Pov. Jungwon

Después que la señora Minako había bajado con la pequeña niña en brazos, caminamos hasta la parte de atrás de la casa, donde un hermoso jardín lleno de arboles y arbustos repletas de flores nos recibió, junto a una mesa con utensilios acomodados en el centro

Ahí también estaba Rei que saludo a mis padres y a mí, no compartí mucha palabra con ella, ya que mi atención estaba en otro lado. Ni-Ki se mantuvo serio desde que me vio, su rostro no transmitía nada. Tan solo era vacío y neutro

Era tan raro verlo así porque jamás lo he visto en esa faceta, parece que por fin se a dado por vencido y ahora se muestra indiferente conmigo, saludo de manera educada a mis padres y para mi solo fue un hola, para mi fue muy frío pero en las rostros de los mayores se veía una sonrisilla rara ¿Qué era gracioso?

Poco tuve que pensar porque alguien más se agarró de mi pierna, al ver hacia abajo estaba la pequeña niña de cabello negro y mejillas apretables, que daban ganas de darles un beso en cada una. Me agaché para saludarla y ella se abalanzó a mi

Desde ahí pude notar su aroma, era uno suave y muy exquisito, como el de un Omega

- Le agradas -escuché a mi al frente donde aún Ni-Ki estaba, no me había dado cuenta que se había acercado - No muestra confianza así a gente que no conoce

-¿Es Omega? -pregunté mientras cargaba a la pequeña en mis brazos y ella empezó a oler mi cabello o a babearlo

-Si, ella nació siendo Omega

Mire a la pequeña porqué estaba tocando mi rostro, más bien tocaba mi mejilla con su pequeña mano, me pareció raro cuando volteo a ver a Ni-Ki  y me volvió a mirar a mi pero sonriendo ¿Qué hacía?

Nos llamaron para comer y camine con la pequeña en brazos, ella empezó a llamar a Ni-Ki porque lo miraba y estiraba sus bracitos hacia él, asi que me acerque para dársela. Por alguna razón no quise mirarlo y solo mantuve mi cabeza gacha para que pueda agarrar a la pequeña, él era más alto que yo y cuando se inclino pude sentir su aroma un poco más fuerte. Parece que estaba usando supresores porque este era apenas percibido ¿No sé supone que los supresores ocultaba por completo el aroma de una? Parece que las supresores que usaba no eran muy buenos

Cuando la pequeña ya no estaba en mis brazos, camine hasta sentarme cerca de mis padres, Poco después la comida fue servida y empezamos a comer

Los adultos son los que hablaban más, los señores Nishimura eran buenas personas y muy amigables, observé a la señora Minako para analizarla mejor (era mi forma de estudiar a las personas, nada importante), su piel era bonita y sus labios también, se podría decir que era como los de mi papá, porque eran gruesos

La forma de su sonrisa y el sonido de su risa, muy escandalosa pero era agradable, si así se le podía decir porque sonaba como si limpiará vidrios

Una vez escuché que Ni-Ki era hijo de Nishimura Minako por eso le di una mirada a Ni-Ki , tenían algo de parecido, se podía ver en la forma de los labios rosados y un poco grueso. Por eso era bonito. Tenía que admitir que Ni-Ki no estaba para nada mal a pesar que lo haya molestado muchas veces diciendo que no lo era

Al terminar de comer, Haruna, hermana de Ni-Ki empezó a jugar nuevamente en forma de lobo, era muy bonita y tan curiosa que daban ganas de jugar con ella

-Si sigue jugando terminara destruyendo todo - el aroma y aquella voz me hicieron girarme de inmediato para mirar a Nishimura Minako, esta también me miro desde arriba, sonriendo - ¿Me podrías hacer un favor?

-Claro - conteste al instante y también un poco curioso por aquel favor

-Por esta zona hay un pequeño parque donde siempre llevamos a Haruna para que jugué pero ahora no podemos - me dijo mirando hacia donde estaba mis padres hablando con el señor Kento- Quería saber si podrías ir a acompañarlos para que juegues con ella, me di cuenta que le agradas y se que estará muy feliz estar contigo más tiempo

-¿Qué? -fue lo único que pude formar por el momento

-No tengas miedo, está cerca de aqui y Ni-Ki te acompañará para traerla cuando ella ya esté cansada -habló nuevamente y yo no sabía que contestar

Mire hacia donde estaba Ni-Ki con la pequeña Haruna jugando, apenas podía con ella y la alejaba donde estaban los jarrones con plantitas pequeñas. En cierta manera no sabría si a Ni-Ki le agrade la idea, a mi no me agrada pero es por Haruna, creo que no sería tan malo, además tendría la oportunidad de disculparme como era debido sin muchos testigos, seria menos vergonzoso para mí

-Si puedo - dije y la señora Minako me sonrió nuevamente

Solo bastó unos minutos para vestir nuevamente a Haruna, quien iba en brazos de Ni-Ki bajando las escaleras del segundo piso de la casa, cargando una pequeña mochila en el hombro derecho. La señora Minako se acercó a sus dos hijos, a la pequeña le dio un beso en la frente y a Ni-Ki le dijo algo que no escuché más un beso en la frente también. No voy a negar que me causo ternura ver como cerro los ojos con una pequeña sonrisa recibiendo esa muestra de cariño. Al menos compartimos algo en común, al parecer también le gusta los mimos de sus padres

Minutos después ya estamos caminando por la calle, con cubrebocas negro y gorras del mismo color. Si bien era normal ver a los artistas caminar por las calles famosas de Seúl pero nosotros como hijos tenemos que cuidarnos porque somos más vulnerables. Atrás podía sentir como nos seguía un auto negro, de seguro eran los guardaespaldas de Ni-Ki

Ya estábamos en el parque, era un espacio de vegetación pública, habían parejas paseando, niños jugando y algunos cachorros en forma de lobo también jugando. Ni bien Ni-Ki dejo a Haruna en el suelo, ella se transformó y empezó a jugar y acercarse a los demás niños que sin problemas jugaron con ella

Mientras que la, ahora, pequeña lobo jugaba con otros niños, nosotros dos nos sentamos en el pasto, observándola desde lejos sin decir nada

Este podría ser el momento perfecto para empezar a disculparme pero estaba muy nervioso, jugaba con los dedos de mis manos. Para mi era muy dificil admitir mi culpa y sobre todo disculparme pero tenía que hacerlo, estoy consiente de ello

-Ah, Ni-Ki - dije, mi voz salió muy baja pero aún así volteo a mirarme - Ah... Yo.... - mi voz se cortó

-¿Qué sucede? - pregunto tranquilo

Trague la saliva acumulada en mi boca pero aún así no podía hablar, parecía que mi legua se enredo dentro de mi boca para evitar soltar algo más. Mi maldito orgullo me lo impedía

-Ah Yo, este... - maldición ¿Acaso no puedes hacer nada bien? Me regañe - Nada, ya...Se-Se me olvido

-¿Estás bien? - me volvió a preguntar pero esta vez girando su cuerpo completo para estar mirándome de frente como yo lo hacia

-Si, si. Estoy bien - menti para volver a ver donde estaba Haruna pero frunci el ceño al ver que estaba muy cerca a un señor, sentada mirandolo en forma de humana - Ni-Ki - lo llame

Fue lo único que dije para luego señalar donde estaban, Ni-Ki fue el primero en levantarse y correr hacia donde estaban, cargo a Haruna y la oculto en forma de protección después de envolverla en una manta que tenía en las manos. Yo también me levanté y me acerque corriendo hasta llegar a su lado

-Wow, has crecido tanto que por poco no te reconozco. fue lo que dijo el desconocido hacia Ni-Ki, lo mire para que pueda explicar pero lo único que vi fue una expresión llena de asombro y ¿Miedo?

- Jungwon, vámonos  - habló hacia mi

Ni-Ki giro rápido pero no dió un paso más porque la gran mano del hombre lo sostuvo del hombro, impidiendo que se vaya y dejándolo completamente quieto

-¿Acaso no saludaras al hombre que te dio la vida, Riki?

Tan solo eso me basto para saber que pasaba y quien demonios era aquel señor

maratón 4/9