━ CAPÍTULO 15
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CAPÍTULO QUINCE
PLANES EN MARCHA
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Las almas gemelas, estaban durmiendo cómodamente en la habitación del hibrido. Los dos estaban abrazados después de una gran noche de sesión de besos y caricias, quedaron mas que cansados y felices, por lo que se quedaron dormidos juntos.
Lo único que se escuchaba eran sus lentas respiraciones ninguno tenia la intención de despertar ni mucho menos separarse. Sin embargo sus planes se fueron al carajo.
—¡Son tan lindos!
—Guarda silencio los despertaras
—Parece que tuvieron mucha diversión
—¡Tenemos que planear la boda!
—¡Yo seré la madrina!
—Es mi mejor amiga ¡Yo seré la madrina!
¡FLASH! de pronto una luz los apunto era una cámara.
—Lo único que serán es dagados si no se largan de mi habitación.—hablo un Klaus enojado por haberlo despertado de su gran siesta.
Todos salieron rápidamente de la habitación, sabían que Klaus enojado no era nada bueno y menos por la mañana.
Soltó un suspiro antes de dirigir su vista a la bella chica que tenia en sus brazos, para Klaus era lo mas hermoso que su ojos habían visto, junto con su hija Hope. Empezó a obsérvala detenidamente quería grabar en su mente cada detalle de su bella Anastasia. Tener su rostro bien gravado siempre.
Vio que tenia una linda nariz, unas pestañas rubias largas y hermosas también logro ver que tenia dos lunares muy peculiares en su cuello. Unos grandes y rosados labios que saben a fresa, ayer lo pudo comprobar.
Ni siquiera se dio cuenta que la chica ya había despertado por estar perdido en su gran belleza.
—Me vas a desgastar de tanto mirarme.—le susurro la chica con una voz suave y una sonrisa.
Klaus al ver que despertó rio y retiro los mechones de pelo de su rostro para poder verla mejor.
—Buenos días amor,—su voz era un poco ronca, eso le gusto a Anastasia.—Y no te estoy observando.
—¿Ah no entonces que hacías?—pregunto con una sonrisa.
—Te admiro amor.—le sonrió.
Los dos se acercaron para poder darse un suave y lento beso. Cuando se separaron tenían unas grandes sonrisas en su rostro y sentían que el corazón se les podría salir de lo rápido que iba.
—Sera mejor que me vaya hoy tenemos algo importante que hacer todos y tenemos que estar listos. —soltó un suspiro cada vez faltaba poco para poder derrotar al vacío y irse al futuro de nuevo.
Cuando intento levantarse Klaus la agarro de la cintura y la abrazo fuertemente sin lastimarla mientras la pegaba a el todo lo que fuera posible.
—No te vayas, quedémonos aquí siempre—le hablo en la oreja de la chica causando que se pusiera nerviosa. No podía evitarlo el causaba eso en ella.
—Nik sabes que me encantaría, pero es importante para terminar con el vacío.—le acaricio el rostro y dejo un corto beso
El solo suspiro y asintió con la cabeza y la soltó.
—De acuerdo pero después de que hagas todo eso, serás mía toda la noche.—le sonrió.
—Y yo pensaba que ya era tuya—le soltó con diversión.
—Lo eres amor pero quiero hacer las cosas bien contigo, por lo que te llevare a un lugar.—le beso la mejilla.
—¿Cómo una cita?
—Una cita amor.—le confirmo.
Con un ultimo beso ella salió del cuarto dirigiéndose al suyo para poder arreglarse y desayunar. Cuando entro agradeció que Hope no estuviera sabia que su amiga se pondría muy intensa.
—Entonces ¿Cómo te la pasaste?.—pregunto Hope.
Anastasia chillo y brinco en su lugar no había vista su amiga. Hope estaba en la esquina del cuarto sentada con una pierna cruzada mientras en una mano tenia un baso de bourbon, una gran sonrisa en su cara y una ceja levantada.
Anastasia soltó un suspiro y cerro los ojos.
—¿Todos saben lo que tienen que hacer verdad?, —Preguntó Hope.
Todo el clan Mikaelson, Marcel y Keelin estaban reunidos en el complejo. Acababan de desayunar y hoy era un día muy movido por lo que todos tenían que hacer algo importante.
—Yo y tu papá iremos a la iglesia Santa Ana y nos encontraremos con Davina. —comentó Hayley lo que le correspondía.
—Exacto y ustedes. —señaló a su tío Elijah y su hermano Marcel.
—Del robles, iremos a su cripta en Saint Elbe ellos tienen un hueso enterrado.
—Y...
—Y nada de pelearnos entre nosotros. —contestaron al unido ambos vampiros.
Estaba claro que ninguno confiaba todavía en el otro.
—Correcto, pase lo que pase Sofya no puede tener ese hueso. —dijo Anastasia por lo que asintieron.
—Yo me quedaré aquí con Hope, —afirmó Freya. Keelin a su lado le sonrió.
—Yo estaré afuera de la iglesia para cuando Davina aparezca impedir que haga una tontería. —kol estaba nervioso volvería haber al amor de su vida pero sabía que ella no tenía intenciones buenas hacia su familia.
—Bueno eso me deja a mi y a la loca novia de Marcel. —Rebekah impediría que Sofya arruinaría el plan de alguno.
—Explíquenme de nuevo por que ustedes tienen que ir a Mystic falls y no puede venir el cazador. —Klaus no quería que ninguna estuviera en peligro.
—Ya lo hablamos Nik. Cuando Alaric viene hacia Nueva Orleans Sofya lo intercepta y se roba el hueso por lo que no podemos dejar que ella lo tenga.—se lo explicó una vez más.
—Ella tiene razón papá, además estaremos bien sabemos cuidarnos no se preocupen.
Todos se dieron una última mirada antes de empezar el plan. Estaban cada vez más cerca de terminas con el vacío.
El carro deportivo de Marcel estaba listo para el viaje hasta Mystic falls donde las chicas irían por el hueso.
—Tengan cuidado ¿si?, te necesito en una pieza amor. —le acarició el rostro.
—Lo tendremos Nik no tienes que preocuparte. Tu también cuídate mucho, no quiero que Davina te mate. —le soltó con diversión.
Se acercaron para poder darse un último beso antes de que Anastasia pudiera partir.
—Dense prisa Romeo y Julieta tenemos mucho por recorrer. —interrumpió el momento Hope divertida.
—¡Andrea!—le reclamo Anastasia.
—¡Andrómeda!—le hablo con diversión.
—No me llames así. —nadie sabía su primer nombre.
—¿Andrómeda? —Preguntó Elijah con confusión.
—¿Oh no lo sabían? Andrómeda es su primer nombre. —soltó con malicia sabía que a su mejor amiga no le gustaba que supieran eso.
Se escuchó una carcajada y todos voltearon para encontrarse con Kol.
—Andrómeda eso—dijo entre risas. —Es muy ridículo.
Anastasia levantó una mano causándole un dolor muy grande a Kol por lo que dejó de reírse para terminar en el suelo lloriqueando.
—Pues yo opinó que es un hermoso nombre. —comentó Klaus, dedicándole una sonrisa a Anastasia.
Ella se la regresó.
—Si bueno por mas que quisiera seguir hablando de mi nombre, tenemos que irnos.
Las dos chicas se metieron al carro y empezaron su recorrido hasta Mystic falls.
—El estará bien Hope. —la ánimo su amiga. Al ver la cara de preocupación.
—Lo sé, solo que tengo miedo de que Davina haga algo. —soltó un suspiró tembloroso
—No podrá, además Nik es muy fuerte.—le sonrió. —Ahora vista al frente que no quiero chocar ni morir.
Ella se estiró y prendió la radio para escuchar un poco de música y calmar el ambiente.
Rebekah Mikaelson estaba a las afuera de Nueva Orleans esperando a que su sobrina y ¿cuñada?. Salieran de la ciudad y evitar de que Sofya las intente detener.
Estaba recargada en su coche a lo lejos pudo ver un carro y supo que era el de Marcel donde venían las chicas. Cuando estaban por pasar apareció Sofya deteniendo su pasó.
—Parece que no funciona. —les comento cuando el coche dejó de funcionar.
—Por qué mejor no te metes con alguien de tu edad linda. —Rebekah hizo presencia.
La mujer rápidamente volteo a verla, no tenía previsto a la original.
—Ah pero si es la ex-insufrible, —comentó riendo. —¿Dime que se siente que Marcel te reemplazará?. —eso enfureció a Rebekah.
Ella estaba apuntó de darse cuenta de que no era bueno hacer enojar a un original ni mucho menos un Mikaelson.
Rebekah a super velocidad la aventó hacia unos árboles y la empezó a asfixiar. El vacío actuó rápido y intentó causarle un dolor pero no funciono. Ella tenía una pulsera que las chicas le dieron para que no pudieran afectar a la familia.
Todos tenían un objeto para no ser dañados.
—Eso no funcionar perra,—dijo antes de romper su cuello. Dirigió su vista al carro.—Pueden irse chicas y tengan cuidado, aun tenemos una boda que planear. —eso último se dirigió a Anastasia que sólo sonrió.
Así las chicas siguieron su camino sin ninguna interrupción. Rebekah tomó el cuerpo de Sofya y se dirigió al recinto.
Esto a penas comenzaba.
La pequeña Hope se encontraba junto a una mesa en el patio donde estaba la mandíbula que Hayley había encontrado. Justó cuando entro Hayley las chicas se acababan de ir.
—Hope... ¿qué está pasando? —Preguntó Hayley a su hija con curiosidad, sus cejas se fruncieron al notar las miradas lejanas que reposaban en los rostros de ambos.
—¿Mamá? ¿Tú también los oyes? —susurró Hope, sin apartar la vista del hueso mientras llamaba a su madre. Hayley frunció el ceño y un sentimiento instantáneo de pánico y preocupación la invadió mientras se arrodillaba frente a la niña , desviando su atención del hueso. <<Esta empezando>> pensó Hayley.
—¿Qué está pasando? —Preguntó Klaus, frunciendo el ceño con preocupación al entrar en el patio, encontrando a Hayley arrodillada frente a Hope con preocupación.
—Mírenme. —ordenó Hayley a su hija con suavidad. atrayendo su atención hacia ella mientras la miraba con temor, —Dime qué has oído, —afirmó Hayley con desesperación.
Hope arrugó la nariz, como si tratara de encontrarle sentido a algo que nadie más podía escuchar.
—Susurros, —reveló la más joven, —Dijeron que estábamos conectadas a esto tu y yo, —informó Hope mientras miraba a su madre con los ojos abiertos. Hayley miró hacia Klaus preocupada, con el rostro pálido y conmocionado.
—Las brujas. Los Ancestros. Tienen un mensaje para nosotros. Una advertencia. —reveló Hope.
Hayley y Klaus compartieron otra mirada de preocupación, temiendo por la seguridad de su hija.
—Dime lo que te han dicho, —insistió Hayley desesperadamente mientras se volvía para mirar a Hope.
—Quieren que vayas a la iglesia de Santa Ana para hablar con ellos. Dijeron que tienes que hacer exactamente lo que dicen, y tienes que hacerlo ahora. —Hope le dijo a su madre, con una mirada preocupada.—Antes de que el vacío venga.— La niña terminó la revelación con una mirada de preocupación mostrada en su pequeño rostro.
Hayley suspiró, volviéndose a mirar a Klaus, que había apretado los dientes con rabia ante la revelación. Ellos ya sabían que Davina se encontraría ahí y todo lo que se venía por delante.
Klaus y Hayley entraron en la iglesia de Santa Ana, observando con cautela la silenciosa iglesia.
—Está tranquilo, —comentó la morena mientras echaba un vistazo a la sala vacía, sin encontrar nada que pareciera fuera de lo normal.
—Claro que está tranquilo, —comentó Klaus mientras se colocaba al lado de ella, —Es una trampa, —proclamó el original con seguridad.
Hayley puso los ojos en blanco ante su evidente paranoia.
―Sabemos que no es del todo—replicó la híbrida haciendo que Klaus enarcase una ceja en respuesta.
—Las brujas de Nueva Orleans llevan tres siglos odiando a mi familia, —replicó Klaus mientras los dos se adentraban en la Iglesia, —Por supuesto que es una trampa, y tenemos ventaja a nuestro favor—comentó el original.
Hayley volvió a resoplar,
—Las brujas protegen a los suyos, —afirmó la morena con un pequeño encogimiento de hombros. —Hope en una de ellos. Es parte de su legado. —Klaus puso los ojos en blanco esta vez.
—Hope es totalmente diferente a cualquiera de estos brujos y ya que lo mencionas tiene siete —recordó, —Si quieren hablarle necesitan mi permiso.
La morena se rio como respuesta, sacudiendo suavemente la cabeza mientras sonreía divertida.
—Serás insoportable cuando tenga novio—comentó Hayley haciendo que Klaus sonriera en respuesta.
—Seré un perfecto caballero , —replicó el original con maldad mientras una expresión de astucia se abría paso en sus rasgos, —Y si sus pretendientes no llenan mis expectativas los confinare al sacerdocio.
La híbrida estaba a punto de responder cuando cuatro brujas adolescentes aparecieron de repente a su vista.
—Oh, ¡mira, Chicas de la Cosecha!, —habló Klaus con una sonrisa de satisfacción mientras él y Hayley se acercaban a donde las chicas se habían detenido, —Supongo que hablan en nombre de sus Ancestros.
Las cuatro Muchachas de la Cosecha se detuvieron frente a ellos cada una con la misma mirada perdida.
—Siempre que hayan venido en son de paz,—habló una de las brujas haciendo que Hayley pusiera los ojos en blanco.
—Bueno, eso depende de ti, ¿no?. —replicó Klaus con impaciencia, cruzando los brazos sobre el pecho mientras miraba a las cuatro brujas con cansancio.
La bruja que acababa de hablar suspiró suavemente: —No queremos una pelea. Estamos aquí para ofrecer un trato, —reveló, ellos ya sabían las intenciones de las brujas y Davina pero tenían que actuar como si no lo supieran.
—Aunque tu hermano nos asesinó a las cuatro, así que no finjamos que somos amigos, —dijo una bruja diferente mientras se adelantaba, estrechando los ojos con odio hacia Klaus.
El original puso los ojos en blanco en respuesta.
—Por favor, considere que todas las pretensiones de amistad han sido abandonadas, —comentó Klaus con una sonrisa mientras miraba entre cada una de las chicas de la cosecha, ―Ahora, ¿Dónde están los Ancestros?
Poco después, Klaus y Hayley se encontraban en las escaleras de la iglesia de Santa Ana, observando con desconfianza cómo las chicas de la cosecha trabajaban en un hechizo que permitiría a los dos comunicarse con los ancestros. Y, aunque sabían que era una trampa para Klaus no tenían otra opción era parte del plan.
—Necesitamos su sangre, —dijo una de las "brujas" mientras se volvía hacia ellos y les tendía un cuenco. Hayley levantó una ceja mientras miraba el cuenco a la bruja y Klaus sonreía.
—Qué curioso, no te he oído decir por favor,— comentó burlonamente el original, negándose a seguir las instrucciones de la bruja.
La bruja suspiró en respuesta, con una mirada agotada al tener que lidiar con Klaus.
—Si quieren respuestas, tenemos que guiarlos hasta los Ancestros, —comenzó a explicar la bruja, —Pero, como ustedes no son brujas..., —se interrumpió cuando Hayley se dio cuenta de repente.
—Tenemos que saltarnos las reglas, —dedujo la morena, ganándose una cortante inclinación de cabeza de la bruja como respuesta.
—¿Cómo? —preguntó Hayley con curiosidad mientras se levantaba, y Klaus la siguió poco después.
—Una simple laguna jurídica, —respondió una de las otras brujas, —Ambos están unidos por sangre a una bruja de Nueva Orleans. Podemos utilizar el vínculo con su hija para lanzar un hechizo y vincularos a una audiencia con los muertos, —explicó.
La morena se mordió la muñeca, dejando que la sangre que goteaba de su herida ahora abierta fluyera hacia el cuenco que le había quitado a la bruja antes de entregárselo a Klaus, que hizo lo mismo antes de devolvérselo a la bruja.
—¿Por qué tengo la sensación de que hay algo que no mencionas?. —Comentó Klaus molesto, expresando la misma paranoia que Hayley sentía actualmente.
—Sólo una cosa... esto va a doler, —contestó una de las brujas con un atisbo de sonrisa antes de que las cuatro Chicas de la Cosecha levantaran los brazos, comenzando su hechizo.
Mientras cantaban, Klaus y Hayley cayeron de rodillas dentro del círculo de sal, ambos gritando de dolor mientras eran transportados al Plano Ancestral
—¿Ahora puedo enojarme con ellas? —comentó Klaus con el ceño fruncido mientras él y Hayley despertaban en el Plano Ancestral.
Seguían en la iglesia de Santa Ana, aunque ahora todo era de un tono azul deprimente. Hayley suspiró cuando Klaus se puso en pie y le tendió una mano para ayudarla,
—Enójate más tarde, —respondió la morena mientras le agarraba la mano, aceptando su oferta de ayuda, —Ahora estamos aquí. Pará seguir el plan.
Hayley salió primero del círculo y miró con cansancio el entorno familiar mientras Klaus la seguía.
—Entonces, ¿vamos a seguir jugando a las escondidas o vas a salir ya?, —preguntó el original con impaciencia, lo que hizo que Hayley pusiera los ojos en blanco, impacientándose cada vez más con klaus.
Sin embargo, antes de que Hayley pudiera replicar, las luces de la iglesia comenzaron a parpadear haciendo que las dos híbridos fruncieran el ceño preocupadas justo cuando las puertas se abrieron de golpe.
—No estaba segura de que fueras a aparecer,— comentó una voz inquietantemente familiar mientras una mujer, con una capucha cubriendo su rostro, entraba en la iglesia. Klaus entrecerró los ojos ante la mujer con cansancio.
—Bueno, esa fue una entrada dramática,—proclamó Klaus.—Un dos tres por Davina yo ganó. —afirmó el original impaciencia.
—¿Cómo es que tu? Se supone que yo..—respondió la mujer con desconcierto mientras se quitaba la capucha.
Los ojos de Klaus y Hayley se abrieron de par en par al ver a Davina, una cosa es saber que está viva y la otra es ver la por si mismos.
—Deberías saber que yo siempre voy un paso adelante. —alardeo con superioridad, a su lado Hayley rodó los ojos.
—Por qué mejor no dices lo que dirías Davina. —la ínsito a hablar.
—¿Cómo está Kol? No veo nada aquí, excepto Nueva Orleans, —preguntó la bruja con curiosidad.
—Creo que en estos momentos está deambulando por la Riviera Francesa. —Klaus le informó con una sonrisa sarcástica, —Aunque estoy seguro de que volverá cuando le diga lo encantadora que te sigues viendo. La muerte te sentó bien, —dijo el original mientras Hayley le cortaba con un suspiro de fastidio.
—Deja de hablar, —exigió la morena, con un tono de molestia que hizo que Klaus pusiera los ojos en blanco.
—Con mucho gusto, —replicó Klaus mientras se apartaba de la pareja y comenzaba a caminar por el pasillo de la Iglesia. —Una vez que nos cuente algo que pueda ser de ayuda, porque, si mal no recuerdo, cuando Freya la echó a esta monótona tierra de las sombras, sus hermanos querían destrozarla, —recordó el original, volviéndose a mirar a Davina con una ceja alzada, como si no se fiara de ella.
—Tú quieres derrotar al Vacío, yo también —afirmó Davina, mirando entre Klaus y Hayley con firme honestidad, —Y los Ancestros también. Pero primero, deben saber a qué se están enfrentando —comenzó la bruja mientras Klaus y Hayley fruncían las cejas.
—Comienza mil años antes de la fundación de la ciudad. Dos tribus rivales decidieron combinar su poder. Pensaron que si se unían en paz, entrarían en una nueva era de armonía—pero fue interrumpida por el híbrido una vez más.
—Creo que no entendiste bien lo de que voy un paso adelante siempre. Ya nos sabemos tu historia de campamento, te ahorrare tiempo. —la corto Klaus.
—¿De qué estás hablando?, es imposible que sepas esto. —le dijo con confusión esto no es como pensaría que pasará.
—Escucha Davina esta vez Klaus tiene razón. —comentó Hayley.
—¿De verdad?. —preguntaron muy sorprendidos al mismo tiempo Klaus y Davina.
—Si nosotros ya sabemos la historia del vacío y también como detenerlo. —afirmó con firmeza.
—Pero no tiene sentido ¿cómo es que lo saben?. —la confusión era notable en su rostro.
—Digamos que tuvimos un poco de ayuda pero ese no es el casó. Por que mejor no nos dices lo que sea que tengas que decir para que nos dejes ir. —hablo el híbrido.
—Eres la única oportunidad que tenemos, —le dijo Davina a Hayley mientras comenzaba a caminar hacia ella.
Klaus observó el intercambio con las cejas fruncidas sabiendo lo que estaba a punto de pasar.
—¿Qué demonios significa eso?, —espetó el original con rabia.
—Ya no quiero hablar contigo, —le espetó Davina al original con amargura, sin molestarse en dedicarle al híbrido una última mirada antes de agarrar repentinamente la muñeca de Hayley y transportarlos de vuelta al mundo de los vivos.
—¡Davina! —gritó Klaus con rabia.
Capitulo editado: 22—07—22
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