➶➶➶ ℂ𝕒𝕡𝕚𝕥𝕦𝕝𝕠 1 ➷➷➷

En el planeta Mercurio, se encontraba sentado en su habitación uno de los príncipes, el más joven de los dos.

El orbes verdes que tenía enmarcados en unos anteojos finos y ovalados, iban leyendo hoja por hoja del libro en su mano, pasándolo tranquilamente, aunque se escuchaban unos gritos del pasillo, reconoció al instante que era la voz de su madre, y la tranquilidad que tenía se fue de su cuerpo.

── ¡Géminis! ¡Solo tienes que empacar unas estúpidas cosas, apúrate! ¡No tengo todo el día! ── El de tierra dejó su libro a un costado y se levantó tambaleando, ¿Estaba echando a su hermano?

Llegó a la puerta abriéndola y escuchando más fuertes los chillidos de ella, le molestaba ese tono de voz y hasta le daba... Inseguridad.

── ¿Reina? ── Preguntó el rubio, mirándola y está le sonrió de manera falsa.

── ¡Hijo mío! ¡Debes empacar tus cosas! ── Decía alegremente ── Ofiocus y Cetus mandaron a llamar a todos los signos y que se reúnan en la tierra, ¡Así que empaca unas cuantas cosas! ¡Tardate lo que quieras, te espero abajo con tu hermano! ──

A este ya le estaba preocupando, sabía por un lado que su madre no le haría irse, pero a su hermano Géminis si, y  quería evitar tal cosa.

Empacó rápidamente, también le intrigada el por qué los habían llamado para juntarse en la tierra, que por un lado, si iban todos los signos, vería a sus hermanos zodiacales y eso le impulsaba más, y cualquier lugar estaría mejor lejos de casa.

── Ya estoy ── Dijo el signo de aire pasando por la puerta de su hermano menor, se recostó en el marco mirándolo empacar ──No quiero ser malo... ── El contrario lo miró amenazante, a lo que le hizo sonreír sarcástico── Pero si te apuraras para salir de este castillo estaría mucho más feliz. ── Rebajo sus lentes mirándolo por encima, y el de orbes verdes asintió.

Cerró su maleta mediana y bajo con su hermano las escaleras, la Reina no dijo nada de la tardanza de su hijo mayor, e lo ignoro dejando a cargo de todo a Virgo.

── ¡Hijo Mío! Te estaré mandando unas cuantas cosas una vez llegues a la tierra, te las darán y espero que te vaya muy bien en este laaaargo viaje ── Se abrazo al brazo de su hijo menor, quien no dijo nada más que asentir con la cabeza.

Ambos tenían preguntas, ¿Por qué mandaría cosas? ¿Viaje largo? De todos modos no preguntarían por qué desearían no haberse puesto hablar en primer lugar.

── Comportate una vez ahí ¿Sí? ¡Eres el orgullo mío! Y todo tiene que salir perfecto.──Contesto lo último con una sonrisa cínica, con lo que el de tierra también asintió, intentando guardar la calma y alejándose de esta.

── Reina, el portal está listo y dirijido a la tierra. ── Habló un guardia golpeando su arma al piso.

── ¡Que tengas un lindo viaje, Virgo! ── Sonriendo se despidió de solo uno de sus hijos, y el otro la ignoro metiéndose primero en el portal, el de tierra se despidió con la cabeza entrando a este.

Al llegar no eran los primeros, al frente de el se encontraba Capricornio como el signo más puntual, y libra a un costado del lugar apartado aburrido mirando su celular.

El rubio al ver la cabeza del castaño menor se le acercó sonriente, se le apoyo encima de su hombro mirándolo.

── ¡Cabrita! ¿Que me cuentas? ── Capricornio no dió una sonrisa, solo lo miro e expreso satisfacción con su mirada, lo que le basto al rubio.

── Virgo, nada hasta ahora, esperando a la llegada de los ocultos, ¿Cómo se encuentran? ── Dijo también mirando a Géminis.

Estos no tienen una amistad verdadera ni nada, pero es conciente que es el hermano de uno de sus amigos, y qué los modales son ante todo, no saludar a la tercera persona que acompaña a un conocido queda muy mal.

── Realmente nada nuevo, lo mismo podría decir. ── Géminis miro hablar a su hermano y luego contesto también.

── Capricornio, ¿Sabes alguna información de está reunión sorpresa? ──

── Quisiera, pero no, realmente me molesta que hagan planes de esta manera, con anticipación todo es mucho mejor ── Se le notaba molestia y disgusto en su voz.

── Comprendo ── Géminis y Virgo se miraron, ambos entendieron que realmente les daba igual, cualquier excusa es buena para irse de su planeta.

Una hora más tarde empezaron a llegar más signos, se saludaron amablemente y otros solo se ignoraron. Llegando Sagitario al lado de Aries, Virgo por alguna razón llegó a fijar su mirada en el, le pareció adorable e inocente con su pelo pelirrojo y mechas turquesas, pero enseguida desvió su mirada sonriéndole a su amigo Tauro.

Pasó algo parecido a Aries pero con Géminis, al mirarlo de una manera triste solo desvió su vista a sonreírle a su amigo Escorpio. Sagitario curioso siguió la vista de su mayor, y en vez de mirar al de aire, contempló un poco tonto al de tierra.

Cabello rubio brillante, ojos verdes tapados por lentes ovalados y una sonrisa perfecta. Sí, se sorprendió por su aspecto, por su actitud, pero solo siguió a su hermano mayor hasta la mesa donde se sentó.

Géminis se acercó a su hermano elemental Libra, y acuario siguiéndole atrás. Cambiaron palabras "dulces" entre ellos, el tercer signo mostrando y preguntando cómo se encontraban, los otros contestando felizmente, lo cual a este le calmaba y se sentía mejor.

A las horas llegaron los Signos Ocultos, Cetus y Ofiocus.

── Buenos días Mis Estrellas, espero que se encuentren maravillosamente como yo y Cetus lo estamos. ── Sonrió acomodando papeles golpeándolos suavemente en la mesa. ── Lamento haberles llamado con tan poco anticipación, pero realmente estoy agradecido de que asistieron. Pero ── hizo una pequeña pausa antes de continuar

── Odiamos que hagas esas pausas OfiocuS── grito de fondo Aries, riéndose algunos y hasta el mismo Cetus rió.

── Lo se, por eso me encanta hacerlas ── Sonrió orgulloso ── Y ahora me odiarán más, pero el tema de que he querido hablarles lo tendrán que saber a la noche ── suspiraron los demás.

── Calma, es una noticia que espero les traiga gran abundancia a su mayoría, hasta ahora, les pedimos que disfruten de la estadía en la tierra, acá tenemos cosas que les mandaron los Reyes de sus planetas para disfrutar de este lugar. ── Dijo Cetus.

Todos se acercaron y les dieron lo que necesitaban, cosas como documentos a los que les faltaban, e dinero y tarjetas.

Claramente todo lo que recibía de Mercurio géminis y virgo estaba solo pensando para el menor, pero que el de tierra le dió igual y le sonrió a su hermano mayor.

── A comprar cosas moneda~ ── Géminis rió y se acercó a sus hermanos elementales a preguntarles qué harían ellos.

── ¡Iremos a probar las máquinas de juegos con Libra! ¡te aseguro que haré que se divierta! ── Sonrió acuario, mientras libra tenía una cara de "sálvame" con ojos suplicantes.

Géminis pensó que eso sería bueno, sacar del entorno a libra sería bueno, así que no hizo nada y disfruto verlos irse juntos, orgulloso.

Se dirigió a Virgo que estaba acompañado de Capricornio, y los tres juntos fueron a comprar cosas triviales, en el centro comercial.

Como justamente tres personas lo estaban haciendo, su grupo era Aries, Escorpio y Sagitario.

Virgo estaba mirando camisas tranquilamente, mientras que capricornio miraba guantes.

Géminis estaba demaciado aburrido quejándose de que lo hayan traído a este lugar, capricornio harto de sus quejas se dio vuelta a mirarlo, pero lo vio de pies a cabeza quedándose horrorizado, ante su cara virgo miro a Géminis sin entenderlo del todo.

Luego escucho susurros de la gente, hablando tonteras de la vestimenta del de aire, vestía un buzo suelto celeste, un pantalón deportivo negro y zapatillas deportivas rojas, decían que esa vestimenta no era por la que tendría que estar en esta tienda, que era refinada y cara. Prácticamente diciendo eso hicieron enfadar a los de tierra.

Se estaba tratando de Géminis, el tercer signo al mando, el futuro rey de mercurio, no podía ser así insultado por humanos tan normales. Los de tierra se miraron y se entendieron rápidamente.

El de aire no entendía nada, solo los miro a su hermano y su amigo buscando ropa rápidamente, se acercaron y lo tomaron de los brazos llevándolo a los vestidores.

A Virgo no le gustaba darle el gusto a los demás cambiando así a su hermano, que no le veía nada de malo en todo caso a su ropa, era ropa de deporte que a géminis le gustaba, era su gusto, y no tendría que poner contento a nadie más.

Pero, a la vez ser aceptado por los demás, agrandaba su ego, y se trataba de su hermano, quería, deseaba, que sea el centro de miradas de envidia.

Géminis entre reproches decía que no se quería cambiar, pero no le importo en nada al de tierra y con amenazas le puso la ropa que deseaba. Consistía en una remera blanca manga corta, con detalles en el cuello de letras, metida a dentro de un pantalón negro, rodeado por un cinturón del mismo color, al ser manga corta dejaba a luz sus brazos, que en uno poseía un reloj caro e llamativo, y en la otra estaba su billetera con los documentos.

── ¿¡QUE MIERDA LES PASA PEDAZO DE BESTI- ── Las miradas se fueron absolutamente en él, su vestimenta, no prendía el lugar, lo quemaba. Su porte, altura, su cabello negro resaltado a un costado para arriba, sus ojos anaranjados brillantes rodeados del vidrio de sus lentes, sus mejillas y nariz con pecas atractivas, su ropa solo resaltó lo verdaderamente guapo que era.

── Cállate, y eleva el pecho Reina, qué se te cae la corona ── Se rieron los dos y Capricornio solo sonrió ladino con los labios a ese comentario.

Géminis aceptaba que escuchaba las conversaciones que hablan de él, pero las ignoro, y que su hermano lo haya hecho sentir así, le hacía feliz, satisfecho, después de tantos días de mierda, hoy se sentía muy bien.

Virgo ya orgulloso de su obra de arte decidió buscar más ropa para él, al cruzar a verse una camisa blanca con una rosa dibujada en el brazo, la agarro y miro a su costado, se encontraba el signo de fuego menor, que parecía estar un rato muy largo observandolos.

Una vez que se cruzaron las miradas se quedaron callados, pero el de tierra le sonrió coqueto y se dió la vuelta dirigiéndose a los vestidores.

Sagitario se sonrojo, miro toda la escena, el por qué Capricornio y Virgo cambiaron a Géminis, le pareció muy lindo ese detalle de ambos, esa sonrisa le encantó.

Mientras el signo de tierra se cambiaba se quedó pensando en el rostro del pelirrojo, era adorable, frágil, inocente, dulce. Sonrió a eso y siguió acomodándose la camisa blanca con la rosa en su brazo, el pantalón jean negro con el mismo detalle en la pierna de la rosa, y agrego un chaleco negro finalizando su conjunto.

Capricornio estaba en la misma situación que virgo, pero este se cambió a una camisa gris, tirantes negros y pantalón negro, solo resaltaba el broche en platinado de su cinturón gris.

Salieron de distintos lados, y cuando Virgo dió la vuelta a dónde estaba antes, no se encontró con el pequeño de fuego, lo que lo dejo decepcionado aunque dando la vuelta a los vestidores en uno de los cubículos se encontraba este cambiándose.

Sin poder resistirlo lo miró, este ya tenía puesto un jardinero color rosa pastel en su parte inferior, pero no tenía remera dejando ver su espalda marcada, sagitario elevó su mirada y lo vio en el reflejo del espejo, le gustó eso y al ponerse la remera negra manga corta movió sus caderas de forma sexy, lo que le gustó aún más al de tierra.

Luego fue conciente que Sagitario lo miro al terminar de ponerse la remera, y se disculpó.

── Lo siento ── Se retiró con una sonrisa pícara y siguió buscando a sus amigos.

── ... (No me hubiese molestado que se habría quedado...) ── Pensó el pelirrojo y se mordió el labio.

── Sagi, ¿Todo bien? ── Preguntó Aries, viéndolo salir con sus mejillas rojas.

── Si claro, ¿Por qué estaría mal? ── Sonrió inocente.

── Me pareció ver qué alguien veía tu vestidor, solo me preocupe ── Dijo cruzándose de brazos, sagitario puso su mano en su hombro calmandolo.

── No pasó nada, vamos ya elegí mi ropa ── Contestó alegre.

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