───CHAPTER EIGHT, voice

              Lo primero que vio al llegar fue a la gran montaña de nieve en su cama viendo con un poco de asco allí haber estado allí por varias horas, miro a Hela, quien ya la observaba, analizándola.

───¿Y bien?.

───¿Que?.

───¿Como te sientes, mocosa?.

───Mucho mejor, creo que adentrarse más funciono.

───Bien.

El silencio se adueñó del lugar, reinando cada rincón mientras ambas se separaban yendo a diferentes direcciones, mientras Hela iba a la ventana más cercana, Freya camino a la cama, tocando la nieve y viéndola disolverse en su mano cuando salió del campo del hechizo.

───Algo me dice que padre de todo se dio cuenta.

───Si, también pienso lo mismo───Gruño volteando a verla, acercándose y tomando su rostro entre sus manos, viendo los ojos directamente.

───Hela...

───Guarda silencio.

Rodeó los ojos, separando un poco su rostro del de Hela, sintiendo los nervios peor que antes, empuñando con más fuerza el mango de la cuchilla de la mujer.

La mayor revisaba minuciosamente a través de los ojos azules en busca de algún rastro de malestar, queriendo asegurar que ir allí no había sido una pérdida de tiempo.

Y cuando Freya se rió de la nieve cayendo encima de ambas vio que no había nada más que una ya pronta recuperada salud completada.

Sonrió un poco soltando su suave rostro, y viendo a Freya extenderle la cuchilla que había tomado durante el enfrentamiento.

───No───Negó empujándola a la albina───Es tuya, veamos si empiezas a defenderte más.

───No será necesario, Hela. Tómala.

───Que te la quedes. No la quiero de vuelta, es tuya ahora.

Ambas permanecieron viéndose a los ojos, retándose hasta que las puertas se abrieron, causando que Freya volteara de inmediato a ver quienes entraron, ocultando la cuchilla en su espalda a la vez que se inclinaba un poco hacia Odin.

El rey miro a ambas con detenimiento, acercándose a Freya notando los nervios a flor de piel, tomo su rostro con su mano libre y la obligo a mirarlo, notando el destello azul que paso por estos, sonriendo un poco.

───Sabía que harías esto, Hela───El miro a la azabache, viéndola rodar los ojos, hastiada del───Llévenla a la sala de curación.

Unas doncellas se acercaron a Freya, tomándola de los brazos y obligándola a salir de allí, viendo a Eleonor y Frigga fuera.

Hela observo con cuidado a Odin, elevando una ceja esperando a que hablara y dejará los jueguitos que tanto la estresaba.

───¿Cómo fue?.

───¿Qué cosa, majestad?.

───¿Cómo fue que mejoro en solo media hora?.

La pregunta salió llena de rabia, Hela apretó su mandíbula viendo a otro lado, optando por simplemente informárselo omitiendo un par de cosas.

Eleonor la miraba con una ligera sonrisa llena de impaciencia movía su pie de forma frenética esperando a que Freya hablara, o al menos la mirara. Pero solo la veía jugar con sus dedos buscando distraerse de su intensa mirada.

───Freya───Llamo ya dando por perdido que ella diera el primer paso───Mírame, ahora.

───Fue Hela la que me llevo───Hablo nerviosa, elevando un poco la mirada───No sabía que tu no estabas enterada. Pero, mira estoy mejor───Ella rió nerviosa, más que antes, volviendo a callar cuando Eleonor se acercó.

───Sabía de esto. Hela me lo comento y yo di mi aprobación, aunque eso no le importará en lo mínimo.

Hizo lo que más correcto le pareció para salvarte. Solo lo pensó y no lo dijo, acaricio la mejilla de su hija antes de obligarla a mirarla.

───Y si, note que estas mucho mejor que antes, y eso me alivia demasiado.

Freya sonrió un poco, viendo a la curandera volver con una ligera sonrisa y cosas en mano para revisar su cabeza.

───Debes volver con las valquirias cierto───En vez de pregunta pareció una afirmación, que casi de inmediato fue respondida con un ligero si───Ve, iré cuando ya me suelten.

Eleonor solo suspiro levantándose y dejando unos cuantos besos en su cabello, antes de irse a paso lento de la sala. Freya miro al techo cerrando sus ojos mientras la curandera iniciaba su deber.

Apretó su mandíbula, queriendo ignorar la voz en su cabeza y escuchando a la curandera pedir la calma. Le fue difícil, pero acabo lográndolo y permaneciendo en total silencio mientras escuchaba la misma voz decir lo mismo.

"Acaba con Asgard"