Azulin siguió abrazando a Gordi, a pesar de todo el movimiento en la habitación, ahora.  Azulin siguió abrazando a Gordi, a pesar de todo el movimiento en la habitación, ahora. No dijo nada, excepto una disculpa entrecortada y ronca. Por odiarlo todos esos años,

humillándolo y maltratándolo. Por supuesto, su hermano tomó el abrazo, dándole palmaditas en la espalda después de uno o dos minutos de conmoción.

Gordi parecía haberse quedado sin palabras. No importa cómo fue su vida, su hermano siempre estaba tan enojado y engañando. Estaba medio esperando que su hermano se diera la vuelta y comenzara a burlarse de él nuevamente, a pesar de cómo internamente se regañó a sí mismo para no pensar esas cosas sobre su hermano. Esperaba que le exclamara que lo soltara y lo dejara en paz. Pero por primera vez, no lo hizo.

Las orejas de Gordi se doblaron hacia atrás cuando tomó el abrazo. Era algo que su hermano no le había dado en mucho tiempo. Algo que casi se sentía bien. Como un niño al que le devuelven un juguete que perdió después de dos semanas de saber que estaba en un gabinete en algún lugar y no pudieron alcanzarlo.

Gordi nunca supo qué hizo mal para que su hermano lo odiara tanto antes, pero un abrazo de su hermano fue tan agradable. Sin embargo, ahí fue donde su mente comenzó a divagar. ¿Qué diablos pasó y por qué Azulin estaba tan sensible y emocional en este momento?
Azulin siempre fue emocional, pero la mayoría de las veces se proyectó en ataques de ira y el deseo o la necesidad del oso azul de infligir dolor físico o emocional a alguien o algo.

Quizás Gordi nunca entendería por qué Azulín era como era.
A pesar de que su vida hogareña no era la mejor, estaba lejos de ser la peor. Ambos padres los amaban, incluso mamá ya no amaba a papá. Tuvieron un hogar generoso y una buena infancia, sin nada más que amor, libertad y la oportunidad de ser lo que quisieran.
Azulin finalmente soltó al hermano mayor, llevándose los brazos temblorosos a la cara mientras miraba a través de sus lágrimas ardientes solo para ver el rostro preocupado de su hermano una vez más.
Gordi se quedó allí con las manos entrelazadas y los brazos cerca del pecho, algo que casi siempre hacía cuando estaba nervioso o sin palabras. Incluso si Azulin era un hermano pútrido antes, lo único que recordaba eran los hábitos de su hermano.

– Azulin... 

– Tranquilo ya estoy mejor – Azulin soltó un suspiro llevándose un brazo a sus ojos y se limpió las lágrimas que caían de sus ojos.  

Tal vez nunca sepa por qué llegó aquí... pero... no puede simplemente sentarse allí y tener un debate consigo mismo sobre por qué sucedió.

Esta era una oportunidad para hacer las cosas bien. Cualquier ser que haya escuchado su súplica lo aceptó. Podría haber caído en saco roto, pero no fue así. Era una señal. Necesitaba cambiar las cosas, antes de que fuera demasiado tarde. Aunque por ahora.... Miró a su hermano, que lo estaba viendo. 

Era su oportunidad de recompensar sus errores, recompensar a su hermano de sus humillaciones y burlas. 

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Pasaron un par de días más. 

Con la forma en que iban las cosas, ya habían comenzado a alejarse de la línea de tiempo inicial de la que habían surgido. Azulin notó esto, sin saber si era bueno o no que los eventos de la línea de tiempo se hubieran alterado. 

 El oso azul se sentó en lo que se consideraba una pequeña casa parecida a una iglesia. el Padre, un oso morado con anteojos oscuros estaba parado al frente de la habitación, sosteniendo un libro con un ojo y algunos símbolos en él. Esto hizo que Azulin retrocediera un poco y sacudiera la cabeza, sin querer volver a mirarlo. Durante el discurso, se dio cuenta de lo... 

trivial que sonaba todo. Al escucharlo de nuevo, por segunda vez, cada palabra se sentía más y más como una especie de fantasía diluida. Una especie de extraña

 obsesión escrita por alguien de la fe separada cuando el libro apareció por primera vez. 

 El oso azul se llevó la mano a la cara, protegiéndose los ojos mientras miraba hacia el suelo. 

 No podía culpar a Padre por tratar de predicar lo que le enseñaron. Predicar tal cosa que le había dado fe al oso mayor durante tanto tiempo en su peligroso y horrible mundo. Estas enseñanzas... Azulin se dio cuenta de que no podía llamarlas correctas o incorrectas... 

incluso si parecía que no había eternidad o belleza cuando la profecía se había cumplido la primera vez. Pero, estaba seguro de que esa cosa estaba 

hecha para encontrarse con Pompon, pero. Ahora que la línea de tiempo fue el cambio. ¿Significaba eso que... él nunca conocería a Pompom?

No sabía como responder esa pregunta exactamente. 

Su leve nerviosismo fue notado por el padre de la Iglesia, llamado por el oso púrpura mientras se ajustaba las gafas en la cara con una mirada de perplejo interés.
– Azulín. ¿Qué te pasa hijo?– el oso mayor preguntó sobre la multitud de osos en la iglesia. Todos se volvieron hacia Azulin, ya que no les tomó mucho encontrar uno de los únicos ojos azules en todo el campamento.

 
Los ojos azules de Azulin miraron al Padre. Esto hizo que el corazón del oso azul latiera más rápido con una creciente aprensión.

-Yo... estoy bien- Padre. Azulin suspiró, relajándose.No descansé bien, eso es todo.Padre metió sus manos detrás de su espalda, antes de inclinar su cabeza.
El padre metió las manos detrás de la espalda antes de inclinar la cabeza. Sin embargo, no se dijo nada por unos momentos. Después de un stent de incomodidad, el oso morado asintió. le dio unas palmaditas en la espalda antes y dejó su libro antes de comenzar a predicar a sus observadores nuevamente.
Azulin se sintió de pronto extraño, era la primera que Padre le daba palmadas a él mismo, claro había visto que le daba palmadas a sus otros compañeros o a Gordi, pero a él era sin dudas la primera vez que lo hacía.
Por primera vez, Azulin se sintió extraño... diferente a lo que siempre fue alguna vez. Por primera vez se sentía...... Felíz?...
Esa pregunta era algo exagerada y Azulin lo sabía pero debía saberlo que lo que estaba viviendo estaba comenzando a cambiar el rumbo de la historia de su hermano, sus compañeros y de seguro.
Su historia.