𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 8: 𝐄𝐬 𝐢𝐧𝐮́𝐭𝐢𝐥, 𝐊𝐚𝐭𝐬𝐮𝐤𝐢.

Gritaba aquellas palabras ante el pecoso, sentía cada frase salir y alivianarlo, había retenido aquellos pensamientos tanto tiempo. ¿Por qué mierda era tan idiota?, ¿por qué no podía decir lo que sentía normalmente como cualquier persona lo haría? Podría haber evitado todo esa maldita situación, Deku no estaría en ese estado tan crítico, ni su vida correría peligro.

Pero, ya no tenía caso arrepentirse, ya no serviría de nada ser sincero con respecto a Izuku. El pasado no puede cambiarse, y debía abstenerse a las consecuencias de sus estúpidos actos.

¿Qué se hace en esos días donde te duele la vida?, es triste, aquel dúo tan perfectamente imperfecto acabó de la peor manera, y todo por Katsuki, todo por su orgullo, todo por rehusarse a admitir que Deku tenía más madera de héroe que él, por no soportar ver al pecoso reír con otras personas que fueran él. Todo, todo fue su culpa.

—¿Qué mierda haces aquí?, debes ser demasiado imbécil para estar en el hospital sabiendo que alguien podría entrar en cualquier momento.—sintió una mano posarse en su hombro. Volteó instantáneamente y pudo ver la cara de su amigo Eijiro, su rostro no tenía su típica sonrisa, aunque claro, no era momento para reír, aún así era raro escuchar al pelirrojo decir alguna grosería.

—¿que putas te sucede?—se puso a la ofensiva. Estaba segura de que Kirishima no estaba contento con él. Detrás de su amigo estaba Kaminari, a diferencia de Eijiro estaba completamente en silencio apoyado contra la pared con su cara neutra, pero tampoco daba buena espina aquella mirada del rubio eléctrico. —¿a quien llamas imbécil?—frunció el ceño levantándose de la silla para intimidar al pelirrojo.

—¿tienes el descaro de preguntarme que me pasa?, tan solo mira a Midoriya, ¿quién crees que lo puso en ese maldito lugar?, vamos Bakugo. ¡Tu golpiza lo dejo en ese estado!, ¡tu tienes la culpa de hacer que Midoriya este al borde de la muerte!—lo tomo del cuello de su camisa, sus ojos carmínes ardían de furia, ver a sus amigos dañados los enojaba, pero saber que uno de sus compañeros dañó gravemente a alguien, le ponía los pelos de punta. —Eso no es ser un hombre, eso es ser un idiota, un maldito asesino y un puto cobarde. ¿Entiendes?

Katsuki retiro la mirada empujando al más bajo, se puso en su posición de batalla, no permitiria que Eijiro lo golpeara, aunque cada maldita palabra que salía de su estúpida boca era verdad.

—Cierra la puta boca. Tienes razón, yo cause esto, pero eso no quiere decir que tengas el maldito derecho de hablarme de esa asquerosa manera, Idiota. ¿Estas seguro de que quieres luchar conmigo? ¡JA!, sueñas. Aquí está bastante claro quien es superior entre los dos—sonrió ladinamente, creando una pequeña explosión en su mano para acojonar al pelirrojo. —Si quieres hablar de hombres, tu no entras en esa categoría. No divagues como si tu no tuvieras un poco de culpa.

—¿que dices?, nosotros no golpeamos a Izuku, ¡fuiste tu!, tu eras quien metía su cabeza dentro del excusado hasta que dejaba de moverse. Tu eras quien lo golpeaba hasta que suplicaba por su vida o quien le ponía el pie para que tropezara en el almuerzo. Tú , Bakugo, tú, nosotros no hicimos nada de eso e n ningún momento —el rubio perdió toda su serenidad, apuntaba al cenizo enojado, diciendo cada palabra con sus ojos lagrimosos. ¿Kaminari llorando?, eso era un punto inimaginable, él era el típico idiota que no le preocupaba nada ni nadie. Bakugo estaba anonadado, cada maldita palabra era real, joder, tan reales que hacían punzar su corazón de dolor.

Chasqueó la lengua, no dejaría que sus supuestos amigos lo culparan por todo—creo que no recuerdas unas malditas cosas, ¿olvidan cuando Deku les rogaba ayuda?—aquello dejó en blanco a Denki y Eijiro. —¿ustedes que hacían?, tan solo desviaban la mirada como si nada pasara. ¿Y se hacen llamar futuros heroes? Tan solo solo mierda, mierda al igual que yo. No intenten venir en el peor momento a culparme luego de haber sido mis cómplices solo para sentirse héroes— miró de reojo al pecoso, ellos eran los idiotas que habían acabado con su vida, odiaba que hasta hace poco nadie veía su sufrimiento, pero de la nada, ahora en aquel estado, todos los gusanos parecían salir de la tierra a llorar por él a su lado, y él era uno de esos malditos gusanos.

—tks...—Eijiro apretó sus nudillos. Era verdad, Katsuki no se equivocaba al decir aquello. Él también era un cobarde, un cobarde que no pudo defender a alguien que consideraba su amigo, sólo por el miedo a perder a otro, a aquel rubio cenizo que no era mas que pura escoria de cuarta. —Midoriya una vez me dijo... Que quería ser alguien genial como yo, alguien que siempre defendía a los débiles y luchaba por la justicia, pero...cuándo ví sus ojos cuando rogaba por ayuda, y...y cuando solo ignore aquella súplica...—no pudo contener su llanto, toda esa mierda lo estaba haciendo caer en cuenta de que era alguien similar a Bakugo. —estoy arrepentido de esto, de todo lo que he hecho con Midoriya desde que te conocí. Maldito odiota. No mereces estar vivo, ¡deberías estar en el lugar de Izuku!—lanzó un puñetazo
al rostro del cenizo, había activado su quirk en aquel instante. Katsuki cayó al suelo, soltando un bufido, efectivamente le había dolido.

—¡Kirishima, dijimos que no llegaríamos a este extremo!—El rubio eléctrico corrió hacia el más alto a ayudarlo. Pero Bakugo tan solo permaneció en el suelo, imparcial, sin moverse. —viejo...

—¡MIERDA, PUTA MIERDA!—gritó el cenizo sin mostrar su cara—¿¡CREES QUE NO ME SIENTO MAL CON TODO ESTO?!, ¡DEKU ERA MI MALDITO AMIGO DE LA INFANCIA, PASÉ CADA MALDITO SEGUNDO SE MI NIÑEZ CON ESA PUTA ESCORIA!, CLARO QUE LO QUERÍA!—su voz quebrada demostraba que había comenzado a llorar. Se levantó precipitadamente del suelo, golpeando a Kirishima en el estómago. —¡Joder, también estoy sufriendo, también me arrepiento!, soy un puto ser humano a pesar de que me comporte como un monstruo!, ¡tengo el mismo derecho que tú de ser perdonado, pero aún así, tu estas aquí reprochando cada mierda que hice ne lugar de ayudarme!, ¡TAMBIEN ME DUELE LO QUE DICES!, YO FUI QUIEN ACABO CON DEKU!, PROMETI ESTAR A SU LADO SIEMPRE, PROMETI SER SU HÉROE SIEMPRE, LE PROMETI TANTAS MIERDAS Y LO UNICO QUE HICE FUE LASTIMARLO Y LO DEJARLO ATRÁS, RIENDO CUANDO TROPEZABA, CUANDO FALLABA, CUANDO ME PEDÍA QUE DEJARA DE GOLPEARLO!

Actualice demasiado rápido /gAsp

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top