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Agradeció que su primera clase haya sido tranquila, no se encontraba con el mejor ánimo y estaba algo cansada con las tareas asignadas.
— Chicos, los veré luego debo ir por unos libros a la biblioteca — Dijo Samantha a sus amigos quienes se despidieron de ella para ir a la sala común.
Los pasillos estaban tranquilos después de todo, no hubieron nuevos ataques pero aún así los niños petrificados no habían logrado salir del hospital, de todos modos la profesora y jefa de Hufflepuff, Pomona Sprout junto con la enfermera Pomfrey hacían todo para ayudar a los alumnos y que las mandrágoras crecieran lo mejor posible para que hicieran efecto en ellos.
Harry seguía recibiendo miradas de miedo o molestia pensando que él era quien había causado esos crimenes.
— Samantha — Escucho —. Samantha, espera.
Al voltear se encontró con Lucas quien se acercaba trotando para alcanzarla, la muchacha lo espero para saber el motivo de su llamado.
— Hola — Dijo este sonriendo.
— Lucas, necesitas algo?
La serpiente entendía que debía hacer un mayor esfuerzo para agradarle y que una invitación a salir sería un retroceso por esa razón hablo con Snape sobre sus notas y en querer mejorar, sugirió que Butler fuese su tutora a lo que Severus lo acepto con tan solo ver mejoría en sus estudios sino el mismo se encargaría de buscar a otra persona.
— Pero...— Él la interrumpió.
— Fueron órdenes de Snape y no creo que quieras llevarte un castigo por desobedecer a un profesor — Samantha soltó un leve gruñido al saber que tenía razón y que su juego estaba saliendo a la perfección.
— Está bien, estaba camino a la biblioteca te parece comenzar ahora? — Pregunto con cierto desánimo.
Él asintió con una sonrisa algo coqueta y se atrevió a tomar los libros de la pelinegra tomándola por sorpresa.
— No creo que quieras poner más peso a tu brazo.
— Tranquila ya no me duele tanto a demás nunca hay que dejar de ser un caballero frente a una dama.
La chica fue por unos libros de pociones mientras que Lucas se encargaba de encontrar un lugar para los dos. A pesar que no estaba de acuerdo haría lo posible para que Snape viera que podía ser inteligente y buena tutora.
Price agitó un poco su mano para que lo notará, la leona dejo dos libros sobre la mesa y busco los pergaminos para realizar el trabajo. Samantha iba lento para que la serpiente pudiese comprender pero se distraía muy fácil.
— Lucas estamos aquí para estudiar, nos sacarán si nos siguen oyendo — Dijo la pelinegra causando que el muchacho resoplara y continuará leyendo.
Ella sonrió sin darse cuenta pero él lo noto y expreso la misma sonrisa dándose cuenta que estaba rompiendo la barrera que Samantha había creado para el muchacho.
Los pocos alumnos que rondaban por ahí se habían dado cuenta de los dos chicos sorprendiéndose un poco, Samantha solo los ignoro pero Lucas regalaba miradas fulminantes por doquier y sin mezquinar a nadie.
— Creo que estoy entendiendo — Dijo Lucas a lo que Samantha sintió alivio.
— Bien, pero tomaremos un descanso y mañana podremos seguir nuevamente — Dijo la pelinegra tomando sus libros.
Pero la serpiente la detuvo tomando su brazo, en ese momento escucharon como uno de los libros caía al suelo y no era de ellos. Samantha sintió pánico al ver a Oliver quien noto la presencia de los dos y expreso desilusión abandonado la biblioteca, la chica solo vio a Lucas y se despidió rápidamente queriendo ir por Wood pero este ya no estaba.
Se odiaba por no haber arreglado las cosas con el castaño, era una estupidez pero parecía que está estupidez crecía y crecía sin intención en detenerse.
[...]
Angelina no creía aún que Lucas se había salido con la suyo y había logrado que Snape aceptará que Samantha fuese su tutora, la morena expresaba su disgusto y en como había afectado a Oliver sobre todo los rumores que no tardaron en circular por el castillo diciendo que “Samantha Butler y Lucas Price son los nuevos novios de Hogwarts”. Para colmo la chica los desmentía pero la serpiente parecía aumentarlos cuando se acercaba a ella con cierto coqueteo.
— Angie, no quiero que Snape me de un castigo solo por desobedecerlo. Es más Lucas está entendiendo los contenidos lo que significa que pronto no necesitará mi ayuda — Dijo la pelinegra harta de las quejas que oía por parte de su amiga.
— Y mientras tanto? Sam ese tonto está feliz de oír su nombre en un rumor sobre ustedes dos — Dijo la otra chica —. Dime qué harás para que eso deje de circular?
— No tengo idea pero no voy a preocuparme, mientras que ustedes sepan la verdad me basta — Respondió —. Y con Oliver, he querido hablar con él pero me ha estado ignorado lo entiendo pero no puedo hacer nada si no quiere escucharme. Pronto vendrán las vacaciones y se que las cosas se calmaran por el momento solo debo ignorarlos.
Samantha tenía las esperanzas que las vacaciones fuesen de ayuda y que esos rumores se detuvieran.
— Trataré que Oliver te escuché, pero tú debes hacer algo para que esos rumores dejen de correr por el castillo sino será imposible que el terco de Wood quiera hablar contigo — La chica asintió.
En ese momento se levantó en busca de su lechuza quien había llegado con una nueva carta de su tía Julia. Angelina prefirió darle privacidad lo cual agradeció.
— Querida Sam;
Mcgonagall me ha mantenido al tanto con respecto a los niños petrificados y lo demás pero ha logrado convencerme que no vaya por tí, aún así quiero que te cuides por qué las cosas mi bella niña han cambiado y tu lo sabes. A pedido de Albus te quedarás en el castillo en vacaciones, por tu seguridad, cree que bajo su vigilancia estarás mejor, tomaré ese tiempo para encontrar una nueva casa quiero que ahora en adelante vivamos tranquilas y sin temor a que alguien nos haga daño...
PD: Si vuelve a ocurrir otra cosas, dímelo.
— Te quiere, Julia.
La chica guardo la carta para escribir una respuesta a Julia aceptando la propuesta en quedarse, también le agradeció y le prometió que se cuidaría.
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