Hyuckie
Eres un idiota Sungchan.

Hyuckie
No vuelvas a hablarme.

Ya no puedes responder a esta conversación.

Sungchan se preguntaba, ¿Qué había hecho mal el?

Shotaro fue el que se sobrepasó con sus acciones, pero Jung no tenía la culpa de nada.

Ahora quería arreglar las cosas con Donghyuck pero el mayor lo había bloqueado.

¿Cómo ocurrió aquello? Pues...

Hace unas horas

Sungchan estaba ansioso esperando a Haechan en la puerta del parque.

Quería asegurarse de que todo saliera bien, al final, era como una cita y había preparado muchas actividades para hacer.

No contó con que su mejor amigo pasaba por el lugar y lo vió.

—Hola, Sungchan, ¿qué haces aquí?–

—Oh, hola, estoy esperando a Donghyuck–

—Al moreno que te gusta–

—Si–

—Hmm, que feo Sungchan– puso cara triste y Sungchan lo miró extraño.

—¿Qué pasa?–

—Sungchan, tú me gustas desde hace tiempo–

Sungchan lo miró extraño, casi con asco porque jamás se imaginó algo como eso de parte de su mejor amigo.

—Oye, escucha, si sentías eso por mi yo realmente lo siento pero–

No pudo terminar porque Shotaro lo miró enojado y tomó sus hombros con fuerza. Sungchan se asustó y intentó quitar sus manos pero Shotaro fue más rápido y se le acercó tanto que parecía que era un beso desde otro ángulo.

—Puedes por favor–

—¡Sungchan!–

Donghyuck estaba del otro lado de la calle y había visto eso. Rápidamente Shotaro lo soltó, le sonrió tan divertidamente y se fue corriendo, dejándolo tan confundido.

—Sungchan, tú...– Donghyuck tenía los ojos llorosos y parecía temblar.

Sungchan intentó hablar, pero tenía un nudo en la garganta, un malentendido que había hecho que el perdiera al amor de su vida.

Haechan lo miró tan triste que se sintió la peor persona del mundo, pero realmente no había hecho nada malo.

Lee corrió hacia otro lado y Sungchan intentó seguirlo pero el mayor corrió más rápido y lo perdió de vista.

Jung estaba tan triste, no entendía el comportamiento tan raro que tuvo su amigo y tampoco quiso que Donghyuck malentendiera las cosas.

Necesitaba hablar con él rápido, entonces corrió a su casa y lo único que pudo encontrar fueros esos últimos mensajes de Lee.

Su vida se había arruinado por completo.