo pedía a gritos una siesta, las jaquecas eran constantes y su apetito disminuyó, más todo se lo sumó a que era un ambiente distinto para su cuerpo. 

tomó asiento en la arena, con la espalda recostada sobre una gran piedra casi en la orilla; inhaló profundamente una bocanada de aire salado y fresco; estar lejos de muchas cosas la hacía obtener esa calma que debía mantener, ser durable. con los ojos cerrados sintió unos pasos apresurados por la arena; abrió uno de sus ojos para corroborar y ver a shancai detenerse cerca de donde ella estaba. parecía afligida y triste. 

─ ¿shancai?. ─ la joven se giró de inmediato, permitiéndole obtener su cariz triste. ─ ¿está todo bien?. ─ se puso de pie con las manos sobre su vestido, intentando no se levantara por la brisa. 

negó con la cabeza, casi que llorando; las esquinas de los ojos le quemaban con lágrimas acumuladas de la tristeza. 

─ vamos, abrázame y llora lo que necesites. no te retengas. ─ shancai se metió entre los brazos de crystal, llorando en silencio con lágrimas gruesas rodando por sus mejillas, mientras recordaba cada cosa bonita que pasó junto a lei y cómo esto se había arruinado con la escena de él y jing besándose sobre la cama. ─ las lágrimas alimentan tu alma, sí te reprimes tu corazón va a oxidarse. ─ recitó dulcemente sobre su cabeza, acariciando su espalda. 

probablemente ahora lei estaría besando fuertemente a jing, y ella no podía impedir eso. el solo pensarlo causó otra ola de lágrimas, con pequeños sollozos de fondo. 

estuvieron en la misma posición, de pie y aferradas a la otra como sí el mundo dependiera de eso; shancai se sentía comprendida incluso sin palabras. 

─ ¡hey, shancai!. ─ más ella no se salió de su abrazo, crystal le dedicó una mirada a qinghe y daoming si que llegaban juntos. 

─ ¿qué haces aquí, shancai?. ─ por fin levantó el rostro, acomodándose el fleco. 

─ ¿por qué tus ojos están rojos?, ¿shanseo sabe que estás aquí?, ¿estabas llorando?. ─ ah-si se veía genuinamente interesado. 

─ no pasa nada, un poco de arena que se metió en mis ojos. ─ terminó de separarse de crystal, quien se sacudió el vestido porque de verdad la arena se metía en todas partes. 

─ ¿qué hacen ustedes aquí?. ─

─ vengarte, desafié a daoming sí a la pesca de calamares y perdió por mucho. ─ le enseñó una cubeta con varios de esos moluscos.

─ ¿estás orgulloso de la pesca de calamares?, yo te recuerdo como alguien que ni siquiera podía sacar el calamar del anzuelo. ─

─ es realmente difícil, ¿de acuerdo?. ─ se acercó al oído de shancai para hablarle lentamente. 

─ sí necesitas algo puedes venir a donde me estoy quedando, recuerda llorar siempre que lo necesites. ─ dándole una palmadita en el hombro caminó rodeándose con los brazos hasta estar lejos del panoramas. 

─ crystal, ¿a dónde vas?. ─ le gritó ah-si desde lejos, ella se giró para sonreír. 

─ iré por algo de comer, tengo hambre. ─ y siguió su camino. mintió un poco, estaba sedienta, no hambrienta. necesitaba encontrar a fei. 

NO ENCONTRÓ A FEI PERO SÍ A KUN, QUIEN LE INFORMÓ QUE LA PAREJA SE QUEDÓ EN SU HABITACIÓN Y QUE LO ECHARON DE AHÍ. así que decididos a encontrar algo para comer, se acercaron a una pequeña parrilla y autoservicio poco progresivo con muchas guarniciones y el especial, calamar a la parrilla. el calamar no le apetecía, pero sí que se le iluminaron los ojos al ver la bebida de limón que tanto le gustaba. 

aprovechó que shanseo estaba cerca de las bebidas. 

─ shanseo, ¿podrías darme la bebida de limón, por favor?. ─ reaccionó lentamente; la chica más linda de la universidad, la más amable y dulce, por quien suspiraba en secreto le estaba pidiendo una bebida. tembloroso tomó la botella y se la extendió. 

─ a-aquí tienes. ─ estaba todo rojo, como de costumbre. 

─ eres muy tierno, gracias. ─ se quedó callado por la presencia de kun que llevaba un plato con calamar y algo de maíz. 

─ ¿no comerás nada, preciosa?. ─ "preciosa", esa palabra le estaba calando la mente a el joven. 

─ no, kunnie. con la bebida estoy bien. ─ quería salir corriendo y preguntarse por qué se había hecho ilusiones de crystal así como shancai se las había hecho de lei. la pareja se ubicó en una banca cerca de allí, charlaban, comían y reían bastante. shanseo suspiró, admirándolos desde lejos. 

que afortunado era ese chico. 

─ recuerdo que cuando entré a la universidad todos creían que era el hijo de la mujer del restaurante. ─ contó kun mordiendo el maíz, crystal río dándole un sorbo a la botella amarilla. 

─ ¿de verdad?, eso es ilógico. ─ él asintió.

─ lo sé, no tenía aspecto de ser alguien que entrara a la universidad, mucho menos en medicina. ─ de nuevo la jaqueca molesta, pero no iba a permitir que arruinara su buen momento. subió los muslos sobre los de kun, tomando una posición ladeada en la banca, por inercia él puso las manos en los bordes de su vestido, tirando de estos hacia abajo para evitar que se levantara. 

─ cuando yo entré a la universidad todos creían que tomaría la carrera de periodismo, así que nadie vio venir que entrara en la aula de música. ─ lei salió de la casa para hablar con shancai; shanseo apreciaba de lo que se perdía por no ser kun. 

─ creo que a ambos nos subestimaron mucho, bǎobèi. ─ su corazón dio un vuelco ante el apodo, kun la hacía sentir malditamente bien y eso no lo cambiaba por nada del mundo. 

─ y míranos, eres todo un doctor y yo una futura compositora. dame esos cinco. ─  alzó la mano para que la chocara con él y así lo hizo, explotando en risas otra vez. una suave melodía se coló entre el aire, un piano que sonaba con tanta armonía. 

crystal reconoció de inmediato la canción, repitiendo con los dedos en la nada los acordes que le costaron aprender alguna vez. kun y shanseo la observaron con admiración y deleite. 

ninguno lo sabía, pero ximen entre risas y tragos se concentraba en poder admirar desde lejos a crystal, quien parecía relajada junto a kun. debía controlarse y focalizarse en su compañía.  

christie bostezó, sintiéndose cansada pero tan tranquila que quiso dormitar allí mismo. 

volverían a casa mañana, pero deseaba quedarse ahí en compañía de quienes sí se preocupaban por ella. 

AUTHOR'S NOTE: 

aquí va otro capítulo, siento que me estoy dedicando de lleno a esta historia y abandono al las otras trece que debo actualizar *agonizo*

pero yo sólo culpo a majo pq ella es la que se la pasa diciéndome que actualice y cmo le niego yo algo sí ta chiquita unu

voten y comenten, de verdad que eso me anima; así no voten seguiré actualizando pero non sean lámparas, grax 

sin más que decir, cuídense mucho, beban awa y sonrían, los amo. ♡