La pareja se encontraba saliendo del auto, pues habían llegado al cine.

— ¿Por qué tuvimos que traerlos? — cuestionó Steve al ver a todo del club audio-visual correr por todos lados.

— Son como nuestros hijos — Harrington abrió un tanto sus ojos— Siempre están apegados con nosotros.

— Bien — el castaño tomó la mano de su novia para después empezar a caminar con todos los adolescentes detrás de ellos.

Al llegar a la parte dónde les tocaba pedir sus palomitas y refrescos, Steve mandó a Lucas y Max a comprarlas, mientras que el se recostaba en el sillón con algo de sueño.

— ¿Dónde están los demás niños?— preguntó Addie, apesar de que ya no eran tan niños, la pareja siempre los vería así.

— Jugando con las sillas que dan vueltas — indicó mientras tenia sus ojos cerrados.

Addie volteó, ahí se encontraba los demás mientras que se reían al ver caer al pelinegro.

La chica al ver como su novio se tomaba un mini sueño, suspiró, al buscar con la mirada a los dos chicos que se encontraban en la fila visualizó también a Billy, el hermanastro de Max. Esté tenía sostenido del brazo a Lucas, mientras que a Max la empujaba detrás de él.

Adeline sin esperar a que Steve abriera los ojos fué directo hacia ellos, lista para defenderlos, pues odiaba cuando alguien molestaba a alguno de sus niños.

— ¿Qué te pasa idiota? Sueltalo — cuestionó mientras que tomaba a Lucas de su otro brazo jalandolo hacía ella — ¿Si comprendes que ellos son unos niños? — ahora tomó a la pelirroja.

Billy la veía un tanto enojado con sus puños cerrados — Escúchame bien, Addie — dijo con ironía su apodo — Aléjate de mi hermana, estúpida niñera — mencionó mientras jalaba a Max bruscamente haciendola caer.

Lucas ayudó a parar a la chica — Lástima que lo digas, no lo haré — se cruzó de brazos mientras veía que Steve venía hacía ellos.

— Déjala en paz — atacó Steve mientras se ponía adelante de su novia.

Addie volvió a ponerse enfrente de Billy — Con mis niños, no, con ellos no te metas — indicó a lo que Steve trataba de calmarla — No los vuelvas a tocar.

Steve observó a ambos, sabía que si Adeline no paraba lo más probable, era que Billy la llegará a golpear.

Harrington sólo se llevó a su novia hacía donde estaba todo el club observando.

Al llegar con ellos se acercó a la pelirroja y al moreno  — ¿Están bien? ¿Se lastimaron? — preguntó rápidamente.

— No nos pasó nada, Addie — calmó Lucas — Vayamos a la sala, ya está apunto de empezar — indicó Max mientras le daba una sonrisa a su niñera, siempre era la primera en defenderlos.

Todos se encontraban en sus asientos listos para que la función empezará, a excepción de Maxine y Adeline, las cuáles iban llegando a la sala con toda la comida chatarra.

— Gracias por defenderme de Billy — mencionó de repente la menor.

— No es nada — le sonrió — Sólo, te aconsejó que le digas a tu padrastro o a tu madre cómo te trata — la ojiazul agachó un tanto su mirada — Esperó realmente que no, pero, un día que el este realmente enojado, puede llegar hacer muchas cosas.

Max asintió levemente — De verdad agradezco que seas mi niñera, aunque también amiga.

Addie sonrió, también le gustaba saber que ellos no sólo la consideraban su niñera.

Sin esperar más, ambas enteraron a la sala empezando a repartir las palomitas a cada quien.

Todos el club audio-visual se encontraba en la cuarta fila de los asientos, mientras que Steve y Adeline en la quinta.

Steve, como lo había visto en la películas románticas, pasó su brazo por el hombro de la chica.

— Es muy aburrida está película — mencionó la ojiverde, Harrington quitó su brazo — Ya me dió sueño.

— Vayamos a caminar  — comentó el castaño — ¿Vamos?

— ¿Qué pasa con ellos? — cuestionó Addie. Steve los volteó a ver — Todavía falta para que termine — la chica asintió a lo que el sonrió.

La pareja se encontraba tomada de las manos, la caminada que según iban hacer, terminó siendo sólo un estar sentados en una banca, pues Steve se sentía cansado.

Cómo también, Harrington le había comprado unas flores a su novia. Pues a Addie le gustaban mucho las flores, no entendía el porque a algunas chicas no le gustaban, o tal vez sólo las amaba cuando su novio se las regalaba.

Steve tomó la iniciativa y se acercó más a Adeline, su mano la pasó por atrás del cuello de la chica, mientras que también jugaba con el cabello de su novia.

Antes de que la chica hablará sintió los labios de su novio encima de los suyos, admitía que se sentía algo extraña al saber que estaban en público.

Decidió seguir el besó, ya que Harrington sabía cómo tratarla.

El castaño se separó — Perdón por lo de hace rato — mencionó a lo que la ojiverde frunció el ceño — Lo de Billy.

Tomó las manos de su novia — Perdón por no defenderte de él — se disculpó un tanto avergonzado.

— No te preocupes — ella le sonrió causando un leve nerviosismo en el chico.

El castaño cerró sus ojos — Mierda, todavía me pones nervioso — comentó a lo que Addie soltó una risa.

Antes de que la chica hablará, notaron otras presencias enfrente de ellos.

— ¿Cómo la están pasando? — preguntó Lucas con sarcasmo.

— Genial, sólos — contestó Steve con ironía a lo que su novia soltó otra risa, está vez intentando evitarla.

— ¿Nos pueden llevar casa? —pidió Jane — Estoy cansada.

Addie asintió sin algún problema, todos se dirijeron a la salida para después ir directo al auto y dejar a cada niño en su casa.

• No soy muy buena para redactar besos o ese tipo de escenas, así que espero que haya quedado bien.