Un gemido ahogado escapó de la garganta de Jungkook cuando Shownu sacó el cuchillo que se hundía en su vientre, Jimin parecía estar congelado, sus ojos anegados en lágrimas viendo al hombre que amaba perdiendo la vida.

No fue hasta que su visión se vio interrumpida por las piernas del asesino que reaccionó, apretó sus puños tan fuerte que sus nudillos se volvieron blancos, levantó la vista hasta el hombre que lo veía con burla, mientras jugaba con el arma aún sangrante en su mano.

—Esta es tu última oportunidad muñeco. O te vas conmigo o le haces compañía a tu estúpido noviecito —le dijo poniéndose en cuclillas frente a él.

—Maldito hijo de perra —fue su respuesta antes de tirarse encima de él y comenzar a golpearlo.

Shownu había soltando el arma y trataba de detener los furiosos golpes sin éxito, con sus brazos trataba de bloquearlo, pero sus fuerzas no eran las de siempre, el idiota de Min lo habia logrado herir antes de que cayera inconsciente por la droga y la pelea anterior lo habia debilitado.

En un momento en que Jimin le dió una ventana de oportunidad, logró invertir los papeles, lo giró dejándolo debajo suyo.

—¿Tanto te duele que matará a ese imbécil? ¿Por qué? ¿Por qué Jimin? Yo te di mi amor y tu lo despreciaste, ¿que tenía ese idiota que no tuviera yo?

—Jungkook era mejor hombre de lo que tú jamás podrás ser, y óyelo bien, podrás haberlo matado, o arrastrarme contigo al mismo infierno y ni así dejaré de amarlo.

Shownu aflojó su agarre en las manos del rubio, lo que este aprovechó para bajar la mano izquierda mientras levantaba su pierna, hasta que sus dedos tocaron el borde del pantalón. Con calma metió la mano y tomó el cuchillo que llevaba escondido. 

—Vete al infierno maldito enfermo —le dijo antes de levantar su mano y en un rápido movimiento clavar el afilado puñal en su garganta.

Shownu se llevó la mano al cuello, antes de inclinarse hacia un costado y caer al suelo. El gorjeo de su sangre llenando su garganta ahogándolo era lo único que se escuchaba, Jimin lo miró con todo el odio que le causaba antes de correr a dónde yacía Jungkook.

El estruendo de la puerta de metal siendo embestida resonó, al mismo tiempo que Jimin veía una pesada camioneta atrevesarla.

—Es tarde —dijo en un murmullo cuando vio bajar a sus amigos del vehículo. 

Habían llegado tarde.

Una semana después…

—Somos hombres de palabra, ustedes hicieron un trato con nosotros y lo cumpliremos, a partir de este momento, los cuatro dejan de pertenecer a los vigilantes.

Una vez más Jimin se encontraba frente a los cuatro hombres más poderosos del mundo, aunque esa sería la última vez.

—Jimin, Seokjin. Con la muerte de Jeon Jungkook y el rechazo de Kim Namjoon para continuar con el lugar que dejó vacío su tío y su primo,  el liderazgo de la organización en Corea, será dado a quien nosotros consideremos apto para hacerlo, por lo que sus vínculos con nosotros han terminado —anunció otro de sus antiguos ex jefes haciendo sonreír a Jin y a Jimin asentir suavemente.

—Yoongi, tu por otro lado se que mantienes una relación con  él próximo líder de la Tríada china, y supongo que así como nunca hemos tenido inconvenientes con ellos, así continuaremos en el futuro —continuó el mismo hombre, antes de dirigir su mirada a Taehyung.

—Taehyung al igual que Jimin y Seokjin, tu pareja tampoco quiso tener nada que ver con él lado ilegal del negocio de los Jeon, así que también eres libre de toda clase de relación con nosotros —dijo finalmente.

Una vez fuera del cuartel, los cuatro subieron a la camioneta en que habían llegado y volvieron a la casa de Jimin, dónde sus parejas los esperaban, los cuatro iban en silencio, cada uno pensando en lo que les depararía el futuro.

—Chicos —los llamó Jimin —mañana me voy.

—¿Estás seguro? —le pregunto Jin.

—Sí, ya es tiempo.

Yoongi no dijo nada, solo se apresuró a abrazarlo, al igual que Taehyung.

—Gatito y yo también nos iremos —anunció de pronto Jackson, haciendo que todos voltearan a verlo sorprendidos.

—¿Pero qué? —hablo Namjoon viendo a su amigo.

—Todos sabíamos que quisiera o no el liderazgo de la Tríada sería mío, y mi padre ya está viejo, además ahora que hice las paces con él, me quiera cerca y a Yoongi también, ya hasta amenazó con hacerlo líder a él y no a mí —respondió el castaño riendo.

—Tae y yo nos haremos cargo de Jeon’s Company —dijo Hoseok causando un asentimiento por parte de Jimin.

Así como Taehyung, Jin también se quedaba en Corea con Namjoon, quien aún seguía convaleciente después de despertar del coma y con él que ya tenía planes para abrir un negocio fuera de toda ilegalidad, el moreno jamás quiso pertenecer a la mafia al igual que Jungkook y por fin era libre de hacer lo que él quisiera.

A la mañana siguiente Jimin subió al avión sin mirar atrás, se iba de Corea, ya no tenía nada que hacer ahí, nada que lo detuviera, su misión había terminado, había cumplido su venganza. 

Una vez dentro del avión contempló por la ventanilla, afuera estaba lloviendo y sonrió levemente, parecía que la ciudad le daba una triste despedida. Tal vez volviera para la boda de su primo y Namjoon o para la de Taehyung y Hoseok. O quizá pasará a visitar a Yoongi y a Jackson a China en algún momento.

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El viaje de Corea hasta Ginebra había sido agotador, casi veinte horas de vuelo, pero por fin había llegado, una nueva vida lo esperaba.

2 meses después…

Dos meses atrás…

—¡Jimin! —grito Hoseok llegando hasta donde el rubio estaba arrodillado al lado del cuerpo de Jungkook.

No perdió tiempo con preguntas estúpidas, revisó el pulso del pelinegro y sonrió un poco al sentirlo.

—Está vivo, débil, pero vivo —dijo y se puso manos a la obra, con ayuda de Jackson lo subieron a la camioneta.

Mientras Taehyung y Yoongi se encargaban de llamar al equipo de limpieza de los vigilantes para que se hicieran cargo del cadáver de Shownu.

La llegada al hospital fue caótica, Jungkook fue ingresado de urgencia a cirugía, pasaron casi cuatro horas antes de que un médico saliera. Jimin corrió hasta él.

—¿Cómo está? —preguntó agitado.

—El paciente aún está delicado, y deberá de estar en observación, el cuchillo perforó el estómago y daño un par de arterias, lo que causó que se una hemorragia mucho mayor, tuvimos un par de complicaciones y estuvo clínicamente muerto por un minuto pero logramos reanimarlo, ahora solo es cuestión de esperar a que la anestesia pase y ver cómo reacciona.

Un suspiro de alivio escapó de la boca de Jimin, estaba vivo, Jungkook estaba vivo y bien. Jin lo abrazó, al igual que Yoongi que lo llevó hasta un costado.

—Mimi, el equipo de limpieza, el cuerpo de Shownu fue cremado, por fin se terminó.

—Pero por poco y se lleva a Jungkook con él, estuvo clínicamente muerto gatito, casi lo pierdo —se quejó mientras se abrazaba a su amigo.

—Ahora todo volverá a la normalidad, Kook podrá volver a ser el presidente de Jeon's Company y su madre ya se encuentra recibiendo el tratamiento que necesita, Joon también ya despertó, las cosas volverán a la normalidad.

—Sí, todo volverá a ser como antes, con la diferencia de que ahora él será el líder de… —comenzó a decir Jimin antes de interrumpirse.

Yoongi lo miró extrañado.

—¿Qué pasa? 

—Hablemos con todos, creo que se me acaba de ocurrir algo —dijo antes de reunir a sus amigos en la habitación de Namjoon.

Todos lo miraban mientras sentían, mientras él les explicaba lo que quería hacer Jungkook no quería continuar con el legado maldito de su padre, Namjoon nunca lo quiso tampoco y gracias a lo que habían hecho Jeon's Company volvió a pertenecer en su totalidad a la madre del pelinegro, si hacían pasar por muerto a Jungkook también quedaría libre de la obligación impuesta por los vigilantes.

Jin accedió a cambiar la identidad de Jungkook, y Jackson y Yoongi hablaron con el médico para que declarara muerto a Jungkook. El pelinegro había despertado al día siguiente y se mostró conforme con él plan de Jimin. Al día siguiente hubo un funeral y en los medios se anunció su muerte. 

El mismo día en que Jeon Jungkook murió, ese mismo día apareció Park Jung Guk.

Jimin jamás pensó como su vida iba a cambiar cuando volvió a Corea para cumplir su venganza, él pensó que moriría en el proceso, conocer a Jungkook fue la variable que nunca pensó, pero no  se arrepienta, él era el amor de su vida, su familia, su puerto seguro, su ancla, su todo. Por fin podía dejar atrás su doloroso pasado y vivir la vida tranquila que siempre desearon los dos.

Fin.

Ahora sí llegamos al final de esta historia, y claro que sí Wattpad no podía dejarlo pasar y me borró el capítulo jajaja

Gracias a todas por leerla, y darle tanto amor.

Ahora sí después de tres intentos fallidos por fin cierro un ciclo con esta historia.

Nos leemos en la próxima bellezas las quiero mucho.

Besitos 😘😘😘