013 | Ron "Idiot" Anderson
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༄ ⁂ * • "Ron "Idiot" Anderson"
—¿Tu le enseñaras a Ron?—Pregunte, caminando junto a Carl, Soph y papá.
—Si, solo en caso de emergencias—Respondió papá.
—Mientras eso no interrumpa mis lecciones, ni un problema.
Llegamos hasta el pequeño "parque" de Alexandria, que usaríamos para enseñarles a Ron y Andrew como usar armas.
—¡Estoy listo para aprender!—Andy se abalanzó sobre mi, y sobre Sophia, abrazandonos por los hombros.
—Oh, Dios. Me das vergüenza ajena—Murmure, cubriendome el rostro con las manos.
—Ya, enserió. Necesito aprender.
—Bien.
Comenzamos con la estructura del arma, luego postura, puntería y todo lo demás. Aunque Andrew parecía tener bastante talento, y estaba muy dispuesto a que le enseñarán...no como Ron, que le estaba dando problemas a papá y a Carl. Y que, además, insistía con usar balas y disparar de verdad.
Al final, papá controlo la situación y todo se resolvió.
—Cuando los muertos se vayan—Señale los muros, y escuchamos los gruñidos de los caminantes un momento—Podrás practicar con balas, y así estarás listo.
Andrew asintió, y todos volvimos a nuestras casas.
—✿︎꧁ 🪼 ꧂✿︎—
—Hola, Maggie—Me acerqué a ella, llamando su atención.
—Hola, Ro.
—¿Aun nada?
—Ni una sola señal. Si Glenn esta vivo debería haber enviado una señal.
—Quiza...quizá solo se retraso un poco—Apoye mi cabeza en su hombro, y ella poso su mejilla sobre mi cabeza.
—Eso espero.
—Y bueno, si tarda mucho, iremos allá afuera y lo traeremos de vuelta.
Justo en ese momento, varios globos amarillos se elevaron en el cielo. Casi como una señal divina.
—Es Glenn—Murmuró Magg—¡Es Glenn!—Me miró, sonriendo, antes de que las dos fuéramos a buscar a mi papá.
—¡Es Glenn!—Exclame, apenas llegue junto a papá.
—Es el, esta vivo, Rick—Añadio Maggie, señalando los globos en el cielo.
Y de pronto, la torre de Alexandria comenzó a caer, haciendo caer también, el muro que nos mantenía alejados de los muertos.
Todo el lugar se cubrió de polvo, impidiéndonos ver más allá de un metro frente a nosotros. Sentí como alguien me tomaba del brazo, y me obligaba a correr hacia algún lado.
La adrenalina que recorría mis venas no la habia sentido hace mucho tiempos, supongo que tanto tiempo en Alexandria causa eso. Por ahora, mi prioridad era encontrar a mis hermanos y protegerlos.
—¡Por aquí! ¡Tengo a Judith!
Corri hacia esa voz lo más rápido que pude, tratando de no toparme con algún muerto hambriento.
Cuando el polvo desapareció, pude ver a Jessie y a Carl. Los tres entramos a la casa, seguidos de papá y Michonne, que ayudaban a caminar a Deanne.
—¿Estas bien?—Pregunte a Carl, a lo que el asintió.
Mientras la mayoría de adultos trataba de ayudar a Deanne, que estaba cubierta en sangre, Jessie me entrego a Judith.
—¿Podrías cuidar de Sam también?
—Claro, no hay problema.
Fui hasta la habitación del niño, aun abrazando a Judith como si no la hubiera visto en años.
—Hola, Sammy. ¿Que haces?
—Estaba dibujando—Respondió Sam, algo distraído tratando de ver que pasaba afuera.
Yo también me asome un poco por la puerta, justo para alcanzar a ver la mordida en el abdomen de Deanne. Cerré un poco la puerta, al menos hasta que no se pudiera ver lo que sucedía, pero que si pudiéramos escuchar si nos llamaban.
—Y dime, ¿que dibujas?
—Un avión, pero me falta pintar las ventanas.
—✿︎꧁ 🪼 ꧂✿︎—
—¿Necesitan ayuda?—Pregunte, acercandome a papá y a Michonne—Deje a Jude en la habitación de Jessie.
—Por ahora no, Ro. Puedes hacer guardia abajo, que los muertos no entren.
Asenti en silencio y salí de la habitación. Iba a bajar las escaleras, pero me apresure aún más al escuchar in ruido.
—¿Ron?—Entre a lo que parecía un garaje—¿Estas bien?
No podía verle el rostro, pues estaba apoyado sobre una mesa y se cubría con las manos.
—Enid esta muerta.
—¿Ah?—Frunci el ceño, dando un paso hacia el.
—Estamos todos muertos.
—Eso no es cierto. Enid sabe cuidarse sola. Y a mi papá pensara en algo para sacarnos de aquí, siempre lo hace.
—Mentira—Ron descubrió su rostro, mirándome enojado—Tu papá hará que muera más gente. Esa es su especialidad. Tu papá es un asesino.
—El tuyo también.
Ron no dije nada, y supe que tenía razón. Quizá Pete no había matado a nadie antes de morir, pero lo hubiera hecho tarde o temprano, habría matado a Jessie a golpes, o quizá incluso a Ron.
—Vamos a solucionar esto—Añadí.
—Ya estoy muerto, Ro. Mi mamá lo está. Mi hermano lo está.
Oh, Dios, si se ponía a divagar ahora dejaría que se lo comieran los caminantes.
—No lo están. Vamos a sobrevivir.
—Tu papá y tu también están muertos—Murmuró, pasando por mi lado.
Se acercó a la puerta, la cerró con llave y las guardo en su bolsillo. Mis alarmas se encendieron cuando saco algo de su bolsillo. Una pistola.
Trate de quitársela, pero el me empujó, haciendo que ambos cayeramos al piso. Por suerte, soltó el arma en el proceso, pero eso no lo detuvo de tomar una pala e intentar golpearme con ella.
Para mi favor, tiene muy mala puntería y yo reflejos lo suficientemente buenos para esquivarlo.
La pala fue a dar con una ventana, rompiendo el cristal y atrayendo a los caminantes de afuera.
Ron me empujó hacia la ventana, presionando mi cuello con el palo de una escoba.
—¡Sueltame!
Logre empujarlo en el momento exacto en el que un muerto llegó a la ventana. Desde la puerta, escuchaba las voces de papá y de Jessie, que nos pedían abrir la puerta.
—¡Rose!—Papá entró al lugar, luego de romper la puerta.
Todos salimos de allí, y cerramos la puerta para evitar que los caminantes, que ya estaban en el garaje, entraran a la casa.
—¿Que paso ahí dentro?—Pregunto Jessie, mientras los cuatro hacíamos presión para que la puerta no cediera.
—Yo te quiero, Jess. Pero tu hijo está demente—Dije.
—¿Que?
—Necesitamos algo para trabar esto—Papá detuvo la conversación.
—Vamos, Ro, hay mesas de noche que podemos usar—Agrego Ron.
Le di una mala mirada, pero aún así lo seguí hasta la habitación de Jessie. Esta vez, dude que intertara algo contra mi, pues Carl se nos unió.
—¿Que paso allí dentro?—Susurro Carl.
—Después te cuento, ¿si?
Entramos al cuarto, y Carl cerró la puerta detrás de él.
—Ro, yo...—Comenzó Ron.
—Dame el arma—Exigió mi hermano—No intentes nada.
—Lo siento.
—Si, claro que lo haces—Dijo Carl con sarcasmo—Ahora dame el arma.
Ron se la entrego, y Carl la guardo en su cinturón.
—Lo entiendo, Ron—Dije—Nuestro mato al tuyo, pero debes saber una cosa: tu padre era un idiota.
Luego, cada uno tomó algo con lo que trabar la puerta y salimos de ahí.
—Tengo que admitir que eso fue epico—Comento Carl, cuando nos alejamos de Ron.
—Lo se—Sonreí con arrogancia, antes de volver con Jude.
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