- SungHoon reprimió un suspiro al sentir una oleada de calor por parte del celo de Ni-Ki, el omega se removió en el regazo de SungHoon, escondiéndose entre los brazos del alfa.

ㅡ Ni-Ki... ㅡ Advirtió SungHoon con voz profunda. Repentinamente se sentía demasiado ansioso para su gusto.

ㅡ Honnie ㅡ Habló Ni-Ki intentando despejar su mente de la neblina que lo abrumaba por tantas sensaciones en poco tiempo.

ㅡ ¿Quieres que te lleve a casa? ㅡ Preguntó el alfa depositando un suave beso en la mejilla esponjosa de Ni-Ki, provocando que un sonrojó adornará el rostro del omega junto a una linda sonrisa.

Ni-Ki negó con su cabeza. ㅡ Quiero estar contigo.

El alfa sintió su garganta seca cuando escuchó a su omega, muy en su interior, deseaba poder marcar a Ni-Ki tantas veces como fuera posible. Pero no le daría gusto a su lobo, pues su parte racional le decía que eso era inapropiado para alguien tan bello como lo es Nishimura.

ㅡ ¿Quieres que te compré supresores? ㅡ Cuestionó acariciando sus rubias hebras, sintiendo a Ni-Ki acomodarse mejor entre sus brazos mientras suspiraba por el delicado toque.

ㅡ ¿Crees que sea conveniente? ㅡ Ni-Ki respondió de vuelta con una pregunta.

SungHoon lo pensó, no estaba seguro de que sería lo más conveniente en el estado en el que se encontraban ambos, por lo que se quedó en silencio, sin saber qué responder. Ni-Ki alzó su cabeza y miró los ojos cafés del alfa, perdiéndose en ellos hasta que saltó sorprendido.

ㅡ ¿Qué sucede? ㅡ Cuestionó SungHoon confundido por la repentina reacción del omega sobre su regazo.

Ni-Ki sonrió y se acercó juguetonamente a la oreja del alfa, cubriéndola con sus manos para contarle lo que vio, como si de un secreto se tratase.

ㅡ Tus ojos están cambiando de color. ㅡ Dijo riendo feliz.

SungHoon lo miró completamente sorprendido. ㅡ ¿Qué color son?

ㅡ Son los ojos de un alfa. ㅡ Contestó Ni-Ki riendo mas fuerte cuando vio la expresión de SungHoon al decirle algo que era bastante obvio. ㅡ Son negros, profundamente negros.

El alfa alzó una ceja. ㅡ ¿Profundamente negros?

Ni-Ki asintió con la cabeza repetidas veces. ㅡ Son lindos, me gustan.

ㅡ Oh. ㅡ Soltó SungHoon mirando con atención a Ni-Ki, quien se sonrojó al tener al alfa mirándolo fijamente. ㅡ Tus ojitos son de colores.

El omega frunció el ceño. ㅡ ¿De colores?

SungHoon asintió con una sonrisa. ㅡ Uno es azul y el otro es ligeramente ámbar.

Ni-Ki lo miró sorprendido, nunca había visto a alguien con ojos de colores distintos.

ㅡ Eres especial, amor. ㅡ Dijo SungHoon meciéndolo como a un bebé, siendo feliz por estar con él. ㅡ Ahora hemos terminado por comprobar que si somos pareja pre destinada.

Ni-Ki abrió grande sus ojos. ㅡ Tienes razón. Si no hubiese tenido el problema con los durazno, nuestros lobos se habrían hecho presentes desde que nos conocimos.

SungHoon asintió. ㅡ Me alegra que mis ojos no hayan sido rojos, como los que llevan algunos alfas.

Ni-Ki tembló. ㅡ Eso sí que es aterrador.

ㅡ ¿Sabes que es más aterrador? ㅡ Preguntó SungHoon, Ni-Ki negó. ㅡ Mi guerra de cosquillas.

El alfa comenzó a picar los costados del omega, obteniendo grandes risas por parte de él y estuvieron jugando por un par de minutos.

ㅡ SungHoon. ㅡ Habló Ni-Ki tragando pesado. ㅡ Quiero que lo hagas.

El alfa lo miró con confusión. ㅡ No entiendo, Riki.

El omega puchereó, le daba vergüenza decir en voz alta lo que quería, pues aunque su celo comenzaba a abrumarlo de sobremanera, aún conservaba un poco la cordura y quería ser claro, directo con su alfa.

ㅡ Quiero que me marques. ㅡ Soltó apretando sus ojos, sintiendo su rostro calentarse junto con sus orejas.

SungHoon se quedó sin palabras, asombrado por la repentina petición del omega.

ㅡ Ni-Ki, yo... ㅡ Vaciló con un torpe hablar. ㅡ No sé si sea correcto hacerlo ya.

El peli rubio lo miró ladeando su cabeza. ㅡ ¿No quieres marcarme?

ㅡ No es eso. ㅡ SungHoon soltó aire. ㅡ Es solo que tengo miedo.

ㅡ ¿Miedo? ㅡ Cuestionó Ni-Ki acariciando la mejilla de su alfa.

Asintió con la cabeza. ㅡ No quiero lastimarte y sé que la marca llega a ser considerablemente dolorosa. Además de que no quiero ser brusco, tus feromonas me están nublando.

Ni-Ki sonrió, despejando su mente. ㅡ No me harás daño. Desde que comenzamos a salir deposité toda mi confianza en ti, SungHoon. Esta bien si no quieres marcarme en este celo, siempre podemos esperar.

ㅡ ¿Quién dijo que no quiero marcarte? ㅡ Preguntó SungHoon alzando sus cejas sugestivamente, provocando una risa tímida en el omega. ㅡ ¿En serio confías en mi?

Ni-Ki asintió frenéticamente. ㅡ Eres mi alfa y confío plenamente en ti. 

SungHoon sonrió. ㅡ Solo para confirmar, ¿Quieres que te marque en este celo? ¿Estás seguro de querer hacerlo?

ㅡ Si, SungHoon. ㅡ Ni-Ki se acercó a los labios de SungHoon, depositándo un pequeño beso. ㅡ Quiero hacerlo hoy, contigo.

SungHoon miró a los ojos del omega, buscando cualquier pista de inseguridad. Al no encontrarla, sonrió con confianza y estampó sus labios con los de Ni-Ki. 

Primero suavemente los movieron al compás de sus respiraciones, disfrutando del momento e intentando calmar un poco los nervios. Los labios de SungHoon callaron un pequeño gemido que quiso salir de la boca de Ni-Ki cuando el alfa lo depositó en la cama.

Ni-Ki podía sentir a su lobo aullar de la satisfacción por tener a su alfa encima de ellos, besándose apasionadamente. Ni-Ki podía sentir la fuerte oleada de calor expandirse por todo su cuerpo.

Antes de que pudiera quitarse alguna prenda, el teléfono del alfa retumbó por toda la habitación, obligándolo a detenerse. Se levantó para poder contestar y tomo aire antes de hablar.

ㅡ ¿Mamá? ㅡ Respondió mientras veía a Ni-Ki restregar sus ojos y quitarse sus zapatos.

ㅡ No voy a llegar hoy, Hoon. Necesitan auxiliares en el hospital de la ciudad vecina y me ha tocado ir. ㅡ Contestó su madre apresurada, pues la esperaban en la camioneta para irse.  ㅡ Cuida bien de Ni-Ki, cariño.

SungHoon sonrió. ㅡ Claro, madre. Por favor viaja con cuidado.

Su mamá sonrió al escuchar a Ni-Ki despedirse desde la distancia. ㅡ De acuerdo, no se olviden de usar protección.

Antes de que SungHoon pudiera replicar, su madre colgó. El alfa suspiró mientras negaba con la cabeza gacha, mirando sus zapatos.

ㅡ SungHoon. ㅡ Chilló Ni-Ki sentado en la cama, con su camisa desabrochada y sin pantalones.

ㅡ Ya voy, amor. ㅡ El alfa sonrió y se abalanzó hacia Riki.

El celo de Nishimura no duró tanto como pensaban, pues a los dos días, la pareja salió a una cita, con el omega presumiendo una visible marca en su lechoso cuello.

Por fin estaban unidos de todas las maneras posibles, sintiéndose felices por estar juntos siendo alfa y omega.