─ CAPÍTULO ─
TRES

❝EQUIPO❞

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        TOMÉ LA HOJA ENTRE MIS DEDOS PASANDO página para continuar con mi lectura. Habían pasado la hora del almuerzo en la cual Lee estuvo conmigo hablando sobre lo increíble que sería el equipo si entrenamos todos los días las 24/7 lo cual espero y no se haga.

Como buenos compañeros que somos invitamos ─por no decir que Lee hizo todo por el mismo─ a Neji almorzar con nosotros. Oferta que rechazó sin dirigirle la palabra a mi amigo.

Según había dicho el sensei conoceríamos a nuestro sensor cuando regresáramos de nuestro almuerzo. Por lo que notaba los jounin aún no aparecían, ante esto Lee comenzaba a impacientarse moviéndose de un lado a otro.

──¿Por qué tardarán tanto? ─preguntó mirando hacía la puerta. ──. ¿Cómo crees que será? ¿Crees que sea un gran extraordinario jounin? ¡Ya quiero conocerlo!

──Lee, no llevamos ni cinco minutos que regresamos del almuerzo. ─le recordé sin mirarle. ──. Debe de tomar un poco de tiempo cuando comiencen a llegar.

──¡Pero eso es mucho tiempo desperdiciado! ─estaba por explotar. ──. Con todo ese tiempo podemos gastarlo en entrenar.

──Entré más desees que aparezca más tiempo tardará en aparecer. ─comenté sintiendo como estaba por arrancarse sus cabellos.

──¡Eso es! ─soltó de repente. ──. Ojalá que nuestro sensei tarde mucho en llegar. Nadie de nosotros quiere conocerlo.

Alcé una ceja ante sus repentinas palabras. Ahora eran lo contrario de lo que deseaba.

──Estás usando psicología inversa, ¿en serio? ─cuestione.

──No. ─negó cruzando sus brazos. ──. Sólo digo que no tengo ganas de conocer a nuestro sensor.

──No creo que así aparecerá el sensor más rápido. ─dije, claramente sonaba absurdo.

De pronto, la puerta del salón fue abierta bruscamente dejando ver a un hombre o mejor dicho una cosa verde y escurridiza de cabello de tazón haciendo una extraña pose.

──Equipo 9, yo seré su nuevo sensor. ─mostró sus dientes dando una sonrisa mientras mostraba su pulgar arriba.

Tanto Neji como yo nos mantuvimos sentados con una mueca ante su tanta energía y su forma extraña de vestir. Por parte de Lee parecía que estaba por explotar de felicidad.

──¡Funciono! ─gritó Lee feliz. ──. ¡La psicología inversa funcionó! ─lo vimos levantarse de su asiento llegando frente al hombre. ──. ¡Rock Lee listo para la acción, sensei!

──Ese es el espirito, hijo. ─aunque lo decía como un cierto apodo, el parentesco era muy similar. ──. ¿Qué esperan ustedes? ─nos miró a nosotros. ──. ¡Dejen que la energía de la juventud florezca!

──Qué fastidio. ─suspiré parándome del lugar, no había de otra.

──Hmp.

El Hyuga me siguió mientras yo seguía a esos dos hasta que llegamos a la azotea de la academia donde nos sentamos viendo a nuestro frente al sensei que no dejaba de sonreír.

No se cansara. ─pensé inconscientemente.

──Déjenme presentarme como es debido. ─habló sin dejar de sonreír. ──. Soy la Sublime Bestia Verde temida de Konoha, Maito Gai. ─todo eso lo dijo mientras hacía una pose rara. ──. ¿Y cuales son sus nombres?

──¡Rock Lee a su servicio, Gai-sensei! ─el primero fue el energético.

──Nara Saiko, es mi nombre. ─dije soltando un leve bostezo. Tenía un poco de sueño.

──Hyuga Neji. ─dice secamente.

──Bien. ─sonrió satisfecho. ──. Como todos saben, el día de hoy todos son gennin. Así que díganme, ¿por qué lo hicieron? ¿Qué objetivos tienen?

Que buena pregunta.

──Preferiría no decirlo. ─comentó Neji mirando a otro punto.

──¡¿Qué tal yo, sensei?! ─Lee levantó su mano. ──. ¡Quiero demostrar que también soy un espléndido ninja! ¡Aún sin tener ningún ninjutsu o genjutsu! ─en sus ojos podía ver esa determinación. ──. ¡Quiero demostrarle al mundo entero!

──Hmp. ─soltó una leve risa el castaño.

──¡¿Qué?! ¡¿De qué te ríes?! ─cuestionó Lee al escucharlo. ──. ¿Crees que estoy bromeando? ¡En serio, seré un espléndido ninja usando sólo taijutsu y nada más!

──Imbécil. ─mostró su sonrisa arrogante. ──. Sin ninjutsu o genjutsu difícilmente puedes ser llamado ninja. Hmp. ─soltó su tan característico sonido. ──. ¿Recuerdas cuando te dijeron que serías la primera persona en graduarse que sólo usará taijutsu? No lo dijeron porque fuera algo importante, sólo por ser algo inusual.

Lee bajo su cabeza antes esas palabras.

──Disculpa Hyuga, ¿en que se especializa tu clan? ─pregunté mirando al castaño. ──. En los jutsus de fuego, no lo creo. Tampoco hacen genjutsu... Oh sí, se especializan en el taijutsu, ¿no? ─él arrugó su entre ceja. ──. Y se hacen llamar... ninjas.

──No es lo mismo. ─cruzó sus brazos mirando hacía otro lado.

──El taijutsu es taijutsu aún después de que se usan completamente diferentes.

──Hmp. ─fue lo único que hizo.

──¿Y qué hay de ti, Saiko? ¿Cuáles son tus objetivos? ─preguntó el sensei desviando el tema.

──Pues... ─ladeé mi cabeza pensando la razón de porqué me convertí en ninja. ──. No lo sé. Nunca lo había pensado. ─me encogí de hombros. ──. ¿Es necesario tener objetivos? De solo pensarlo me da flojera.

A él le resbalo una gota ante mi flojera para pensar en la razón y los objetivos que quiero.

──Escuchen. ─habló después de un rato. ──. Sí tienen la pasión requerida, tranquila Saiko trabajaremos en la tuya. ─me miró por unos segundos. ──. Sí la tienen, no es necesariamente que sea así.

Nos dio una sonrisa donde se vio un pequeño brillo relucir.

──Con la pasión requerida y una sana competencia entre ustedes... ¡todos serán grandiosos ninjas! ─eso atrajo la atención de Lee. ──. Sin embargo, deben seguir trabajando muy duro.

Dicho eso se soltó a reír para mostrar nuevamente su dentadura junto a su pulgar arriba.

──Ahora que aclaramos eso, mañana comenzaremos con el verdadero reto. ─anunció.

──¡¿Habla de una misión?! ─preguntó Lee.

──Yo no lo llamaría así. ─sonrió con misterio. ──. Mañana lo sabrán. Para eso los veré después del mediodía en el campo de entrenamiento número tres.

Y justo al decir aquellas palabras, desapareció.

Dejando una intriga en nosotros.

      DEFINITIVAMENTE ODIABA ESTE DÍA. PRIMERO ver como un jounin reprobará a su equipo justo cuando llegamos al campo haciéndonos cuestionar sobre cómo es posible que repruebe a su equipo.

Y ante eso, Gai-sensei nos explicó el verdadero motivo de nuestro llamado hasta aquí, al campo de entrenamiento. Teníamos que pasar una prueba que nos iba a poner de lo contrario seremos mandados de nueva cuenta a la academia.

A parte de que el sensei aprovechó para decirnos que ese jounin era algo así como su rival eterno. La verdad poca importancia le preste.

La prueba que nos puso fue que teníamos que golpearlo, no importa en donde, si uno lo hacía se convertía en un verdadero gennin, el que no lo logrará antes de tiempo regresaría a la academia.

Fácil, ¿no?

Pues no, no es fácil. Es todo lo contrario. A pesar de que había aprendido lo básico del taijutsu en la academia y para ayudar a Lee aprendí un poco más para ayudarlo a entrenar, no estaba a su nivel. No me sorprendía ver a Lee ser derribado como veinte veces en menos de media hora, pero ver como Neji caía a mi par era sorprendente.

──Esto es problemático. ─murmuré para mí misma.

──¡Con esto tendrán que regresar a la academia! ─dijo sin dificultad, con una enorme sonrisa mientras hizo a Neji retroceder.

──¡Poder de la juventud a plena potencia! ─gritó Lee, tomando más energía para enfrentar al sensei.

──No sé ustedes, pero la academia no suena tan mal. ─comenté al ver que no teníamos ninguna oportunidad.

──Se nota que es un jounin, esquiva nuestra técnica sin dificultad. ─habló Neji mirando al hombre frente a nosotros.

──¿Qué tan importante es ser gennin? ─me pregunté a mi misma.

──¡No podemos rendirnos! ─gritó Lee seguido de eso corrió directo al sensei.

Solté un leve suspiro y en cuanto lo vi caer al suelo corrí dispuesta a darle un golpe. Únicamente podemos utilizar el taijutsu, si usaba mi sombra y lo golpeara prácticamente me iba a golpear a mi misma. No podía esquivar sus golpes, mientras que él esquivaba los míos con los ojos cerrados.

──¡Konoha Senpuu!

Cuando menos lo esperé estaba comiendo pasto sintiendo a Lee caer arriba mío y a Neji caer a mi otro lado. Los tres malheridos.

──¿Se dan por vencidos? ─nos preguntó sin cansancio alguno, con cierta burla.

──¡No me rendiré! ─gritó Lee levantándose de encima mío. ──. ¡Siempre he soñado ser todo un ninja tan solo con mi talento físico! ¡No puedo renunciar a ese sueño!

──Qué absurdo... ─murmuró Neji levantándose de la tierra. ──. Pero... no dejaré que nada me detenga.

──Esto es un fastidio. ─dije apoyando mi peso con mis manos para comenzar a levantarme. ──. Si voy a suspender, por lo menos lo haré de pie. ─dije dando un paso al frente preparando mi puño.

──Sí, muy bien, chicos. ─Gai-sensei sonrió al ver nuestra determinación. ──. ¡Eso es la juventud! ─extendió sus brazos esperando por nosotros.

Caminamos unos cuantos pasos lentamente, parecía que los tres íbamos a ir con todo. Nuestros cuerpos pesados por el cansancio no nos iban a detener.

──¡Vamos, hagan estallar su voluntad aunque su fuerza sobrepase el límite! ─nos vociferó. ──. ¡Intenten darme!

Levanté mi puño al mismo tiempo que mis compañeros y cuando menos lo esperamos, le habíamos asentado un "golpe" en su rostro mismo que no tenía fuerza por lo cansados que nos encontrábamos.

──¡Han... ─gritó envolviendo sus brazos, sin medir su fuerza, a nuestro alrededor en un abrazo. ──. aprobado todos!

Sentía el aire comenzar a faltarle a mis pulmones ante su fuerza ejercida.

──¡Lo logré! Lo he logrado. ─Lee era un mar de lágrimas.

Mientras él lloraba, Neji moría entre los brazos del sensei guardando sus comentarios.

──N-no puedo respirar... ─balbuceé.

Una vez que nos soltó. Pudimos descansar bajo de un árbol hidratado nuestra garganta con agua fresca. Mientras que Lee agradecía por no habernos tocado el sensei que había mandado a esos tres a la academia.

──Bien, ahora que han recuperado su fuerza y son oficialmente gennin. ─miramos al sensei sonreír con gran alegría. ──. Es hora de hacer algo muy importante.

──¡¿Entrenar?! ─preguntó Lee con entusiasmo.

Gai-sensei solo movió su cabeza negando aquello.

──¿Una misión? ─interrogó Neji, pero por igual el sensei lo negó.

──¿Dormir? ─pregunté esperando su afirmación.

──Me temo que todos están en lo incorrecto. ─soltó una pequeña. ──. Lo que haremos será para la posteridad. Un hermoso recuerdo.

──¿Qué es, sensei? ¡Dígalo ya! ─pidió Lee energético.

──La fotografía del equipo.

──¿Fotografía?

Esa era la razón por la cual estábamos frente al fotógrafo, quien no parecía muy contento. Neji se posicionó a mi izquierda y Lee a mi derecha dejando a la más pequeña en el medio.

──No creo que esto sea importante, ¿o sí? ─dijo Lee, a él no le gustaba tomarse fotos así que intentaba irse.

──Vamos, Lee, no puedes huir de la juventud. ─Gai-sensei lo tomó de su hombro para asegurarse de que no se fuera.

Neji reservaba sus comentarios a pesar de que el sensei lo tomó de su hombro.

──Ahora digan: "por el poder de la juventud".

──Por el poder... ¡No puedo hacerlo! ─gritó Lee intentando huir, pero Gai-sensei lo tenía presionado.

Neji no dijo nada mientras que el sensei cerró sus ojos. Por mi parte solo crucé mis brazos sin darle mucha importancia al flash que nos cegó.

──¡Listo! ─el sensei nos soltó. ──. No fue tan complicado después de todo, ¿verdad, Lee?

──Eh, eso creo, sensei.

Miré de reojo al castaño.

──Parece que el flash te dejó ciego, Hyuga. ─solté mirando su mala cara.

──Hmp.

──En tres días les entregaré la fotografía. ─avisó el señor recogiendo su equipo.

──¡Y será una grandiosa fotografía! ─aseguró Gai-sensei.

Tendría que verlo por mi misma.

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. no se preocupen, más adelante integraré a Tenten. al final creo que sacarla del equipo no era lo mejor.

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