𝙘𝙝𝙖𝙥𝙩𝙚𝙧 𝙚𝙡𝙚𝙫𝙚𝙣, a change







───CHAPTER ELEVENa change




Freya




           No entiendo la repentina decisión de Hela. Una vez le había pedido llevarme a una caza y aprender más del tema para enorgullecer a Odin y poder hablar con mi madre sobre ello como ella hacia con sus experiencias siendo Valquiria.

Hela me lo negó alegando que era una mocosa que no sabía ni donde estaba parada.

Ahora estaba en un caballo junto a Hela y unos seguidores de su causa que pertenecían a su pequeño grupo sanguinario lo más cerca de ella, pedido de Frigga preocupada por mi bienestar.

En las dos horas que llevamos cabalgando, Hela observa en silencio todo lo que hago, buscando ser lo más disimulada posible mientras me da cosas para entrenar mi poder y distraerme de los asuntos que a ella le informan, aún así, yo escucho cada cosa.

Note hace un par de minutos a Hela hacer una mueca disgustada y podría decir preocupada después de un susurro a su oído por un mensajero de Odin. Y eso solo prendió la luz de curiosidad y la valentía para acercarme lo suficiente para susurrarle.

───¿Que pasa?───Pregunto viéndola bufar.

───No es de tu incumbencia.

───Hela───Reprocho preparando la idea de hacer un berrinche, la estresaria pero hablaría un poco.

───Ni pienses en hacer un maldito berrinche, te puedo dejar varada en el bosque.

───Sabría cómo volver.

───Si, claro...

No comento más y yo tampoco.

Hela cuidaba de sus palabras  cuando alguien se acercaba y yo buscaba escuchar más de cuatro palabras mientras parábamos para atrapar a un animal y preparar unas cosas que no sabría explicar y me estresa no saber que son.

¿Cuál era el objetivo de Hela llevarme con ella a esto?. Es decir, no me siento mal de venir, siempre he querido ver esto, a lo que trato de referirme es al cambio de actitud de ella conmigo en las últimas semanas.

No parece querer alejarse de mi como hace meses después de un pequeño incidente.

No parece retenerse a contarme sobre ciertas cosas de sus días, un ejemplo; cuando viajo y tuvo que asesinar a casi todos los rebeldes y Fenrir resultó herido por una lanza especial que desató pura desgracia, cortesía de la mujer al lado mío.

───La pregunta será estúpida, ¿Puedo cazar algo?.

───Especifica que quieres cazar.

───Un ciervo, lo que sea.

───¿Qué te parece un oso?.

───... Deja la demencia Hela.

Ella rio entre dientes con malicia acercando su mano a mi pierna para sacar la daga que me regaló y cuido con tanto esmero.

───Algo que debes aprender de mis dagas, es que nunca pierden filo, y siempre debes atacar con la punta. Si quieres acabar de una vez y salir ilesa.

───¿Eso es un si?───Pregunte con emoción, Hela asintió devolviéndome la daga.

───Pero iré contigo.

───Es una condición.

───Tómala cómo quieras.

Sonreí por inercia reteniéndome a saltar en mi lugar mirando los alrededores para saber que cazar, y tal vez así mamá deje de tratarme como su pequeña hija y me vea como la hija jotun que quiere dejar atrás.

Porque quiero ser como mi padre; proteger todo lo que amo.

El pensamiento me entristece de inmediato y en automático agachó a cabeza. Nunca pude conocer a papá, pero estoy segura que el amaba a mi madre y a mi con tanta fuerza que murió por nosotras. E Igur había tenido la amabilidad de mostrarme un par de recuerdos de mi madre con papá, pero nunca pude ver su rostro, y tampoco tenía el descomunal tamaño de los gigantes, me atrevo a decir que media casi tres metros, mamá le llegaba por la rodilla.

Recuerdo que cada día específico del mes mamá llora por el, su aniversario me había dicho. Y yo solo puedo consolarla y llorar un poco con ella.

La mano de Hela en mi hombro me saco de la ensoñación, dándome cuenta de que pase mucho tiempo absorta en mi mente por la noche cayendo sobre nosotros.

───¿Que pasa?.

No puedo decirle a Hela que mi ánimo decaído es por mi padre, no quiero la respuesta de siempre; está muerto, pero estoy segura de que te cuida.

Al menos tiene empatía por mi tristeza. Pero con mi madre no es muy igual que digamos.

───Nada. Solo pensaba en que mejor cazó un jabalí.

───Con ese cuerpo tan debilucho quue tienes morirás al primer golpe que te de.

───... Puedo intentarlo, unas costillas rotas no podrán evitar que lo mate.

───Bien.

Ese tono, se estaba burlando, de seguro creo varios escenarios donde hago el ridículo junto a palabras sarcásticas al respecto.

Iba a matar a ese jabalí, de verdad lo haría.

───Los jabalís son inteligentes, Freya, cuidado con tus pasos.

───Esta bien.

Sabía que Hela estaba irritada, la forma en la que tomaba las riendas del caballo y golpeaba al animal para que fuera mas rápido, por lo que simplemente tome la rienda y obligue a Hela detenerse.

───¿Que pasa?.

───No entiendo de que hablas.

───El pobre caballo no tiene la culpa───Señale y ella bufo───¿Paso algo en el palacio?, después de que el idiota pelirrojo llegará haa estado extraña.

───No tiene que ver con el palacio.

───Es uno de los mensajeros del palacio, Hela, además de escuche una pequeña parte de la conversación sin querer.

───¿Acaso tu madre no te enseño a no escuchar conversaciones ajenas?───Pregunto tajante, estaba enojada y a la defensiva, yo solo observe con una ceja elevada───Si no es así, yo te enseñaré. No te metas en cosas que no te conciernen.

───¿Y si tengo sospechas sobre que trata?───Pregunte intentando bajar la rabia, podria jugar un poco como habitualmente hago con ella───Mira, creo que tiene que ver con el estupido que llego al palacio y tropezo con los...

───Son asuntos reales───Corto de inmediato───Y tu eres solo la hija de una valquiria que por cierto, ya traiciono a Asgard por irse con tu difunto padre y lo único que obtuvo fue su muerte por protegerlas a ambas, sobre todo a ti.

Esa respuesta fue venenosa y sobre todo; demasiado dolorosa. Lo único que pude hacer fue apretar mi mandíbula, tragar mi saliva y asentir mientras los demás miraban expectantes, parecian sorprendidos por la mordaz respurasta, pero unos me miraban fijamente a lo que pude diferenciar la pena, la lastima que les doy, y eso me hizo molestar mas, miro a Hela otra vez.

───Lamento mi intromisión, majestad───Empiezo buscando la fortaleza para no quebrar mi voz───Pero usted no tiene el derecho de hablar de esa forma sobre mi madre cuando le salvo la cabeza hace unos años, y mucho menos de hablar sobre mi padre cuando no lo conoce.

───Y tu tampoco.

───Y yo tampoco, está en lo correcto.

Con la expresión de Hela pude notar que falle en mi deber de ocultar la herida que sus palabras ocasionaron y justo antes de que ella hablará hice a mi caballo blanco galopar lo mas rápido que podía lejos de los seguidores y de ella, escuchando mi nombre en sus llamados hechos gritos.





La noche ya había caído y yo en ningún momento volví, seguí huyendo de cada uno de los hombres que me buscaban para llevarme al palacio nuevamente cuando lo único que quería era volver a Jötumhein y olvidar lo sucedido.

Sabía que mi madre estaba enloquecida, lo podía sentir y solo me hacía sentir peor que antes, mamá había perdido a mi padre por mi existencia.

El caballo buscaba mi atención golpeando su hocico con mi rostro, obteniendo lo que quería y distrayendo mi mente en el proceso

───¿Sientes mi tristeza, verdad?───Supuse escuchándolo relinchar disfrutando del cariño, el sueño comenzaba a gobernarme, pensando en acostarme con el caballo cuando el fuego de la pequeña fogata se movía por el viento.

Lo descarté de inmediato cuando un ruido entre los arbustos quito todo rastro de sueño, me levante junto al caballo mirando a esa dirección dando dos pasos al frente para tener mejor visibilidad, la fuerza en los arbustos aumento y cuando menos pensé un jabalí había salido de la naturaleza y se había lanzado encima mío atacándome con sus dientes sobresalientes, busque alejarlo sosteniendo los laterales de su hocico mientras el colmillo afilado cortó mi mejilla.

Mi caballo se lanzó encima de el, pateando con sus patas antes de alejarse relinchando, respire profundo mientras me levantaba y veía al caballo correr cuando un lobo se aproximo, ahora persiguiéndolo y dejándome con el jabalí que ahora se levantaba para seguir atacándome, la única solución que encontré fue alejarme con prisa escuchándolo perseguirme.

Esquivaba las ramas de los arboles y lo que ganaba era constantes tropiezos que ya me hartaban y al parecer a el también por que como si hubiera reunido mas fuerzas; se había lanzado tumbandome al suelo y atacando con mas furor, golpee sus costados al ver mis brazos atrapados quejándome por los golpes en mi estomago.

Abrí mis ojos de golpe cuando el jabalí chillo adolorido y cayó a un lado respirando mas tranquilo, tome varias bocanadas de aire desesperada tomando mi costado en mis manos.

Quien estaba allí guardo su arma para acercarse dos pasos cuando el animal se alzó otra vez con dificultad.

"Tu difunto padre y lo único que obtuvo fue su muerte por protegerlas a ambas, sobre todo a ti"

Me levante tumbando al animal nuevamente, tome la daga que tenía guardada en mi muslo y arremetí contra el una y otra y otra vez sin detenerme, gritando y sintiendo la sangre esparcirse por mi rostro y cabello bajando por mi cuello y manchando mi ropa.

Solo me detuve cuando alguien tomo mi brazo evitando que siguiera apuñalándolo cuando lo creyó suficiente y salí de su estado petrificado, notando ahora su cuerpo desfigurado, la sangre saliendo a montones, todo mi cuerpo lleno de su sangre.






Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top