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/𝟎𝟎𝟑/
𝐍 𝐎  𝐈 𝐃 𝐄 𝐀

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ﾟ。03 ｡ﾟ Baji sólo podía pensar en lo
　ﾟ･｡･ﾟ extraña que podía parecer la escena desde la perspectiva de un extraño. Con Mikey arrastrándole mientras corrían por los pasillos y Draken haciendo todo lo posible por alcanzarles; mientras llevaba los bocadillos de Mikey en una bolsa.

Había intentado varias veces zafarse del agarre del chico más bajo, pero había fracasado todos los intentos. No sólo se sentía mal por si mismo, sino también por Draken y la gente que Mikey había empujado bruscamente cuando se cruzaron en su camino. Baji aún no tenía ni idea de adónde planeaba llevarle su amigo, pero sólo esperaba que no fuera tan embarazoso como antes.

Baji hace una mueca de dolor al recordar la mirada de sus dos mayores cuando Mikey gritó. Izana tenía una mirada de vergüenza mezclada con irritación y la chica a su lado se reía como un ángel por la situación. Hubiera estado bien si Mikey se hubiera limitado a decir lo de su enamoramiento, pero no, el demonio tuvo que usar también ese horrible apodo.

Se estremeció aún más cuando recordó que técnicamente era él quien se nombró así.

─¡¿A dónde demonios vamos Mikey?!─ Preguntó Baji mientras los dos corrían.

─Vamos a buscar ayuda para que puedas conseguir a tu Rin-senpai─ Respondió Mikey, con una mirada decidida que hizo sudar al chico de pelo negro.

¿Por qué parece más emocionado que yo? Pensó el chico ─¡¿Qué quieres decir con mi Rin-senpai?! ¡Ella no es mía!─ Dijo Baji, claramente nervioso por las palabras de su amigo.

─¡Todavía no, querrás decir! Mírate cómo te sonrojas, mi bebé ya está creciendo─ Se burló Mikey mientras volvía a mirar momentáneamente al chico que arrastraba.

─Al menos yo si crecí─ Murmuró Baji en voz baja, que por suerte el chico más bajito no escuchó.

El chico solo pudo suspirar mientras dejaba que su amigo rubio le arrastrara por el pasillo, Draken aún trataba de alcanzarles pocos metros detrás.

Recordando antes las palabras de Mikey, Baji se preguntó de qué tipo de ayuda estaría hablando el chico. Mejor dicho, a quién iba a pedir ayuda.

Bueno, Baji pronto tuvo su respuesta cuando vio al chico de cabello blanco aparecer. Sus ojos se abrieron de par en par al verlo. Intentó apartarse, pero el agarre del chico más bajo era demasiado fuerte.

Izana no los saludó sino que los miró con cara de asco, seguramente por su aspecto desaliñado. Y tal vez por el hecho de ser ellos, su grupo de amigos y el de Izana no se llevaban muy bien.

Por el rabillo del ojo, Baji vio a Draken detenerse a cierta distancia, asegurándose de no acercarse demasiado, pero no lejos, estaba a la distancia perfecta para poder ayudar a Mikey en caso de que fuera necesario.

─Izana─

─Mikey─

Los dos hablaron al mismo tiempo. Izana levantó una ceja, indicándole a su hermano que continuara.

─Necesitamos tu ayuda─ En cuanto Mikey habló, la expresión neutra del rostro de Izana se tornó agria, pero no dijo nada que contara como desacuerdo.

─¿En qué? Si es en estudiar entonces no te molestes─

─¡Con Rin-senpai!─ Exclamó Mikey, con los ojos brillantes de emoción.

La mirada de Izana se transformó en una expresión de horror y azco mezclado, mientras miraba atónito a su hermano pequeño. Baji sólo pudo apartar la mirada cuando notó que el chico mayor la desviaba hacia él. Sabía que probablemente recordaba la escena de la cafetería.

─¿Qué quieres decir con que te ayude Rin? Y ¿Por qué crees que lo voy a hacer?─ Preguntó Izana, cruzándose de brazos.

─Porque soy... tu hermano favorito?─ Dijo Mikey añadiendo un cierto tono de incógnita en las últimas tres palabras, pero aun así, mantuvo su brillante sonrisa.

Sí, obvio. Pensaron los dos espectadores, Baji y Draken solo pudieron burlarse ante la respuesta del chico más bajito. Ambos sabían bien que de ninguna manera Izana lo consideraría ni siquiera su amigo.

─Necesitamos tu ayuda porque Baji planea cortejar...─ Antes de que Mikey pudiera terminar su frase, fue interrumpido por el propio Baji. El chico de pelo negro usó su mano para tapar la boca del chico más bajo antes de susurrarle que se callara. En un intento de aligerar el ambiente y hacer que el chico mayor dejara de mirarles mal, Baji soltó una risita falsa.

─Mikey es un comediante, ¿verdad, Izana-san?─ Dijo Baji mientras intenta apartar al chico más bajito, pero se mantenía firme, como si estuviera pegado al suelo.

─¿Qué estás diciendo? No dijiste que te gustaba...─ Mikey intentó hablar de nuevo pero esta vez fue Draken quien había puesto la mano sobre su líder para callarlo.

─Sólo está bromeando, Izana─ Dijo Draken, que ahora se unía a Baji para intentar tirar y arrastrar a su líder lejos de la bomba que estaba a punto de explotar.

Izana no era estúpido, sabía que lo que Mikey decía era probablemente cierto. Observó cómo los tres discutían frente a él. Su sentimiento inicial de enfado se convirtió en una inmensa irritación por las molestas voces de su hermano y sus amigos resonando en sus oídos.

─No te ayudaré Mikey... Baji─ Afirmó Izana, diciendo el nombre de Baji en un tono mucho más frío y serio. Esto hizo que los tres se detuvieran y miraran al chico mayor.

Baji y Draken solo pudieron tragar saliva mientras Mikey miraba a su hermano mayor con la boca abierta, como si no pudiera creer que el chico de pelo blanco no estuviera de acuerdo.

─¡Tienes que ayudarnos! Es la primera enamorada de Baji!─ Argumentó Mikey, haciendo que sus dos amigos dieran un respingo.

Por favor, no empeores más la situación. Los dos rezaron mientras permanecían detrás de su líder. Sin embargo, sus plegarias no fueron escuchadas, ya que Izana frunció aún más el ceño.

─¿Qué te hizo pensar que a Rin le gustaría un tipo como Baji?─ Preguntó Izana, su irritación y desagrado hacia ellos eran descaradamente obvios.

Las palabras del mayor hicieron que Baji se quedara helado. Era como si le acabara de abofetear en la cara. ¿Por qué no lo había pensado? Se preguntó. Era completamente razonable. ¿Por qué alguien mayor y mucho mejor que yo en todos los aspectos, iba a interesarse por alguien como yo?

Claro que tenía cosas buenas, pero ¿de qué iba a hablar con la chica?. Dudaba que tuvieran algún interés en común.

Draken se dio cuenta de la mirada triste de su amigo. Sabía que no podía quedarse ahí sin hacer nada al respecto. Draken respetaba a Izana a pesar de que realmente no le agradaba, pero no era el tipo de persona que simplemente miraba mientras sus amigos eran abucheados.

─Tú no eres ella, ¿quién te crees que eres para decir que a Rin no le gustaría Baji?─ Preguntó Draken, igualando el tono del chico mayor. Mikey asintió mientras fulminaba con la mirada a su hermano mayor.

─Soy su mejor amigo, estoy bastante seguro de que la conozco lo suficiente como para decir eso─ Replicó Izana. Draken vio una sonrisa en la cara de su líder debido a la respuesta del chico mayor.

─¿Su mejor amigo? ¿Y qué?. No eres su padre, ni su hermano y mucho menos su novio. Y no sé cómo lo ves tú, pero para mí significa que Baji tiene una oportunidad con ella─ Replicó Mikey.

Draken sonrió satisfecho ante la respuesta del chico más bajito.

Baji observó cómo sus amigos mantenían un intenso concurso de miradas con Izana. Mentiría si dijera que las palabras del chico mayor no le afectaron. Sabía que podía ser una posibilidad pero Mikey tampoco se equivocaba. Por lo que ellos sabían, Rin no tenía ninguna relación con nadie así que Baji tiene oportunidad. Si es rechazado está bien, pero, el que tenga miedo a morir que no nazca.

Con una conclusión en mente y una nueva determinación formada, Baji puso sus brazos alrededor del hombro de sus dos amigos. Tiró ligeramente de ellos hacia abajo mientras miraba a Izana con su habitual sonrisa, dejando ver sus colmillos.

─¿Sabes qué? No necesitamos tu ayuda Izana─ Comenzó Baji, dejando completamente de lado las formalidades. ─Porque la voy a enamorar y haré que sea mi novia─ Baji declaró con confianza. Sin molestarse en escuchar la respuesta del chico mayor, procedió a arrastrar a sus dos amigos por el pasillo, alejándose con rapidez.

Y para ser honesto, Baji no tenía ni la menor idea de qué hacer y cómo empezar.

─¿Fueron bien tus clases, Ran?─ Rin preguntó mientras se sentaba frente a su primo. Estaban en un café cercano, esperando a que el resto de su grupo apareciera.

─No estuvo tan mal. Aunque terminé golpeando a un estudiante, estaba siendo demasiado molesto─ Ran dijo, completamente indiferente por el hecho de haber golpeado a alguien, mientras ella lo miraba con los ojos espernancados.

─¡¿Golpeaste a alguien?!─

En ese momento, Kakucho entró con Rindou que tenía un gran moretón en su cara. Conectando los cables, Rin miró a Ran con una expresión de desconcierto y desaprobación en su rostro.

─¡¿Le diste un puñetazo a Rindou?!─

─Estaba portándose como un cabrón─