- Ni-Ki entró a la carpa instalada para los miembros VIP, sonriendo a las personas que conocía. Y sabiendo que la mayoría, si no es que todos los presentes, ya conocían el fracaso de su antigua relación con el importante alfa Kim SeonWoo.

Además, estaba completamente seguro de que la semana pasada había salido publicado un artículo en una revista de chismes avivando la curiosidad sobre el que supuestamente era su nueva pareja.

Todos se llevarían una desilusión al enterarse que su relación con el famoso beta Shim JaeYoon no era más que un truco publicitario inventado por su representante.

Su separación del famoso y cotizado alfa Kim había salido en las portadas de todas las revistas, provocando un escándalo porque todo el mundo los creía una de las parejas más felices de Hollywood. Muchos habían seguido su noviazgo de cuento de hadas, convencidos de que eran el alfa y omega hechos el uno para el otro, «predestinados» les decían unos. Había sido una sorpresa cuando todo terminó después de tres años.

Ni-Ki había esperado que fuera una separación amistosa y discreta pero gracias a la prensa eso había sido imposible. Los rumores volaban y más con titulares como: «Omega ganador de un Oscar deja a su Alfa por otro», «Alfa Kim deja al actor por una modelo» y muchos más, pero ninguno de ellos era cierto.

Si, Ni-Ki había sido el que rompió con SuNoo, pero no había nadie más. La única amante que había tenido su, en ese entonces, alfa era el trabajo.

El primer año de noviazgo había sido todo lo que Nishimura había soñado. SeonWoo era el alfa perfecto para él, estaban completamente enamorados y no podían separarse ni un momento. Al segundo año todo empezó a cambiar, la carrera de SuNoo se volvió más importante que su relación. Por más que Ni-Ki le mencionara que se sentía solo, que su omega y él lo necesitaban, no sirvió de nada.

Riki incluso había rechazado un par de películas para estar más tiempo con SuNoo pero a él no parecía importarle pues seguía trabajando sin descanso.

La gota que terminó por derramar el vaso fue al terminar de grabar una película. Aunque SuNoo había ido a Francia varias veces durante la producción de la película, Ni-Ki quería estar a solas con él, sin personas interrumpiéndolos todo el tiempo, que era prácticamente imposible en un rodaje.

Para su comodidad Ni-Ki alquiló una casa en Barcelona para pasar unos días. Ahí Ni-Ki esperaría su llegada impaciente y cuando estuviera SuNoo con él, le daría la noticia de que iba a ser padre.

Pero SuNoo nunca llegó.

En cambio de eso, lo llamó a su celular para decirle que había surgido algo importante y sugirió que lo dejaran para otro momento. Riki se enojó estallando por fin, SuNoo le respondió que no era el momento para sus dramas de omega. Ambos discutieron por teléfono y cuando Riki no aguantó más terminó la llamada.

Esa misma noche, Ni-Ki empezó a sangrar y perdió a su cachorro. Un cachorro del que SeonWoo no sabía nada. Mucho menos sabía que Riki había pasado esos días en Barcelona al cuidado de un médico y una enfermera privados.

Había sido un completo milagro que los medios no se enteraran y lo único que SuNoo sabía era que a los días siguientes Nishimura lo estaba terminando.

Riki miró alrededor, sin dejar de caminar y sin pararse para hablar con nadie. Había demasiada gente pero afortunadamente los de seguridad se encargaban de que los reporteros no molestaran a los famosos que habían acudido para ver el partido y Riki estaba más que agradecido.

Era un completo alivio porque llevaba días siendo perseguido por los paparazzis, especialmente después de que publicaran el rumor sobre Jake.

Decidió pasar el verano en los Hampton, asistiendo al campeonato de polo que organizaba el propietario de la hacienda «Siete Robles» de Bridgehampton todos los años.

Necesitaba relajarse pero debía tener cuidado porque había chismosos en todas partes y aquel lugar no era una excepción. Especialmente desde que la omega Miyawaki Sakura había comprado una casa en la zona.

Sakura era la reina de los chismes y los periodistas se enteraban de los secretos de muchos famosos que tenían casas de verano en los hampton gracias a ella.

—¡Ni-Ki, cariño!

Ni-Ki hizo una mueca al verla, era como si la hubiese convocado. Estuvo a punto de seguir caminando pero eso sería una grosería y aunque Sakura era alguien a quien no quería como amiga, tampoco la quería como enemiga. Respiro profundamente y se dio la vuelta.

—Hola Sakura ¿Cómo estás?

— Riki cariño olvídate de mí, ¿Cómo estás tú? —le preguntó fingiendo preocupación mientras le daba un beso al aire —. Me enteré de lo mal que se está portando tu alfa contigo.

Nishimura levantó una ceja, podía imaginar las mentiras extendiéndose por todas partes.

La verdad es que SuNoo no le había hecho nada en absoluto. De hecho, era como si nunca hubiera existido para él. No sabía nada de SeonWoo desde que se separaron un año atrás, pero lo había visto en marzo, durante la entrega de los premios de la academia.

Como él, SuNoo había ido solo, pero eso no solo sirvió para estimular a la prensa. Cuando aceptó su Oscar como mejor actor secundario, le había parecido lo más natural darle las gracias por el apoyo que le había ofrecido durante el rodaje. Pero los medios habían disfrutado su discurso, lanzando rumores sobre una posible reconciliación.

SuNoo se había negado a comentar sobre el tema y él había hecho lo mismo. No tenía sentido decir algo cuando los dos sabían que no existía una reconciliación posible. Su relación estaba rota y estaban intentando rehacer sus vidas, cada uno por su lado.

Pero rehacer su vida le estaba costando más que a SeonWoo, quien no perdió el tiempo. Ver esas fotos de su ex alfa con una beta le había dolido hasta su omega interior, pero no intentó devolverle el golpe. En lugar de eso, Riki se había centrado en su carrera.

— Sakura, estás equivocada —le dijo con su mejor sonrisa —. SuNoo no me ha hecho nada. Al contrario, hemos decidido seguir como amigos.

Eso no era verdad, SuNoo lo odiaba.

Según unos amigos comunes, jamás lo perdonaría por haberlo dejado y humillado. ¿Un omega terminando con un alfa prestigioso? ¡JÁ! Nishimura Riki le había dado en el orgullo a Kim SeonWoo.

De todos modos, Ni-Ki tampoco lo perdonaría por no haber estado a su lado cuando más lo necesitaba.

—¿Enserio? — exclamó Sakura.

—No puedes creer todo lo que oyes por ahí.

—¿Y qué es eso que dicen sobre Jake y tú?

— Jake y yo somos amigos, nada más.

—Pero tengo entendido que SuNoo está saliendo con una beta, la modelo Kim DaeYun.

Ni-Ki sintió que le ardía la cara al escuchar el nombre de la beta pero intentó disimular.

—Como te he dicho antes, no puedes creer todo lo que vayan contando por ahí.

Sakura hizo una mueca.

—¿Y lo que he visto con mis propios ojos? Estuve en Los Ángeles y vi a SuNoo con DaeYun en una fiesta. ¿Cómo explicas eso?

Ni-Ki se rió, aunque no fue una risa alegre.

—No tengo que explicar nada. SuNoo y yo llevamos un año separados, él tiene su vida y yo tengo la mía.

—¿Pero siguen siendo amigos?

Sakura sería la última persona en saber si eran amigos o no. Aún recordaba la columna que publicó el año anterior, diciendo que SeonWoo lo había contratado para su primera película porque se acostaba con él.

Recordando que una mentira se respondía con otra, Ni-Ki le dijo:

—Si. SuNoo y yo somos amigos. Hace falta algo más que una separación para convertirnos en enemigos.

Esperaba que no le preguntara a SuNoo sobre el asunto porque...

—¡Mira quien esta aquí!

Riki sintió que se le erizaba el vello de todo su cuerpo y eso solo podía significar una cosa.

—Parece que tu ex acaba de llegar —le confirmó Sakura —. Que bueno que son tan amigos...

Nishimura se dio cuenta de que estaba siendo sarcástica. Y por el silencio que se había creado en la carpa estaba claro que los invitados encontraban aquel drama más entretenido que el partido.

—Viene para acá. Bueno creo que es hora de irme —se despidió Sakura con una sonrisa.

El omega de Ni-Ki quería salir corriendo, pero él se quedó en dónde estaba. Tenía que creer que el alfa del que había estado enamorado y que lo había amado a él no iba a hacer nada que lo avergonzara.

Se mostrarían amables el uno con el otro y luego averiguaría qué estaba haciendo allí.

La casa de los Hampton era de ambos, pero con la ruptura habían acordado que Ni-Ki podía ocuparla mientras SuNoo estuviera en Los Ángeles.

¿Qué estaría haciendo allí?, se preguntó.

—Hola Riki.