〖𝑳𝒂 𝒃𝒆𝒔𝒕𝒊𝒂 𝒂𝒖𝒍𝒍𝒂𝒅𝒐𝒓𝒂〗
꧁ 〔 Ⅹ 〕 ꧂
"...𝑇𝑜𝑑𝑜, 𝑚𝑒𝑛𝑜𝑠 𝑝𝑒𝑟𝑑𝑒𝑟𝑡𝑒."
Jemina se levantó al escuchar unos pasos provenir del pasillo.
Pensó que seguramente eran alguno de sus amigos, asi que se acercó a la puerta y la abrió lentamente.
Pero solo encontró a una silueta entrando en la habitación donde dormían Emma y _____. La pequeña se tapó la boca y trató de pensar en que hacer mientras la silueta entraba completamente a la habitación.
Debía alertar a los chicos, seguro ellos podrían ayudar.
—Bien...aqui voy.—respiró hondo y dio la primera pisada, afortunadamente esa y las siguientes no hicieron ruido alguno.
Estaba por cruzar el pasillo cuando el suelo rechinó y ella se cerró los ojos esperando lo peor.
—¡Oye-!—escuchó la voz de Emma gritar dentro de la habitación—¡___...!
No se escuchó otro ruido, solo unas pisadas más que se acercaron a salir del cuarto. Jemina abrió los ojos y se encontró con un joven.
Lo único que pudo distinguir a través de esa capa fue un par de orbes escarlata, más brillantes que la luz que atravesaba la ventana ese momento. Era una niña, pero sabia perfectamente lo que estaba pasando cuando vio a _____ inconsciente entre los brazos de ese sujeto.
Sus manos empezaron a temblar y se preguntó a si misma que podria hacer. Apenas era una niña, ni siquiera era lo suficientemente valiente.
Pero _____ necesitaba ayuda, la albina sin duda haria todo lo posible de estar en su lugar. Ella si era valiente y Jemina queria ser como ella.
—N-no....no puedes llevártela.—se acercó y saltó hacia _____ para aferrarse a ella.—¡No puedes llevártela!
Los gritos de la pequeña fueron suficientes para alertar a todos en la casa, por lo que el vampiro se acercó a la ventana y saltó creyendo que la niña se soltaría.
Pero Jemina continuó gritando mientras aferraba sus manos al cuerpo de la joven albina.
—Maldición.—aterrizó en el suelo y miró a la menor—¡Taci din gură!
La niña dejó de lloriquear y por accidente cruzó miradas con él, lo que le dio la oportunidad perfecta al contrario.
—Îți ordon să dormi.—ordenó él, viendo como la pequeña caía desmayada.—¿Deberia de llevarla tambien?
De pronto algo rozó su brazo desde atrás, al mirar al suelo observó restos de magia.
—Espera...¿Magia?—volteó hacia la ventana, donde un joven lo apuntaba con una varita—¿Habia un mago en esa casa? Vaya lugar más malditamente desafortunado para entrar.
No debía perder el tiempo, esta vez seguro lo matarían por haber causado tanto escandalo. Decidió llevarse a la niña tambien y con un salto llegó al techo de la casa.
Desde ahí saltó de techo en techo, perdiéndose rápidamente de la vista de los jóvenes.
—¡Subaru!—Norman jaló del brazo a su amigo al ver que estaba por tirarse de la ventana—¡Ni siquiera podemos perseguirlo, debes esperar!
—¡¿Esperar a que?! ¡Acaban de secuestrar a ____!—exclamó Subaru.
Por alguna razón, Ray era el más calmado de los tres. Segundos despues llegó Krone, intuyendo lo que pasaba con solo ver el ambiente que habia.
—Dime que no...—corrió hacia la habitación de Jemina, luego hacia la de Emma.
No estaba su pequeña, no habia un solo rastro además de las expresiones preocupadas de los jóvenes.
¿Eso era todo? ¿Jemina desaparecería igual que su hermana Cecile y los demás en el pueblo?
Sintió una mano sobre su hombro.
—La encontraremos, se lo prometo.
—¡Tú...!—quitó su mano y, en cambio, lo tomó del cuello de su camisa—¡Dijiste que ayudarías al pueblo! ¡¿Porque no hiciste nada y dejaste que se llevaran a mi hija?!
—Será mejor que se calme, Jemina no fue la única que fue secuestrada.—Ray se interpuso—Y si mata a Norman ahora mismo, no habrán más posibilidades de ver a su hija de vuelta ¿Quiere eso?
—¿Acaso tienen idea de lo que se siente?—cuestionó Krone.
—¿Prefiere quedarse a decirnos una lección de vida o dejar que hagamos nuestro trabajo y recuperemos a Jemina?
La mayor no tuvo más opción que soltar a Norman.
—¿Al menos tienen un plan?—interrogó—¿Acaso saben como encontrar a mi hija? Ni siquiera tienen pistas de los demás desaparecidos.
—Tiene razón, nosotros no podemos seguir el rastro de los desaparecidos.—sonrió de forma confiada. Parecia que por fin sabia que hacer exactamente—No somos capaces...pero conozco a un par que si puede.
—¿A que te refieres?—preguntó Subaru.
—"Un par que si puede"....—repitió Ray, comenzando a entender la frase—¿Hablas de...?
Casi como si lo hubieran invocado, un búho se posó en la ventana. Tenia en el pico una de las dagas que ____ siempre llevaba con ella.
—Agh...—_____ se llevó una mano a su cabeza, parecia que todo a su alrededor daba vueltas.
No sabia donde estaba ni que estaba pasando, ni siquiera podía recordar quien era y como terminó ahí. Su cuerpo estaba adormecido y sus parpados pesaban.
—Veo que ya despertaste.
Escuchó un suspiro y una risa burlona, pero no encontró de donde venia. Solo habian rocas y más rocas por todos lados, todo se veía tan oscuro que la poca iluminación provenía de las antorchar colocadas por todo el lugar.
—Siendo sincero, me arrepiento de esto.—dijo la voz—De saber que habia un mago en esa casa, ni siquiera me hubiera acercado.
De pronto lo recordó todo, quien era ella y como habia llegado ahí, pero decidió no decir nada y dedicarse a observar.
Al parecer estaba en una cueva y, a juzgar por el olor metálico y putrefacto, estaba en algún lugar cerca a lo que apostaría que eran cadáveres.
Justo a su lado estaba la pequeña Jemina, aún inconsciente.
—¿No vas a decir nada?—preguntó la voz, nuevamente sin mostrarse—Normalmente en este punto, todos suplican por sus vidas.
Alguien aterrizó justo frente a ella y se quitó la capucha. Los ecos de sus pasos resonaron por todo el lugar y incluso con el ruido vacio del viento se podían escuchar algunas gotas caer.
—¿Me vas a matar?—preguntó, mientras retrocedía para cubrir a Jemina y usarse como escudo de la pequeña.
—No lo tomes personal, son ordenes.
El joven se encogió de hombros con una sonrisa ladina y se inclinó hacia ella, recorriéndola con la mirada antes de relamerse los labios.
—Eres demasiado bonita como para ser sacrificada.
—Si voy a morir, al menos dime por que haces esto.—retrocedió al ver que él seguía acercando su rostro a ella. Acercó su mano lentamente a uno de los bolsillos en su falda para poder tomar una de sus dagas.—¿Qué ganas con esto si solo sigues ordenes?
Al contrario le pareció interesante el hecho de que, aunque podía verla temblar y fingir que no le tenia miedo, ella seguía interrogándolo con una voz firme.
—Es facil...—dijo él—Yo tampoco quiero morir, es por eso que cumplo ordenes.
Alzó su mano al mentón de la albina, para obligarla a mirarlo a los ojos.
—Pero si estas dispuesta a seguirme...podria perdonarte la vida y convertirte en una de nosotros.—bajó la mirada hacia la pequeña detrás de _____—Sacrificaré a la niña en tu lugar.
—No.—respondió ella, quitando la mano del contrario con un golpe—¿Por que querría sacrificar a alguien en mi lugar?
—Eh...—parecia algo desconcertado—¿Qué acaso no quieres vivir? ¡Te estoy dando una oportunidad!
—¡No voy a sacrificar a nadie en mi lugar!
El eco de los gritos se extendió, el joven parecia perder la paciencia y arrastró a ____ del brazo para alejarla de esa niña.
En alguna parte, la bestia rugió como si estuviera impaciente o irritada.
_____ podía sentir la presencia de la criatura desde algún lado escondido de la cueva, merodeando y tal vez observando con ansias. Si no atacaba, tal vez era porque esperaba.
Esperaba el momento perfecto o esperaba ordenes. Cualquiera de las dos opciones era mala.
—Si quieres matarme, hazlo. Hazlo ahora mismo.—soltó la fémina—Pero ten en cuenta de que mis amigos te harán pedazos despues de eso ¿Entendiste bien?
—¿Por que le temería a unos críos humanos?—preguntó con burla—Ni siquiera se atreverían a entrar al bosque prohibido, mucho menos a enfrentarme.
—Podrían estar en camino ahora mismo.
—Podrían haberse rendido.—contradijo, tomando el mentón de la albina una vez más.
____ quitó la mirada al intuir lo que él haria, al sentir presión sobre su mentón solo cerró los ojos.
Tenia que pensar en algo rapido, pero no era nada contra un vampiro. Incluso si lo hiere con una de sus dagas, apenas podria aturdirlo y Jemina aún estaba inconsciente.
—¡Uită-te la mine acum, femeie încăpățânată!
____ se encogió en si misma, sacando lentamente la daga de su bolsillo. Si iba a morir que sea ahora, siendo humana y en sus cinco sentidos, pero no iba a irse sin haber intentado nada.
<<Lo siento, chicos. Despues de todo, creo que no soy tan fuerte.>>
Justo cuando iba a herir al vampiro, dos búhos clavaron sus garras en el rostro antes. Seguidamente, un destello lo hirió en el brazo.
—¿Q-que?—al abrir los ojos, unos brazos la envolvieron rápidamente.
—¡_____!—Emma comenzó a llorar mientras la abrazaba.—¡Estas viva, estas viva!
—Estan aqui...¿Cómo me encontraron?
—Killow y Miko te siguieron hasta aqui.—explicó Norman—Luego Miko regresó para guiarnos, solo así pudimos llegar.
El albino se tomó unos segundos para arrodillarse y ver si ___ tenia algun rasguño, parecia que se forzaba a no contener sus propias lagrimas.
_____ no lo iba a admitir, tal vez por orgullo o porque eso significaría que dudó de ellos, pero se sintió aliviada de ver a sus amigos llegar.
Por un momento se habia imaginado muerta o convertida en vampiro, tal vez devorada por la bestia aulladora. Tuvo más suerte de la que creía, pero ya nada importaba. Su cuerpo dejó de temblar solo para abrazar a Emma con fuerza.
—Debemos irnos.—dijo el peliblanco.
—No. No podemos irnos ahora.—respondió ____—Si huimos, significa que todo lo que hicimos desde que llegamos al pueblo habrá sido en vano.
A su lado aterrizaron Subaru y Ray mientras rodaban en el suelo, habiendo sido golpeados por el vampiro.
—¡¿Cine sunt ei?!
—¡¿Qué rayos dijo?!—Subaru se desconcertó, saltando para quedar de pie de nuevo.
—¡¿Y yo que carajos voy a saber?!—respondió Ray, levantándose del suelo. Alzó la espada de nuevo, poniéndose espalda-espalda con el castaño.
—Es peligroso y no tenemos un plan concreto...—la mirada de Norman, de entre todas las demás, parecia preocupada, pero por alguna razón tambien parecia confiada.
Confiaba en los demás, como un equipo. Un equipo lleno de jóvenes inexpertos que estaban dispuestos a arriesgar sus vidas unos por los otros.
—Maldición, sabia que debí acabar con ella cuando pude.—el vampiro bufó, su malhumor crecía rápidamente.
Se acercó a ellos, quedando a unos metros de distancia mientras acomodaba sus mangas.
—¿Quién se supone que eres tú?—preguntó Emma—¿Por que haces todo esto?
—Es mi trabajo, solo hice lo que me ordenaron.—se encogió de hombros—Asi que dejen de interponerse en mi camino.
—¿Ordenes? ¿Quién te ordenaría algo así?—cuestionó el albino—Se supone que deberías estar en tu lado del mundo y no secuestrando personas.
—Oh, es cierto, no me di cuenta de mi gravísimo error.—respondió sarcásticamente, hizo una pausa para luego soltar una risa.
En su mirada se podía distinguir lo poco que se tomaba en serio a Norman y los demás. No hay vergüenza en su voz, tampoco arrepentimiento y parece que solo espera el momento perfecto para lanzarse a atacar.
—Ustedes solo son una molestia para mi misión, asi que será mejor que regresen por donde vinieron. —guardó sus manos en los bolsillos de su pantalón—Les daré solo una oportunidad.
—No nos iremos de aqui.—contestó la pelinaranja—No hasta que regresemos con las personas que secuestraste y dejes en paz al pueblo.
—¿Las demás personas?—pareció contener una carcajada.—¿Por que no se lo preguntan a su amiga?
Por un momento, ____ notó todas las miradas sobre ella.
—¿Por que no les dices donde estan las demás personas del pueblo?—preguntó, casi gritando—¡Vamos, dícelos! Es más, salúdenlos y abrácenlos, seguro están felices de que lleguen a rescatarlos.
—¿_____?—Emma parecia querer una respuesta explicita, pero la albina no se atrevió a responder.
—Estan muertos.—soltó Ray, hacia su hermana.
—Muertos...—la ojiverde trató de no perder la compostura y solo apretó los puños.—En ese caso, debemos hacer que sus muertes no sean en vano.
Desde su posición, el vampiro tomó el impulso para lanzarse contra Emma y tomarla del cuello con una sola mano, alzándola del suelo.
—¿Tú? Ni siquiera puedes hacerme frente.—se burló—¿Cómo podrias vengar a otras personas?
Emma trató de liberarse, pero su fuerza no era nada contra la de aquella criatura. Tanto Norman como Ray fueron los primeros en lanzarse a intentar detenerlo, pero fueron lanzados fuera del camino de inmediato.
Subaru lanzó un hechizo apuntando a su cabeza, logrando aturdirlo lo suficiente para dejar caer a Emma y que _____ vaya por ella.
—¡Maldición, esto quema!—se llevó ambas manos al rostro.—Ustedes están hartándome...
Al alzar la mirada, se lanzó contra la primera persona que vio y empujando lejos a las demás.
—¡Todo esto es tu culpa! ¡Debi matarte antes!—la tomó del brazo, arrastrándola hasta alejarse lo suficiente.
Al ver que los amigos de la fémina estaban por interponerse de nuevo, acercó los colmillos hacia ella.
Y ellos se detuvieron. Solo entonces se dio cuenta de que eso era todo lo que tenia que hacer.
—Si se acercan, la mataré. —advirtió.—Y si intentan atacarme con magia, no dejaré una gota de sangre en su cuerpo ¿Me oyeron?
—¡Aléjate!—sintió como el contrario tomaba desde atrás su brazo y la otra mano sujetaba su mentón para inmovilizarla.
—Un poco de sangre no te matará...¿No?
—Inténtalo.—dijo la fémina, como si estuviera retándolo. Miró de la expresión del contario, sonriendo con desdén mientras se relamía los labios.
Él acercó sus dientes hacia el cuello de la albina, mientras mantenía la mirada alzada. Se estaba burlando de ellos, sabiendo que no podían hacer nada en ese momento.
Justo cuando estaba por clavar los colmillos, algo más se clavó en su abdomen. En ese momento, entre a confusión y el aturdimiento, la peliblanca volteó y lo mordió justo en el cuello.
—¿Qué carajos está...?—Ray no pudo evitar sonreír de la impresión.
Norman no podía creer lo que estaba presenciando.
—Ce faci?! La naiba femeie, vei plăti pentru ce ai făcut!—exclamó la criatura, llevándose una mano al cuello.
Antes de que pudiera decir algo más, la fémina lo apuñaló de nuevo, esta vez en el pecho.
—Si vas a insultarme, hazlo en mi idioma.—desenterró la daga solo para patearlo y derribarlo hacia el suelo.—¿Vas a decirme quien te ordenó secuestrar gente?
Solo recibió un gruñido de respuesta, el vampiro estaba preparado para lanzarse hacia ella hasta que _____ lanzó un par de cuchillos a cada uno de sus ojos.
—Dă-te dracu în iad!!—se sacó los cuchillos, el metal de esas le ardía entre las manos y sus ojos no estaban sanando tan rapido como deberían—metalul sfânt...
Ray se quedó observando, replanteándose el hecho de que su amiga hace unos segundos iba a morir y ahora estaba por matar a un vampiro. Tenia fuerza impresionante para ser tan pequeña y una puntería demasiado precisa para ser una simple sirvienta.
—Te dije que era el As del equipo ¿No?—el albino, a su lado, sonrió orgulloso.—Debemos aprovechar esta oportunidad, tú irás con Emma a buscar a Jemina. Deben sacarla de aqui.
La pelinaranja no esperó más y corrió en busca de la pequeña, encontrándola sobre unas rocas.
—¡Jemina!—la tomó entre brazos, luego miró alrededor en busca de alguna otra persona inconsciente.
—Creo que es mejor que esté desmayada ahora mismo.—dijo Ray—Vamos, tenemos que llevarla afuera.
—Espera.—la ojiverde se detuvo y olfateó un poco—El olor a sangre era más intenso, tal vez los demás desaparecidos estarían cerca.
—¿Estas loca? Seguro estan muertos.
—Incluso si estan muertos, sus cuerpos merecen regresar con sus familias.—respondió ella—Ellos merecen despedirse.
Ray bufó de forma irritada, mientras su hermana comenzaba a buscar alrededor.
—Emma, no podemos tardarnos tanto. Solo salgamos con Jemina-
—¡Ray, tienes que ver esto!—interrumpió la pelinaranja.
—¿Ahora que?—se acercó de mala gana.
La verdad es que estaban muy cortos de tiempo y Emma seguramente no pensó en como llevarían tantos cadáveres fuera de la cueva si apenas podían distraer a un solo vampiro.
Pero Emma habia descubierto un agujero en el suelo que llevaba a un nivel más profundo de la cueva.
Y en ese lugar estaba la bestia que tanto buscaban, observándolos en cuanto se dio cuenta de su presencia.
—¿Esa es...?
—La bestia aulladora.
La criatura intentó subir saltando, intentando atraparlos, pero chocó contra una barrera que se iluminó en símbolos y rugió con furia al darse cuenta que no podía salir.
—¿Está encerrada?—Ray se asomó, viendo como la bestia chocaba contra la barrera mágica.
—Creo que fue mala idea dejar que nos vea....—sintió el suelo temblar por cada salto que daba la criatura intentando subir donde estaban.
—No podrá salir.—tomó una piedra y la lanzó hacia el hueco, viendo como pudo ingresar sin problema.—Se puede ingresar pero no salir...
Era probable que hayan utilizado a la bestia aulladora como una especie de maquina para eliminar los cadáveres.
Pero entonces ¿Por que no fue liberada antes por el vampiro? ¿Acaso no controlaba la barrera?
Ahora que lo recordaba, el vampiro jamás usó magia contra ellos ¿Entonces de donde viene la magia de la barrera que contiene a la bestia aulladora?
—Aqui hay algo que todavia no encaja...—el azabache retrocedió junto a su hermana, para luego salir corriendo.—Tenemos que avisarle a Norman.
Si esa bestia lograba salir, seria un problema mucho mayor que un vampiro.
Pero entonces escucharon a los dichosos treinta perros dentro del aullido de la bestia, que desde tan cerca y resonando entre cada rincón de la cueva, parecia que podria ser capaz de desgarrar lo tímpanos de cualquiera en ese mismo instante.
Emma tapó las orejas de la niña antes que de si misma, provocándole un dolor en los oídos que la hizo gritar.
Todos lo demás tambien tenían los oídos tapados, menos el vampiro.
La cueva comienza a temblar y varias estalactitas caen, los jóvenes apenas pueden mantenerse de pie con todo el movimiento.
—¡¿Donde está la bestia?!—Subaru intentó mirar a su alrededor, pero no habia rastro de la criatura. En su lugar, solo observó al vampiro tratando de levantarse.
—N-no lo se...—____ apenas podía oír las voces de sus amigos, asi que abrió los ojos solo para ver como el vampiro se lanzaba contra el castaño—¡Subaru!
Trató de acercarse a defenderlo, pero escuchó un fuerte ruido seguido de un rugido. El aullido se habia detenido.
Subaru apenas podía prestarle atención a aquello, pues seguro tenia suficiente con tratar de quitarse al vampiro de encima tratando de morderlo.
Una de sus manos apartaba la cabeza de la criatura y la otra impedía que le quiten su varita.
Estaba ciego, pero sus ojos comenzaban a regenerarse y eso sería un problema.
—Agh....—miró de soslayo a sus amigos, tenían su atención en la bestia aulladora que parecia apenas haber llegado.
Tenia que hacer algo por si mismo.
"—Si. Luz. Son sensibles a la luz, incluso a la magia de luz.—aclaró la fémina—Cualquier cosa que derive de la luz solar. No los mata, pero los aturde."
Realmente el fuerte de Subaru eran las pociones, en el campo de batalla apenas podía valerse de algunos hechizos, pero debía intentarlo.
—Magia de luz...magia de luz...el fuego es luz ¿No?—alzó la varita y apuntó al vampiro.—¡Ardenti igne!
Una llamarada envolvió la cara del vampiro, provocándole quemaduras que difícilmente sanarían.
—El fuego...el fuego le hace daño.—sonrió.
—Pero aún no podemos matarlo...—dijo la albina.—Y aún falta mucho para el amanecer.
—Naibii de oameni...fiară blestemata...¡La naiba cu toți!
____ buscó alguna otra arma que le quede, pero ya habia utilizado todas las cuchillas que trajo consigo.
Fijó sus ojos en la espada que traía Subaru con él.
—¿Me la prestarías un momento?
—Algo me dice que estará mejor en tus manos.—le entregó el arma—¿Tienes un plan?
—No soy como Norman pero...podemos intentar quemarlo vivo ¿No?
—¿Alguien dijo quemar?—Ray llegó junto a los demás—Encontramos a la bestia aulladora, pero está encerrada con magia.
—¿Con magia?
—Ustedes...malditos humanos...—el vampiro se levantó del suelo, tenia la cara totalmente quemada y sus ojos seguían sangrando a pesar de que estaban regenerándose.—¿Cómo pudieron hacerme esto unos estúpidos niños como ustedes? ¡Se supone que yo soy mucho más poderoso!
Corrió hacia ellos, pero Subaru se interpuso y creó una barrera alrededor del grupo. El vampiro chocó y comenzó a golpear la barrera.
—Subaru, quiero que a la cuenta de tres quites esta barrera.—ordenó la Norman.—En cuanto eso pase, lanzarás otro hechizo para aturdirlo.
—¡¿Estas loco?!
—Ray, cuando Subaru desactive la barrera...atravesarás al vampiro con tu espada, ______ se encargará del resto.
—¿Estas seguro de que esto funcionará?—preguntó Emma, abrazando a Jemina mucho más fuerte.
—Si no se mueven rapido, podriamos morir.—sinceró—Pero ellos tres son los soldados mejores entrenados del reino, se que no fallarán.
Subaru tragó saliva, manteniendo la mirada en el vampiro que aún trataba de atravesar la barrera.
_____ y Ray se miraron entre si antes de sonreír decididamente y alzar sus espadas.
—En tres...—frunció el ceño levemente.—dos...
Emma se escondió detrás del albino, asomándose para observar con preocupación.
—Uno.
La barrera se desactivó y Subaru lanzó el mismo hechizo de antes, logrando impactar en el rostro del vampiro nuevamente.
Ray avanzó y atravesó el pecho de la criatura con una estocada, inmovilizándolo el suficiente tiempo para que _____ pudiera cortar la cabeza del vampiro con un movimiento.
La sangre salpicó lo suficiente para manchar el rostro de la albina, pero incluso con la cabeza rodando en el suelo se pudo escuchar a la criatura hablar.
—La naiba cu toată lumea...
_____ se acercó y con su espada atravesó la cabeza.
—Ya dijiste mucho por hoy.—lo levantó, notando algo extraño en la piel del vampiro—¿Siempre...tuvo marcas en la piel?
—Emm...por aqui tambien hay marcas.—dijo Emma, señalando el cuerpo del vampiro. Las partes con piel visible como sus manos y cuello tenían símbolos que empezaban a brillar.
—Son las mismas que estaban en la barrera.—mencionó el azabache, inclinándose a observar—¿Por que aparecen ahora que el vampiro murió?
Norman se acercó a observar, eran marcas son símbolos que jamás habia visto. Ciertamente no se trataba de magia que conozca, tal vez era alguna otra que solo usaban las criaturas.
—Es magia negra—dijo Subaru—Leí que es capaz de vincular la vida de alguien a un hechizo de protección, como si lo usaran de escudo.
—Espera.—notó como las marcas desaparecían y el cuerpo del vampiro empezaba a secarse.—Eso significa que si el vampiro muere...la barrera que contenía a la bestia...
La respuesta vino sola, junto a un aullido y el sonido de las pisadas acercándose a ellos.
—¡¿Como es posible que no haya ningún rastro de ellos?!
—Los sirvientes dijeron que su alteza real se encerró en su habitación luego de que sus sirvientes comenzaron a enfermarse.—informó el capitán de la guardia—Pero no volvieron a ver a ____ y ella siempre está con su alteza, asi que creemos que sigue junto a él.
—Eso me alivia un poco....—James comenzó a toser.—____ vale lo mismo que diez soldados, confio en que mi hijo está a salvo.
—Da igual si esa sirvienta vale lo mismo que un batallón entero, ambos sabemos que no conocen otro lugar que el reino.—respondió el rubio—Están en un territorio desconocido.
Peter estaba a punto de perder la cabeza, si es que eso no habia pasado ya. Estaba seguro de que Norman no pudo haber escapado solo, pero ni siquiera habia rastro de sus sirvientes más cercanos.
Ni siquiera los guardias vigilantes en la entrada del reino se dieron cuenta de que salió, a pesar de lo llamativo que seria ver a un par de albinos salir del reino.
¿Cómo habian logrado salir?
—Mierda...—Peter se llevó una mano al entrecejo mientras pensaba en que más hacer.
—Creo que solo queda una opción.—James suspiró—Prepara a la guardia real, viajarán a Goodwill Ridge.
—¿En verdad crees que esta ahí?
—Se que mi hijo está ahi.—aseguró el albino—¿Tienes alguna otra opción más probable?
—....No.—desvió la mirada hacia el capitán—Y escuchaste a su majestad, busquen a Norman en Goodwill Ridge.
—Si, alteza.—Kazuma se inclinó y se retiró de la habitación.—____...¿En que problema te metiste ahora?
Pronto, un grupo de guardias y el capitán salieron camino al pueblo de Goodwill Ridge. Sabían que el viaje tardaría demasiado, pero tenían que hacer lo posible para encontrar al príncipe.
Por otro lado, regresando a las cavernas cerca de Goodwill Ridge, Norman y los demás estaban intentando no llamar la atención de la bestia.
—¿C-como escapó?—preguntó Emma.
—La vida del vampiro estaba vinculada a esa barrera.—respondió Subaru—Si el vampiro murió, significa que la bestia es libre ahora.
—Hagan lo que hagan....no se muevan.—dijo Norman.
—Oh, genial, le daremos a esa cosa la facilidad de que nos mate—respondió Ray, en su típico tono sarcástico.
—Está la posibilidad de que no tenga una buena visión...—Subaru solo intentaba ser positivo hasta que vio como la bestia corría hacia ellos—¡Tiene buena visión! ¡Corran!
El grupo terminó escondiéndose mientras la criatura se detenía a despedazar el cuerpo del vampiro.
—¿Qué se supone que deberíamos hacer?—preguntó _____, detrás de una roca.
—No me miren a mi, Norman es el de los planes.—dijo Ray, a su lado.
—Tengo una idea...pero necesitamos de Subaru.
—...—Emma se dio cuenta de que les faltaba uno en el grupo—¿Y Subaru?
Norman se asomó, observando a su amigo castaño corriendo de la bestia como si su vida dependiera de ello, lo cual era cierto. Se encerró a si mismo en una barrera, pero la criatura golpeaba agresivamente y parecia que Subaru no aguantaría tanto tiempo.
—Debemos hacer que esta cueva colapse con la criatura dentro.—Norman observó a su alrededor, tratando de encontrar los puntos débiles del lugar—Por la forma en la que todo temblaba cuando la bestia aullaba, este lugar seguro ya está a punto de colapsar.
—Pero necesitamos de Subaru...—Emma volteó hacia su amigo—Y parece que no resistirá mucho más tiempo.
Norman se quedó en silencio unos segundos, tratando de pensar en que hacer. Posó sus ojos en Jemina y la pelinaranja.
—____ y Ray distraerán a la bestia, Subaru lanzará explosiones y yo le indicaré donde.—alzó su mirada hacia la ojiverde—Y Emma, deberás aprovechar esa oportunidad para salir de la cueva con Jemina.
—¿Q-que? Pero...ustedes...
—Debemos priorizar la vida de Jemina, le prometimos a Krone que la regresaríamos a casa sana y salva.—posó sus manos sobre los hombros de la fémina—Prométeme que saldrás de la cueva en cuanto la bestia se distraiga.
Emma posó sus ojos en Ray, luego en _____ y por ultimo en Norman, ¿Y si les pasaba algo y no estaba para ayudarlos?
Pero debía mantener a salvo a la pequeña niña, no habia más opción que dejar a sus amigos.
—Lo prometo.
El albino le sonrió, luego volvió a asomarse entre las rocas para ver como estaba Subaru.
—Bien, empecemos.
_____ respiró hondo y apretó la espada entre sus manos, de pronto aterrizaron frente a ella el par de búhos con varias de sus dagas entre las garras.
—Killow...Miko...—besó a cada ave en la cabeza—Son los mejores, ¿Lo saben?
—No es momento de besar gaviotas, ____.
—Cállate, pescado gruñón.—le hizo una mueca y se levantó mientras guardaba las dagas de nuevo.—Bueno...hoy es un buen dia para morir.
—¿Y dices que yo soy el pesimista?—el azabache tambien se levantó del suelo y comenzó a caminar con ella en dirección a la bestia—¿Algunas ultimas palabras antes de morir?
—Solo que me hubiera gustado salir con alguien.—se encogió de hombros—Parece que moriré soltera, justo como me advirtió la ama de llaves.
—¿Esas son tus ultimas palabras?
—Hey, yo tambien tengo derecho a experimentar el amor ¿No?—soltó una leve risa, sin quitar la mirada del frente—De todas formas, no pienso morir antes de cumplir mis sueños.
Se detuvieron justo al frente de una columna.
—¿Sueños?
—Si.—alzó la espada, en guardia.
—¿Y cual es tu sueño?
—Mhh...te lo diré cuando todo esto termine.—lo miró de soslayo y alzó el dedo meñique—¿Promesa?
—...—no podía creer que estaba por hacer una promesa en un momento así.—Promesa.
Entrelazó su meñique con el de la albina, luego miraron a la bestia.
—Te daré el honor, señorito Ray.
—Es un gran honor, señorita ____.—respondió sarcásticamente mientras rodaba los ojos, tomó su espada y se puso en posición mientras miraba a la criatura—¡¡Hey, criatura estúpida!! ¡Aqui, pedazo de imbécil!
La bestia volteó rápidamente, corriendo hacia ellos rápidamente.
El corazón de ____ comenzó a latir tan fuerte que podria saltar de su pecho en algún momento, sabia que un paso en falso tendria terribles consecuencias.
—Aguarda...—se prepararon para correr, aguardando a que la bestia se acerque lo suficiente.—Todavia no....¡Ahora!
Corrieron en direcciones opuestas y la criatura chocó contra la columna que anteriormente estaba detrás de ellos, dejándola aturdida unos segundos.
Pero se levantó rápidamente para perseguir a _____.
Mientras tanto, Norman llegó junto a Subaru.
—¿Norman?—el castaño volteó en búsqueda de la albina, tratando de ir a ayudarla hasta que el príncipe tomó de su brazo.
—Ellos están haciendo de señuelos, tú debes ayudarme a debilitar la cueva.
—¿Qué hay de Emma y Jemina?
—Emma se llevará a Jemina fuera de la cueva.
El castaño logró ver como a unos metros, Emma corría junto a la pequeña en dirección a la salida de la cavernas.
—No mires atrás, Emma, no mires atrás.—susurró para si misma, tratando se esquivar las rocas y estalagmitas que surgían desde el suelo.
Sus piernas estaban cansadas, no sabia cuanto tiempo iba a durar. De pronto, Jemina comenzó a despertar, tardándose varios segundos en darse cuenta que estaba pasando.
—¿Emma?—miró a su alrededor, mientras aún era cargada por la pelinaranja y veía todo por encima de su hombro.
Observó a una criatura persiguiendo a la albina.
—¡¡_____!!
—¡Shh, no debe escucharnos!—dijo Emma, tapando su boca.
La bestia aulladora cambió de dirección para perseguirlas a ellas, por lo que la ojiverde aceleró el paso tanto como sus piernas se lo permitían.
Debía escapar, tenia que hacerlo por Jemina. Incluso si sus piernas estaban cansadas y le era dificil controlar su respiración por la falta de costumbre, iba a seguir.
Pero tropezó sin querer y usó su cuerpo para amortiguar la caída de Jemina, su tobillo se habia doblado en el peor momento mientras la criatura se dirigía hacia ellas.
—Jemina, escúchame.—trató de levantarse, pero su tobillo le dolia demasiado.—Corre tan rapido como puedas hasta ver la luz, tienes que salir de aqui.
—¿Q-que? No voy a dejarte ¡No quiero irme!—abrazó a Emma en un intentó de aferrarse, pero la pelinaranja se apartó rápidamente.
—¡Vete ahora mismo!
La menor, viendo a la bestia acercarse, comenzó a llorar y salió corriendo.
La ojiverde cerró los ojos, esperando lo peor.
—¡Emma!
Fue cuando alguien se lanzó contra ella para apartarla del camino de la criatura, rodando hasta chocar contra una columna.
—¡¿Estas loca?!—el albino se levantó—¡Pudiste haber muerto!
—¿N-norman?—intentó levantarse, pero cayó de nuevo por el dolor en su tobillo.
—¿Te lastimaste?—la ayudó a ponerse se pie—Apóyate en mi, vamos.
Subaru comenzó a atacar a la bestia, llamando su atención y alejándolos de sus amigos.
—¡Norman, debes irte con Emma!—exclamó el castaño—¡Yo me encargo del resto!
Jemina continuó corriendo hasta poder ver un poco de luz, entonces aceleró hasta salir de la cueva. Corrió y corrió hasta que el frío se intensificó y sus pies pisaron la nieve.
Si habia nieve, significaba que estaba en el territorio del bosque Moonlight y en la parte más baja de las montañas.
—¡Jemina!—la voz de Emma venia desde la cueva.
—¿E-eh?
Al voltear, vio como la pelinaranja salir mientras se apoyaba en Norman para caminar. Corrió hacia ellos, entre lagrimas, para abrazar a Emma.
—¡Lo siento, no debí gritar!—se disculpó la menor.
—Esta bien, no te preocupes por eso.—con su mano libre, acarició el cabello de la niña.
Norman no pudo evitar voltear hacia la cueva, preocupándose por sus amigos.
No podía entrar de nuevo y abandonar a Emma junto a Jemina, mucho menos considerando que solo estorbaría si entra a la cueva de nuevo. Era debilucho y no tenia ninguna habilidad de combate como los demás.
Era mejor quedarse fuera y confiar en sus amigos.
—¡Apresúrense, chicos!—exclamó Subaru, retrocediendo mientras le disparaba bolas de fuego a la bestia, sin embargo, la criatura apenas era afectada.
Retrocedió tanto que su espalda tomó la pared de roca, estaba acorralado.
—¡Ray, llévate a Subaru!—____ corrió y se deslizó en el suelo justo al lado de la bestia, lo suficientemente cerca para cortar los tendones en las patas traseras.
La criatura rugió del dolor, moviéndose bruscamente hasta buscar a la persona que le habia causado tal dolor. No podía caminar bien y la persona más cercana era una humana con una espada en la mano, asi que abrió la boca para mostrar sus filosos dientes y se apoyó en sus patas delanteras antes de dirigirse a la humana.
—Acércate...vamos...—se puso en posición mientras escuchaba a Subaru causando explosiones por toda la cueva para debilitar el lugar—Un poco más...
La bestia estiró su largo cuello para morder a la fémina, pero ella interpuso la espada de forma horizontal para evitar ser mordida.
—¡Subaru, Ray, apúrense!—intentó resistir, pero la fuerza de la criatura era demasiada a pesar de tener los tendones traseros rotos. Sus pies trataron de clavarse en el suelo, pero en su lugar retrocedió por culpa de la criatura.
Podía sentir la respiración de la bestia aulladora, la tenia tan cerca que vio su propio reflejo en los ojos de la criatura que gruñía de furia frente a ella.
Dirigió una de sus manos a su bolsillo y sacó una de sus dagas para clavarla en la bestia, salpicando su rostro con la sangre y escuchando en primera fila el aullido de dolor que soltó la criatura.
Aprovechó en sacar su espada y corrió mientras se cubría los oídos.
Varias rocas empezaron a caer junto a tierra y estalactitas, al parecer la caverna comenzaba a colapsar.
—¡Debemos salir!—exclamó Subaru.
Las antorchas empezaron a caer y la iluminación cada vez era menos, por lo que no veían a ____ en ningún lado y el aullido no permitía escuchar sus posibles gritos.
—¡_____!—gritaron al unísono, intentado buscarla.
Subaru encendió su varita, Ray forzó su vista intentando ver algo hasta que distinguió un destello de luz que reconocería en cualquier parte.
Era el collar de la albina, destellando mientras se movía al mismo ritmo que ____ corría hacia ellos.
Ray tuvo el impulso de correr hacia ella, pues se escuchaba como la bestia rugía justo detrás de ella.
_____ estaba haciendo lo posible por esquivar las rocas y estalactitas que caían, pero una la golpeó justo en el hombro y otra en la espalda, provocando su caída.
—Uhg...—trató de levantarse, escuchando las pisadas de la bestia cada vez más cerca.
Su cuerpo le dolia, sus piernas estaban cansadas y le habia caído una roca grande en la espalda. No sabia si podía seguir, pero tenia que intentarlo.
Justo cuando alzó la mirada, vio como la bestia se digirió hacia ella aún cuando tenia las patas lastimadas y el ojo chorreando de sangre.
Se detuvo justo frente a ella, rugiéndole justo en la cara como muestra de su ira por haberlo herido, por atreverse a clavar sus armas en él. Cuando vio que la fémina se levantó, se preparó para morderla.
Ella retrocedió arrastrándose en el suelo, pero vio como Ray se interpuso y atravesó el cuello de la bestia con su arma.
Lastimosamente, no fue suficiente para matar a la criatura, y esta ultima dirigió sus dientes al brazo del chico.
Ray apretó la mandíbula intentando no gritar del dolor.
—¡¿Acaso enloqueciste?!—exclamó Subaru, apenas llegando.
—R-ray...—____ se levantó y tomó la espada. No iba a dejar que Ray haga todo el trabajo solo.
Ya tenia una mordida, lo que era suficientemente peligroso.
"Considerando que su mordida posee un poderoso veneno, solo puede ser combatido con magia antigua de un mago de sangre pura."
Aprovechando que la bestia aún tenia los dientes clavados en el brazo del azabache, ____ clavó otra de sus dagas en el ojo restante de la bestia, provocando que suelte a Ray.
Retrocedió junto a él, mientras Subaru se encargaba de interponer una barrera de magia algo más débil por su condición. Habia utilizado mucha de su magia, no estaba nada acostumbrado.
—____, escúchame.—intentó apartarla al ver que ella se detenía a curar su brazo ensangrentado. Entrelazó sus propias manos y se agachó—Te impulsaré.
—¿Q-que?
—Debes atacar justo a su cabeza, desde arriba. Así no podrá morder a nadie.—dijo él—Yo cortaré su cuello desde abajo.
—Pero tu brazo...—temía empeorar la herida si saltaba siendo impulsada por los brazos de Ray.
—¡Subaru, no resistirá con esa barrera por más tiempo!—exclamó, intentando hacer que reaccione de una vez—¡Es ahora o nunca!
Ella asintió con la cabeza, intentando eliminar sus propios miedos. No era el momento de dudar.
Retrocedió unos pasos, preparándose.
—Subaru, eliminarás la barrera en cuanto ___ salte.
—Entendido.—miró de soslayo a la albina, para poder calcular bien.
Ella se acercó corriendo y pisó las manos entrelazadas de Ray para impulsarse mientras veía la barrera romperse, se elevó lo suficiente para clavar su espada con fuerza justo en la cabeza de la bestia.
Atravesó su mandíbula y con el peso de su propio cuerpo enterró aún más aquella hoja afilada. Ray aprovechó para levantar su espada, reuniendo toda la fuerza que le quedaba para rebanar el cuello de la bestia con un movimiento.
La cabeza cayó y ____ aterrizó al lado. Los búhos se acercaron a picotearlo en busca de señales de vida.
—Lo....hicimos...—susurró, observando el cuerpo de la bestia en el suelo.—¡Matamos a esa cosa!
—S-si, lo hicimos, pero debemos irnos.—dijo Subaru, justo detrás de ella.—_____, ¿Podrias hacerme un favor?
—¿Eh?—la albina se dio cuenta de que su amigo mantenía una barrera justo arriba de ellos para evitar que las rocas y estalactitas no caigan sobre ellos.
—Dentro de mi bolsa hay botellas de cristal vacías.—indicó el castaño—Tómalas y llena do botellas con el veneno de la bestia aulladora, el que resta llénala con su sangre.
La peliblanca no preguntó nada, solo se apresuró en hacer lo ordenado. Subaru parecia estar haciendo un gran esfuerzo por mantenerlos a salvo con su magia.
Cada vez caían rocas más grandes y más tierra.
—____, apresúrate.—pidió Ray, con una de sus manos cubriendo su herida.
—Ya casi....ya casi.—tapó la ultima botella y las guardó de nuevo en el bolso de Subaru.
Los tres corrieron en dirección a la salida.
Norman no dejaba de caminar en circulos bajo la mirada preocupada de Emma y Jemina.
La entrada de la cueva estaba cubriéndose de rocas y a este paso ellos quedarían atrapados dentro.
—¡Ahi están!—exclamó la pequeña, señalando hacia la cueva—¡____! ¡Ray! ¡Subaru!
—¿Son ellos?—el albino volteó, dándose cuenta de como Ray estaba apoyado en ____ para caminar—¿Está herido?
—¿Ray?
Sus tres amigos aceleraron el paso mientras más rocas caían en la entrada, lastimosamente tapándola por completo.
—N-no...¡Chicos!
La pelinaranja corrió a pesar del dolor en su pie, junto a Jemina. Norman se quedó perplejo, justo en su lugar.
¿Sus amigos se quedaron atrapados en la cueva?
Su corazón se aceleró con temor. Esto no podía acabar así, sus amigos no debían morir ¿Qué clase de príncipe seria si dejaba morir a su gente? ¿Qué clase de amigo seria si debajo morir a esos tres?
Y lo que era peor ¿Qué clase de hermano seria si dejaba morir a ____?
Se escuchó el sonido de una pequeña explosión, dándose cuenta de lo que planeaban los contrarios.
—¡Emma, apártate!—jaló a la fémina del brazo, y con ella a Jemina.
Una explosión más grande hizo a varias rocas volar en pedacitos, alzando polvo y nieve alrededor.
Subaru, ____ y Ray salieron desde ahí, como si surgieran desde los escombros. El par de búhos salió volando rápidamente, cargando algo entre los dos.
—¿Eso era...?—Norman sacudió su cabeza, no era momento para eso.
—¡Chicos!—Emma se lanzó a abrazarlos, a los tres juntos, entre lagrimas de felicidad por verlos vivos.
Norman se sumó al abrazo, los tres cayeron al suelo de rodillas sin dejar de abrazarse mientras Jemina tambien se lanzaba al abrazo.
El vampiro estaba muerto, la bestia aulladora tambien. Lo habian logrado. Realmente habian matado a esas criaturas.
—Estamos vivos, ¡En serio estamos vivos!—Emma se separó del abrazo, solo para tocar su propio rostro—¿Esto es un sueño?
—Ojala que no.—respondió Ray—Nos costó mucho matar a esa cosa.
—Pero tu brazo....—____ miró hacia su herida.
—¿La criatura te mordió?—Norman comenzó a sentirse culpable.
—Estaré bien, créeme.—se levantó, los demás imitaron su acción—Debemos regresar al pueblo.
—Pero...—la pelinaranja dio un paso hacia él, pero el azabache se alejó.
—Estaré bien, Emma.—insistió.
—Emma, no podemos quedarnos aqui.—dijo el albino.—Vamos, apóyate en mi.
La ojiverde suspiró y se fue caminando con la ayuda del príncipe, mientras tanto, Subaru cargó a Jemina.
Ray estaba por ir detrás de sus amigos, pero alguien tomó su brazo.
—...—dejó salir un suspiro y volteó hacia ____—¿Necesitas algo?
—Ray...debemos atender tu brazo.—dijo ella—¿Seguro que te sientes bien?
—Oye, a ti te cayó una roca del tamaño de mi cabeza justo en tu espalda.—respondió, en tono burlón—¿En serio me preguntas a mi si estoy bien?
—No seas tonto, esa roca no se compara a la mordida de la bestia aulladora.—ella deslizó su mano por el brazo del azabache hasta tomar de su mano y entrelazarlas—Ray...me niego a dejar que esa herida empeore.
—____, leímos el mismo libro. No se si lo olvidaste, pero no hay cura para el veneno de esa cosa.—desvió sus ojos hasta mirar las manos entrelazadas—Y nadie aqui sabe de magia antigua ni es un mago de pura sangre.
—¡Subaru lo es!—exclamó ella—Me niego a dejarte morir por algo así, tienes muchas cosas por vivir ¡Y todavia no ves ni la cuarta parte del mundo humano!
—____...
—¡Aun tienes que explorar y probar varios postres! ¿No quieres aprender a cocinar más cosa?—sus ojos comenzaron a llenarse de lagrimas retenidas—Debemos hallar la forma de curarte, no, vamos a hallar la forma curarte.
—_____, escúchame-
—N-no importa lo que cueste, no voy a dejar que mueras.—su voz comenzó a temblar.
—¡____!—la tomó de los brazos—Escúchame, no tengo miedo de morir ¿Esta bien?
—¡Pero yo si!—interrumpió ella—¡Tengo miedo de que mueras!
Ray no supo que decir, solo se limitó abrazarla mientras sentia como ella lloraba.
—Conozco...a una ninfa, es mi amiga.—comentó él—Tal vez ella sepa que hacer al respecto, es una experta en curación y magia antigua.
—¿E-en serio?—preguntó, alzando la mirada.
—Si, en serio.—se separó del abrazo, limpiando las lagrimas de la fémina con su mano—Pero para eso debemos regresar a Neverland.
—E-entonces no perdamos tiempo.—respiró hondo y tomó el brazo sano d Ray para comenzar a correr en la misma dirección por la que fueron sus amigos.
Todos caminaron de regreso al pueblo. Aún era de madrugada, por lo que todo estaba muy oscuro.
—Lo siento...creo que se me acabó la magia.—Subaru parecia apenado.—Supongo que debo entrenar más.
—Mhh...¡Oh!—____ sacó algo de su bolsillo, era la flor que le habia dado Subaru—¿Esto sirve?
—¡Claro!—el ojiazul tomó la flor.—Solo debo...
Acercó su varita y fue como si sacara la luz que habia en la flor. El pequeño brillo se quedó en su varita y continuaron caminando guiándose de esa luz.
Al llegar al pueblo, cuando el cielo comenzó a esclarecer, caminaron hacia la casa de Krone.
Ella estaba en la entrada, de pie, esperando el regreso de los jóvenes y su pequeña. Despues de varias horas, aún estaba esperanzada de verlos.
—¡¡Mamá!!—Jemina saltó de los brazos de Subaru solo para correr hacia su progenitora—¡¡Mamá, regresé!!
Los gritos de la pequeña la hicieron reaccionar, corrió a abrazarla en cuanto vio su pequeña silueta acercarse.
—¡¡Jemina, mi niña!!—la envolvió entre sus brazos fuertemente, chocando sus mejillas—¡¡Volviste!! ¡¡De verdad volviste!!
Los gritos comenzaron a despertar a los vecinos, quienes se asomaron a ver que pasaba.
Todos vieron como Krone lloraba mientras gritaba entre lagrimas lo preocupada que habia estado y lo feliz que era ahora que su hija habia regresado.
Tambien vieron a un grupo de jóvenes, heridos y llenos de tierra, sangre y escombros.
—Jemina es la primera y única sobreviviente de las desapariciones del pueblo.—dijo Norman, acercándose a ellas—Lo siento, pero los demás...ellos...
—Cuando llegamos, ya era demasiado tarde.—completó ____.
Pero Krone se acercó a abrazarlos, a cada uno, comenzando por Emma y terminando en Norman.
—Estan vivos, es lo que importa.—tomó las manos del albino, con una mirada que reflejaba tanta gratitud y felicidad como podía.—Cumplieron su promesa de regresarla con vida. Y ustedes regresaron con vida.
Pronto, varias personas del pueblo se acercaron.
Norman dio varios pasos adelante, siendo seguido por sus amigos justo detrás de él.
—Desde ahora, el pueblo de Goodwill Ridge es libre de sentirse tranquilo.—anunció, en voz alta—Mis amigos y yo nos encargamos de los causantes de las desapariciones.
Bajó un poco la mirada.
—Y lo sentimos, porque no pudimos hacer nada para salvar a las personas que desaparecieron anteriormente.—dijo él—Cuando llegamos, era demasiado tarde y la cueva donde estaba la bestia colapsó.
Algunos parecían desconcertados, otros sorprendidos y algunos entraron en shock al escuchar lo ultimo.
—¿Significa que...mi esposa nunca volverá?—el hombre de quien provenía la voz dio un paso adelante, era el padre de Carol.—Tu prometiste...traerla de vuelta.
—El asunto estaba fuera de nuestras manos en el momento en que supimos que esas personas estaban muertas.—respondió ____—Nuestra prioridad fue matar a la bestia y salvar a Jemina, porque ella seguía con vida.
El hombre bajó la mirada, mirando a su hija entre los brazos.
—¿Y como sabemos que de verdad mataron a la bestia?—preguntó alguien.
—¡Si, tiene razón! ¡No tenemos pruebas!
—¿Quieren pruebas?—Norman sonrió levemente, de forma soberbia, antes de llamar con un silbido a los búhos.
Las aves se acercaron con la cabeza de la bestia entre las garras y la dejaron caer cerca de los pueblerinos, estos últimos retrocedieron.
—Es la cabeza de la bestia aulladora, la criatura responsable.—señaló el peliblanco—¿Quieren más pruebas que eso?
Todos se callaron, observando la cabeza de la bestia y la sangre del mismo rojo intenso que tenían alguno de los jóvenes encima.
—Desde ahora, pueden dejar de lado el miedo.—dijo ____, quien al dar unos pasos al frente vio como la gente retrocedía. Tal vez era porque ella tenia más sangre salpicada encima que Subaru y Ray.—La bestia murió y su alteza continuará protegiendo al pueblo cada vez que necesiten ayuda.
Los murmullos empezaron, Krone volteó a verlos con mucha confusión.
—¿"Alteza real"?
____ le devolvió su espada a Subaru, quien junto a Ray se posicionaron a los lados de Norman. Con los broches de la guardia real puestos.
Clavaron la espada en el suelo y colocaron sus manos en la empuñadora, mostrando el escudo real que relucía en sus armas. La albina estiró uno de sus brazos en dirección al albino para presentarlo formalmente.
—Inclínense ante su alteza real, el príncipe heredero de Neverland.—observó como todos, junto a su asombro y nerviosismo de tener a alguien de la familia real frente a ellos, se inclinaron en señal de respeto.
Realmente no lo pensaron mucho, pues el hecho de tener un par de guardias resguardándolo ya era señal suficiente de que decían la verdad.
Y Norman se sintió extraño al ver, como por primera vez, la gente se inclinaba ante él en vez de mirarlo con desprecio y lastima.
No lo insultaban, no le decían que estaba maldito ni trataban de golpearlo. Estaban inclinándose ante él.
—Alteza, debemos regresar para tratar las heridas de los demás.—dijo ____.
Él asintió y se fueron junto a Krone.
Subaru cayó en lo primero que vio al entrar, el piso.
Pero se levantó luego de que Ray caminara por encima como si él fuese un tapete de entrada.
—Mejor ve al sofá.—la albina lo llevó de la mano como a un niño pequeño.
Emma se sentó en el otro sofá con ayuda de Norman, mientras que Ray estaba en la mesa y esperando a ____.
—Bien, empecemos contigo.—la albina se acercó junto a una pequeña caja llena de vendas y otras cosas.
Se sentó junto a Ray, pero acomodó su silla para verlo de frente. El azabache comenzó a desabotonar su camisa para facilitarle el trabajo a ___.
—¡O-oye!—se cubrió los ojos.—¿Qué haces?
—No creo que puedas curar una herida con tela encima.
—Ah...c-cierto.—bajó sus manos, pero aún así retiró la mirada.
Sintió sus mejillas enrojecer, lo que le pareció muy extraño a ella. Ya habia curado las heridas de Kazuma antes, y en su tiempo ayudó a su madre a curar las heridas de su padre.
Sus ojos se desviaron hacia el torso descubierto del pelinegro, rápidamente quitó la mirada.
—_____, me haré viejo esperando.
—¡Lo siento!—tomó la botella de licor—Ahora...solo quédate quieto.
Al ver la herida, se dio cuenta de que el veneno estaba extendiéndose y oscurecía la piel conforme avanzaba.
—¿Vas a emborracharme?—preguntó Ray alzando una ceja.
—Solo habia esto para desinfectar las heridas, no te quejes—derramó el licor encima de la herida, observando como Ray apretaba los puños para soportar el dolor.
Continuó con ungüentos y vendajes hasta cubrir toda la zona que el veneno habia alcanzado.
Antes de que ____ vaya con Emma para revisar su tobillo, Ray tomó su mano.
—¿Podrias...no decirles sobre el veneno?
—¿Tratas de morir mas rapido?—preguntó ella, en voz baja—Debemos decirles e ir a Neverland en cuanto antes.
—Estan demasiado cansados ¿Crees que podrán resistir el viaje?
—Pero...—frunció el ceño, golpeando a Ray en su brazo sano—Ya tuve suficiente de esto. Tu fuiste quien me dijo que no todo se trata de proteger a los demás.
Se acercó a los demás, Ray intentó detenerla.
—Prepárense para volver a Neverland.
—¡No me dormí!—Subaru se levantó, cayéndose del sofá sin querer—¿Eh? ¿Qué pasó?
—¿Volverán a Neverland?—preguntó Krone.
—¿Eh? ¿Tan rapido?—Jemina parecia triste de que sus amigos se vayan.
—Lo siento, pequeña.— ___ acarició la cabeza de la menor—Pero es un asunto urgente y no podemos perder tiempo.
—¿Urgente?
—____...—el azabache la miró, negando con la cabeza.
—Es la mordida, ¿No?—preguntó Subaru, aún con la voz adormilada—Debi suponer que con esa cabeza de serpiente seguro tendria veneno.
—¿Veneno?—Emma intentó levantarse del sofá, pero no pudo.—¿Por que no lo dijiste antes?
El pelinegro desvió la mirada.
—Guardemos nuestras cosas y regresemos a Neverland.—dijo Norman—Un medico debe-....un momento ¿Un medico puede atenderlo?
—Tengo una conocida que podria ayudarme.—dijo Ray—Pero debemos llegar a Neverland primero.
Todos fueron a guardar sus cosas, excepto ____ y Emma, pues la pelinaranja todavia no era curada.
—Solo es un pequeño esguince, estará bien en una semana.
Emma observó su tobillo vendado.
—Cuando volvamos...¿Podrias enseñarme a curar heridas?—preguntó la ojiverde.
—Claro, te enseñaré todo lo que se.—le sonrió dulcemente mientras la ayudaba a caminar.
Despues de empacar y llevar un poco de comida que Jemina les dio para el camino, salieron de la casa solo para encontrar a Krone afuera junto a varias personas más.
Traían cinco caballos con ellos.
—Creemos que les serán de ayuda.—dijo la morena—Llévenselos, es una forma de agradecimiento por arriesgar sus vidas por nosotros.
—Las personas que desaparecieron nunca más volverán a casa, pero al menos fueron vengadas.—dijo el padre de Carol, quien estaba entre la multitud.
Todos se inclinaron, no solo ante el príncipe, sino ante todos los jóvenes que los habian salvado del peligro. Eran sus salvadores.
—¿En serio deben traer esa cabeza?—preguntó Ray, asqueado. Devolvió su mirada al frente, dejando que el viento en su rostro mueva su flequillo.
—Deja a mis pequeños, de todas formas lo cargarán ellos.—respondió la albina.
Ya estaban camino al reino de Neverland, apresurándose tanto como podían. Sabían que los caballos que llevaban no eran tan experimentados como los caballos de la guardia real, asi que tendrían que hacer una parada en algún punto para descansar.
—¡Más adelante habrán dos opciones!—exclamó Subaru—El camino más largo lleva al pueblo, pero hay un atajo que pasa por el bosque y nos ahorra medio dia de viaje.
—¿Medio dia?—Norman no sabia si confiar en un atajo.
—¿Pasa por el bosque?—cuestionó ____.
—No es el bosque Moonlight, es un bosque separado.—aclaró el castaño—Pero los cocheros, como el señor que nos trajo, suelen ir por el camino del pueblo para cobrar más dinero.
—Iremos por el atajo, haremos un paradero saliendo del bosque.
—¿Estas segura, ____?
—Si.—respondió la fémina—Tenemos que llegar lo antes posible.
Ray observó como ___ parecia la más apurada por llegar a Neverland, ¿Tanto le preocupaba su herida?
¿Acaso se sentia culpable? ¿Tal vez lo hacia por lastima? ¿O era todo junto?
No iba a admitirlo, pero sentia como si su brazo estuviera a punto de caerse por si solo luego de ser rasgado por la fuerza, sin mencionar el dolo en todo su cuerpo y su rostro ardiendo a pesar de todo el viento que golpeaba su piel.
Podía sentir el veneno extenderse desde la herida.
Varias horas despues, Subaru los guió hacia el atajo, asi que llegaron a un bosque lleno de arboles.
El bosque era demasiado diferente al de las criaturas, empezando por los arboles que eran mucho más altos que los del bosque Moonlight.
—No sabia que existía un bosque así en Neverland.—dijo _____, mirando a su alrededor—Podrían medir más de veinte metros.
—¿Veinte? Algunos seguro miden más de treinta.—respondió Subaru.
—Emm...Subaru.—llamó la pelinaranja.—¿No dijiste que aqui no habian criaturas?
—Si, dije eso.—dijo el castaño—Es un bosque solo del territorio humano, ¿Por que lo preguntas?
—Porque vi una silue-
Una sombra pasó frente a ellos, fue tan rapido que apenas pudieron verlo.
—¡Norman, cuidado!—gritó _____, frenando de golpe junto a él.
Todos los demás frenaron y miraron alrededor, buscando a la sombra de hace unos segundos.
—¿Qué fue eso?—cuestionó Emma—¿Una criatura?
—Es imposible, este bosque no...
—A este punto, realmente no tenemos la certeza de saber si un lugar esta totalmente libre de criaturas.—interrumpió Norman.
—Esperen.—Subaru se bajó del caballo al notar unas marcas en el tronco de un árbol.—No parece que una criatura lo haya hecho.
—Parecen marcas hechas a proposito...—añadió Norman.
—De cualquier forma, es mejor no quedarnos más tiempo.—_____estaba lista para partir nuevamente.
Se acercó un poco a Ray, dándose cuenta de que estuvo callado todo este tiempo. Sin decir una sola palabra, colocó su mano en la frente del pelinegro.
—Tienes fiebre...—buscó la cantinflora que traía consigo—Toma, bebe un poco. Solo es agua.
El pelinegro tomó la cantinflora y tomó todo el agua que podía al sentir su garganta seca. Al alzar la cabeza para beber lo ultimo, se dio cuenta que habia alguien en uno de los arboles.
No podía distinguir quien era, debido a lo lejos que estaba por lo alto del árbol.
—¿Pasa algo?—preguntó la albina, dándose cuenta de que Ray miraba hacia uno de los arboles.
Siguió el camino de su mirada hacia las ramas de los arboles, donde habia una persona observando desde lo alto.
Justo en lo alto del mismo árbol que Subaru revisaba.
—Eh...Subaru...—se bajó del caballo para alertar a Subaru disimuladamente. Pero se alarmó cuando vio que la persona se lanzaba desde lo alto del árbol.
Tal vez fue sus reflejos de proteger a las personas a su alrededor o su instinto de hacer lo correcto impulsivamente, pero en cuanto vio que esa persona podria caer encima de Subaru no hizo más que empujarlo.
Y asi, seria aplastada en su lugar, o eso creía.
Unos brazos la rodearon y vio como sus pies despegaban del suelo con demasiada rapidez. Cuando menos se dio cuenta, estaba en los brazos de un joven que la noqueó con un golpe en la nuca.
ღ࿐*:・゚ ¿COMO ESTAN MIS ESTRELLITAS? Espero que la vida las esté tratando bien ♡✨ ¿Les gustó el cap? Les confieso que ni siquiera yo sabia que pasaría en la cueva, ni siquiera habia pensado en como iban a matar a esas criaturas JKAJKSJK 🧃🐢
୨୧࿐*:・゚ La imagen de multimedia es la bestia aulladora. Es una criatura originalmente de la mitología celta y pertenece a la leyenda del Rey Arturo.
εїз࿐*:・゚ Si tienen curiosidad por el idioma que habló el vampiro, es rumano. En cuanto a los hechizos de Subaru, estan en latín. Creo que es obvio que usé traductor, pero me gustó como quedó ¿Y a ustedes? jsakjask
౨ৎ࿐*:・゚ Gracias por leer este capitulo y perdonen las faltas ortográficas (a veces mi mente es mas rápida que mi mano cuando escribo TT ) No saben cuanto agradezco la paciencia que me tienen, los amo demasiado ♥
ꕤ࿐*:・゚ Eso fue todo por hoy, cuídense, no olviden tomar agua y alimentarse bien para aguantar la vida y la escuela. No olviden que su salud mental está primero, bye bye ♡♡♡
_________________________
┊┊┊┊⋆ ✧ · ✧ ✵
┊┊┊☆ * * ⋆
┊┊★ *
┊┊* . * ✦
┊☆ ° ✧ ·★
★
「PRÓXIMO CAPITULO」
•| 『𝑳𝒂 𝒅𝒐𝒏𝒄𝒆𝒍𝒍𝒂 𝒑𝒆𝒄𝒖𝒍𝒊𝒂𝒓 』|•
—¡Trajiste a la persona equivocada!
—¡Ella se interpuso!—respondió el pelirrojo.
Su hermano suspiró, tratando de pensar en que hacer. Frunció el ceño mientras se llevaba una mano al rostro con frustración.
Ambos voltearon al escuchar unos sollozos, provenientes de la fémina.
—¿Ya viste? ¡La hiciste llorar, Sirius!
—¿Yo?—se señaló a si mismo, muy indignado—¡Tu la secuestraste, pedazo de imbécil!
╔═.❥.══════╗
9114 palabritas
╚══════.❥.═╝
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top