Skylar

Luego de hablar con Marcel y de que me diera su regalo, Hayley, Ash y yo volvimos al pantano mucho más tranquilas y con menos dudas, pero nuestra paz no nos duró mucho porque mientras más nos acercamos a los lobos vemos a Oliver armar algo parecido a una revuelta, el está rodeado de gente que luce muy molesta y que parece tener toda la intención de causar un completo caos, en sus ojos distingo una descontrolada ira, pero también el profundo deseo de venganza y eso me preocupa demasiado.

—Te quedaste, gracias—Le digo a Elijah con una sonrisa, quién está parado observando lo mismo que nosotras con neutralidad—¿Qué sucede? ¿Qué está haciendo?

—Está haciendo su jugada por el poder después de la tragedia y no está solo, después de que se fueron hubo otro ataque, muchos no lograron salvarse, su amiga Eve fué una de ellos, lo siento mucho.

—¿Qué?—Preguntamos al unísono con incredulidad

—Su amigo Jackson necesitará su ayuda, querrán venganza, sangre por sangre y, desafortunadente en tiempos tormentosos, la gente no buscará lo mejor, sinó al más ruidoso—Murmura observandonos con pena antes de dirigir su mirada a la niña a mi lado—¿Eres Ash, no es así? ¿Por qué no vienes conmigo para que Skylar y Hayley puedan ir a despedirse de su amiga?—Pregunta extendiéndole su mano, ella duda unos segundos mientras lo observa con desconfianza y por un momento pienso que se va a negar, pero parece ver algo en su rostro que la tranquiliza, debido a que accede a ir con él

—Tengo mucho frío y estoy cansada, ¿Me llevas a casa?—Suplica arrastrándolo hacia su hogar

Luego de verificar que ella se siente cómoda con él, me dirijo a la cabaña habitada por Eve, allí la encuentro tendida en su cama, a su lado se encuentra un triste Jackson sujetando la mano de aquella mujer rubia que me trató tan bien. Sin darme cuenta las lágrimas comienzan a salir de mis ojos a montones y me arrodillo junto a ella, sosteniendo la mano de mi difunta amiga, recordando que esta mañana estuve con ella hablando en este mismo lugar, riendo y aprendiendo cómo poder ser una buena madre.

No podría decir con certeza cuanto tiempo es el que pasé llorando, pero sé que fué demasiado porque mi cabeza comenzó a doler cómo si la estuvieran martillando, mis ojos arden y siento nauseas, pero a la vez un vacío en mi pecho, ahora mismo todo lo que siento es dolor y ganas de seguir a Oliver y matar a todas las personas que sean necesarias, quiero sangre cómo dijo Elijah y de un modo u otro lo voy a conseguir.

—Skylar...—Escucho la voz del Original tras de mi y volteo a verlo, limpio mis lágrimas al ver su rostro triste y me levanto rápidamente del suelo—Tenemos que hablar

—¿Qué pasa?—Mi pregunta se queda en el aire cuándo él comienza a guiarme hacia algún lugar con prisa, cómo si algo terrible acabara de suceder, retengo mis ganas de frenarlo y exigirle respuestas porque considero que en este momento lo más importante es dejarlo llevarme—¿Y Ash?

—Solo ven conmigo—Suplica antes de tomar mi brazo y guiarme con ayuda de su velocidad vampírica a una sala completamente blanca con sillas del mismo color que está vacía, no tengo que analizar mucho el lugar para darme cuenta de que es la sala de espera de un hospital

—¿Qué hacemos aquí?—Pregunto confundida, él suspira y cierra los ojos un segundo con pesar, cómo convenciéndose a si mismo de hablar

—Desearía no tener que decirte esto porque sé lo mucho que te importa esa niña, pero sé que si no te lo digo jamás me perdonarás por no dejarte despedirte—Suelta con dolor y no puedo evitar sentir temor—Cuándo me llevé a Ash me dijo que tenía frío, le di mi chaqueta y la llevé a su casa, a penas llegamos me dijo que estaba exhausta y que le dolía mucho la cabeza, comenzó a vomitar y vomitar hasta que perdió el conocimiento, que fué cuando la traje aquí

—¿Ella está bién?—Pregunto desesperada y él se queda completamente callado—Elijah, por favor dime que ella está bién

—Los médicos dijeron que tiene un Hematoma Subdural agudo producto de un traumatismo en el cráneo, este sucede cuándo...

—Cuándo los vasos sanguíneos se rompen entre el cerebro y la parte externa de las tres capas de la membrana que recubre el cerebro, la sangre que se filtra forma un hematoma que comprime el tejido cerebral, este puede causar una pérdida gradual del conocimiento y posiblemente la muerte, sé sobre eso porque lo vi en la escuela—Lo interrumpo y él me observa asombrado de que sea poseedora de ese conocimiento médico—Puedo curarla si le doy mi sangre

—Eso fué lo primero que intenté y no funcionó, los médicos a los que hipnoticé dijeron que curó los vasos sanguíneos, pero la sangre filtrada sigue ahí adentro comprimiendo el tejido cerebral, dijeron que su caso es bastante complicado porque tuvo muchas lesiones en los últimos días, se sospecha que sufre maltrato infantil porque su hermana Kimberly la trae todas las noches al hospital llena de daños internos, aunque jamás pudieron comprobar si era el padre quién la lastimaba.

—Ese maldito—Digo furiosa apretando los puños a mis costados con ganas de golpear a ese asqueroso ser que se atrevió a dañar a su hija—¿Se puede hacer una craneotomía para extraer la sangre?

—Ese es el problema, lograron localizar el lugar de la hemorragia y mi sangre curó el daño cerebral, pero su sangre no está líquida, es un gran coágulo sólido que no pueden succionar porque parece endurecerse más cada minuto, ella sufre de Trombofobia, lo que significa que su sangre coagula demasiado rápido y que no hay forma de resolverlo.

—Tiene que haber algo que podamos hacer, esto no puede estar pasando—Niego pasando las manos por mi rostro en un desesperado intento de no largarme a llorar—¿Cuánto tiempo le queda?

—Es dificil estar seguro, pueden ser horas o minutos, lo único que sé es que los médicos no creen que sobreviva la noche—Responde con mirada gacha, siento un nudo en mi garganta y unas inmensas ganas de llorar, ¿Cómo no me dí cuenta de que eso estaba pasándole a Ash? Pude haberla salvado, ella estaba tan bién, pero no debí confiarme, debí acudir a un médico para que la ayudara antes

—¿Podrías llevarme con ella?—Le pregunto al vampiro y él asiente levemente, tomo una respiración profunda y avanzo junto a él por el corredor hasta llegar a la habitación 145, al entrar la encontramos tendida en el suelo intentando levantarse, por lo que corro a su lado y la siento en la camilla—¿Estás bién? ¿Cómo llegaste al suelo?

—No puedo mover la pierna ni el brazo—Dice asustada—Quiero ir a casa, no me gustan los hospitales

—Los médicos deben cuidarte—Le dice el moreno y ella niega

—¡No quiero morir aquí!—Chilla indignada y la miramos sorprendidos por lo que dijo—Te escuché hablando con los doctores, si voy a morir no quiero que sea ni aquí, quiero que sea en mi cama, no en este... en... esta... en... blanco...

—¿Hospital?—Le pregunto porque parecía estar teniendo dificultad para encontrar la palabra y ella se limita a asentir—Bién, nos vamos

—Skylar, ella tiene que quedarse para que puedan monitorearla y ver cómo sigue.

—Ya la escuchaste, no le gustan los hospitales y a mi tampoco, así que nos vamos a ir quieras o no—Determino y él suspira frustrado antes de acercarse se Ash y levantarla de la camilla, los dos utilizamos nuestra velocidad sobrehumana para llevarla a su casa en el pantano y al llegar nos dirigimos a una de las habitaciones de la casa que está vacía y la dejamos sobre la cama

—¿Podrías traer una vela y encenderla?—Le pregunta a mi amigo y él asiente

—Ya regreso—Informa el vampiro antes de abandonar la habitación, a lo lejos lo escucho hablando por teléfono con Klaus y explicarle brevemente la situación, algunos minutos más tarde trae lo pedido y vuelve a irse para dejarnos a solas

—Lamento mucho que esto esté pasándote a tí, es mi culpa que estés así, debí darme cuenta—Las lágrimas comienzan a caer nuevamente de mis ojos mientras enciendo la vela y ella con la única mano que puede mover que es la izquierda se estira un poco y las limpia

—No es tu culpa, es del hombre que explotó en el pantano—Dice obvia—No te preocupes, Sky, voy a estar con Kim

—¿Lo sabías?—Pregunto incrédula

—Ustedes los adultos creen que porque tengo cinco no me doy cuenta de las cosas, pero yo se mucho—Asegura con una pequeña sonrisa—El día que nací hubo un incendio al igual que hoy, en uno murió mi madre y en el otro mi padre y hermana, mi nombre significa cenizas y eso es lo que queda después de un fuego cómo el de hoy

—Quería cuidarte y poder darte una buena vida, odio que esto esté pasando—Me quejo entre sollozos

—Serás la mejor madre del universo, eres una buena persona, Sky, y la mejor reina que conocí y solo... solo... una... una... conocí... una—Suelta con algo de dificultad—Tengo mucho sueño, tal vez nos volvamos

—Tal vez—Murmuro no muy segura de que va a pasar si llego a desbloquear mi lado vampiro y me convierto en una verdadera Trihibrida

—¿Sabes por qué quería una vela?—Interroga en un susurro y yo niego—Cuándo llegue al final quedarán solo sus restos, pero eso no significa que sea algo malo, el final de algo es el nuevo comienzo de algo aún mejor, los cambios dan miedo, pero no son más que un nuevo inicio y todos lo necesitamos a veces

—Eres muy lista para tener cinco, creo que mucho más que yo—Digo con una sonrisa que muy posiblemente parezca más una mueca

—Cuándo la llama de mi vela se apague quedarán las cenizas, osea mi cuerpo y será el final de mi vida aquí, pero yo tendré un nuevo comienzo cómo dice Kim—Asegura con felicidad—No me da miedo morir, solo me pone triste que las personas que van a quedarse van a extrañarme, no quiero que sufras, Sky, quiero que estés bien, ¿Podrías haces eso por mí?

—No puedo prometerte que no me va a doler, que no te voy a extrañar o que no voy a llorar, pero te doy mi palabra de que aúnque los días sean oscuros, voy a encontrar la manera de iluminarlos.

—Ya tienes una luz en tu interior, la bebé va a iluminar tus días oscuros cuándo me vaya—Murmura débil observando un algo tras de mi—¿Tú eres Klaus, no es así? ¿El novio de Skylar y hermano de Elijah?

—Lo soy—Afirma observandola a lo lejos con pesar

—¿Cuidarías a Sky por mí?—Pregunta suplicante

—Voy a cuidarla, lo prometo—Asegura y ella le sonríe

—¿Y tú, Elijah?—Le pregunta al moreno que está junto a su hermano parado en la entrada de la habitación

—Te doy mi palabra de que siempre voy a protegerla.

—Me alegra que no estarás sola y tendrás quienes te cuiden—Dice cerrando los ojos con cansancio

De un momento a otro su corazón deja de latir y su respiración también se detiene, la vida abandona su cuerpo y no puedo hacer más que sujetar su mano y llorar por la niña que logró ganarse mi corazón en tan solo un día, desearía poder volver el tiempo atrás y haberme dado cuenta de lo que estaba pasando dentro de su cuerpo, haber podido hacer más que sentarme a verla morir, si mi magia no estuviera descontrolada tal vez hubiera podido salvarla, pero soy completamente inútil y aparentemente solo traigo desgracia y muerte, quizás Ash estaría viva si jamás me hubiera conocido.

—Ven aquí, amor—Siento sus brazos envolverme, por lo que me aferro a su cuerpo y descargo todo lo que he estado conteniendo, él acaricia mi cabello con suavidad mientras yo pienso en lo mucho que me hubiera gustado que él conociera a la pelirroja, traerla con nosotros y poder cuidarla, yo anhelaba poder mejorar su vida y darle el amor que sus padres no pudieron darle

—Es mi culpa—Afirmo entre sollozos, él toma mi rostro entre sus manos y me hace verlo a los ojos, luce tan afligido a pesar de que no intercambio más que un par de palabras con Ash—Debí darme cuenta de que estaba mal

—No había nada que pudieras hacer, nadie se habría dado cuenta, hiciste todo lo que pudiste, Elijah me dijo que estuvo contigo todo el día y que parecía perfecta—Dice en un intento de calmar mi dolor, pero eso no me hace sentir mejor en lo absoluto

—Solo traigo dolor y muerte, deberían alejarse de mi.

—Nosotros seguimos aquí y te prometo que nada de lo que dijiste es cierto, tú eres la esperanza de nuestra familia, Skylar—Dice el moreno

—Me duele mucho—Me quejo entre lágrimas de tristeza

—¿Qué cosa?—Preguntan al unísono observando mi vientre con preocupación

—El corazón...—Klaus vuelve a apegarme a su cuerpo para reconfortarme y se lo agradezco porque en este momento su apoyo es todo lo que necesito

—Lo que pasó esta noche es producto de una guerra entre especies creada siglos antes de que nacieras, no es culpa tuya, amor.

—Tengo que salir de aquí, no puedo seguir viéndola de ese modo—Le doy una breve mirada a la niña en la cama y debo respirar profundamente para lograr calmar las ganas de llorar, salgo de la cabaña y me alejo observando a lo lejos a Oliver seguir intentando ocasionar una guerra y a Hayley observarlo atentamente, me acerco a ella para despedirme porque no me siento nada bien y todo lo que quiero es irme a casa—Ya me voy, ¿Nos vemos mañana?
 
—Si, ¿Y Ash?—Pregunta confundida al no verla por ningún lado, aprieto mis labios en una fina linea para no volver a llorar y sin embargo una lágrima solitaria se escapa de uno de mis ojos, ella parece comprender lo sucedido, ya que me da un fuerte abrazo—Lo siento mucho, ¿Qué sucedió?
 
—Sucedió que soy muy mala cuidando niños y no me di cuenta de que salió herida en el ataque de esta mañana, tuvo una hemorragia interna en el cerebro y sumado a su problema de hipercoagulación no logró sobrevivir—Explico rápidamente limpiando las lágrimas que se escapan de mis ojos por el recuerdo de todo lo sucedido en el día, por su fascinación cuándo le conté que soy la reina de la ciudad, por sus últimas palabras, por no haber podido ayudarla cómo hubiera querido y por haberla perdido

—Eso no es cierto, estuve con ustedes y ella estaba perfecta, tampoco lo noté.

—Skylar, tienes que venir conmigo ahora—Dice Elijah, por lo que Hayley y yo corremos hacia la cabaña, al llegar me sorprendo al ver a Ash sentada en la cama observando a Klaus y una adolescente de cabello castaño y ojos verdes, no lo dudo y me acerco a abrazarla con fuerza aunque no tengo idea de que es lo que está pasando

—¿Cómo es posible?—Pregunto confundida

—¿Kim?—Pregunta asombrada observando a la desconocida—¿Funcionó?

—¿Kim? ¿Tu eres su hermana?—Pregunto incrédula y ella asiente—¿Qué demonios está pasando aquí?

—Sky es buena y confiable, me cuidó todo el día, podemos contarle lo que hicimos—Dice segura la pelirroja

—¿Qué hicieron?—Pregunta preocupado Elijah

—Fingimos nuestra muerte, pero al parecer muy mal—Dice frustrada—Te vi llorar por mi hermana y te aseguro que hacerte pasar por ese dolor no me gustó en lo absoluto, pero tenemos que irnos de la ciudad y era la única forma

—¿Por qué tienen que irse?—Interrogo con seriedad, intentando procesar todo lo que acaba de pasar en los últimos minutos

—¿Crees que podamos hablar a solas?—Pregunta suplicante y entiendo que no quiere hablar frente a su hermana, por lo que salimos de la habitación—Mi padre era malo, pero mi tía Francesca Guerrera es mucho peor, necesitábamos irnos de la ciudad sin que nadie se enterara porque ella no iba a parar hasta ver a Ash muerta, cree que por su cabello no es hija de mi padre, pero se que está equivocada porque les hice una prueba de paternidad para demostrar que no es así, el problema es que cuando se lo mostré pensó que el papel estaba falsificado y me amenazó con matarla

—¿Dijiste que tu tía se llama Francesca? Dime su apellido, la buscaré y hablaré con ella.

—Nos matará si sabe que vivimos, todos en el pantano creen que morí.

—Hablando de eso, ¿Cómo se supone que hicieron para fingir su muerte?

—Cuando me enteré que la Trihibrida se había llevado a mi hermana las seguí porque habíamos planeado fingir nuestra muerte esta noche desde hace meses, mi idea era que los doctores le dieran la falsa noticia a mi papá de que mi hermana tenía una hemorragia interna en el cerebro, le conseguí a Ash unas hierbas que hacen que el latido del corazón sea tan débil que pasa desapercibido por las maquinas de un hospital o de alguien con un oído sobrenatural.

—Es por eso que ni Hayley ni yo nos dimos cuenta que estaba enferma, era porque no lo estaba.

—Exactamente, las nauseas, mareos, la baja temperatura corporal, los desmayos, la dificultad para hablar, concentrarse y mover ciertas partes del cuerpo son efectos secundarios que harían todo más creíble—Explica rápidamente y no puedo evitar sorñrenderme por lo inteligentes que fueron—Le preparé un te con las hierbas en la mañana y como tardan en hacer efecto no me preocupé, esperaba que en los cinco minutos en los que Ash iba a estar muerta que ustedes se fueran y poder llevarmela, pero los Originales me descubrieron

—¿Y cómo hiciste que los médicos te ayudaran?—Pregunto confundida

—Les di verbena en caso de que alguien intentara hipnotizarlos y les pagué una buena suma de dinero.

—¿Y ahora que harán?—Pregunto intrigada—Podrían venir a vivir con nosotros hasta que la situación con su tía pase

—Hiciste mucho por mi este día cuidando tan bien a mi hermanita, ella es todo lo que me queda y quiero darle una buena vida, he ahorrado por mucho tiempo y tengo algo de dinero para poder irnos, pensaba comprar unos pasajes para irnos a New York, entré a la universidad de ahí, si consigo un empleo y a su vez estudio estaremos bien.

—¿Cuántos años tienes?

—Tengo 18, soy mayor de edad y se que puedo hacerme cargo de mi hermana, como pareces quererla te prometo que si me entero que mi tía se va de la ciudad vendremos y aceptaré tu ayuda de cuidar a Ash, es solo que somos todo lo que tenemos y no estaría tranquila dejándola con desconocidos.

—No somos solo desconocidos, somos las criaturas más poderosas existentes y la cuidaríamos mejor de lo que cualquier otro podría—Dice Klaus llegando a mi lado, haciendo que lo observe sorprendida—Tu hermana me acaba de contar la historia sobre como era su padre y que siempre la protegiste, no puedo negar que va a estar bien y va a ser feliz contigo, pero debes saber que si algún día crees que ya no puede seguir contigo, las puertas de nuestro hogar siempre van a estar abiertas para recibirla

—Muchas gracias a ambos, pueden venir a visitarnos cuando quieran, les daré mi número y pueden llamarme cada vez que quieran hablar con ella.

—Espero que con esto puedan sobrevivir hasta que consigas empleo, si necesitan más solo llama y te lo daremos—Afirma el rubio extendiéndole un cheque con una gran cifra que se que para que dos personas vivieran les dudaría al menos dos años

—No puedo aceptarlo, es demasiado dinero...

—Claro que puedes—Digo con una sonrisa para tranquilizarla, ella nos mira agradecida antes de tomar el cheque y darnos un abrazo—¿Ya saben dónde van a vivir?

—La verdad no, solo sabía que quería salir de aquí y pensaba ver eso al llegar a New York.

—Tengo una casa allá, le pediré a mi híbrido que las lleve—Dice saliendo de la casa para luego dirigirse hasta donde los dos castaños estaban—Jason, ¿Podrías ayudarme con algo? Tu amigo también puede venir

—De hecho, es mi novio—Suelta con seriedad y el rubio finge sorpresa, ya sabía que estaban juntos, pero le encanta molestar a las personas y conocer a fondo las historias

—Bien, mientras me ayudan pueden contarme cómo se conocieron.

—Creí que me habría librado de tí porque ya no tengo interés en Skylar, pero al perecer ahora tengo que gastar mi tiempo hablando con el novio de mi ex novia acerca de mi nueva relación—Dice irritado—¿Es en serio, Klaus?

—Muy en serio, además, creí que éramos amigos—Finge indignación y yo sonrío divertida mientras los veo alejarse

—Y yo creí que era tu esclavo porque no tienes amigos, si tu forma de ser amistoso es amenazarme entonces supongo que si somos amigos.

—Tonterías, yo no hago esas cosas—Suelto una risita al verlo molestar a la pereja con cada palabra que dice—A menos que conspires en mi contra o intentes desobedecer mis ordenes, claro, en ese caso si te haré sufrir de formas muy creativas

—Ahora si actuas cómo el Klaus que conozco y no cómo un raro clon—Afirma Jason con una sonrisa mientras ellos se alejan para preparar todo, mientras que nosotras volvemos a ingresar en la cabaña

—¿Sabes? No eres tan tonto como esperaba—Escucho decir a Ash y río al ver a Elijah observarla con una ceja alzada—Me agradas, no eres malo como mi padre, eres bueno, aunque un poco raro

—También me agradas, me alegra mucho que estés bien—Dice con sinceridad

—A mi también me agradas, Ash, eres una niña muy especial, así que quiero que te cuides mucho para que cuando vuelvas te compre el helado que te prometí en la mañana.

—Lo haré, Hayley, lo prometo—Dice dandole un abrazo

Los cinco nos quedamos hablando por un buen rato acerca de lo que planean hacer cuando lleguen y sus planes hasta que Klaus se apareció y nos dijo que todo estaba preparado, decidimos que solo el híbrido y yo las acompañaríamos porque ir todos juntos sería correr un gran riesgo muy grande porque al parecer la loca de su tía tiene ojos por toda la ciudad y es una mafiosa, por lo que tomamos todas sus pertenencias y con cautela las llevamos hacia las afueras del pantano, donde estaba un lujoso auto negro que sería conducido por Jason.

—Te voy a extrañar mucho, pequeña—Le digo a Ash dándole un fuerte abrazo que me devuelve inmediatamente

—Yo también, gracias por ser tan buenos conmigo y perdón por hacerte llorar, planeamos todo mucho antes que te conociera.

—No te disculpes, estoy muy feliz de que estés bien y que vayas a ir a una ciudad tan linda como New York.

—Ustedes podrían venir a visitarnos con la bebé cuando nazca y le daremos helado, estoy segura de que ella y yo seremos amigas—Dice emocionada—Hayley, Elijah y Marcel pueden venir también

—No creo que pueda comer helado tan pronto, pero lo de ser amigas me parece bien, eres una buena niña—Dice Klaus con una sonrisa

—Sky me contó que son los reyes de la ciudad, ¿Cuándo nos volvamos a ver me contarás como es ser rey?—Pregunta intrigada

—Te contaré todos mis trucos—Asegura haciéndola sonreír con emoción

—Muchas gracias a ambos por todo lo que hicieron con nosotras, aquí tienen mi número y pueden llamar cada vez que quieran, si alguna vez necesitan algo no duden en pedirlo—Dice la castaña dándonos un papel con un número y el nombre "Kimberly Guerrera", cosa que me da una pista porque ahora se que debo buscar a una Francesca Guerrera y hacerla sufrir

—Cuídense mucho, ¿Si?—Pido y ambas asienten antes de subirse al auto

—Adiós—Se despiden a unísono justo cuando Jason comienza a conducir

—Querías cuidarla, ¿No es así?—Pregunta mientras observamos el auto alejarse

—Antes de que fingiera su muerte iba a preguntarte si te gustaría quedárnosla, me recordó muchísimo a mi de cierta forma.

—Si las cosas fueran de otro modo te habría dicho que sería una idea asombrosa, nuestra hija tendría con quien jugar cuando naciera.

—Sonará horrible, pero me encantaría encontrar a su tía y hacerla pedazos para que vuelvan.

—Esa idea también es asombrosa— Dice divertido antes de llevarme hacia nuestra casa a velocidad vampírica, al llegar el va a llamar a Liam y pedirle que en cuanto ellos y las dos chicas hayan llegado a la ciudad le avisen, y yo voy a mi habitación, encontrándome a Elijah buscando algo en mi closet, lo miro confundida hasta que lo veo sacar el Grimorio de su madre de ahí dentro

—¿A quién se le ocurre esconder el Grimorio de la bruja más poderosa que ha existido dentro del closet de su mejor amiga?—Pregunto divertida

—Niklaus lo quería y me pareció el mejor escondite porque confío en ti y sé que mi hermano jamás hubiera pensado que estaría ahí.

—Eres más listo de lo que cualquiera pudiera pensar, estoy segura de que Klaus no lo hubiera encontrado porque eres tan caballeroso que nadie se esperaría que tocaras los muebles ajenos, supongo que en esta familia nadie es lo que parece.

—Lamento mi intromisión, normalmente no hago esas cosas, pero quería tener el libro en un lugar a salvo y nadie lo hubiera buscado ahí—Explica dedicándome una sonrisa de disculpa—Sé que quizás después de este día no quieras seguir intentando salvar la ciudad, pero aún te considero mi compañera y necesito saber si tengo tu aprobación para darle el libro a mi hermano y dejarlo continuar con la alianza que que tiene con los lobos

—Tienes mi completa aprobación, creo que ahora más que nunca van a necesitar estar más protegidos y si esos anillos pueden ayudarlos a ser más fuertes y controlar el dolor de la transformación, entonces estoy de acuerdo—Digo firme—Creo que fueron los humanos quienes hicieron esto, según Marcel el que explotó la bomba les debía dinero a los casinos y ya sabes quienes son los dueños

—¿Cuándo viste a Marcel?—Interroga confundido

—Ella lo rastreo esta mañana, ¿No estabas con ella?—Pregunta el rubio ingresando en la habitación y él niega, la mirada de ambos recae en mi y yo me encojo rápidamente de hombros porque descubrieron mi mentira—Primero la masacre de Marcel, ahora bombas en el pantano, asumo que están listos para renunciar a este nefasto acuerdo

—La alianza con los lobos, si tiene que progresar, asumo que querrás esto—Dice entregándole el Grimorio de Esther

—Supongo que debo agradecerte por su cambio de actitud—Me dice echándole un vistazo al libro

—Las grietas en esta ciudad son más profundas de lo que imaginé, Niklaus, estas tribus, estas facciones son familia y la familias optarían por luchar—Comienza a decir mientras caminamos a la sala de estar, Elijah sirve dos vasos del bourbon que estaba en la mesa y a mi uno de agua mientras nos observamos fijamente—El caos descendió en nuestro hogar, y si debo tomar una decisión elijo la victoria

—Por nuestra victoria—Digo levantando el vaso

—Por nuestra victoria—Los tres chocamos el vaso y bebemos el contenido antes de sonreír levemente