﹝ BNHA                      mod: blanco
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               𔓕 ۪  ۫ ୭                  ୭ৎ  ࣪ ׅ  핫

# Izuku Midoriya, Bakugo Katsuki, Eijiro Kirishima.

Cómo reaccionarian los de bnha si les cae la lluvia justo cuando paseaban románticamente con su pareja.

🌧️

1. Izuku Midoriya.

_____ y Midoriya paseaban por un pastoso y verde parque cuando la lluvia torrencial los había tomado desprevenidos, empapandolos de pies a cabezas sin la oportunidad de poder cubrirse y permanecer secos.

Ambos en caminata rápida buscaban algún lugar para resguardarse o algún taxi que los llevara a su hogar lo más pronto posible. Estar expuesto es una lluvia así, sin la protección necesaria o demasiado tiempo  no era muy genial para Midoriya, siendo bastante susceptible a pescar un resfriado por lo enfermizo que es.

—¡Una parada de autobús! ¡mira!

Midoriya corrió y se apresuró a sentarse en la banca de espera junto a la culpable de sus sonrrojos masivos. Empapados, con frío y sus cabellos despeinados.

Era tierno, o por lo menos era lo que pensaba _____ en ese momento que se resguardaba de la lluvía torrencial junto al peliverde debajo de ese techito del paradero. Que en la mañana, donde el sol era el protagonista de un maravilloso día, ese tierno chico de cabellos verdosos haya tomado el coraje de declararse a su chica de en sueños; _____, con la cara tan roja como un tomate y sudando, queriendo por lo más sagrado de su alma no recibir un rechazo que lo traumatice gran parte de su adolescencia, cosa que no sucedió. Y ahora, ambos guardaditos de la lluvía, en silencio, disfrutando del refrescante olor a tierra mojada que se desprendía del suelo.

—Qué mala suerte...

Había comentado la peli ____, mirando al pecoso que al escucharla su mirada se había pegado en ella, prestadole atención.

—¿Por la lluvia? —Respondía Midoriya con una pregunta bastante obvia.

—Pues sí...si no hubiera empezado a llover seguiríamos paseando y me seguirías contando que significaba cada flor que veías...

Ella le sonrió, él se sonrrojo.

Izuku dejó de mirarla, desviando su vista a sus zapatos nuevos color rojo con blanco que decidió usar el día de su confesión porque según él le traerían buena suerte. Sus zapatos favoritos desde ahora.

—¿No te estaba aburriendo?

Midoriya jamás se ha considerado el tipo más entretenido, social y carismático del planeta. Quizás sí cuando ya toma confianza con alguien pero si no es así, es un saco de nervios por donde lo veas, y peor con la chica que le gusta.

—Pues...es lindo saber que significan, así podría regalarte una y ya sabría que es lo que representa.

Ella reía avergonzada por lo que decía, con la intención de provocar lo mismo en el otro, y no se equivocó.

_____ toma la mano combinada de sudor y agua de lluvia de su ahora novio; Izuku Midoriya, en un apretón para demostrar su afecto a pesar de estar empapados.

Él corresponde sin hablar.

Ambos sonrrojados, mojados, con frío y enamorados, tomados de las manos siendo uno solo en ese momento, esperando a que la lluvia cesará y continuaran con su cita de reciente pareja, dejandose llevar por lo que el destino les tenga preparados de ahora en adelante. Juntos.

2. Katsuki Bakugo. 

—¡Joder! ¡te dije que era mala idea salir! —Con rabia contenida había expuesto Bakugo, esposo de la joven muchacha a la que agarraba de la mano fuertemente para no separse del aguaceron que los había atrapado en plena calle donde eran espectantes de un grupo musical callejero con talento, teniendo la intención de incrementar más aparentemente por la abundancia en la que caía la lluvia y arrastrarlos como de si una corriente de río se tratase, por suerte no era lejos de su residencia, teniendo que solo cruzar dos cuadras para llegar a su destino.

—¡Yo que iba a saber que iba a llover, bebé!

El ruido de la lluvia impetuosa era poderoso, teniendo que alzar la voz para que ambos puedan escuchar sus voces y comunicarse no sea un problema que irrite más al rubio cenizo que era ya un perito para gritar.

—¡No me digas así! y claro que te avisé! solo que eres necia, joder...

—¡Lo siento! pero es que hacía un bonito día!

La agua sucia llegaba hasta las rodillas de ambos, dejando asquiado a el rubio histérico que no tenía la intención de parar a descansar a pesar de lo pesado que había comenzado hacer el simple hecho de andar, pues toda su ropa estaba empapada de agua y andar por abundancia no facilitaba las cosas.

—¡Mira! ¡La casa está allá... pastelito!

—¡Si puedo ver idiota!

—¡No me llames idiota!

—¡Entonces deja de llamarme con apodos cursis! ¡Sabes que no me gustan!

—¡No decías eso anoche mientras te hacia piojito!

—¡Cállate!

Su apartamento no estaba ya muy lejos de poder llegar, ya podían imaginarse secos y calentitos, bañándose juntos en la tina y salir para ver alguna película de acción o de terror mientras Bakugo reposaba la cabeza en los muslos de su amada y ella acariciando los cabellos cenizos de su chico que ocultaban su frente pálida, haciéndole caricias y cosquillas hasta que se harte y aparte su mano de un manotazo o con un delicado beso en el torso de esta, sin olvidar el relajante té verde en sus tazas correspondientes, porque bakugo no puede vivir sin su querido té que lo hace tan feliz en días como esos, mientras escucha la lluvia caer con desesperación y el olor a manzanilla apoderándose de sus fosas nasales, transformando el momento en uno de los mejores, tranquilos, de paz, con lo mejor de dos mundos. Su chica, su té y una poderosa lluvia tan genial como él.

3. Eijiro Kirishima. 

Eijiro manejaba su motocicleta a toda velocidad —o por lo menos hasta donde era permitido, claro— Teniendo a sus espaldas a su novia que le acariciaba los abdominales trabajados solo para escuchar su risilla a través de el comunicador que sus cascos tenían aderidos, que servían evidentemente para comunicarse, pues en el trabajo de Eijiro eran requeridos.

—Cariño, basta, que me harás chocar...

Daba vuelta a una esquina, casi a nada de llegar al lote de departamentos de su amada donde él también se quedaría la noche para hacerle compañía, como el hombre y novio varonil que es. Apapacharla mientras se duchaban y cuando se vayan a la cama era algo que ya tenía pensado hacer a lo largo de la noche.

—Lo siento. —Respondió ante la advertencia de su chico, depositando un casto besito en la espalda enpapada de agua y sin camisa de el pelirrojo.

—En casa puedes hacerme toooodo lo que quieras, bonita ¿Sí?

Como reflejo a buscar una respuesta, brevemente gira su cabeza hacia a un lado, volviendo a concentrar su mirada al frente de la calle para no provocar un accidente, pudiendo ver ya la pila de apartamentos.

—Está bien.

Risueña había respondido, notandolo por la risita que el contrario había escuchado por el comunicador.

Estaba contenta, por el ahora y el después que los esperaba, concentrada también en recordar la tentadora imágen  que Eijiro hace no mucho le había regalado al quitarse su playera en frente de ella, porque supuestamente así, podría sentir el frescor de la lluvia sobre su torso desnudo, cada gota acariciando su ser como acostumbrada hacer de niñez —además, daba lo mismo que no la tenga si de igual forma se iba a mojar, había agregado— No cambiaba nada incluso con ya veinticinco añotes encima.

Con peñizcos en donde solo los novios se dan, esperaban llegar al piso del departamento donde se alojaba la mujer enamorada de las bonitas sonrisas y palabras que Eijiro le otorgaba, dejandose llevar por las caricias hasta que a alguien más se le ocurra entrar a ese ascensor donde dos jóvenes se repartían besos y amor, teniendo que continuar en la habitación o ducha, en cualquier lugar, ya no importaba, ambos querían ser uno en esa noche nublada y ruidosa.... lastimosamente para Eijiro, que tanto le gusta oírla cuando sus cuerpos se unían en lugares públicos.

terminé.

tres escenarios porque mi cabeza no da para mucho.

me ha encantado el de Midoriya 😞🤲

en fin, gracias x leer

te amo kemy, hermosa waifu.