X. Smallville, Kansas


CAPÍTULO DIEZ
SMALLVILLE, KANSAS




Cuando la brecha entre tierras se cerró tras ellos, Barry, Tessa y Oliver aterrizaron en el interior de un establo. Una mujer de pelo oscuro y ojos azules les apuntaba con un martillo, miedo pintado en todo su rostro, pero también un sentido de valentía.

—Eh. No, no, no—Barry levanta las manos—Venimos en son de paz.

Sus ojos viajan de Oliver hasta él.

—¿Quienes sois?—exige saber con firmeza—

Antes de que Tessa pueda responderle, Kara y otro hombre aparecen junto a la mujer.

—Lois, espera—Kara rápidamente intenta tranquilizarla—Son Barry, Tessa y Oliver. Mis amigos.

Señala a cada uno de ellos.

—E... Espera—Oliver mira a la kriptoniana con esperanza—Entonces, ¿sabes que yo soy Oliver y él es Barry?—inquiere, viendo como les había señalado al presentarles y mencionar sus nombres—

Kara se gira hacia él, dedicándole una mirada confusa.

—Si—asiente con obviedad—¿Po... Por qué no iba a saberlo?

Ninguno de ellos tres responde. Un suspiro de alivio por parte de cada uno es lo único que Kara recibe como explicación.

—Menos mal.

—Entonces es verdad—Tessa mira a ambos hombres—

—Si—asiente Barry a su derecha—Ya te lo dije.

—Ah, chicos—Kara interrumpe su conversación, atrayendo su atención de nuevo a ella—Este es mi primo Clark. Por fin le conocéis.

Sonríe con orgullo.

—¿Tu primo?—repite Tessa, frunciendo el ceño—¿Ese primo? ¿El súper primo?

Kara asiente.

—Por favor, llamadme Clark—sonríe el aludido—Bienvenidos a nuestra granja.

—Soy Lois Lane, del Daily Planet—se presenta la mujer a su lado, esta vez con una sonrisa y escondiendo el martillo con el que les había amenazado previamente tras su espalda—

Barry y Tessa le dedica una sonrisa como saludo, mientras que Oliver fija su mirada en Clark.

—Oye, ¿por qué creíais que no os reconocería?—cuestiona Kara entonces—

—Pues...

Antes de que Barry pueda explicar nada, Oliver levanta su mano, haciéndola vibrar con sus poderes de velocidad. Al ver eso, Kara y Clark comparten una mirada confusa.

—Ah. Eso es nuevo—admite la chica entonces, posando su mirada en Tessa—

—Dímelo a mi—suspira la chica Merlyn—Al parecer he besado al mejor amigo de mi hermano. Quiero vomitar.

Oliver rueda los ojos.

—Si. Necesitamos tu ayuda—admite Barry, mirando a su amiga—

En silencio, y aún sorprendida y confusa, Kara asiente rápidamente.


Tessa estaba demasiado perdida en sus pensamientos, sentada en la cocina de la granja de la familia de Clark, como para prestar atención a lo que Kara le decía. Barry y Oliver se encontraban fuera, practicando con sus poderes, mientras ella intentaba hacerse a la idea de lo que estaba pasando. Alguien había cambiado la realidad de su tierra, intercambiando las vidas de su marido y su mejor amigo.

—Hey, Tess.

Cuando Kara colocó una mano sobre su brazo, Tessa por fin consiguió salir de sus pensamientos. Su mirada conectando con la de la kriptoniana.

—¿Estas bien?—le pregunta con un tono de preocupación—

—¿Qué? Si, si. Estoy bien—asiente rápidamente, agarrando la taza de té que Lois le había servido. Kara la observa con duda—¿Esta Mon-El aquí? Digo en esta Tierra.

Su pregunta toma a Kara por sorpresa.

—Si. Pero en el futuro—aclara—¿Le echas de menos?

—Si. Bueno, es un buen amigo—Tessa se encoge de hombros—Él parecía entenderme incluso cuando apenas nos conocíamos.

Kara sonríe levemente ante su respuesta.

—Sinceramente, no sé si volverá—admite con un pequeño tono de tristeza—

Tessa asiente levemente, algo decepcionada.

—Esto se va a arreglar, ¿verdad?—inquiere tras unos segundos, señalando a la ventana por donde podían ver a Barry y a Oliver entrenar—

Kara asiente, dirigiendo su mirada hacia la ventana.

—Claro.

—Bien, porque no pueden quedarse así—declara con firmeza—

Los ojos de la kryptoniana vuelven a posarse en su amiga, observándola con detenimiento.

—¿Hay algo más que te preocupe?—cuestiona, preocupada—

Tessa suspira.

—Es una larga historia—admite, depositando la taza sobre la mesa—Viajes al futuro y al pasado, ya sabes.

Kara asiente comprensivamente. Pero su ceño se frunce entonces en una mueca, llamando la atención de Tessa.

—¿Qué ocurre?

—Creo que ese entrenamiento no va muy bien—responde, poniéndose en pie—

Tessa la observa con confusión, siguiendo sus pasos hasta el porche de la casa. Allí, Clark y Lois observaban a Barry y a Oliver desde la distancia.

—Venga, tío—se queja Barry entonces, atrayendo la atención de la chica Merlyn—Llevo disparando a botes de pintura toda la tarde.

—Pues a no ser que un bote de pintura haya reescrito la realidad y nos haya intercambiado las vidas, necesitas adiestramiento de combate—declara Oliver con firmeza—

—Bueno, ¿por qué no te vas allí, corres hacia mi y yo intento darte con una flecha?—propone Barry, formando una sonrisa en sus labios—

—Si. De acuerdo—suspira Oliver, rodando los ojos—¿Dónde has escondido los arcos por control remoto?

—Tío, venga ya. No soy tú—le asegura con una sonrisa divertida adornando su rostro—

—Ya, bueno. Vale—acepta el ahora velocista—

Tessa ya había presenciado esta escena antes. Sabía cómo terminaría por mucho que Barry negara no ser como Oliver. Ella sabía que querría devolverle el golpe, gastarle una broma. Así que cuando Oliver corrió de nuevo hacia Barry, atrapando la flecha que él disparó hacia su cara, otras dos flechas salieron disparadas hacia su espalda gracias a los arcos por control remoto escondidos en el suelo.

Cerrando sus ojos con fuerza, Tessa pudo oír como Oliver se quejaba de dolor mientras Barry celebraba su triunfo.

—Llevó cuatro años esperando esto—exclama Barry, saltando de alegría—Que bueno. Espera, deja que te haga una foto.

—¡¿Qué?!

—Listo—sonríe, guardando su móvil y acercándose a él—Ya voy. No te preocupes. Aguanta.

Agarrando las flechas, Barry se las arranca de la espadas con facilidad. Y Oliver comienza a curarse rápidamente gracias a sus poderes de velocista.

—¿Crees que esto tiene gracia?—se queja, dándose la vuelta para mirar a Barry—¿Crees que mis habilidades son una broma?

—Venga, tío. Yo me lo tome mejor cuando me disparaste.

—Yo te dispare para enseñarte a estudiar el terreno. Tú lo has hecho para reírte.

—Vale—suspira, rodando los ojos—

—¿Sabes qué? Vale. ¡Vale! Atácame—la anima Oliver, claramente enfadado—Intenta ponerme una mano encima.

—¡Dale, Barry!—exclama Lois a su lado—

Los ojos de Kara, Clark y Tessa se posan en ella, mirándola con confusión.

—¿Qué? Es un borde—se justifica la periodista—

Tessa sonríe para si misma, volviendo su atención a Barry y Oliver.

—No pienso hacerlo. Yo no entreno así.

—Ah, ¿entrenas? ¿De verdad? Yo creía que tus poderes te habían llovido del cielo—señala Oliver—

—Si intentas molestarme, no lo vas a conseguir—le asegura Barry, dando un paso atrás—

—¿Necesitas que te animen?—Oliver eleva sus cejas—¿No haces nada sin tu mujer hablándote al oído?

—¿En serio? Pero si Felicity inventó el comunicador.

—Creo que no puedes pasar ni nueve horas sin una cursilada de discurso de motivación.

—Mira, paso de esto—declara Barry, dispuesto a alejarse de él—

—Tu equipo te ha traicionado. ¡Los necesitabas y no han cumplido!

—Que paso de esto—insiste, continuando con su camino—

Sus ojos conectan con los de Tessa, quien les observaba desde el porche de la casa. Pero cuando Oliver uso su velocidad para atacarle, Barry se agachó rápidamente para esquivarle, haciendo que se cayera al suelo.

Oliver aprieta sus puños desde el suelo, viendo como Barry le miraba con enfado.

—Si supieras usar mi velocidad, no podría ponerte ni un dedo encima—asegura, alejándose de él y dando por finalizada aquella discusión—

Pero Tessa no podía dejarlo así. No ahora que sabía la verdad y podía reconocer a Barry y a Oliver de forma más clara. Así que, caminando hasta él, Tessa se inclina para mirar a Oliver.

—Eres un idiota, ¿lo sabías?—declara, cruzándose de brazos—

Oliver gruñe, poniéndose en pie con dificultad.

—Tess...

—No te molestes—le interrumpe, molesta—No es menos héroe que tú solo por no haber pasado 5 años atrapado en una isla luchando por su vida. Eras un idiota antes de ese incidente. Él perdió a su madre. Vio como la asesinaban delante de él y aún así creció siendo un buen hombre.

—Solo intentaba...

—¿Qué, Oliver? ¿Qué es exactamente lo que intentabas?—vuelve a interrumpirle, mirándole con incredulidad—Tal vez deberías dejar de acusarle y dedicarle malas palabras y céntrate en aprender a usar sus poderes. Yo le ayudaré con su entrenamiento.

Cruzándose con Clark en su camino de vuelta a la casa, Tessa aún podía notar la mirada de arrepentimiento de Oliver sobre ella. Él no quería hacerla enfadar a ella, solo estaba frustrado por los métodos de trabajo de Barry. Pero la había metido en la conversación y eso le daba todo el derecho a enfadarse con él.




Central City
Tierra 1

—Ese fue el que nos atacó en IVO—Caitlin señala la pantalla principal del cortex cuando Cisco coloca unas imágenes—

—IVO fue contratado por ARGUS para construir una unidad para identificar metapoderes. Lo bautizaron como OZAAM, Organismo Zootonico Adaptativo Anti Metahumanos—explica Hailey, colocándose junto a ella—

—Esto no solo escanea poderes, tiene también un híbrido nanoadaptado del suero mirakuru—informa Cisco, entrando  en los archivos de información de IVO—

—Así fue como nos copió los poderes. Escaneo nuestros genes metahumanos y uso el hibrido del mirakuru para copiarlos.

—¿Así que un malvado cyborg imitador quiere venir a machacarnos y no podemos soltar a Flash ni a Green Arrow para luchar contra él?—señala Ralph, incrédulo—

—Bueno, podríamos si siguieran aquí—responde Sherloque, adentrándose en el cortex junto a Jay—¿Por qué no les cuenta que ha pasado, inspector Jay Halstead?

El aludido suspira, conectando su mirada con su compañera.

—Los has soltado—asume Hailey, leyendo su mirada casi al segundo—

—Yo no—niega rápidamente—

—Tessa—asume Ralph—

—Si. Y se ha ido con ellos a Tierra 38 a pedirle ayuda a Kara porque nosotros no les hemos escuchado—les informa, sacando un papel del bolsillo de sus pantalones—Lo ha dejado todo explicado en esta pequeña carta. Dice que hablando con Oliver... o quien sea, sentía que en verdad estaba hablando con Barry. Y no la culpo. Todo esto es muy raro.

Cisco asiente, bajando la mirada.

—Yo la creo—admite el latino, atrayendo las miradas de todos—Todo lo que está pasando... Ese cielo rojo, Barry y Oliver y, además, he vibrado a alguien en la sala de velocidad.

—¿Qué?—Sherloque le observa con confusión—

—Si. Un tío con unos pelos raros y unas patillas enormes.

—¿Y crees que el cielo rojo, ese tío y todos esos sucesos están relacionados?

—¿Ese tío ha intercambiado las mentes de Barry y Oliver?—Hailey frunce el ceño, cruzándose de brazos—¿Por qué?

—Y no estamos ni a martes—murmura Ralph—

La alarma comienza a sonar entonces, interrumpiendo su conversación.

—Es OZAAM—anuncia Cisco, mirando su ordenador—Acaba de entrar en la ciudad.

—Necesitamos refuerzos.





Smallville, Kansas
Tierra 38

Barry se lo había pasado especialmente bien entrenando con Tessa. Era una maestra mucho mejor que Oliver, además de que él siempre disfrutaba pasando tiempo a su lado. Pero tras varias horas siendo machacado por su mujer, Barry necesitaba descansar. Así que, mientras Tessa se reunía con Lois, Clark y Kara en el interior de la casa, Barry tomaba el aire en el porche cuando Oliver se acercó a él.

—No me digas que vienes a pedir perdón.

—No voy a usar esa palabra—asegura Oliver, colocándose a su lado—

Barry suspira, sonriendo levemente ante su respuesta.

—Mira, lo entiendo, solo intentas ayudar a tu manera. Quieres molestarme para que luche como tú.

—Ya, pero es más que eso, Barry—declara, posando su mirada en él—Llevo haciendo esto mucho tiempo. Y... casi siempre que he aprendido una lección, viene con un recuerdo dolorosos. He visto amigos morir, he tenido que matar para sobrevivir. Cuando soy Green Arrow canalizo esos recuerdos dolorosos—le explica, recordando las muertes de Tommy y Laurel—Uso... Uso mi lado oscuro cada vez que saco mi arco. Y cuando te veo con todas mis habilidades, riendo y bromeando, me cabreo. Más de lo que me gustaría admitir.

—Cuando corro todo lo que siento por dentro, dolor, culpabilidad, tengo que olvidarlo y centrarme en aquello hacia lo que corro. Tessa, mis amigos, toda la alegría en mi vida—explica Barry entonces—Cuando estoy contento corro más rápido.

Oliver asiente de forma pensativa.

—Cuando has atravesado la puerta de la celda lo estabas pasando bien.

—Y tú no te dislocaste el pulgar hasta que te enfadaste—contraataca el arquero—Si tú vas a ser Green Arrow y yo voy a ser Flash...

—Tenemos que actuar más el uno como el otro.

—Si—exclama Kara, saliendo al porche en compañía de Tessa—Por fin. Dios.

Los ojos de ambos se posan en ella con confusión.

—Tengo súper oído, lo siento—les explica—Tessa y yo hemos estado ahí sentadas, esperando a que os aclaraseis, porque tenemos muchas ideas.

—Déjame adivinar—pide Oliver—Que sonría más.

—Si, eso ayudaría—admite Tessa—

—Tenéis que interpretar vuestro papel—explica Kara—Venga, probad.

—¿El qué?—Barry frunce el ceño—

—Soy Green Arrow—habla, usando una voz grabe para imitar a Oliver—

Barry y Tessa no pueden evitar reír ante eso.

—Ponte una máscara—dice Barry entonces, usando la misma voz—

—Yo no... Yo no hablo así—se queja el mayor de los hermanos Queen—

—Si que lo haces—ríe Tessa, haciéndole rodar los ojos—

Las risas de los tres se van desvaneciendo poco a poco, dejando un silencio entre los cuatro héroes.

—Oye, Tess—Oliver vuelve a hablar, posando su mirada en la joven Merlyn—Siento lo de antes.

Barry le observa con incredulidad. Acababa de oírle decir cómo no iba a usar la palabra "lo siento" con él, pero sin embrago lo estaba haciendo con ella.

—Está bien—Tessa le quita importancia—Creo que estaba un poco a la defensiva.

—Y yo estaba... No lo sé, frustrado—admite él—

—Lo entiendo—le asegura, dedicándole una leve sonrisa—

Su conversación se ve rápidamente interrumpida ante la apertura de una brecha a pocos metros del porche. Las miradas de los cuatro viajan hacia ella, viendo a Cisco aparecer allí. Rápidamente, los cuatro correr a reunirse con él.

—Hola, Supergirl—sonríe el latino—Barry. Oliver. Tessa.

—¿Ahora nos crees?—Barry frunce el ceño al ver como les señala al pronunciar sus nombres—

—Si. Yo y todos—admite en un suspiro—Perdón por encerraros. Y os agradeceríamos que, si queréis perdonarnos y volver a Tierra 1, sea rápido. Tenemos un problemilla en casa. En plan 'por favor, hay un robot asesino destruyendo la ciudad y una ayudita nos vendría bien'.

Oliver y Barry comparten una mirada preocupada ante tal revelación.

—Vamos—asegura el arquero—

Kara sonríe, posando su mirada en su primo Clark, quien se acercaba a ellos junto con Lois.

—¿Nos acompañas?—le pregunta—

—Si no vas tú, iré yo—Lois le advierte al que era su novio—

Clark sonríe, asintiendo hacia su prima.

—Genial—responde Cisco, aunque la confusión era clara en su voz y rostro—¿Tú quien eres?

—Un amigo.


Tras volver a Laboratorios STAR y prepararse para pelear, Cisco les abrió otra brecha con ayuda de su extrapolador para que pudieran aparecer justo en el centro de la ciudad, donde aquel robot estaba causando estragos.

Sin esperar apenas un segundo, Oliver uso su velocidad para atacarle, Tessa le golpeó varias veces con su espada, Kara uso los lasers en su ojos y Superman voló alto antes de lanzarse contra él, hundiéndole en un gran agujero en el suelo.

—No hay movimiento—les informa, saliendo del agujero para reunirse con ellos en la plaza—

—Buen trabajo—le felicita Oliver, formando una sonrisa en sus labios—

—Ha habido suerte—responde Barry con seriedad—

Tessa rueda los ojos. Era divertido verles interpretar la personalidad del otro, pero también era bastante desconcertante.

—Eh, chicos—la voz de Cisco suena a través de las comunicaciones—Tenéis que salir de ahí.

Antes de que ninguno pueda preguntar por qué, el robot aparece frente a ellos, saliendo del agujero como si nada hubiera pasado. Los cinco fruncen el ceño, viendo como éste se queda quieto, mirándoles.

—¿Qué demonios está haciendo?—cuestiona Oliver—

—Justo lo que queríamos evitar—responde Tessa a su lado, viendo como los símbolos de sus trajes aparecían en el centro del robot—

Les acababa de escanear y copiar sus poderes. Pero eso no impidió que Superman se lanzara contra el, intentando golpearle. Sin embrago, era como si se encontrara pelando con el aire, pues no conseguía dar con nada sólido.

—Esto no pinta bien—murmura para si mismo—

El robot le devuelve entonces el golpe, lanzándole lejos. Tessa prepara su lazo, pero el robot lo atrapa y la lanza hacia un lado antes de usar el laser que les había copiado a los kriptonianos para atacar a Oliver y el aliento de hielo para apartar a Kara.

—Chicos, necesitamos ayuda—pide Barry antes de que el robot consiga golpearle a él también—

—¿Cómo se para a un robot que mata sin despeinarse?—cuestiona Cisco, observando las imágenes de la pelea en la pantalla del cortex—

—Es un ordenador. Solo... hay que apagarlo—responde Sherloque, tomando un trago del té que acababa de prepararse—

Hailey y Jay se giran hacia él.

—Odio que tenga razón—murmura el latino—

—Tengo razón—exclama el detective—

—Si—suspira—Vamos.

Caitlin asiente, siguiéndole hasta su taller.

—Puede vibrar—se queja Oliver al reunirse con los demás en el centro de la plaza, pues el robot se había alejado con la velocidad que le había copiado—

—¿Así se llama eso?—Clark le mira con confusión—

—No podemos luchar contra él si no podemos tocarle—se queja Kara—

—Tengo una idea—anuncia Barry entonces, sus ojos posándose en Oliver—Consigue que vuelva.

—No hay problema—asiente—Aparta.

Rodando los ojos, Barry da un paso atrás, dejándole sitio a Oliver para que se vaya corriendo.

—Cuando vuelva, derribadlo—les pide entonces a Kara y a su primo—No podrá correr y vibrar al mismo tiempo.

Tessa le observa con incredulidad al verle usar una flecha con una cuerda para subir a la azotea del edificio tras ellos sin antes haberle dado una orden a ella.

—Yo me quedaré aquí, supongo—murmura, compartiendo una mirada con Kara—

—Podrías usar tus brazaletes—propone la kryptoniana—Eso le aturdirá.

—Creía que Barry debía dar las órdenes.

Kara y Clark sonríen divertidos ante su respuesta.

—Está situación no te está gustando ni un poco, ¿eh?—comenta él—

—Oh, no, estoy encantada—asegura, sarcásticamente—

—Chicos, ¿cómo vais?—cuestiona Barry a través de las comunicaciones—

—Creo que lo tenemos—le responde Caitlin, entrando de nuevo al cortex—

—Hemos analizado su sistema operativo y hemos programado un virus para freír su CPU—explica Cisco a su lado—

—No era tan difícil—celebra Sherloque—

—Excepto...

—Que es un robot que ha replicado su superfuerza y ahora es impenetrable y no podéis meter el virus dentro—completa el detective—Eso no es bueno.

—¿Y qué hacemos?—cuestiona Ralph—

—Si ha heredado sus poderes, tal vez haya heredado sus debilidades—comenta Jay, atrayendo la atención de todos—

—Solo que no vamos a debilitarlo, vamos a mandarlo directo al infierno—le responde Barry con frialdad, haciendo que todos compartan una mirada—Oliver, tienes que contrarrestar su vibración mientras StarNigh, Supergirl y Superman lo mantienen quieto.

—Entendido—responde el aludido—

—Solo tendré una oportunidad—les informa—Tráeme ese virus, Cisco.

—Voy—responde su amigo, usando el extrapolador para abrir otra brecha—

—¿Preparados?—cuestiona Oliver entonces—

Corriendo a toda velocidad con el robot tras él, Oliver por fin llegó a la plaza. Allí, Kara y Clark les esperaban para golpear al robot y retenerle antes de que pudiera atacarles a ellos. Ayudándoles, Tessa uso su lazo, rodeando al robot con él y usando toda su fuerza para mantenerle quieto.

—No falles—indica Cisco tras colocar el virus en la punta de una de las flechas—

—No lo haré—le asegura Barry, preparando su arco—

—Date prisa—le pide Tessa—

Tomando una bocanada de aire, Barry apunta hacia la cabeza del robot.

—Le has fallado a está cuidad—murmura, disparando la flecha directa a su ojo—

Una vez se clava en él, el robot explota en mil pedazos dando por terminada la pelea. Oliver sonríe, levantando su dedo pulgar hacia Barry con entusiasmo. Tessa suspira con frustración, recuperando el aliento.


Sujetando una bolsa de hielo contra su cabeza, Tessa se encontraba sentada en una de las sillas del cortex. Sus piernas sobre el escritorio principal y Jay sentado a su lado.

—Tu favorito—habla Oliver, entregándole un batido del Big Belly Burger—

—Ya me pediste disculpas, Ollie, no hacia falta—sonríe divertida, agarrando el vaso en sus manos—

Rodando los ojos, el ahora velocista se coloca junto a Barry.

—Mis felicitaciones, chicos—sonríe Sherloque—Especialmente para Flash. Ha sido todo un espectáculo.

—Pues... muchas gracias—responde Oliver al notar su mirada puesta en él—Pero soy Oliver Queen.

—Y yo soy Barry Allen.

—No sé, chicos. Has derribado al robot con un solo disparo. Solo Green Arrow podría hacerlo—comenta Kara, señalando a Barry—Y tú, Oliver, has corrido más que el robot. Igual que Flash.

—Podríamos mantener este intercambio de cuerpos ya que funciona tan bien—propone Ralph—

—No creo que a nadie le preocupe demasiado que no os volváis a cambiar—admite Sherloque—

—Es broma, ¿cierto?—se queja Tessa, observándoles con incredulidad—Uno de ellos es mi marido, el otro es el mejor amigo de mi hermano. No pienso volver a besar a Oliver. Es... asqueroso. Sin ofender.

—Tranquila.

—Hay que averiguar quién le ha hecho esto a Barry y a Oliver y por qué—declara ella entonces, formando una mueca de dolor—Y después lo arreglaremos, ¿de acuerdo?

Barry y Oliver asienten de acuerdo con ella.

—Caitlin, ¿alguna idea?—cuestiona Jay, posando su mirada en la científica—

—No lo tengo claro aún—admite ella—Pero, hasta entonces, sé que Central City y Star City están en buenas manos.

Sonríe hacia ambos héroes.

—Hablando de estar en buenas manos. Debería volver a Metropolis con Lois—comenta Clark, atrayendo la atención de su prima y todos los presentes—Si pasara algo, toda nuestra Tierra estaría desprotegida.

—Si. Tienes razón—asiente Kara—

—Gracias por ayudarnos, Clark—habla Barry, estrechándole la mano—No podríamos haber acabado con ese robot sin ti.

—Dudo que eso sea cierto—sonríe, mirando a su prima—Espero que ese golpe se cure pronto, Tessa. A sido un placer.

Se despide, abandonando el cortex junto a Cisco, quien se encargaría de abrirle una brecha de vuelta a Tierra 38. Después de su marcha, todos comenzaron a salir del cortex. Ralph y Caitlin volvían a sus casas, Sherloque se dirigía a la sala de descanso y Barry, Kara y Oliver se reunirían con Cisco en su taller, pues el latino tenía algo que decirles.

Con sus ojos cerrados y la bolsa de hielo sobre su cabeza, Tessa decidió quedarse en el cortex.

—¿Estás bien?—la voz de Jay la obliga a abrir los ojos—

—No—admite, formando una mueca al notar un pinchado de dolor debido a la brillante luz de la sala—

Notando esto, Jay baja el brillo de las luces rápidamente.

—Creía que te habías ido con los demás—comenta ella entonces, tomando un trago de su batido—

—Debería reunirme con Hailey en la comisaría, pero puedo quedarme un rato contigo—responde, estirando su mano para sujetarle la bolsa de hielo—

Tessa suspira, dedicándole una pequeña sonrisa de agradecimiento.

—¿Quieres algo para el dolor?—cuestiona, mirándola con preocupación—

Tessa niega.

—Estoy bien—le asegura, conectando sus miradas—

Jay sonríe levemente, colocando un mechón de su pelo tras su oreja.

—Tenemos algo—anuncia Barry, adentrándose de nuevo en el cortex—

—¿Si? ¿Qué habéis visto?—cuestiona Tessa, agarrando la bolsa de hielo y girando sobre su silla para mirarle—

Oliver se acerca a ella, entregándole un dibujo. Entrecerrarnos su ojos, la joven Merlyn lo observa con detenimiento. Se trataba de un hombre alto, con un traje extraño y un peinado muy peculiar.

—No le conozco—informa, mostrándole el dibujo a Jay—

—No importa. Sé dónde encontrarle—explica, señalando el edificio dibujado tras el extraño hombre—

Jay frunce el ceño.

—Bien—asiente, compartiendo una mirada con Kara y Barry—¿Dónde?

—Nos vamos a Gotham City—declara Oliver como respuesta—

—Genial—una voz desconocida para él habla a sus espaldas, obligándole a darse la vuelta—¿Puedo ir?

Los ojos de la joven brillan con entusiasmo y una sonrisa aparece en sus labios mientras espera por una respuesta de sus padres.

—Eh... lo siento—Oliver la observa con confusión—¿Tú eres?

—Está es Taylor—explica Barry, colocándose junto a ella—

—Ah, es verdad, intercambio de cuerpos, ¿cierto?—señala la joven, mirándoles a ambos con atención—Así que, tú eres papá. Y tú eres el tío Ollie.

Sonríe, lanzándose a sus brazos. El gesto toma a Oliver por sorpresa, cuya mirada de confusión se posa en Barry.

—¿Papá?—susurra, frunciendo el ceño—

—Es una larga historia—le susurra en respuesta—

—¡Y tú eres Supergirl!—exclama Taylor, separándose de Oliver para poner toda su atención en la kryptoniana—

—Esa soy yo—sonríe la aludida—

Aún en shock por la noticia, Oliver observa a Taylor con atención. No había duda, esa chica era hija de Barry y Tessa. Sus facciones, sus ojos, su sonrisa. Hasta su abrazo se sentía familiar. Incluso pudo ver un pequeño brillo de Tommy en sus ojos.

—Entonces... ¿puedo ir con vosotros a Gotham City?—inquiere, posando su mirada en Tessa—

Soltando un pequeño gruñido de dolor, Tessa niega.

—No. Tú y tu hermano os quedaréis aquí—le responde—Debéis cuidar de Ivy. Y tal vez la ciudad necesite que seáis sus héroes por un par de días.

—Está bien—suspira con un pequeño atisbo de decepción en su voz—

Oliver frunce el ceño, volviendo a posar su mirada en Barry.

—¿Hermano?—susurra, igual de confuso que antes—

—Esto debería ayudarte con el dolor—Tom se adentra entonces en el cortex, saliendo de la sala médica con un vaso de agua y una aspirina, las cuales coloca en el escritorio delante de su madre—

Las miradas de todos los presentes se posan en él. Pero la atención del chico se mantiene en su madre, quien le dedica una sonrisa agradecida.

—Oliver, este es Thomas—le presenta Jay—

—Thomas—repite, mirándole con atención—

El chico levanta su mirada, dedicándole una sonrisa.

—Como...

—Tommy—completa Tessa—

—Chicos, no quiero daros prisa, pero las anomalías empeoran—habla Cisco, adentrándose en el cortex—Creo que deberíais iros.

—Si. Nos vamos—asiente Barry—¿Seguro que estás bien para acompañarnos?

Su mirada preocupada se posa en su mujer.

—Si. Estoy bien—asegura Tessa, poniéndose en pie—Vamos.

Su mano sujeta la muñeca de Oliver, tirando de él para sacarle del cortex, pues se encontraba demasiado embobado mirando a Taylor y a Thomas.

—Ya tendrás tiempo de conocerles cuando arreglemos esto, ¿vale?—le dice, empujándole hacia la salida—

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top