───CHAPTER FIVE, solution

           Eleonor nunca había corrido tan rápido como lo hizo aquella noche, las valquirias estaban lejos del reino, estando en el bosque para fortalecer lazos con la naturaleza cuando un búho llego con una nota en su pata, avisando de la mala salud de la albina de Asgard.

Y es que no había ido sola, dos de las valquirias habían ido con ella en caso de ayuda. Su corazón palpitaba con fuerza sin parar de correr hasta llegar al castillo, donde paso de largo a todos acercándose a la habitación de su adorada hija, anhelando que su salud se hubiera recuperado un poco.

Frigga y la curandera miraron a la angustiada castaña, la reina se movió hacía atrás dándole espacio a ella para acercarse, Eleonor se sentó en la cama, tocando la mejilla de su pequeña, notando el cambio radical de su temperatura. Estaba demasiado caliente para como ella estaba siempre.

Su vista azulada fue a Frigga, quien se acerco pasando su mano por el hombro con ligera armadura encima.

───La ola de calor que azoto Asgard fue demasiado para ella, pareciera que fue enviada por el mismo Surtur───La reina tomó aire antes de mirar a la curandera───El hechizo no fue suficiente para resguardarla del día y la afecto de esta forma tan preocupante.

───¿Y que podemos hacer para que sane?───Pregunto viendo el rostro inquieto de su hija, tomando su mano nuevamente en busca de trasmitirle protección ante lo que sea que la estaba acosando en sus sueños.

───Lo único es llevarla a Jötunheim. El frío es lo que mas necesita para poder sobrevivir.

───Odin no lo permitía cuando Laufey esta tan malditamente feliz al escuchar esta noticia.

───Es por eso mismo que Hela fue a hablar con el padre de todo───La curandera respondió ante la mirada de Frigga, acercándose pocos pasos───La diosa la encontró en la azotea, de inmediato la trato hasta que llego una sirvienta a buscar a la reina, después envió a buscarme.

───Eleonor, si crees que Hela no se preocupa por Freya, estás equivocada, aunque Hela no lo admita, la adora. Yo misma vi la desesperación en sus ojos, así en su rápido caminar al salir para hablar con mi esposo.

Ella se mantuvo en silencio, terminando por asentir y acostarse ligeramente al lado de Freya, rodeándola con sus brazos, queriendo que la frialdad de sus piezas de armadura logren bajar la temperatura hasta que la primogénita de Odin lo convenza de llevarla al gélido mundo.

El grito negativo de Odin retumbo por todo el castillo tal como el ruido en seco del cetro, Frigga y Eleonor se miraron, antes de ambas salir de la habitación en dirección a la sala del trono. Donde lo primero que vieron fue a una Hela recuperándose del abrupto y repentino golpe que de Odin había recibido, Frigga grito el nombre de la azabache, corriendo a ella y viendo todo su rostro y cuerpo, mientras Eleonor miraba a Odin sin ningún temor mientras de sus labios salían palabras de preocupación disfrazadas fácilmente con un manto de rabia que de sus venas había salido tan fuerte y latente del mas profundo de su cuerpo y alma.

───Freya no pudo enfermarse de esa forma tan estúpida───Comento viendo de nuevo a su hija───Creí haber sido claro con que la cuidaras y establecieras mejor relación con ella───Recrimino de inmediato levantándose, Eleonor alejo a Frigga de ambos, viendo a Hela apretar su mandíbula y manos, lo suficientemente colérica por las acusaciones.

───La cuide y establecí mejor relación───Refuto con dientes apretados───No hago esto por deber, lo hago porque no quiero que se muera, no ahora.

Eleonor logro ver algo en la mano de Hela, un broche, uno que reconoció como el de su hija, también vio a Odin quitar la mirada hasta el cetro al lado del trono, notando a Hela bajar levemente la guardia y su rostro enojado cambiar a uno adolorido y sobre todo aunque no se distinguiera casi, preocupado. Sostenía con firmeza el accesorio, ocultándolo tras su cuerpo mientras en su rostro la cólera se mostraba como un reflejo en el espejo, como una imagen en el agua, así era cuando algo la enojaba a un nivel ilimitado y se convertía en un completa colisión que no tardaría en suceder.

Tal vez Frigga tenía razón.

───Majestad, si no hacemos algo por Freya padecerá bajo la influencia entera del calor, el fuego. Esa pequeña aun no da lo que tu tanto viste y que haz anhelado despertar y ver.

Hela miro a Eleonor, quien después de hablar bajo un poco la mirada antes de murmurar.

───Y yo también deseo verlo.

Odin paro en su lugar, pensando en alguna estrategia de último momento. Miro a cada mujer en la sala, Frigga sostenía a una furiosa Hela mientras Eleonor permanecía firme con sus ojos prendidos en rabia fijo en él.

───Busquen a una hechicera más fuerte, Freya no saldrá de aquí.

Él se sentó en su trono, dando la orden de retirada, Hela sonrió un poco, llena de rabia yéndose de la sala. La siguiente fue Eleonor, quien lo miro aun caminando hasta salir de allí, Frigga miro a su esposo, cruzando sus brazos encima de su vientre.

───Estás cometiendo un error, querido mío.

───Freya no morirá, y si lo hace es débil.

───Es más fuerte de lo que tú estás deseando pensar───Fue lo último que comento antes de irse también, Odin miro el cetro tomándolo y volviendo a sus deberes.

───¿Cuánto tiempo?.

───El hechizo que puse no durara tanto como nos gustaría, solo dos días.

───Bien. Ya puede retirarse───Contesto de inmediato la azabache viendo a la hechicera asentir e irse, las únicas en ese lugar eran Eleonor y ella, Frigga había ido a hablar con alguien desconocido para su conocimiento, asegurando encontrar una solución.

La castaña acariciaba el cabello de la menor, Hela miraba el broche con atención antes de guardarlo en su traje y acercarse.

───Tengo una solución Eleonor.

───¿Qué clase de solución?.

La escucho murmurar algo antes de caminar a ella.

───Llevarla a escondidas de Odin.

───No───Contesto de inmediato volteando a verla───Es arriesgado.

───Pero podrá seguir viviendo. Saldrá del peligro en el que está.

Eleonor bajo la mirada, pensando tan rápido como nunca antes y terminando por asentir, ya entendiendo mejor lo que quería decir la diosa.

───¿Cuándo la sacaremos?.

───Mañana, por hoy nos mantendrá bajo vigilancia de sus propios ojos───Bufo molesta cruzando sus brazos───Deberías volver con las valquirias.

───No la dejare.

───Yo estaré aquí, Frigga y yo hablaremos de esto.

───Solo porque estés ayudando no significa que confié en ti.

───No necesito de tu confianza────Respondió caminando a ella y posándose frente a su rostro───Lo único que necesito es que confíes en tu hija y el cómo se recuperará pronto.