—Sigo sin creer que mi mejor amiga mañana se case. —murmura Leo, reí mientras miraba mi anillo de compromiso.

Mañana seria el día en que seré señora Whitlock/Hale. Estaba más que nerviosa y quería que todo fuese perfecto.

Hace un mes les mandé la invitación a mis amigos, aparecieron a los minutos. A Percy casi le daba algo, a Leo y a Jason ni se les diga.

—En realidad, pensé que terminarías con veinte peces. —dijo Percy, lo miré muy ofendida.

—Percy, no te tiro mi tacón al ojo porque no quiero pelear contra Poseidon.

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—Vamos, respira Diana. Todo saldrá perfecto. —me alentó Hades al verme tan nerviosa y caminando de un lado a otro.

Tan solo faltaban diez minutos para mi entrada, temía que Jasper dijera que no, pero mi mayor temor era caerme.

Hades había llegado para mi boda, a todos nos sorprendió pero me alegré al saber que tomó en cuenta en lo que dijo Nico meses atrás.

—¿Qué tal que diga que no, padre? —le pregunté nerviosa.

—Entonces se perderá de una gran mujer. —sonrió para después abrazarme —. Y lo mandaré a las profundidades del Tártaro.

Reí ante lo que dijo.

—Diana. —llegó Hazel con su hermoso vestido de Dama de honor —. Hades, ¿me dejarías un segundo con Diana?

Este asintió para después apartarse un poco de nosotras, Hazel me agarró las manos con una gran sonrisa en su rostro.

—Estoy tan feliz por ti, al fin te casarás. —me dijo.

—Lo sé, estoy tan emocionada pero tan nerviosa. —suelto un suspiro —. ¿Aceptas a Jasper por más que sea un vampiro?

—Vampiro, unicornio, cíclope, semidiós. No me importa lo que sea él, me importa que te haga feliz. Lo aceptaré.

Después de lo que dijo, la abracé evitando llorar.

—« No vayas a llorar, no quiero que las fotos salgas fea. —se burló.

Reímos y en ese momento regresó Hades.

—Es hora. —anunció este.

Hazel se fue y agarré del brazo a Hades, y comenzó  a sonar un piano. La reconocí como Nana de Bella.

Las puertas se abrieron y comenzamos avanzar, miraba a los invitados. Donde logré ver a mi madre llorando junto con Jhon, su novio. A Edward, quien tocaba el piano para mi entrada. Jack y a Eric, quienes ya se enteraron sobre su verdadero origen.

Y a Jasper, quien me miraba con amor y sorprendido al verme. Yo estaba igual que él, casi llorando. Al llegar al altar, mi padre me entregó a este.

Nos quedamos mirando fijamente, Hera dio la señal de que se sentaran y así lo hicieron.

Estaba más que segura que me quería casar con Jasper Hale, él era mi alma gemela.

Hera se había ofrecido en casarnos a mi y a Jasper, estaba admirada con nuestra relación. Al principio no la aceptó, pero con el paso del tiempo se vió admirada.

—Queridos hermanos y hermanas, estamos aquí reunidos para presenciar la unión eterna de Jasper Hale y Diana Clifford. — Decía Hera mirando a los invitados  —Repita después de mi Señor Hale:

— Yo Jasper Hale, te tomo a ti Diana Clifford como mi esposa, para amarte y honrarte siempre, en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, hasta que me tenga que ir de este mundo y separarme de ti. — decía Jasper mirandome a los ojos con mucha adoración y amor, yo estaba con el corazón acelerado y los ojos llorosos

—Yo Diana Clifford, te tomo a ti Jasper Hale como mi esposo, para amarte y honrarte siempre, en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, hasta que me tenga que ir de este mundo y separarme de ti. — dije con la voz entrecortada y mirándolo a los ojos.

—Los anillos por favor. — dijo Hera mirando a los presentes, Noah se levantó de su asiento y se acercó a nosotros con los anillos en una almohadita, Jasper tomó un anillo y lo deslizó por mi dedo anular, me sonrió de la manera que solo él sabía hacerlo, derritiendo mi corazón. Tomé el anillo y lo deslice por su dedo anular, lo miré y le guiñé un ojo.

—Jasper, ¿aceptas a Diana como tu esposa?. —Pregunta Hera con una sonrisa.

— Acepto —dijo mirandome con una sonrisa.

— Diana, ¿aceptas a Jasper como tu esposo?

— Claro que sí, acepto — dije con la voz entrecortada de la emoción

—Los declaro marido y mujer, su hogar estará lleno de bendiciones y prosperidad. Jasper, puedes besar a la novia — dijo Hera mirandonos.
Jasper no esperó más y me besó con dulzura, yo lo tomé del cuello de su traje y le correspondí. Nos separamos y sonreímos, volteamos al publico agarrados de las manos y Hera mencionó en voz alta

—Les presento al Señor y Señora Hale.

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Jasper y yo llegamos al salón de eventos, donde se celebraría la boda. Obviamente eramos los últimos en entrar. Al hacerlo, todo los invitados aplaudieron.

Nos pusimos en la mitad de la pista de baile y comenzó a sonar “Can't help falling in love" de Elvis Presley. A Jasper y a mí nos encantaba esa canción por la que la tomamos.

Nos mirábamos con amor puro mientras bailamos. Era un baile muy lento, pero tierno.

—Quien diría que conocería al amor de mi vida en una cafetería llena de personas con problemas hormonales. —dijo. Reí ante su comentario.

—Lo que importa es que nos conocimos.

—Te amo, Diana Hale. —sonó tan lindo mi nuevo apellido.

—Y yo a ti, Jasper Hale. —dije antes de darnos un beso tierno.

Después de unas horas, Jasper y yo nos teníamos que ir de luna de miel, dejamos a Noah acargo de mi madre que con gusto lo recibió.

Nos íbamos de luna de Miel a Colombia, Cartagena.

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Vestido de novia.

Vestidos de damas de honor: Hazel, Annabeth y Alice.

Preparativos.

Anillos.

Zapatos

Ropa.