CAPÍTULO 46: MISSING
—— MISSING ——
—¿Estoy en el infierno?— Preguntó Serena al ver la llamas de una chimenea y percibir el calor que estás desprendían.
—Oh, no querida.— Dijo una voz masculina desde las sombras. —Es la forma que tenemos para mantenerte con vida hasta que sepamos cómo extraer tu poder. Hacia tiempo que te buscábamos, por suerte nuestra has aparecido en el mejor momento.— Dijo el hombre acercándose a ella, haciendo que Serena observará su transformación, dándola a entender que era como ella.
—Eres como yo...— Murmuró sorprendida.
—¿Como tu? ¡Yo no soy un monstruo ni un asesino! ¡Tu sí! ¡Los que son como tú sois repugnantes, jamás deberíais de haber nacido. Poseéis un poder que está fuera de vuestro control! Y es por eso, que yo debo de liberar al mundo de esta carga.— Dijo el hombre acercándose más a Serena, para después hacerla un corte con una daga, haciendo que la sobrenatural soltara un quejido de dolor al sentir el escozor del corte.
—¿Qué es lo que quieres de mí?— Preguntó Serena mirando a su alrededor y rezando por qué alguna serpiente pudiera encontrarla.
—¿Qué que quiero? Quiero tu poder. El poder de una mestiza. ¿Pero sabes cuál es lo sorprendente? Eres la mestiza. Pero pronto eso dejará de ser un inconveniente, cuando te quite ese poder, tu quedarás reducida a la nada. Será triste, pero yo habré librado a la humanidad de un monstruo y yo tendré el poder para controlar a todos.— Afirmó haciendo que Serena comprendiera que su secuestrador no tenía la habilidad de controlar a las serpientes y que, como todos los villanos de las películas y las series que había visto, e incluso de los libros; la estaba subestimando. Y eso la gustaba, porque entonces ella podría preparar su huida, o por lo menos saber dónde estaba y como huir sin matar a la única criatura que se asemejaba a ella.
✶⊶⊷⊶⊷❍❍⊶⊷⊶⊷✶
—El rastro se desvanece.— Comentó Willa mientras ella y Scott entraban en la veterinaria donde ya estaban Derek y Isaac.
—¿Alguna idea de quién ha podido ser?— Preguntó Deaton, el cual estaba apoyado en la pared con los brazos cruzados.
—Solo que es como ella.— Respondió Derek con obviedad.
—Es decir, otro hombre serpiente.— Asumió Isaac con obviedad, justamente cuando Scott percibía algo extraño.
—¿Y si es la criatura que la controló?— Preguntó Willa haciendo que aquello pudiera ser la opción más segura, como también que fuera el dueño de la extraña sensación que Serena había estado teniendo a lo largo de todas aquellas semanas.
—Puede ser, pero tenemos una pista. Y tal vez un guía.— Dijo Scott mostrando a un lagarto, el cual llevaba enroscado sobre su cuello el collar de Serena, siendo aquello un claro indicio de que ella estaba bien, o por lo menos que seguía viva.
—¿Y si es una trampa de los cazadores?— Preguntó Isaac desconfiando de la pista.
—De serlo mi hermana no hubiera mandado a un lagarto, ni tampoco habría sido atrapada.— Respondió con obviedad Scott haciendo que todos vieran que el comentario del Beta era cierto, no solo porque Serena habría luchado, sino también porque de ser ellos, ella no les habría mandado un mensaje tan significativo como lo era aquel.
—¿Cual es el plan entonces?— Preguntó Willa sabiendo perfectamente lo que Scott diría.
—Ayudar a mi hermana y, posiblemente, evitar que haga una matanza.— Comento con obviedad.
✶⊶⊷⊶⊷❍❍⊶⊷⊶⊷✶
Aunque era cierto que Serena podía soportar el dolor y cualquier comentario hiriente, posiblemente las últimas veinticuatro horas se habían vuelto un infierno para ella. El dolor había aumentado y el hambre también, y cada segundo que pasaba una parte de ella se mentalizada de los insultos que su secuestrador la decía, pero aquello también nutria a algo. Su furia.
Posiblemente, Serena no era la clase de persona vengativa, por supuesto podía odiar a alguien, pero en aquellos momentos si quería verle muerto, quería ser ella la que le arrebatara la vida, y de lo que ella estaba segura era de una cosa, lo conseguirá. Ella le mataría, no por nada en especial, sino porque había enfadado, posiblemente, a la criatura errónea, y también porque había hecho que la ira y enfado acumulado se intensificará y, el problema venía en un hecho: solo quedaría satisfecha con la muerte de aquel despreciable y ambicioso ser.
—Bueno, lagartija. ¿Vas a decirme quién es tu padre o madre sobrenatural?— Preguntó acercándose a ella.
—Me gustaría saber esa respuesta, también. Cuando la descubra te avisaré.— Respondió sarcásticamente llevándose otro corte por parte de él.
—No juegues conmigo o esto terminará muy mal.— La advirtió al mismo tiempo que Serena percibía la presencia de alguien más. —Vaya, parece ser que tenemos la presencia de alguien más. No habrás sido tan tonta como para pedir ayuda, ¿verdad? Sería una lastima para ti haber atraído a quienes quieres hasta su funeral.— Comentó haciendo que la expresión de Serena, aunque se mantuvo igual, intentará ocultar los remordimientos y el miedo que aquello podía significar.
Mientras él se marchaba, Serena observó las cadenas, observando que estaban amarradas a la pared, pero si ejercía la fuerza suficiente podría soltarse. Inspirando con profundidad y rezando, aunque no creía en nada, Serena ejerció un poco de fuerza, la suficiente como para soltarse de una de las paredes y poder usar su mano derecha para liberarse de las otras esposas.
Una vez liberada de ellas, se puso de pies con dificultad, sintiendo el dolor de las heridas, las cuales, extrañamente, no había cicatrizado. Pero a pesar de ello, Serena se mentalizó de que debía de ahorrarse el dolor, porque lo que había descubierto y aprendido en las últimas horas era que a un hombre serpiente, solo podía matarlo otro de la especie. Y por suerte o desgracia ella era uno, y estaba comenzando a enfadarse.
Al salir del sótano, Serena escuchó sonidos y ruidos de pelea, haciendo que una parte de ella se preocupara, para después caminar con sigilo hasta el lugar, observando como su secuestrador estaba, literalmente, dando la paliza de su vida a Derek y a Scott, al mismo tiempo que veía como el hombre serpiente se disponía a matar a Scott, obligando a Serena a salir de su escondite, para luego atacar a agresor, haciendo que ambos se transformarán y, mutuamente, se regieran.
—¡Maldita mestiza!— Gritó dispuesto a atacarla, pero en esos momentos la transformación básica de Serena adquirió un nuevo nivel, haciendo que las escamas la invadieran y sus ojos se convirtieran en los de un lagarto, haciendo que él reconociera de quién era hija. —No, por favor. No lo hagas. No sabías que eras su hija. Perdón.— Dijo horrorizado, pero en la mirada de Serena no había ningún signo de piedad o de lastima, en aquellos momentos su expresión era impasible y tenía un único objetivo, matarlo. ¿Lo iba a hacer? Por supuesto, ni Derek ni Scott se atreverían a intervenir, no solo por qué estaban mucho más lejos de lo que parecía ser, sino porque ambos sabían que si intervenían serían los siguientes en morir.
—No hay piedad para aquellos que deciden atacar al Zilant.— Dijo Serena con una voz que no parecía ser la de ella, sino que se asemejaba a las noches de luna llena que había perdido el control. Pero, antes de que alguien pudiera detenerla o actuar, la adolescente introdujo su mano en el pecho del hombre, agarrando con fuerza su corazón, haciendo que él la mirará a los ojos horrorizado, para que instantes después su cuerpo cayera al suelo como un peso muerto, mientras que Serena mostraba, en su mano derecha, el corazón del sobrenatural.
✶⊶⊷⊶⊷❍❍⊶⊷⊶⊷✶
A pesar de lo ocurrido escasas horas atrás, Serena no había dejado de investigar sobre mitos y leyendas que pudieran estar relacionadas con lo que ella era. Pero en realidad no había nada, por supuesto había historias sobre serpientes, pero ninguna llegaba a ser, para ella, del todo convincente. De modo sabía que eran mitos y, por consiguiente, callejones sin salida. Pero a pesar de que la investigación era lo más importante para ella en aquel momento, Serena había terminado durmiendose sobre la investigación de Stiles, aunque no era de extrañar, ella se había pasado un día entero no solo siendo torturada, sino luchando contra su propio hambre al mismo tiempo que mantenía la unión con una serpiente para que la encontrarán. El problema residía en el hecho de que ella no se acordaba de nada, pero si las marcas insinuaban lo que ella creía, entonces se alegraba de no acordarse.
Al margen de todo ello, los problemas continuaban por el simple hecho de que ahora, la venganza de los Argent se había vuelto mucho más personal de lo que ya era, y era por eso por lo que Derek había tomado, posiblemente, la decisión más difícil de su vida, por qué en tan solo unos días la nueva vida que tenía, al margen de los problemas que tenía, se estaba demorando. Y, de alguna forma, una vez más, él era el responsable; como todas las anteriores veces. Pero aquella noche podría decirse que no era fácil, en realidad la anterior noche, cuando Serena desapareció, tampoco había sido fácil.
Pero a pesar de todo, debía de enfrentarse a una realidad, y era el hecho de que no solo su hermana se había vuelto uno de los principales objetivos de los cazadores junto a sus Betas, sino qué Serena, lo más seguro es que se convirtiera en uno. De Scott dudaba, sobretodo con lo que vio y escuchó la noche en la que el Kanima les dejó encerrados y, siendo sinceros, ellos no tenían una mayor relación que la de una alianza para detener al Kanima, así que el porvenir de Scott le daba igual.
Al llegar hasta las afueras de la casa de los McCall, Derek se percató de que sólo había una persona en la casa, y por la pertenecía del latido y del olor, la única que podía ser era Serena. Sin pensarlo mucho y aprovechando la oportunidad de que no había nadie, el pelinegro se acercó a la casa, accediendo a ella a través de una de las ventanas. Por su suerte la que uso era la de la habitación de Serena, así que era un alivio no actuar como un delincuente, aunque en aquellos momentos se estaba comportando como un acosador. Al acceder a la habitación de mestiza, todos los planes de él se desvanecienron al ver a Serena dormida sobre su escritorio, ante aquella escena solo pudo sonreír como un estúpido, y en aquellos momentos, en los que iba convencido de que debía de poner fin a su relación con ella para protegerla, se transformaron en dudas.
Pero lo que en un principio había sido una decisión clara, en aquellos momento se transformó en dudas. Y, a pesar del miedo que tenía de por sí, el mero hecho de herir a Serena le destrozada, por eso en ese instante aquella decisión que estaba clara se había vuelto en la concepción de que no podía suceder. Hacerlo provocaría más problemas que los que, seguramente, intentara evitar.
Así que, en vez de despertar a Serena como eran sus intenciones previas, únicamente la traslado a su cama y se acercó con las intenciones de marcharse, justamente después de apagar todas las luces.
—Cada día confirmas más el hecho de que estás desarrollando una personalidad de acosador.— Comentó Serena justamente cuando Derek tenía medio cuerpo fuera de la ventana con la intención de marchase, haciendo que el hombre lobo soltara un pequeño gruñido al haber sido pillado por ella. Pero no la juzgaba, se había ganado a pulso que le pillara.
—Venía a hablar contigo pero estabas dormida y leyendo cosas que no te van a llevar a ninguna parte.— Puntualizó haciendo que Serena pusiera una mueca de pocos amigos al mismo tiempo que fruncia el ceño confundida.
—¿Hablar sobre qué?— Inquirió Serena haciendo que Derek pusiera una expresión de desesperación, ya que ella se había quedado con aquel detalle que él hubiera preferido que ignorara.
—En verdad no es importante.— Alegó haciendo que Serena le mirase con una expresión de desconfianza.
—¿Vienes para decirme algo, y cuando quiero que me digas que es, asumes que no es importante?— Preguntó haciendo que Derek suspirara, sabiendo que no podía decirla, del todo, los verdaderos motivos por los que había ido.
—Es sobre lo ocurrido en la comisaría...— Empezó a decir mientras se sentaba en la cama, haciendo que Serena pensará en lo que ocurrió, pero solo tenía lagunas.
—No me acuerdo de muchas cosas, así que deberás de ser más específico.— Le pidió confundida de que no recordará nada posterior a ver a Matt fuera de la casa de Lydia y pequeños flashbacks de aquella noche.
—Los cazadores.— Concretó haciendo que Serena comprendiera lo que quería decir.
—Os buscan.— Asumió en plural, sabiendo que no solo era a él.
—Y se que no solo a Willa y a mi.— Afirmó haciendo que Serena entendiera, de alguna forma, que se refería a ella.
—Todos tenemos una diana en la espalda. Así que el problema de ser atacados por uno empezó la noche en la que mataron al Omega. ¿O me equivoco?— Ante su comentario, Derek no tuvo otro remedio que darla la razón.
—Aquello era diferente, el motivo se ha vuelto mucho más personal. Sobretodo por el hecho de que Victoria se ha suicidado por qué la mordí.— Comentó con frustración.
—Primero, ella nos intentó matar a Scott y a mi; y segundo, tu no la has matado, solo la has mordido. Creo que en ningún momento la has obligado a suicidarse, eso lo ha hecho su estúpido código de cazadores. Y si ahora están detrás de ti no es por que Victoria se haya suicidado, sino porque Allison se ha convertido en quien Gerard quiere que sea.— Afirmó Serena con completa certeza de que aquello venía provocado por el patriarca de lo Argent, ella conocía a Allison y aquella rabia y odio solo podía trasmitirlo otra persona, y por desgracia, Serena lo sabía por experiencia.
—¿Eso crees?— Preguntó Derek sorprendido por su deducción.
—Lo creo de la misma forma que venias con otras intenciones.— Aseguró haciendo que Derek pusiera una mueca de pocos amigos.
—Quiero evitar que salgas herida de esto.— Recalcó con preocupación.
—He sido secuestrada por una criatura como yo, creo que de quién debo de preocuparme son de otros sobrenaturales. No de unos cazadores.— Puntualizó haciendo que Derek sonreir al saber que nunca, a pesar de las circunstancias, ella cambiaría y, que nunca, dejaría de ser tan cabezota como lo era.
★★★
Adoro esta escena Derena.
Para aquellos que tengan dudas, Derek no la dice cuáles eran sus verdaderas intenciones. Eso lo hará más adelante, ya veréis todo.
Bueno, finalmente hemos llegado a este capítulo. Estaba deseando que llegara porque pasan muchas cosas que quiero explicaros.
Primero, en el mundo de los hombres serpiente los mestizos están muy mal vistos, son considerados abominaciones por algunos, de ahí que quiere matar a Serena.
Segundo, finalmente se desvela que es Serena. Sí, es una mujer serpiente pero encontró digo la especie. Es muy evidente, creo yo.
Bueno hasta ahí las aclaraciones. Pasando al punto de la escena Derena, realmente creo que esto es muy importante para lo que va a pasar a finales de estos capítulos (quedan 8 actuaciones de esta parte), y también para lo que sucederá en Cursed Blood, porque aunque no lo creáis en unos 15 capítulos ocurre de todo.
Regresando al tema que me interesa, la relación de Serena con otros miembros de su especie e incluso... de inseguridades (por así decirlo) se mostrarán en poco tiempo, y en Cursed Blood, es prácticamente un tema muy importante, porque es en él donde van a suceder las cosas más importantes, sobretodo con respecto a Serena. (Hay cosas que no os vais a ver venir)
¿Qué os ha parecido el capítulo?
Os leo ❤
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top