extra 3
Realmente creí que los días no pasarían demasiado rápidos, pero ocurrió y estoy a solo unas horas de casarme con el amor de mi vida, sé que en estos momentos mi madre estaría orgullosa de mí y espero lo mismo de mi padre y aunque no están físicamente conmigo, puedo sentirlos, puedo sentir que ellos están aquí, puedo verlos caminar por todo el lugar, puedo verlos sonriéndome desde lejos y no puedo dejar de hacer lo mismo.
Todos nuestros amigos y familia cercana estaban en el recinto, nuestra ceremonia sería algo más reservada e íntima, habíamos prohibido por completo los medios de comunicación por respeto a la familia y también a nuestro hijo.
Jaesoo, como siempre, había preparado todo para nosotros, desde conseguir que la autoridad civil que había casado a Hoseok y TaeHyung viniera hasta el recinto hasta nuestra famosa luna de miel que por cierto Hoseok nos regaló. Realmente sentía de alguna forma que Jaesoo se manifestaba mediante aquel chico que solo llegó para alegrar nuestras vidas, más aún la de Namjoon.
—¡YoonGi, ya está todo listo! — Sooyoung entró a la habitación donde me encontraba sin golpear, pero se quedó parada sin ninguna expresión al verme.
—¿Qué? — Pregunté algo asustado—¿Tan mal luzco?
—No...—Negó al instante—¡Te ves muy bien amigo! — ella se acercó para poder abrazarme.
—Muchas gracias— murmuré— tú no te quedas atrás— ella sonrió ampliamente.
—JiMin se derretirá al verte—no pude evitar soltar una carcajada.
—Puede que yo también me derrita al verlo— mordí mi labio inferior algo inquieto.
Nuestros trajes los había hecho la misma diseñadora, por lo que sé que JiMin se verá muy hermoso.
—Se nos hace tarde, ya llegó la oficial del registro civil— ella tomó una de mis manos y me arrastró hacia afuera.
Cuando llegamos, comencé a sentirme nervioso, vi a Hoseok y TaeHyung junto a JiMin, ellos eran nuestros padrinos o testigos como algunos lo llaman, también divisé a Jungkook con Holly en sus brazos, y a JiMin con nuestro pequeño hijo quien tenía en sus manitos un cojincito donde estaban nuestras argollas.
JiMin no tardó en besar mis labios cuando ya estuve a su lado, solo le sonreí ampliamente y luego tomé su mano para entrelazarla con la mía y así observar a aquella mujer que hace unos meses había llevado a cabo su primera unión civil en una pareja homosexual.
Ella comenzó a hablar y todos se quedaron el silencio de inmediato, comenzó informándonos de las nuevas leyes que algunos países habían comenzado a implantar y todo lo que se había luchado para lograr aquel derecho, ya lo había escuchado una vez en la boda de Hoseok y TaeHyung, pero ahora podía sentir aquella emoción de la chica y aquel orgullo dentro de mí, me sentí demasiado orgulloso de la comunidad a la cual pertenezco y realmente espero que sigamos luchando para lograr este tipo de cosas tan maravillosas que se nos arrebataron sin alguna explicación válida.
Cuando llegó la hora de firmar, miré a JiMin expectante, él en ningún momento dudó en tomar aquel bolígrafo y firmar el documento, cuando fue mi turno sentí la mirada de JiMin en mí todo el tiempo, sabía que él no tenía miedo, sabía que él no desconfiaba en mí, solo estaba algo ansioso, ansioso de que por fin fuéramos nombrados esposos. Tampoco lo dudé ningún segundo y firmé incluso más rápido que JiMin.
Jin comenzó a caminar hacia nosotros acompañado de Namjoon, cuando estuvo a nuestro lado le entregó a JiMin aquel cojincito con las argollas y luego de darle cada uno un beso en la mejilla volvieron a su lugar.
—YoonGi, Dios me tiemblan las manos en este momento— JiMin sonrió—, realmente ansiaba tanto que este día llegara, ansiaba tanto poder llamarte esposo y mira, estoy a solo un paso de poder serlo, — JiMin tomó mi mano y dejó un pequeño beso sobre su dorso— tú sabes que te amo demasiado a ti y a nuestro pequeño hijo, ustedes son mi razón de vivir, ten por seguro que a mi lado nunca les faltará el amor, nunca estarán solos, y por favor, si algún día llegó a fallar todas aquellas promesas que yo te he hecho aquí y en otras ocasiones quiero que me lo digas, quiero arreglar cada error que cometa, porque nunca, pero nunca volveré a perderte, nunca más te arrebatarán de mis brazos, así como se lo prometí a tu madre antes de que falleciera, hoy puedo decir que cumplí cada promesa que le hice, y ahora solo me falta cumplir cada una de las que te hice a ti. Te amo, por favor, nunca lo JiMin puso aquel anillo en uno de mis dedos, estaba bastante emocionado.
—Nunca más lo olvidaré, JiMin— susurré—, nunca más volveré a alejarme de ti, te agradezco demasiado que no te rindieras, de verdad admiro lo fuerte que eres, has enfrentado a mucha gente, hasta a mí mismo para poder lograr que yo te recordara, créeme que será difícil que ahora te saquen de mi mente — sonreí—, pero si algún día vuelve a pasar, por favor inténtalo, inténtalo como la primera vez, siempre estarás aquí— puse una de mis manos sobre mi corazón— yo siempre te amaré—lentamente deslicé aquella argolla en su dedo y luego me acerqué para poder besarlo en los labios.
La oficial dio por finalizada la ceremonia y todos comenzaron a aplaudir. La familia entera se acercó para poder felicitarnos, la primera persona que abracé fue a mi pequeño Jinnie, el cual no entendía mucho lo que ocurría, pero aún así estaba muy feliz.
—Muchas felicidades, chicos— la madre de JiMin se acercó a nosotros.
—Muchas gracias— les sonreí a los dos y ellos comenzaron a hacerle mimos a Jinnie.
—Hermanito, felicidades— JiMin me abrazó muy fuerte, seguido de Jungkook y Jaesoo.
—Esto se los debo a ustedes también — JiMin sonrió y luego negó.
—No, realmente JiMin tiene que llevarse este crédito— el rubio abrazó a JiMin de igual forma.
—¡YoonGi! ¡Holly ya tiene novia! — Damián apuntó hacia el centro del salón donde mi gato estaba junto a una gatita algo asustada.
—¡No puede ser! ¡JiMin, mira! — exclamé algo emocionado. —¡Tenemos que llevarla a nuestro hogar!
—Maldito, perro—JiMin murmuró y yo lo regañé de inmediato.
—JiMin, no le digas así— arrugué mi nariz.
—¿Te das cuenta de que si te llevas esa perrita tendrás perritos pequeños en solo unos meses? — Namjoon habló y no pude evitar imaginar a pequeños holly's hembras y machos en nuestro hogar.
—No debiste decir eso—JiMin negó.
—¡Me la llevo! — grité.
—¡Sí! — Jungkook fue corriendo hasta donde estaba Holly.
—¿Y cómo se llamará? — Jaesoo interrumpió.
—No llevaremos a ese perro, YoonGi— JiMin negó otra vez.
—¡Holly! — dije sin escucharlo.
—Ay, dios mío— JiMin dramatizó.
—Me amas, y en el fondo, sé que amas a Holly— me acerqué para abrazar a mi ahora esposo. JImin soltó una risita y luego asintió.
—Claro que sí— sonrió. —Te amo demasiado.
xxx
Nuestra luna de miel fue lo más relajante que pudimos vivir, claro que solo viajamos los dos, Jin quedó a cargo de Sooyoung, el tiempo que estuvimos solos, nos sirvió para reflexionar y además a JiMin para escribir algunas canciones a las que yo también ayudé un poco prometiéndole que cantaría con él, aunque sea una.
Cuando volvimos, Hoseok fue el primero en llamar y preguntar que tal había estado el viaje, a lo que solo pude agradecer una y otra vez por el maravilloso regalo que nos había hecho.
Tuvieron que pasar algunos días para que cada uno volviera a retomar sus labores, seguía trabajando en mi academia, ahora la pequeña Blue se había incorporado al nivel más pequeño, sí gané la apuesta, la niña sería una gran bailarina como su padrino. Jin por su parte desde que JiMin había comenzado a trabajar también en casa con sus instrumentos, el niño se acercaba a contemplar a su padre mientras tocaba algunas notas en su guitarra o teclado, hasta que llegó un día en el que JiMin se sentó junto a él y comenzó a enseñarle como se tocaba, claro que mi bebé solo comenzó a tocar las teclas todas al mismo tiempo con sus manitos sin poder entender lo que su padre le decía, pero estaba seguro que él estaría inclinado por el lado de la música al igual que JiMin.
Holly y Hollynai iban a ser padres, como JiMin lo pronosticó, la perrita no demoró en quedar en estado. Yo estaba bastante contento, pero JiMin no tanto y al menos se quedó algo tranquilo al saber que le daría uno de los perritos a Jungkook que tanto amaba a mi Holly.
Un día llegaron unas cartas a nuestra casa, no quise abrirlas hasta que JiMin llegara, sabía que esos sobres los había visto algunas veces y podía imaginar de qué se trataba, pero realmente no creía eso posible. Cuando JiMin llegó, no demoramos en comenzar a leer cada una de esas cartas, y efectivamente se trataba de lo que yo había pensado.
Habían nominado la película a un Óscar.
—No puedo aceptar esto— negué al leer que también me habían nominado a mejor actor, al ser el personaje principal.
—¿Por qué no? — JiMin frunció el ceño.
—Porque tú también deberías estar nominado— hice un puchero, realmente quería que JiMin se llevara el premio.
—Pero amor, recuerda que si lo ganas ahora no tendré un Óscar más que tú— él sonrió y yo me sonrojé. Yo y mi estúpida rivalidad con JiMin.
—¿Cómo puedes recordar eso? — murmuré avergonzado.
—Hoseok me lo dijo y me pareció algo que debía decírtelo algún día, los premios no valen Yoonie— él me sonrió.
—Lo sé, yo cree esa estúpida rivalidad contigo, competencia Park— él soltó una carcajada.
—Ahora, aceptarás aquella nominación y comenzarás a buscar el traje más bonito para ponerte ese día y no aceptaré un no como respuesta— besó cortamente mis labios y caminó hacia la habitación de Jin.
—Está bien, amor— puse mis ojos en blanco y lo seguí.
Esa noche de los premios yo estaba orgulloso y demasiado feliz por Hoseok, porque su película logró tener tal reconocimiento al ganar aquel premio, el primer premio de muchos que tendría su carrera, estaba seguro de eso. Y aunque realmente yo no me lo esperara, gané también aquella categoría en la cual me nominaron, y me subí a aquel escenario aún si poder creerlo, agradecí a todos y en especial a JiMin, a mi madre y a mi mejor amigo SeokJin, quienes hicieron aquello posible.
Esa noche también tuve el sueño más hermoso de mi vida, vi a mi madre y a mi mejor amigo sonriéndome, los vi también junto a mi padre, quien por primera vez me regaló una sonrisa y me murmuró lo orgulloso que estaba de mí. Al fin pude sentir aquella sensación, al fin pude sentir que ellos estaban descansando luego de tanto tiempo.
Cada año comenzaron a llegarnos propuestas de películas donde JiMin y yo seriamos los protagonistas, cada vez estudios comenzaban a ofrecernos grandes cantidades de dinero para que trabajáramos con ellos, pero nunca aceptamos.
Un día nos prometimos que si Hoseok nos llamaba para grabar una película lo haríamos, pero nunca aceptaríamos propuestas de alguien más, eso nunca se lo comentamos a nadie.
Y ese día llegó.
Luego de tres años, Hoseok algo temeroso nos hizo la propuesta, ya que no había encontrado a los protagonistas perfectos.
JiMin canceló su gira y yo dejé a cargo el estudio a una de las chicas que trabajaba conmigo.
El momento había llegado y yo estaba ansioso.
Por primera vez iba a actuar con JiMin siendo mi esposo y no mi rivalidad.
Por primera vez me iba a sentir como un verdadero actor.
Por primera vez iba a ser quien realmente soy.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top