[02]

"Es adorable."

---

Elle seguía a Gray en el centro de innovación, Zach más atrás, sin importarle lo más mínimo lo que había a su alrededor. Lo alcanzó cuando él se detuvo frente a un juego que permitía identificar las diferentes bases que componían el ADN.

—Citosina, guanina, adenina y...—Gray se interrumpió.

—Timina—,terminó Elle, pulsando el último botón por él.

—Lo mismo en todos los seres vivos—,dijo Gray.

Zach finalmente llegó a la pareja.

—Oye, no quiero te alejes, ¿de acuerdo? Mamá no me paga por cuidarte—,se quejó.

—Bueno, Claire me está pagando, así que cállate y deja que Gray disfrute de esto—,argumentó.

—¿Qué tal si...?— Zach comenzó pero fue interumpido.

—Gray, ¿eres tú?—gritó Claire. Estaba hablando por teléfono pero colgó rápidamente.

—Tía Claire—,gritó Gray, corriendo hacia ella y abrazando a la mujer.

—Hola. Dios mío, cuanta... cuanta dulzura—,se rió.

Gray la soltó y Claire se volvió hacia Zach.

—Vaya, Zach. La última vez que te vi, medias—,comenzó Claire, levantándola para mostrar lo alto que era antes, era más o menos la misma altura que Gray.—Pero eso eso fue hace, ¿cuanta? ¿Hace tres, cuatro años?—

—Uh, siete. Siete años. Pero, estuviste cerca—,replicó, la molestia en su voz era obvia.

Hubo un silencio incómodo entre ellos mientras Elle fruncía el ceño. Se sentía mal por Zach, aunque no le gustaba.

—Y veo que ya tiene sus pulseras y esto es para sus comidas—,habló, entregándoles un sobre lleno de dinero. —Y Elle los va a cuidar hasta que termine mi trabajo de esta noche—.

—¿No vienes con nosotros?—Preguntó Gray, decepcionado.

—Oh, um, les juro que eso quisiera, pero mañana los llevare a la sala de control, para que vean tras bambalinas y todo eso. Sera... va ser genial, ¿no?—Respondió, mirando a Elle para tranquilizarla. Ella le envió una sonrisa, encogiéndose de hombros, sin saber qué decir.

Zach puso los ojos en blanco y Gray miró a Elle. El teléfono de Claire sonó entonces.

—Okay, entonces los veré esta noche a las...—Claire hizo una pausa, pensando.—A las seis—.

Elle suspiró mientras la corregía,—no olvides que tienes la-—

—Claro, por supuesto. Los veo esta noche a las ocho. ¿Pero a qué hora se duermen? ¿O se duermen a diferentes horas?—Preguntó, haciendo un gesto entre los dos.

—Supongo que a distintas horas, Claire—, dijo Elle mientras ninguno de los dos chicos respondía.

El teléfono de Claire volvió a sonar y lo comprobó.

—Bueno, entonces, um, diviértanse—, dijo. —Y cuida muy bien de ellos—, le indicó a Elle.

—Están a salvo conmigo—, le aseguró mientras Claire se alejaba. —Siento que tengan que soportar esto—, murmuró.

Elle había llevado a los dos al zoológico de mascotas debido a la petición de Gray, pero se dio cuenta de que ninguno de los dos jóvenes lo estaba disfrutando realmente.

—Cárgame—, pidió mientras saltaba, tratando de ver a los dinosaurios bebés. —No puedo ver—.

—No soy papá. Y no tienes cinco—, respondió Zach, aburrido.

—Aún puedo montar el Triceratops. Mido un metro veinte—, razonó.

—Espera, ¿sabes tu altura exacta?— preguntó Elle, divertida.

—¿No lo sabes?— replicó él.

—Sí, mido como cinco pies y medio, no lo sé en centímetros—. Se encogió de hombros.

Hubo una pausa mientras Gray pensaba.

—Mides un metro sesenta y dos—.

—Necesito un mejor tutor—, bromeó ella.

—Este lugar es para niños pequeños—, interrumpió Zach.

—Sí, ya sé—, suspiró Gray. —¿Vamos a los huevos giratorios?— Preguntó.

—No—, afirmó Zach.

—Lo que quieras hacer—, dijo Elle, mirando a Zach. Él se encogió de hombros ante ella.

—Cúbrete tu bolsa de ñoño—, ordenó, bajándose el top.

—Es adorable—, argumentó Elle. —Y práctico—.

Gray le envió una sonrisa de agradecimiento.

—Salgamos de aquí, hay un T-Rex que se alimenta pronto—, informó, guiando a la pareja.

Se encontraban en una pequeña sala con cristales que mostraban al T-Rex. La gente gritaba "aliméntalo" mientras Elle se situaba al fondo de la sala, los ruidos la hacían estremecerse. 

Miró a Zach y lo vio hablando con alguien por teléfono.

—Hola, mamá—, le oyó saludar.

Tenías que llamarme cuando llegaran. ¿Se está divirtiendo?

—Sí, eso creo. La tía Claire nos ha dado pases para no tener que hacer filas—.

Espera, ¿no esta con ustedes?

—No, estamos con su asistente, Elle, es la hija del dueño—.

¿Qué edad tiene?

—Dieciséis—.

¿Es simpática?

—Mamá, probablemente pueda escuchar esta conversación—.

Solo pregunté si era agradable. ¿Entonces lo es?

—Sí, lo es—.

Elle no pudo evitar preguntarse qué había preguntado, pero se dio cuenta de que probablemente no debería estar escuchando.

—De acuerdo, adiós—.

Con un suspiro, Zach colgó.

Miró a Elle, viendo que ya lo miraba, con las cejas levantadas.

—Mi mamá—, explicó. Elle asintió.—Estaba preocupada porque no la había llamado—.

—Los padres se preocupan, es parte del contrato—,bromeó ella, sonriendo ligeramente.

Zach esbozó una pequeña sonrisa a la chica.

—Llama a los medios, Zach sonrió—,bromeó ella.

—Lo has arruinado—,contestó él, cayendo su sonrisa.

—Y yo que pensaba que el siguiente paso eran las pulseras de la amistad y las manicuras—,replicó ella.

Él puso los ojos en blanco y volvió a sonreír.

—Cuando no eres un idiota, eres agradable—,le dijo ella, dándole una palmadita en el hombro mientras se dirigía a buscar a Gray.—Vamos—, le indicó.

Elle los llevó al espectáculo del Mosasaurus, asegurándose de sentarlos en la zona de salpicaduras (no es que ninguno de los lugares estuviera realmente libre de salpicaduras). Esperaron a que todo el mundo entrara y Gray le habló a Elle de los dinosaurios, cosa que ella disfrutó. Su entusiasmo era contagioso. Colocó su bolsa debajo de su silla con la esperanza de mantenerla semi-seca, ya que su teléfono y otros suministros estaban allí.

—Se creía que el Mosasaurus cazaba cerca de la superficie del agua, donde asechaba a cualquiera que estuviera a su alcance, incluyendo tortugas, grandes peces y hasta Mosasaurios más pequeños—,explicó la mujer mientras esperaban sentados.—Bueno, amigos, veamos si tiene hambres despues de haber comido un hace un rato. Es un poco tímida, sean amables y le den un buen aplauso cuando salga—.

La grúa movió el tiburón hasta encima del centro del tanque mientras Elle miraba a los chicos para ver si se estaban divirtiendo. Gray lo estaba, pero Zach miraba su teléfono, con una foto de una chica rubia en él. Su novia.

—Zach, Zach—,habló Gray, sacudiendo el hombro del chico.—El Mosasaurio—,exclamó.

Cuando Zach levantó la vista, el Mosasaurus se lanzó fuera del agua y agarró al tiburón de un bocado. Por primera vez en el viaje, Zach se rió de verdad.

—No se muevan. Les vamos a dar un mejor vistazo de nuestro Mosasaurus—,anunció la mujer mientras los asientos comenzaban a moverse, bajándolos para ver al Mosasaurus devorar su comida.

—Tenia 88 dientes—,informó Gray.

—¿Quieren ver otra cosa genial?—preguntó Zach, sonriendo a Gray y Elle.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top