Talya veía entretenida la TV comiendo frituras, con helado por un lado y una botella de refresco casi vacía con una manta cubriendo sus piernas y parte de su abultado y muy bien oculto vientre. Estaba por llegar a su cuarto mes de embarazo y la verdad es que ya se le notaba, cosa que la ponía ansiosa y evitaba lo más posible salir de la habitación. 

— ¿Has estado ahí todo el día desde que me fui a trabajar? — preguntó Pietro desde la puerta viendo a su novia comer 

— Si

— ¿Sin hacer nada todo el día? — preguntó un poco burlón

El ceño de la pelirroja se frunció ladeando el rostro con ligero brillo amenazante en sus ojos verdosos. Pietro sabía que cuando hacía eso era una advertencia

— ¿Nada? — preguntó incrédula

— Yo no dije nada, no me hagas caso, a veces digo cosas sin pensar— se apuró a decir intimidado por ese brillo amenazante— sabes que te amo, preciosa

— Estoy embarazada, he estado aquí todo el día creando un ser humano, ¿tú has hecho un ser humano alguna vez? ¿Uhm? 

— ¿No? 

— ¡Exacto! Yo estoy aquí haciendo un corazón, un cuerpecito, incluso le estoy dando toda mi energía a este bebé además de mi espacio, así que no me vengas con que no he hecho nada todo el maldito día, Pietro Maximoff— advirtió Talya con ojos centelleantes

— ¿Te he dicho que estás radiante desde que estás embarazada? — sonrió Pietro ocultando su nerviosismo

Talya alzó una ceja cruzándose de brazos viendo a Pietro con cierta molestia. 

— Como si vomitar todas las mañanas y engordar me hiciera ver radiante— refunfuño volviendo sus ojos a la TV

— Para mi tu siempre estás radiante— dijo Pietro sentándose a su lado en el sofá abrazando a Talya llevando una mano debajo de su sudadera sintiendo el pequeño y muy bien oculto bulto— hola

— Está comenzando a notarse más… no estoy segura de que los suéteres lo cubran por siempre— susurró aterrada

— Tarde o temprano se darán cuenta, y está bien— tranquilizó Pietro dejando un beso en su mejilla— ¿Te he dicho que me encanta tocar tu pancita? 

Talya reprimió una sonrisa aun un poco molesta con Pietro. 

— Si, lo has hecho— dijo sin darle mucha importancia

Pietro sonrió sabiendo que se estaba haciendo la difícil. Rodeó a Talya dejando un beso en su mejilla bajando lentamente hacia su cuello causándole una pequeña risa. 

— No… aún estoy molesta contigo— trató de resistirse separándose de Pietro haciendo un mohín

Pietro suspiro dibujando lentamente una sonrisa pilla en su rostro. 

— Oh, es una lástima, ya no podré darte este montón de gomitas que te compré— expresó con falsa lástima

Talya de inmediato giró hacia su novio con los ojos brillosos ante la botana

— ¿Gomitas? — sonrió

— Si, pero ya que estás enojada… 

— Dame gomitas— pidió abrazando a Pietro— por favor, te perdonó por ser un idiota

— ¿Qué clase de petición es esa? — se rió Pietro

— Una en la que saldrás lastimado si no me das gomitas— advirtió la rojiza

— Eso no me convence, creo que comeré gomitas solo

Talya ladeo el rostro de nuevo, algo que causó que Pietro tragara grueso 

— No sabía que querías morirte hoy

— Ten gomitas— dijo Pietro de inmediato dándole el paquete

Talya sonrió como una niña feliz abriendo el paquete comenzando a masticar los dulces. Se inclinó sobre Pietro dejando un pequeño beso y volvió a comer feliz

— Te amo

Pietro suspiro con alivió. Lidiar con Talya embarazada era difícil. La rodeó dejando un beso en su cabello y luego miró la TV a su lado. 

— Tengo hambre— declaró de pronto— quiero lasaña

— ¿Lasaña? 

— Si

— ¿Y de dónde piensas sacar lasaña? — preguntó Pietro confundido

— Puedo hacerlo— se alzó de hombros poniéndose de pie dejando su cobija llena de migas— ¿Me ayudas? 

Pietro apagó la TV yendo con Talya a la cocina. No iba a dejar que su embarazada novia cocinara sola. 

Pietro vio a Talya sacar un recetario que parecía nadie usaba en el lugar, leyó atentamente las instrucciones dejando la pequeña tarjeta flotando frente a ella, entendió los brazos y chaqueo dejando el montón de comida, trastes y utensilios salir de sus lugares flotando alrededor. 

— ¿Estás segura de que cocinaras? ¿No prefieres que te pida algo de pizza? 

— Tranquilo, puedo hacerlo todo sin tocar nada— dijo confiada

Bucky y Natasha entraron al lugar ante el ruido encontrando como Talya guiaba todo lo que se estaba cocinando cómodamente sentada en un banco con Pietro a su lado.

— ¿Qué estás cocinando esta vez? — preguntó Wanda esquivando un sartén que le pasó cerca de la cabeza

— Lasaña— contestó Pietro por ella diciendo "antojos" solo moviendo la boca

Wanda entendió de inmediato viendo a la pelirroja cocinar solo moviendo las manos. Fue increíblemente rápido como Talya término de hacer la lasaña sin esfuerzo para luego terminar siendo metido al horno. Ahora una fila de trastes sucios desfilaba directo al fregadero para ser lavados en lo que la comida estaba lista. 

— Creo que jamás me voy a cansar de esto— susurró Natasha hacia James

El azabache le dio la razón sintiendo el corazón desbocado. Era la hora de decirle pero aún no sabía como acercarse. Talya y él casi no habían intercambiado palabras, algo muy normal en ella ya que era muy silenciosa, pero temía que lo odiara. 

Talya se sentó en el sofá una vez todos los trastes estuvieron limpios. Ahora solo debía esperar a que la comida estuviera lista. 

— Chicos, nos darían un momento con Talya, por favor— pidió Natasha hacia los gemelos

Talya se mostró confundida viendo a los gemelos dudosa. ¿Ya se habrían dado cuenta de su embarazo? Ese pensamiento hizo que se llevará una mano a su oculto estómago viendo a Bucky con curiosidad cuando se sentó frente a ella. 

— Talya— saludo sumamente tenso

— ¿Estoy en problemas? — preguntó cuando vio a Natasha sentarse al lado de James

— No— dijo Natasha causando que Talya se relajara un poco— en realidad… queremos hablarte de algo… Sabemos que fuiste adoptada por… Iván-

— Él no es mi padre— dijo de inmediato

— Lo sabemos— afirmó Bucky— En realidad, lo… nosotros lo conocimos— carraspeo

— Entonces si lo conocen saben el tipo de hombre que es— habló con una extraña sequedad Talya

Natasha jamás la había visto expresarse así. 

— S-si… sabemos el tipo de hombre que es… — Natasha suspiro no sabiendo cómo continuar— Escucha, Talya… ¿Sabes de tus padres verdaderos? 

A la menor esa pregunta la tomó desprevenida. Se alzó de hombros con indiferencia jugando con las mangas de su suéter. 

— Solo se que me desecharon como si fuera solo basura

— ¡Eso no es-...! — Natasha tomó a James del brazo para que no estallara— Eso es una mentira— dijo más calmado

Talya frunció el ceño confundida ante la declaración súbita de Barnes. 

— Talya… nosotros… nosotros sabemos quienes son tus padres— soltó lentamente Natasha esperando alguna reacción

El timbre de el horno sonó, por lo que Talya hizo como que no escuchó nada

— ¡Ya está mi comida! — se puso de pie yéndose ante la mirada atónita de Natasha

— Nos odia— fue lo que salió de los labios de Bucky siendo lo primero que pensó

Natasha se puso de pie yendo tras Talya un poco preocupada de James, que se había quedado casi destrozado ante la evasiva de su hija

— Sobre tus padres.. -

— No quiero hablar de mis padres, por favor— pidió Talya con una sonrisa fingida sacando la lasaña del horno

— ¿Por qué no? 

— No quiero

— Pero… pero son tus padres— Natasha comenzaba a sentir náuseas ante la negativa de Talya

— No… los padres no son los que te engendran, son los que te dan amor y-y… Y nadie me dio eso a mi

— Pero-

— ¡BASTA! — estalló Talya con voz rasposa viendo a Natasha con una profunda advertencia para luego respirar hondo

Natasha se había sobresaltado ante esa mirada tan… amenazante. Habían sido unos ojos completamente diferentes, casi desconocidos

— ¿Qué pasó? — preguntó Pietro alerta ante el grito de Talya

Talya se alzó de hombros sonriendo y ocultando lo alterada que la ponía pensar en sus padres

— No es nada

— ¿No quieres saber de tus padres? — preguntó Bucky creyendo que le daría algo en el pecho

Talya respiró profundo buscando mantener el temple. Cuando estallaba no era lindo. Ese lado tan oscuro de ella le aterraba y lo mejor era alejarse. 

— No me gusta pensar en eso, es todo— habló por lo bajo apoyando sus palmas en la barra de la cocina buscando respirar

— Es que de verdad, debes saber esto— insistió Natasha

— Basta

— Tus padres… -

— ¡CIERRA LA PUTA BOCA! — bramo Talya respirando enseguida atrayendo todo el aire que pudo a sus pulmones— ¿Alguien quiere comer? — sonrió 

Pietro se sentía alerta. Cuando Talya hacía eso solo era un cuenta atrás para que la bomba estallara y las cosas fueran un verdadero caos. 

— ¡Oh! ¡Eso huele bien! — entró Sam frotando sus manos sin notar la tensión en el ambiente

Talya le sonrió de forma dulce sintiendo las miradas sobre ella. Incluso le estaban comenzando a temblar las manos

— Talya… — buscó hablar Natasha tratando de recuperar la voz— eh… 

— ¿Quieres comer algo, Natasha? — ofreció Talya tratando de ignorar el que se veía aturdida

— Talya, creo que… tal vez deberías tomar algo de aire, nena— sugirió Wanda notando el temblor de sus manos

— ¿Todo está bien? — Buscó saber Steve notando que algo andaba mal mientras entraba a la cocina

— Claro, ¿alguien más quiere comer? — ofreció Talya tomando un plato

— Talya, de verdad debes escuchar-... 

Natasha se agachó en cuanto vio un plato ir directo a su rostro. Vio la cerámica hecha pedazos en el suelo y luego a Talya. 

— ¡Talya! — reprendió Steve

Pietro y Wanda negaron en dirección al capitán como advertencia en que no se metiera con la pelirroja. 

— Necesito un poco de aire— susurró Talya queriendo calmarse

Estaba por explotar

— ¿De verdad? ¿Tanto es tu miedo por saber de tus padres que prefieres solo huir? — pregunto Natasha está vez algo molesta

Talya freno en seco girando lentamente hacia Natasha con un ligero relampagueo de ira cruzando sus iris verde azulado

— Natasha, creo que mejor deberían dejar está conversación para otro momento— pidió Pietro

— No te metas— dijo de forma cortante Natasha

La tensión ya podía cortarse y respirarse. Para los Vengadores, el que Natasha viera a Talya de esa forma ya era malo, y temían por la menor, pero para los gemelos… ellos temían por la integridad de Natasha. 

»— Okay, creo que debemos calmarnos, empecemos de nuevo

Talya no dijo nada. Sus ojos se mantenían fijos en Natasha apretando ligeramente los puños. Sam tenía lasaña en la boca justo cuando noto como el agua dentro de su vaso se convirtió un remolino por sí solo y el vidrio de este comenzó a vibrar 

»—: Hace quince años… 

— Dije-que-basta… — susurró Talya apretando los puños

— ¡Tienes padres! 

— ¡No! 

— ¡Si los tienes y-...! 

— ¡No me interesa! 

— ¡Te tiene que interesar! ¡Soy tu madre! — estalló Natasha llevando una mano a sus labios cuando se dio cuenta de que lo había dicho sin tacto alguno

Pietro y Wanda sintieron pánico cuando vieron a Talya inclinar hacia un lado la cabeza con ese brillo indescriptible y amenazante mancillando sus ojos. 

— Okay, Talya, respira— dijo apurado Pietro tomando a Talya de la cintura— piensa en el bebé— susurró en su oído

Talya soltó una pequeña risa escéptica viendo a Natasha fijamente. 

— ¿Mi madre? — pregunto con burla

— S-si

Bucky de inmediato fue hasta Natasha colocándose a su lado. 

— Talya… — comenzó a decir

— Wow… mi madre— se rió Talya— ¿Sabes? Madre no es la que engendra, Natasha… ¡MADRE ES LA QUE TE VOY A PARTIR! ¡HIJA, JODIDA- DE PERRA! ¡VOY A JODERTE! — explotó Talya siendo frenada por Pietro y Steve cuando la vieron abalanzarse sobre la viuda

Natasha retrocedió cuando vio a Talya querer ir sobre ella y golpearla. 

»— ¡MALDITA PERRA! ¡PUTA! ¡VOY A MATARTE! 

— ¡Basta Talya! — pidió Pietro preocupado al verla resolverse

— ¡ERES UNA MALDITA! ¡¿POR QUÉ ME HICISTE ESTO?! ¡¿POR QUÉ?! — demandó saber Talya rabiosa

— ¡Yo no te hice nada! ¡Te llevaron lejos! ¡Pero ahora estoy aquí! — dijo Natasha sobre los gritos rabiosos que soltaba Talya buscando llegar a ella

Pietro solo alcanzó a ver como Talya lanzó a Steve contra el suelo sin esfuerzo y luego él se fue de espalda. Talya estaba furiosa y eso era malo

— ¡Talya no! — grito Bucky alerta poniéndose frente a Natasha cuando notó él peligro

Talya lo apartó en un movimiento de mano de en medio. Fue envuelto en un aura dorada que lo hizo rebotar contra el techo para luego caer dolorosamente contra algunos estantes de licor. 

— ¡James! — gritó Natasha

Natasha sintió la espalda doler cuando algo le cortó la respiración llevando sus manos a su cuello sintiendo algo apretar ahí. No había nada, solo sentía que no alcanzaba aire y no tocaba el suelo. Casi era hundida en la pared viendo los ojos de Talya ardiendo con furia y algo más

— ¡¿CÓMO PUDISTE HACERME ESTO?! — lloró Talya con el pecho agitado sin dejar de sostener a Natasha contra la pared 

— ¡Talya! ¡Basta! ¡Basta! — pidió Pietro al ver a Natasha con el rostro rojizo ante la falta de aire

Natasha gimió jadeando. No solo sentía que no podía respirar, también sentía mucho dolor quemarle el pecho, como si algo quisiera estallar. Sentía que si ese dolor no se iba prefería solo morir. Era demasiado doloroso que inevitablemente lloró. 

— ¡¿SIENTES ESO?! ¡ES LO QUE HE VIVIDO POR AÑOS! ¡¿TE DUELE?! ¡ESO FUE LO QUE ME HICISTE! — lloró Talya dolida— ¡¿QUE HABÍA TAN MALO EN MÍ?! 

— N-nada… nada… — susurró Natasha sin voz soltando otro gemido sin aliento

— ¡Talya! ¡La vas a matar! — Grito Pietro 

Talya la soltó causando que Natasha cayera contra el suelo jadeando y tosiendo. Temblaba de pies a cabeza y tenía ganas de vomitar. Aún tenía la sensación de que prefería morir a tener todo ese dolor atrapado en el pecho. 

Talya cayó de rodillas llorando cubriéndose el rostro. Soltó un grito de dolor y sollozo. Prefería no haberse topado nunca con su madre, con la persona que la había dejado a su suerte y le había dado la espalda. 

— Per-perdóname… por favor perdóname— sollozo Natasha aun tirada en el suelo

Talya se quitó las manos del rostro, otra vez con ese brillo colérico brillando en sus ojos. Otra vez parecía a punto de golpearla

Talya se puso de pie, apenas alzó la mano dispuesta a atacar a Natasha cuando Bucky se puso en medio

— ¡No! ¡¿Quieres lastimar a alguien?! ¡Golpéame a mi! ¡Lo entiendo! ¡Lo merezco! 

— Quítate de en medio— siseo Talya— esto no tiene nada que ver contigo

— Si lo tiene, por que yo y Natasha tuvimos una hija… Soy tu padre Talya, y soy el culpable de todo— confesó esperando el golpe— si alguien aquí tiene que pagar, s-soy yo

Los ojos de Talya se rasgaron ante las lágrimas. Jadeo llevando una mano a su pecho y gimió. 

— ¿Por qué? — lloró viendo a James buscando una respuesta

— Perdóname… perdón por no ser lo suficientemente fuerte… — suplico con la voz quebrada— y-yo… yo jamás quise que esto pasará… 

Talya retrocedió viendo a sus progenitores con dolor. Jamás creyó que el dolor del abandono doliera más de lo que hacía desde siempre, pero saber quienes eran sus padres lo volvió peor. 

James se arrodilló frente a Talya, algo que la tomó desprevenida. Se abrazó a sus piernas casi causando que Talya cayera y sollozo. 

»— Perdóname… entenderé si no lo haces, por que se que no lo merezco… pero… solo… — las palabras se le quedaron en la garganta llorando profundamente abrazando a Talya— n-no te merezco… no merezco que me dejes volver a tu vida… Solo quiero verte bien

Talya se había quedado totalmente quieta sintiendo como el azabache se sacudía completamente roto abrazado a ella. El dolor tiño sus ojos verdosos posando suavemente la mano sobre la cabeza del mayor de rodillas. 

Bucky dejó de llorar alzando sus ojos repletos de lágrimas hacia la menor. Talya parecía sentir pena y una profunda empatía por él, pero cuando vio a Natasha tratando de incorporarse, su mirada se tornó fría tensando los labios. 

— Me programaron cuando tenía doce— susurró para que solo Bucky pudiera escuchar— y-y… aunque sé que no es mi culpa lo que hice, la culpa siempre está ahí… y-y jamás se va a ir, pero de verdad, espero que sepas… que no eres una mala persona… solo… nos han usado malas personas… y nos han hecho cosas horribles a ambos— sonrió con dolor limpiando una lágrima que cayó de los ojos del mayor— Nunca fue nuestra culpa

Los ojos de James se rasgaron ante las suaves palabras apenas audibles que le dijo. Talya dio suaves masajes en su espalda sintiendo a Bucky abrazarse con más fuerza a su regazo. 

Natasha gimió incorporándose poco a poco. Tenía unas terribles ganas de solo hacerse bolita y echarse a llorar, seguramente por la sensación de profunda tristeza y desconsuelo que le había provocado Talya. Era como si le hubiera reflejado su envenenado dolor para hacerla sufrir una mínima parte de su largo y profundo suplicio. 

— Talya… 

— En cambio, Natasha… no puedo decir lo mismo de ti— murmuró con voz neutra y rasposa— Tú si me abandonaste… a ambos… ¿No es verdad? 

Natasha se puso de pie haciendo una ligera mueca de dolor. 

— ¿Q-que… ? 

Talya se separó de un aún muy lloroso Bucky caminando lentamente hacia Natasha como un león dispuesto a desgarrar a quien tenía enfrente. 

— Tu solo corriste— acusó

— N-no sé de qué hablas— declaró Natasha con voz rota

— Si conociste a Iván sabes exactamente la vida que tuve— dijo con la voz quebradiza— Sabes que desde que tenga memoria me escondía en cualquier lugar para que no me golpeara

— N-no tenía idea— retrocedió Natasha peleando con sus lágrimas

— Oh, claro que tenías idea de la vida a la que me condenaste— acusó con voz rota— Barnes tal vez también tuvo parte de la culpa en esto pero ambas sabemos lo que HYDRA le hacía. Sé perfectamente lo que sentía por que me hicieron lo mismo a mí— confesó en un gruñido sin dejar de avanzar amenazadoramente hacía Natasha

— Y-yo… N-no sabía… n-no quería que todo esto pasará

— Tú me hiciste esto. Eres igual de culpable que Iván

— ¡No es cierto! — se defendió Natasha— ¡Eras mi hija e Iván te llevó lejos de mí! 

— ¡PERO NO ME BUSCASTE! ¡JAMAS TE IMPORTE! ¡JAMÁS QUISISTE SABER SOBRE LO QUE HABÍA SIDO DE MI! — lloró Talya tomando una botella que había tirada

— Talya, ¿qué piensas hacer? — hablo con cuidado Pietro

— Y-yo… no hay día en el que no hubiera pensado en ti— susurró Natasha dolida ignorando la botella

— Hipócrita… eres solo una maldita cobarde

— Basta, Talya— pidió James poniéndose de pie— es tu madre

— ¡Yo no tengo madre! — rechazó viendo con un profundo resentimiento a Natasha— Tal vez Iván me hizo todo esto pero tú… ¡TU! ¡PUTA ZORRA! ¡ERES MIL VECES PEOR! — bramo Talya enojada— ¡Tu jamás volviste por mi! ¡Ni por Barnes! ¡JAMÁS LUCHASTE POR MI! ¡JAMÁS VOLVISTE POR MI! 

— E-eso no es verdad

— ¡ESA ES LA PUTA VERDAD! — grito con hastío Talya hacía su madre— Ahora vienes, después de quince años a querer ser una madre… ¡Oh si! ¡Miren a la Santa Romanoff! ¡Viene a acoger a la huérfana! — se burló— ¿En serio crees que es justo que después de todos estos años solo me deje abrazar por ti y llore como una puta niña pérdida por su madre? ¡¿SU MALDITA Y COBARDE MADRE?! 

La barbilla de Natasha tembló

»— Tú jamás volviste— susurró a una corta distancia del rostro de Natasha— No. ¿Hace cuantos años escapaste de la Habitación Roja? ¿Uhm? 

Natasha no contestó, solo sintió la mirada interrogante de James sobre ella 

»— Creo que bastantes, y en todos esos años… ¿No pudiste buscarme? ¿No pudiste dar conmigo de alguna forma? ¿O es que era demasiado para ti volver por la niña a la que decidiste olvidar? 

— C-cada día… no había noche que no lamentara haberte perdido— musito con la voz débil Natasha— cada día… todo el tiempo

— Uy si… ahora aquí viene la madre ejemplar, la pobrecita madre que lloró sola… Mientras tú llorabas "desconsolada", yo me escondía para que Iván no me viera, yo me encerraba en la alacena por horas o dormía ahí— confesó ganando una mirada aún más dolida de Natasha— mientras tu eras libre, ¡Yo estaba en la Habitación Roja aprendiendo a permanecer de puntillas aun cuando me sangraban los dedos! … Cuando tu estabas peleando al lado de los Vengadores yo estaba siendo violada por Iván— susurró ganando un gemido dolido de Natasha

— Talya… — trató de interponerse Pietro

— ¿En serio crees que es justo que solo por que llegas llorando a mi vida después de todos estos años te voy a dejar entrar a mi vida como si nada? ¿Despues de que me hicieras sentir como un puto desecho sin valor? 

— Tú jamás fuiste un desecho— dijo Natasha de inmediato

— Pero aun así me olvidaste… corriste y jamás te importó volver… 

— N-no yo… — las lágrimas se desbordaron de los ojos de Natasha

— ¿De verdad? ¿Ahora vas a llorar? ¿Quieres llorar maldita hipócrita? ¡TE HARÉ LLORAR DE VERDAD, PERRA! — estalló la menor lanzándole a Natasha la botella directo a la cabeza

Natasha apenas pudo hacerse a un lado cuando el objeto le pasó justo a un lado. Miró atónita el objeto y luego a Talya, respirando agitada y al mismo tiempo con incredulidad. 

»— ¡¿Te gusto?! ¡Eso me hizo Iván muchas veces! ¡Incluso me logró dar una vez! ¡Un vidrio de una botella me hizo esto! 

Talya dejó al descubierta su muñeca mostrando una cicatriz alargada de lo que había sido un intento de suicidio. Natasha sintió que estaba por vomitarse ahí

»— ¿Que te hace creer que te necesito ahora? 

— E-ere mi hija… y-yo… yo siempre te ame

— No… si de verdad me amaras hubieras vuelto, hubieras estado cuando te necesitaba. ¡SI DE VERDAD ME AMARAS HUBIERAS SIDO MI MADRE! — lloró rabiosa

— Sigo siendo tu madre

— No… estás muerta para mí ¡¿Oíste?! ¡ESTAS JODIDAMENTE MUERTA PARA MI MALDITA ZORRA! 

— ¡Talya! — regaño con la voz quebrada Bucky

— ¡Ella también te abandonó! ¡Ella solo pensó en sí misma y siguió con su vida! ¡Ella no me ama! ¡Ella tampoco te ama a ti! — acusó Talya cegada por el odio que le tenía a la mujer frente a ella— y no le importa una mierda nadie más

— Es tú madre— insistió Bucky

— No, yo no tengo una madre— negó en una risa burlona— Jamás tuve o tendré una madre

— Por favor… No lo estas diciendo de verdad… no puedes… -

— ¿"No puedo" que? — preguntó interrumpiendo las súplicas de Natasha— ¿no puedo sacarte de mi vida? Pero si tu lo hiciste— susurró con voz casi melodiosa cara a cara con Natasha

El pecho de Natasha se sacudió en lo que pareció un sollozo reprimido, mirando con una profunda suplica a su hija

— Okay, Talya, ya fue suficiente, vámonos— pidió Pietro temiendo que Talya dijera o hiciera algo peor, pero sobre todo, temía por el bebé— ya dejaste claro todo

— ¡No, no, no, no, no, no, no! ¡Aún tengo mucho que decirle a la maldita! 

— No, basta… tienes que respirar— pidió Pietro tratando de encontrar sus ojos— solo te estas haciendo daño a ti

— ¡Ella fue la que me hizo daño! — lloró siendo sacudida por un repentino espasmo

Pietro sabía que cada insulto, ofensa, grito y objeto lanzado era el reflejo del dolor interno de Talya. Podía parecer a punto de matar a alguien cuando por dentro estaba muriendo de dolor deseando llorar como una niña pequeña hecha bolita. Mandar a todos al carajo era su forma de esconder el arrollador dolor que la consumía desde dentro

»— ¡Ella f-fue… ! ¡E-ella… ! ¡Ella me hizo esto! — lloró reflejando dolor— ¡Ella me dejó c-cuando… ! ¡Solo era una bebé y ella me dejó! — sollozo 

— Lo sé, lo sé, pero gritarle no solucionará nada. Solo te lastimas

— ¡ELLA FUE LA QUE ME LASTIMÓ! — grito con odio— ¡Yo todos los días me preguntaba "¿por qué me abandonó mi mamá?" y luego Iván venía y me decía que mi madre solo me abandonó porque no valía absolutamente nada! — lloró— ¡Y está bien! ¡Tal vez tenga razón! ¡Si! ¡No valgo ni una mierda pero eras mi mamá! ¡E-eras… ! — Talya respiró hondo buscando volver a su fachada dura y llena de odio— Ya no importa… ya… no importa está mierda absurda de que no tengo mamá… — se rió limpiando sus lágrimas— Ya no es como cuando tenía cuatro años, me escondía en un lugar oscuro y le pedía a alguien afuera qué llamara a mi madre o a mi padre para qué me salvarán. No. Ni tampoco es cuándo soñaba despierta qué mi madre me salvaba de en medio de los experimentos, o qué era un especie de hada qué entraba todas las noches cuando estaba dormida para arroparme… No

Un sollozo de Natasha rompió el silencio tenso del lugar

»— Sé qué es patético… pero solo tenía cuatro años… o seis.. Ni siquiera sé cuándo dejé de tener esperanzas en qué tu o mi padre aparecieran de la nada para salvarme… — se alzó de hombros— pero supongo qué lo entendí. Entendí qué no te necesitaba. Entendí qué yo sola debía sobrevivir, llorar bajo, callar para no ser golpeada… ¡Pasé catorce malditos años en un infierno! ¡PASE POR CATORCE PUTOS AÑOS COMPLETAMENTE SOLA! ¡ASI QUE JODETE SI QUIERES ENTRAR A MI VIDA! — le gritó a una Natasha que solo podía verla borrosa entre sus lágrimas

— Si tan solo me dejarás-... Puedo tratar de ser una madre para ti

— Ese es el problema, Romanoff, quieres arreglar las cosas, pero ya es demasiado tarde, el daño está completamente hecho— declaró Talya con simpleza— No estuviste ahí cuando me enviaron a la Habitación Roja, o cuando me enviaron a HYDRA… tampoco cuando experimentaron conmigo, ni cuando metieron programación, ¡TAMPOCO ESTUVISTE AHÍ CUANDO IVÁN ME VIOLÓ! ¡ASÍ QUE NO VENGAS A QUERER ARREGLAR LAS COSAS CUANDO OBVIAMENTE NO PUEDES! — respiró errática debido a los sentimientos ardiendo en su pecho

— ¿Qué debo hacer para que me perdones? ¿Cómo puedo… ? — Natasha ni quería perder a Talya teniéndola frente a ella ahora

— Solo quiero que me dejes en paz… ¿Puedes dejar de arruinar mi vida? ¿Es demasiado pedir? — pidió sin sentir compasión por ella— ya me has lastimado demasiado, y me has hecho mucho daño, así que te lo pediré amablemente; alejate de mi, por piedad, por una vez en tu puta vida piensa en alguien más que no seas tú— suplico en un susurró que contenía todo su coraje

— Bien, ya quedó más que claro, ahora vámonos— pidió Pietro

— Y quiero que quede claro algo, Natasha— volvió a hablar ya cuando estaba por salir del lugar— Estoy segura de que jamás sería igual que tú. Yo jamás hubiera podido vivir con el hecho de que mi hija estuviera pérdida, y te prometo que cuando sea madre, me aseguraré de amar a ese hijo ¡SIN QUE TÚ ME HUBIERAS ENSEÑADO UNA MIERDA DE ELLO PORQUE TÚ JAMÁS SERÁS UNA MADRE Y NO TIENES EL JODIDO DERECHO A HACERTE LLAMAR UNA! 

— Talya, basta— susurró más alarmado Pietro

— Ya no me haces falta en lo más mínimo— siseo Talya viendo a Natasha con un profundo desprecio

Hubo un prolongado silencio en el que Natasha veía a Talya sin palabras, solo con un profundo dolor llenandole el pecho y la desesperante sensación de que no podía respirar

»— ¿Cómo… ? ¿Cómo fue posible que solo me olvidaras? ¿Como… ? — preguntó con todo su dolor reluciendo en sus dolidos ojos verdosos

Se soltó del agarre de Pietro y se fue sin rumbo dejando las lágrimas rodar libres por sus mejillas

¿Cómo había sido posible que su madre hubiera seguido con su vida como si nunca hubiera existido? 

☽ ═════ ✧.༺ 𝓓𝓪𝓻𝓴𝓼𝓲𝓭𝓮  ༻.✧ ═════ ☾

Una Talya de cuatro años llegó corriendo hacia su armario, abrió presurosa la puerta y entró a pensar de que su pequeño cuerpo estaba apretado entre la ropa. Estrujo su muñeca recién cocida a su pecho y guardó silencio esperando que milagrosamente el armario la envolviera entre la profundidad de las prendas y jamás la encontrarán de nuevo. 

— Shhh… aquí no nos va a encontrar— susurro a su muñeca viendo en la rendija del armario

— ¡TALYA! — gritó Iván 

Talya se alejó de la pequeña rendija buscando hundirse aún más entre la ropa llevando sus manitas a su boca buscando desaparecer. 

»— ¡¿DÓNDE ESTÁS, PEQUEÑA PERRA?! 

Sin poder evitarlo Talya tembló, con mucho miedo de moverse aunque sea un poco. Sabía que si Iván la encontraba le iría realmente mal. 

»— Talya… — gruño Iván sin dejar de buscar— Sal ahora y te prometo que no te dolerá demasiado

La pequeña pelirroja apretó sus manitas contra sus oídos y cerró los ojos. Mejor iba a pensar otra cosa, mejor iba a imaginar otra cosa

Sería… sería un… ¡Pájaro! ¡Si! Un pájaro que volaba lejos del troll malvado que la tenía atrapada en un oscuro castillo custodiado de dragones. ¡También podría ser un hada! ¿Por qué no? Un hada mágica que había sido capturada por un horrible monstruo malvado

Lo que sea que pudiera distraer su mente de los gritos e insultos que le hacían querer gritar del miedo. 

»— ¡TALYA! — volvió a gritar Iván golpeando la puerta del armario— ¡SAL DE AHÍ, PUTA! ¡VOY A MATARTE! ¡TE HARÉ LLORAR DE VERDAD ASQUEROSA MIERDA! ¡SAL DE AHÍ! 

Talya lloró aterrada buscando hacerse bolita para que no le hiciera daño. Sollozo llena de pánico cerrando los ojos y tapando sus oídos con las lágrimas resbalando por sus mejillas

— No me puede hacer daño porque es mi lugar oscuro especial… No me puede hacer daño porque es mi lugar oscuro especial— decía sin voz viendo la puerta sacudirse ante la insistencia de los golpes— m-mi lugar oscuro especial.. 

—... No me puede hacer daño porque es mi lugar oscuro especial… 

— Talya— tocó la puerta con suavidad Pietro

La ojiverde no pudo evitar hacerse bolita en su lugar cuando Pietro abrió la puerta del armario de limpieza y cerró los ojos con mucha fuerza. 

»— Hey

— ¡N-no! ¡No me puede hacer daño porque es mi lugar oscuro especial! — lloró

— ¡Shhh! ¡Soy yo! ¡Mírame! ¡Soy yo! — tranquilizó Pietro limpiando sus mejillas causando que Talya por fin abriera los ojos— tranquila… 

Talya inevitablemente se lanzó a los brazos de Pietro escondiendo el rostro en su pecho aferrándose a él con fuerza

»— Shhh… ve a tu lugar feliz

— Tu eres mi lugar feliz… t-tu siempre… has sido… 

— Shhh… Está bien. Estás bien… tranquila… Alterarte no le hace bien al bebé— susurro limpiando las lágrimas de Talya quitándole los audífonos con delicadeza

— E-ella… ella me abandonó… m-me dejó, Pietro… se olvidó de mí— lloró sin poder evitarlo— ¿Soy tan desechable? 

— Para nada. No comiences a sentir culpa, por que no la tienes… 

Talya sollozo a lo que Pietro la tomó de la barbilla buscando sus rotos y dolidos ojos

»— Mírame… No-es-tu-culpa

Un pequeño gemido salió de la garganta de Talya volviéndose a aferrar a Pietro. El único lugar que se sentía saldría de la oscuridad era su lugar feliz, todo lo contrario al lugar oscuro especial, que solo era una protección temporal. 

»— Ven… el bebé no puede estar todo el día en tu lugar oscuro especial

Talya salió cabizbaja tomada de la mano de Pietro. El platinado solo pudo ver como ella se tragó las lágrimas, se limpió unas cuantas y salió de aquel armario ocultando todo su dolor apegada tímidamente a él como si temiera que alguien la fuera a golpear por su reciente explosión. 

Pietro miro preocupado como se recostó en la cama aún con los ojos lagrimosos y los labios temblando ligeramente. 

»— ¿Quieres comer algo? 

Talya negó silenciosamente jugando con los dedos de Pietro. Llevó una mano a su pequeño vientre y sonrió con dolor

— Quiero ser una buena mamá… — susurró con debilidad— ahora más que nunca… y-yo… yo de verdad quiero a este bebé

Pietro sonrió entrelazando sus manos sobre su pequeño vientre que no se notaba bajo la ropa

— Serás la mejor mamá

— Pero tengo mucho miedo… De verdad, tengo miedo a no ser lo suficiente para este bebé… así como nunca fui suficiente para ella… — expresó con temor— temo no poder con esto

— Yo sé que podrás con esto— asintió Pietro con seguridad— estaré aquí para tí, cuidaremos a este bebé, le enseñaré a andar en bici, jugaré con él… Yo seré el padre Cool y tu la mamá mandona

Talya soltó una pequeña risa ante la broma de Pietro

»— De verdad, estoy seguro de que podremos con esto.

— Y yo se que podré con esto porque tú estás conmigo— musitó Talya sintiéndose más animada

Ambos unieron sus labios en un suave beso sonriendose mutuamente. Pietro bajo su rostro hasta el estómago de Talya dejando un pequeño beso ahí, a lo que Talya dejó una caricia en el cabello platinado de Pietro. 

— Hola ahí dentro… aquí habla papá— saludó el mayor causando una sonrisa dulce en el rostro de la pelirroja— mamá y papá te esperan con emoción

Talya rió ante las ligeras cosquillas que le provocaron los besos de Pietro. 

»— Te prometo que haré feliz a tu madre durante nuestro matrimonio y no me despegare de ti cuando nazcas

— ¿Ma-matrimonio? — preguntó Talya pensando que había oído mal

— Mmhhm.. 

— ¿Me… ? ¿Me acabas de pedir matrimonio o… ? Tal vez no entendí bien— trató de justificar sentándose 

Una sonrisa sincera se formó en el rostro de Pietro tomando las manos de Talya

— ¿Aceptas casarte conmigo apenas seas legal? 

Talya abrió y cerró la boca tratando de articular palabra luciendo como un pez fuera del agua. Había sido tan repentino y el corazón le había dado un vuelco.

»— Sé que ahora no te puedo dar mucho pero… trataré de ser lo suficientemente para ti y para el bebé. Los protegeré de todo y… y daría mi vida entera por ustedes— juro dejando un beso en el dorso de su mano— tú también-… Ustedes… son mi lugar feliz… 

Talya sintió sus ojos arder ante las lágrimas conmovidas. Afirmó sin poder articular ninguna palabra aún y se lanzó sobre Pietro uniendo sus besos en un beso un poco desordenado ante la premura y la emoción

— Si, si quiero… por dios, es mejor de lo que hubiera podido imaginar… 

Una sonrisa entre burlona y pícara se extendió por los labios del platinado

— ¿Así que te lo imaginaste? 

Las mejillas de Talya se colorearon levemente sonriendo nerviosa

— Eh… oh, por favor, no empieces— se rió golpeando a Pietro con una almohada

Pietro beso sus mejillas para luego darle un rápido beso en los labios. 

— Das miedo enojada— susurró contra su cabello

— Cuidadito, Maximoff… no querrás verme enojada y embarazada— advirtió con diversión

— Lo tendré muy presente, espero sobrevivir a cuando nos casemos— expresó divertido— te debo el anillo— susurró viendo la mano de la menor

Talya peinó los cabellos plateados de su pareja con el corazón aún muy acelerado y la sensación de su estómago muy persistente. 

— No tienes porque darme un anillo, con tenerte a ti está bien

Pietro no se sintió convenido viendo la mano de Talya fijamente

— Tal vez tu misma puedas elaborar los anillos

— ¿Anillos? — pregunto Talya con curiosidad

— Si, como la señal de una promesa

Talya lo pensó un poco sonriendo. 

— Si, tal vez pueda hacerlo— asintió teniendo una ligera idea en mente

Pietro tomó su mano, a lo que la de orbes verdosos miró fijamente el lugar donde debían ir los anillos. Alzó su dedo índice de su otro mano e invocó un ligero destello dorado al mismo tiempo que un aro de luz rodeaba los dedos anulares de cada quien. Fue como una ligera corriente eléctrica haciendo cosquillas en el dedo de cada uno, para luego dejar de brillar revelando los aros de lo que parecía oro. Pietro dejó un beso en la frente de su ahora prometida y sonrió

— Y vivieron felices por siempre— sonrió Pietro entrelazando sus manos

Talya giró hacia él con una sonrisa enamorada y las mejillas levemente sonrosadas 

— Me gustaría imaginar que de verdad hay un "felices por siempre"... Pero no tiene que ser por siempre si… al menos fue real por un tiempo, ¿No? 

Pietro unió sus labios, a lo que Talya apretó con fuerzas los párpados siguiendo el beso

— Acepto

Talya sonrió ante la palabra de Pietro

— Acepto— afirmó para volverlo a besar

Unos toques reventaron la burbuja que había distraído a Talya de los recientes hechos. Gimió aún dentro del beso y suspiro ante la cruda vuelta a la realidad. 

Talya alzó la mano abriendo la puerta dejando ver a un Bucky que parecía tener muchas ganas de llorar aún. Apenas vio a Pietro, sus facciones temblorosas se mostraron un poco duras. No era que la idea de Pietro a solas con su pequeña hija lo tuviera muy contento. 

— Talya… — ignoró al chico enfocando sus ojos en la pelirroja— ¿podemos hablar? 

Pietro miró a su novia buscando saber si estaba bien que la dejara. Talya le sonrió tranquilizadoramente afirmando. 

— Llamame si me necesitas

Talya sonrió con un poco de suficiencia

— Lo sabrás… — susurro causando que Pietro se mostrará confundido— nuestros anillos le harán saber al otro cuando nos necesitamos

Pietro miró el aro dorado alrededor de su dedo y sonrió al ver un ligero destello en él. 

»— Estaré bien

Pietro dejó un rápido beso en la nariz de Talya saliendo con la mirada de Bucky encima. Ese chico debía ser muy descarado para besar a su pequeña hija frente a él, aún si era un beso en la mejilla para él era bastante descarado. 

Talya respiro hondo buscando no pensar en lo que había pasado hacía apenas momentos atrás con Natasha. Cuándo se enojaba era mejor apartarse temiendo hacer lo que le había hecho… pero no se arrepentía en lo más mínimo en haberle lanzado una botella. Iván le había hecho eso cientos de veces y quería mostrarle a la mujer lo que había sufrido por años.

— ¿No hace calor para estar usando suéter? — Bucky no encontró otra forma de empezar

Talya se tensó apretando los labios en una línea tensa 

— Los suéteres me dan seguridad— mintió algo ansiosa de que notará algo

Bucky alzó las cejas meciéndose de forma incómoda en su lugar

— ¿"Madre es la que te voy a partir"? — no pudo evitar preguntar

Talya torció los labios

— Estaba molesta… la verdad es que… cuando me enojo digo cosas sin pensar… — musito con pausas— aunque debo admitir que la perra se lo merecía

— Esa perra-... Es decir, a la que le acabas de decir "perra" es tú madre— corrigió en decir de inmediato al notar que le acababa de decir perra a Natasha

— No tengo madre

— Se nota… — dijo por la bajo

Talya lo vio entre divertida e irritada

— ¿Qué dijiste? 

— Nada— le restó importancia soltando un largo suspiro

— Escucha, si vas a hablar de la maldita que me abandonó, mejor sal de aquí antes de que las cosas se vuelvan a poner feas— susurro con un ligero destello de advertencia en sus ojos verde azulado

— En realidad, quiero que hablemos de… de nosotros… — aclaró alzando las manos buscando hacerla calmarse— Entenderé si me odias

Talya se burló un poco incrédula

— Creo que quedó más que claro que no te odio

Bucky frunció el ceño con semblante confundido

— Me lanzaste contra el techo con solo mover la mano— le recordó con cierta obviedad

Talya abrió y cerró la boca para luego arrugar el gesto con algo de gracia

— Solo quité un obstáculo del camino… 

Bucky la vio con aire ofendido y aún sin saber cómo tomar el hecho de que a él no le hubiera insultado. Natasha se había quedado en la habitación donde nadie podía verla destrozada. 

»— La verdad es, que cuando me enojo hay una parte de mi que… Que nadie debe ver realmente. Hay cosas que digo que son muy hirientes, y… me pongo violenta. No es que lo justifique pero… por eso solo me alejo cuando estoy enojada— explicó un poco apenada— pero como dije: no me arrepiento de haberle dicho lo que le dije

— Pero… -

— No me arrepiento en los más mínimo— recalcó con semblante neutro

Bucky suspiro, aclaró su garganta y mejor decidió dejar eso de lado por el momento. 

— Entonces… ¿No me odias? — preguntó con un atisbo de esperanza

— No, si lo hiciera te hubiera lanzado por la ventana apenas asomaras la nariz por aquí— explicó como si nada alzándose de hombros

Bucky se rió creyendo que era una broma, pero cuando vio a Talya lucir sería frenó de reír. 

»— ¿Que es gracioso? 

— ¿No era una broma? — alzó las cejas un poco espantado

Talya solo le dio una sonrisa de labios apretados. 

— No te odio, Barnes

— Bucky— corrigió

— Te diré James… — aceptó— no te odio pero… tampoco te veo como un padre

El azabache sintió una punzada de dolor en el pecho, una que trató de no mostrar que le dolía. 

»— Pero… eso no significa que no te quiera en mi vida

— ¿Qué quieres decir? 

— Que tal vez podamos tratar de conocernos y… ¿quién sabe? ¿Tratar de ser familia? Nunca he sentido lo que es una familia realmente, solo tengo a Pietro y a Wanda— explicó con cierta tristeza— y… bueno, HYDRA y la Habitación Roja nos arrebataron la oportunidad de tenerla

Bucky sintió el corazón saltarle de euforia y emoción, sin embargo, esa emoción se fue tan rápido como vino recordando a Natasha

— ¿Y qué hay de tu madre? 

Talya rodó los ojos

— Ella solo nos dejó, ¿cómo puedes seguirla amando después de todo? — inquirió molesta

— Es tu madre

— Es una hija de puta

— No hables así de ella. Es tu madre te guste o no— insistió Bucky tratando de no impacientarse

— No

— Talya, de verdad-

— No quiero hablar de ella

— Y yo no quiero que hables mal de ella— habló con algo de brusquedad

Talya respiró hondo sonriendo con una chispa de ira en sus ojos. 

— No estoy hablando mal de ella… solo le digo lo que en realidad es

— Talya— suspiro Bucky sin saber que hacer para hacerla entrar en razón— ella también sufrió

— Tal vez… pero no cómo nosotros— susurro con las lágrimas haciéndose presentes en sus ojos poniéndose de pie 

— ¡Tú no sabes nada de tu madre! ¡A ella le dolió! — no pudo evitar defender 

— ¡¿Cómo podría saberlo?! ¡Ella jamás estuvo aquí! ¡Jamás estuvo para ninguno de nosotros! — alzó la voz igualmente

— ¡Yo tampoco estuve y aquí me estás dando otra oportunidad! — señaló con frustración

— ¡No estuviste porque no pudiste! ¡Ella era libre y JAMÁS luchó por nosotros! 

— ¡No sabes-..! 

— ¡ELLA NO ESTABA AQUÍ!

— ¡Ella es una maravillosa, fuerte, perseverante y grandiosa mujer! 

— ¡Ella nos dejó atrás! ¡Nos olvidó! 

— ¡Ella nos ama! 

— ¡¿Eso es amor?! — pregunto Talya con incredulidad

— ¡Si! ¡Ella nos amó siempre! 

— ¡Bien! ¡Si es amor, ¿por qué jamás volvió?! 

— No sabes lo que dices… Solo estas viendo lo que quieres ver— expresó frustrado

— ¡Si ella "nos amaba tanto", ¿por qué nunca nos buscó?! ¡¿Por qué jamás estuvo con ninguno?! ¡¿Por qué?! — dejando saber con molestia

— ¡E-ella quiso… ! ¡E-ella siempre deseó… ! 

— ¡NO ESTUVO AQUÍ! ¡ELLA JAMÁS NOS BUSCÓ PUTA MADRE! ¡ELLA SOLO SE FUE! — gritó dolida y enojada— ¡ELLA SIGUIÓ CON SU JODIDA VIDA OLVIDÁNDONOS! … se fue

Inevitablemente los ojos azules de James se llenaron de lágrimas. 

»— ¡Solo era una bebé y ya no tenía a nadie! ¡Tenía solo cuatro años cuando ya debía aprender a sobrevivir! ¡A esconderme para no ser golpeada! ¡Tenía solo cuatro años cuando fui a la maldita Habitación Roja! ¡¿Y sabes lo peor?! ¡Prefería la Habitación Roja a estar en el mismo lugar que Iván! 

— T-Talya

— Dormía en el armario cuando temía ver a Iván ebrio… — susurró con la voz quebrada— Yo jamás tuve a nadie… desde que tenía memoria me veía sola y me cuidaba sola… y ella-no-estaba-ahí… — gruñó— Preferí sangrar de los pies a que Iván me golpeara… ¡Prefería que HYDRA experimentará con mi sangre a que Iván me encontrará escondida!

Bucky trago grueso limpiándose una lágrima con brusquedad

»— ¡Tenía once años cuando fui enviada a HYDRA! ¡Tenía solo doce cuando fui programada a base de descargas y dolor… ! — tomó una bocanada de aire riendo resaltando sus lágrimas de rabia— ¡Yo jugaba a escondidas con mis muñecas después de una misión! ¡Yo me quité las lágrimas sola! ¡Yo busqué sola mi libertad! ¡Nadie me rescató! ¡No Natasha! ¡No los Vengadores! ¡YO! … Si hubiera sabido desde el principio que quienes me habían acogido eran algo de mi madre, créeme, me hubiera ido sin pensarlo— susurró lo último— y tú, tú estabas perdido en ti mismo

— Si yo hubiera sabido todo eso… — susurró temblando de la impotencia. Creyó que sus piernas cederían en cualquier momento— Natasha te ama

— No… ella solo decidió seguir con su vida— musito con una lágrima rodando por su mejilla— Ella no me amaba… 

Dio un paso hacia Barnes clavando sus dolidos y destrozados ojos en los lagrimeantes del mayor

»— Ella no te ama… — dijo en apenas un susurro cargado de resentimiento— no le importa una mierda alguien que no sea ella misma… Para mi esta jodidamente muerta

La barbilla de Bucky templo tratando inútilmente de contener sus lágrimas

»— Hagamos una cosa, James— habló con una inquietante calma dándole una sonrisa dulce que de cierta forma le dio un escalofrío al azabache—: yo no te culparé de los últimos quince años, y tu no insistirás con lo de Natasha… ¡Todos felices! ¿No crees? 

— ¿Y qué hay de tu-...? 

— ¿De quién, perdona? — preguntó haciéndose la confundida con los ojos teniendo ese brillo peligroso y casi oscuro— menciona su nombre y te vas por la puerta, y no caminando— advirtió— o callas… y podemos iniciar de nuevo

— No puedes huir por siempre de lo que eres… ni de tu familia

Talya inclinó levemente el rostro

— ¿Eso crees? — inquirió con un tono peligrosamente sugerente

— Solo quiero… quiero tu bien, Talya… aun si no me perdonas— confesó con dolor

Talya esta vez sonrió con una profunda empatía yendo en dirección a su padre. Sus ojos se fijaron a los del otro viendo exactamente lo mismo; fantasmas y monstruos del pasado

— Alguien me dijo… — carraspeo ignorando la imagen de Natasha en su mente—: No eres… una mala persona… Eres una buena persona a la que le han pasado cosas malas. Eso no es culpa de ninguno en realidad

Bucky sollozo sin poder evitarlo

— ¿Pu-puedo… ? ¿Podría darte un abrazo? — preguntó con mucho temor

Talya lo meditó un poco; una eternidad para el azabache, pero al final accedió

— No te odio— susurro cuidando mucho la distancia entre ellos para que no notará el pequeño bulto bajo su ropa

Talya sintió las lágrimas cálidas de Bucky sobre su hombro, entendiendo perfectamente la sensación de culpa. Sabía que no podría evitar a Natasha por siempre, sin embargo, no se sentía capaz de perdonarle

Y tal vez jamás podría hacerlo. 

☽ ═════ ✧.༺ 𝓓𝓪𝓻𝓴𝓼𝓲𝓭𝓮  ༻.✧ ═════ ☾

¡No le puse gifs a este capítulo porque mi Internet esta MUY lento! Apenas y pude actualizar

¡RECORDEMOS QUE TALYA TIENE ATAQUES DE IRA!
Trato de controlarlo pero al final explotó.. Bucky otra vez termino volando JAJAJAJA

Este capítulo y el que sigue son los más dramáticos

Estamos a casi la mitad de este "What If...? " aunque tengo algunas escenas eliminadas que tal vez quieran leer 😉

Nos leemos... Si es que mi Internet se restaura