•27: JinSon-parkGae•

Un sonoro beso quedó plantado en la mejilla de JinYoung.

Uno de los pasatiempos favoritos de Jackson, era besar aquellos cachetes llenos de chispas que adornaban la tierna carita de su novio.

JinYoung sonrió con aquel gesto; el amor que le demostraba Jackson, era enorme.

Por su lado, JinYoung, sentía que en ovaciones no demostraba correctamente —o suficiente— todo el amor y el cariño que tenía por su mayor.

Pero es que era tanto que no sabía cómo hacerlo, y tampoco quería espantarlo.

—Vamos, arriba Jinnie— Jack acarició el cabello del azabache, con una sonrisa, tratando de levantarse, más no pudo, JinYoung lo volvió a aprisionar en sus brazos—. Se nos va a hacer tarde, Jin.

—Un rato más, tenemos todo el día, hyung— puchereó, vaya debilidad para Jack.

—No, cielo, debemos empacar nuestras cosas para cuando ChangBin pase.

JinYoung rodó los ojos, y dejó largar un suspiro, que sonó más bien como un bufido.

—Oh, bien, tú ganas, Jackson— lo soltó un poco molesto.

Jackson notó su humor, haciendo que se acercara a él con una sonrisa para dejar un suave y tierno beso en su mejilla, siguiendo por ellos, hasta llegar a sus labios.

Un beso con sus suaves labios, lentos, que hicieron que el enojo del otro, bajara, soltando una pequeña sonrisa en medio del beso.

—Te ves tan lindo cuando sonríes— Jack le guiñó un ojo—. Ahora anda, ve y empaca tus cosas.

JinYoung se levantó, apenas a regañadientes.

—No entiendo para qué, si a fin de cuentas voy a terminar usando tu ropa— se señaló así mismo, mostrando la camisa de Jackson que llevaba puesta.

—Eso es cierto, pero igual, ve— se acercó luego de llevar su mochila—. Ve a tu dormitorio, prepara tus cosas, y yo pasaré por ti, ¿sí, bebé?

—Está bien— dijo dirigiéndose a la puerta, con un puchero en sus labios.

Jack lo vió alejarse. Si bien es cierto, él tampoco quería que se fuera; pero ChangBin pasaría por ellos y los demás para ir hacia la casa de playa.

Había prometido que él conduciría, YugYeom se había ofrecido, pero por ser el auto de su madre, ChangBin prefiero que Jack condujera.

—Bebé, olvidas algo— se acercó más rápido donde él, recibiendo la mirada brillante de JinYoung.

Con una mano lo tomó de la cintura, atrayéndolo a él, sintiendo como la mirada del menor se posaba en sus ojos, mientras colocaba sus bracitos en los fuertes de su novio.

Con su mano libre, Jack tomó su mejilla, y se acercó muy despacio hacia él, con una sonrisa claramente imborrable, contagiando también al otro.

Junto sus suaves labios con los del contrario, acariciándolos suavemente, en un suave compás que los dos disfrutaban, mientras que el mayor acariciaba su mejilla.

A los segundos, se separaron viéndose a los ojos, Jack notando el rubor de las mejillas de JinYoung, y el pecoso la hermosa sonrisa del que estaba frente suyo.

—Ahora sí, ve por tus cosas, paso por ti al rato.

Besó una última vez su frente, antes de dejarle salir, sin soltarse las manos hasta que estuvieron lo suficientemente lejos.

Dos estúpidos muy, muy enamorados.

Jack sintió el vibrar en su teléfono, esperando que fuera un mensaje de JinYoung, diciendo que lo extrañaba; pero era de ChangBin.

Binnie🐰:

Ya estás listo?
Te veo en vente.
Veinte*
10:38 AM

JAJAJSJSJS, vente, ah.
Como digas, okay :)
10:38 AM

Cállate.
Recuerda que te toca montar.
Manejar* fuck
Te burlas y no te llevo.
10:39 AM

JAJAJAJAJAJAAJAJAJ
De todos modos me toca conducir a mi, pff.
10:40 AM

SHH
Estaré ahí en un rato .
10:40 AM

Ok.
10:41 AM

Jackson apagó su teléfono aún riéndose un poco. ChangBin era todo un loquillo.

Se paró frente a su armario, con sus manos en su cadera.

Empacó camisas de más pues sabía que JinYoung le robaría aunque llevase su propia ropa, pantalones, medias, y unas cuentas cosas más.

Cerró la mochila, tomó su teléfono, y se dirigió hasta la habitación de JinYoung.

Mientras caminaba le pedía la dirección exacta a BamBam, para prevenir perderse en busca de ella.

También una foto, así se daría una idea de cómo es y sería más sencillo localizarla.

Cuando volvió a guardar su teléfono, vió a JinYoung sentado en el escalón antes de la puerta de su habitación, y sonrió.

Se acercó con una sonrisa, que se ensanchó aún más viendo como el chico jugaba con unas hormigas en el suelo.

Cuando estuvo cerca, besó su cabeza, sobresaltando un poco al menor, pero al verlo, sonrió.

—Te van a picar, Park-Gae— le dijo el mayor.

—Son mis amigas— excusó.

—Claro, sí— río—. Despídete de ellas, hay que ir a la habitación de YoungJae.

De la mano de Jack, los dos emprendieron camino hasta la habitación del menor de sus amigos, donde en teoría ya debía encontrarse con JaeBeom y YuGyeom.

La verdad no estaba tan lejos, debían bajar las escaleras, dar la vuelta, y estarían frente a la habitación del de mechas menor.

Justo cuando habían llegado al último escalón, visualizó a sus otros dos mejores amigos caminando, y cargando un bolso cada uno.

Se saludaron con un gesto, avanzando nuevamente hasta llegar hasta aquella puerta.

Ya estando cercanos, observaron que estaba abierta, notando como de ella salía YoungJae con una mochila, y BamBam con otra.

También se saludaron con otro gesto.

—¿Están todos listo?— se escuchó la voz de ChangBin desde el pasillo de la entrada. Justo a tiempo.

—¿Tienen compañero de asiento?— preguntó Mark detrás de él—. Cedo mi campo, quiero ir con mi primo.

ChangBin volteó con una mueca.

—Es broma— dijo—, pero si quieres no es broma.

—Yo voy con Yugy— saltó BamBam, recibiendo una mirada de parte de el nombrado.

—Yo voy adelante, con Jack— sonrió, pasando la vista a su mejor amigo—. Eso significa que YoungJae le toca con JaeBeom— le guiñó un ojo, notando el rojo del rostro del menor, éste no dijo nada.

—Bien— habló Jackson—. Vamos, que no se nos haga más tarde.

Caminaron los ocho hasta el auto del señora Seo. Mark tenía razón cuando dijo que era espacioso, y eso que la señora sólo tenía dos hijos.

Acomodaron unas cuántas maletas en el baúl, y el resto decidieron llevarla en sus regazos. Teniendo todo, se subieron en parejas al asiento.

Adelante iba Jackson y a su lado JinYoung, luego YuGyeom y BamBam, detrás de ellos ChangBin y Mark, y en los últimos asientos, JaeBeom y YoungJae.

—No queremos accidentes, así que abróchense los cinturones, gracias— la voz del conductor hizo presencia, para luego encender el motor—. Es un poco lejos de aquí, así que si quieren pueden dormir.

Por el retrovisor, él les echó el ojo a todos, y sonrió.

Qué bonito círculo de amigos tenía.

—Si te da sueño, puedes dormite, Park-Gae— el auto se puso en movimiento, avanzando.

—Desc-

—¿Park-Gae?— los de atrás de ellos dos dijeron al unísono.

—Cállense— dijo el azabache, ruborizado—. Descuida, Jackie, te haré compañía.

Nuevamente, por el retrovisor, visualizo a YoungJae y JaeBeom compartiendo ya su tiempo juntos.

Mark y ChangBin compartían un auricular escuchando música, mientras el menor de esos dos sostenía a cabeza del mayor en su hombro, pero sin observarlo.

BamBam y YuGyeom hacían lo mismo, escuchando música, mientras Bambam descansaba su cabeza en el hombro de su novio, y el otro aprovechaba y jugaba con sus cabellos castaños.

Una última mirada hasta atrás, y observó cómo YoungJae caía dormido en el hombro de JaeBeom.

Pasó su vista al frente. A pesar de que estaba poco alejado de la ciudad, trataría de llegar rápido y con cuidado hasta aquel lugar del que se encargarían de cuidar.

Su vista se fue hacia su lado, viendo cómo JinYoung disfrutaba un poco del viento que revoloteaba en su cara.

Jackson pasó su mano por su pierna, acariciándola con una sonrisa.

Esperaba tantas cosas buenas de ese viaje.

—¡Nosotros pedimos el cuarto más grande!— el chillido de BamBam no se hizo esperar cuando Jackson aparcó el auto.

—Mierda, Bam— JinYoung se volteó antes de abrir la puerta del acompañante—, pero Jack es quién está a cargo, así que nosotros tendremos la habitación grande, querido.

El castaño hizo un puchero, el azabache sólo reía.

—¿YoungJae sigue dormido?— preguntó Jack cuando se bajó.

—Desde que salimos de Seúl— respondió JaeBeom con una sonrisa, viéndolo.

—Qué bueno que tienes brazos fuertes— Mark se bajaba del auto—, así no tienes complicaciones de bajarlo, aunque no creo que a él le importe— le guiñó un ojo.

Entre todos, bajaron las maletas del auto, dejando a JaeBeom con un dormido YoungJae dentro, hasta que Jackson abriera la puerta para poder llevarlo al cuarto donde dormiría.

Quedaron boquiabiertos al entrar; era espacioso, bastante ordenado, de dos plantas y con varias fotos de gatos, que encantaron a JaeBeom.

Por un momento Jackson temió por la casa, con esos siete durante casi dos semanas ahí.

—Imagino que ustedes dos van a dormir juntos— señaló a YuGyeom y a BamBam, quienes asintieron—. Bien, busquen un cuarto.

—Yo compartiré con Jaenie, permiso— Mark pasó entre medio de todos ellos, buscando una habitación para compartir con el menor.

—¿Y por qué no conmigo?— ChangBin elevó sus cejas.

—¡No me hables!— gritó subiendo las escaleras.

El resto sólo observó.

JaeBeom subía con cuidado las escaleras, con YoungJae dormido aún, siguiendo a Mark hasta el cuarto que compartía con su primo.

Tuan abrió la puerta, topándose con una linda habitación.

Paredes lisas, una cama de dos plazas, una televisión, y no pudo ver nada más, pues sólo observó como JaeBeom dejaba a YoungJae en la cama.

Estaba por darse la vuelta, hasta que lo detuvo.

—Puedes quedarte una de estas noches con él, si quieres— decía de espaldas, tomando su mochila—. No me molestaría.

JaeBeom sonrió—. Lo haré. Gracias.

Mientras tanto, en la habitación principal, JinYoung revolcaba la mochila de Jackson en busca de alguna de sus prendas.

Dió con una camisa negra que aún conservaba su perfume. Era dos tallas más grandes, así que el usarla le dejaba muy cómodo.

Jackson salió del baño, y lo observó a medio vestir, viendo cómo lucia aquel pedazo de tela que le quedaba muy bien, y sonrió.

Se acercó caminado, y lo abrazó por detrás, dejando su nariz en su cuello, aspirando su olor.

—Tenias razón que te pondrías mi ropa— dejó un beso en su cuello—. Por suerte traje de más.

JinYoung río—. Siempre tengo razón.

El otro hizo un sonido afirmativo, sacando el agarre que tenía con JinYoung, dejando sólo sus manos entrelazadas.

—¿Qué quieres hacer hoy?

—Podríamos salir a cenar y luego caminar en la playa.

—Espero que el resto haya traído suficiente dinero entonces— se sentó en la cama.

—¿Eran todos? Pensé que hablabas sólo de nosotros dos— JinYoung tomó asunto en el regazo del mayor.

—Podemos salir nosotros dos uno de estos días, tenemos dos semanas aquí, y toda una vida por delante.

JinYoung suspiró, era cierto—. Podemos jugar al Uno, quien pierda, paga la cena, ¿qué dices?

—Digo que no seré yo quien pague— sonrió.

—Es porque tú haces trampa— se levantó de brazos cruzados.

—Poner un más cuatro no es hacer trampa, JinYoungie.

—Claro, cómo no— dijo saliendo de la habitación, dejando a Jack riéndose solo.

Minutos después, Jackson salía del cuarto, topándose con JaeBeom en el camino.

Parecía que ya se había puesto cómodo en el cuarto que compartía con ChangBin.

Traía ropa más cómoda y sandalias, casi igual que Jackson, sólo que el otro portaba una camisa sin mangas, y estaba descalzo.

Bajaron hablando trivialidades, notando como la mayoría ya se encontraba en la sala, unos usando su teléfono, otros hablando entre ellos.

Contando las cabezas, le hacían falta dos pollitos.

Y fue que no notó la otra cabellera castaña, ni tampoco a Mark.

Pero si vio a ChangBin, cosa que le extrañó; generalmente esos dos siempre estaban niñato cuando todos se reunían.

Así por el momento, sólo decidió sentarse con JinYoung, y esperar a que bajaran para comenzar a jugar.

El azabache lo notó al toque, sentándose en su regazo, descansado su cuerpo en el otro, con una sonrisa en sus labios.

Jackson pareció desaparecer a todos en su campo de visión, pues sus ojos sólo se concentraron en el hermoso chico que tenía en frente.

Lo tomó de la mejilla, dejando un delicado beso en ella, sonriendo, al igual que el otro.

—Eres tan hermoso, Park-Gae— dejó otro beso y la sonrisa de JinYoung no cesó, y creció.

—Iugh, busquen un cuarto.

—Luego no se quejen de que somos nosotros.

—Dejen sus melosidades para más tarde.

—Cállense— JinYoung rodó los ojos.

Largos días les quedaban.

Espero les gusta el capituló.
¡Besos! <3

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top