1.6
La multitud de gente, el sonido estridente de la música, y la adrenalina corriendo por sus venas era lo que sentía Jimin mientras avanzaban hasta llegar al inicio de la pista donde un grupo de hombres están reunidos.
—Hola chicos, ¿que tal listos para que les quitemos su dinero? —saludo Jackson llamando la atención.
Los cinco hombres se giraron a verlos y más de alguno se quedó encantado al ver a sus acompañantes.
—Tal vez está noche si te gane Jack, y veo que ahora no vinieron solos, ¿no nos van a presentar? —dijo uno de ellos que no le quitaba la mirada de encima a ninguno de los cuatro chicos.
—Claro, él es Yoongi, mi novio —dijo tomando la mano del castaño que lo saludo con una sonrisa—. Gatito él es San, Hongjoong, Mingi —. Presentó solo a los tres que conocía.
—Él es Jin, mi novio —dijo Namjoon tomando la cintura de su pareja que solo sonrió en dirección de los chicos.
—Yo soy Taehyung —se apresuró a presentarse, por qué no quería que Hoseok lo presentará como su amigo, aunque lo eran, era algo que ya no quería ser —. Y ni se molesten en voltear a verme, ninguno me interesa —concluyó al ver la mirada hambrienta que le dedicó uno de ellos, antes de pegarse más al cuerpo de Hoseok, que por puro instinto rodeo su cintura con su mano.
—Y yo soy Jimin…
—Mi novio y podré del que lo voltee a ver dos veces —dijo Jungkook interrumpiendolo.
—No seas troglodita, además no soy tu novio aún —lo último lo dijo en un susurró solo para que lo escuchará el pelinegro.
—Eso es algo que tengo que resolver entonces, yo ya lo daba por hecho precioso.
—Yo soy muy tradicional y me gusta que me hagan la pregunta —respondió Jimin dejándose envolver entre los brazos de Jungkook.
Los demás habían quedado relegados a un lado, y es que como siempre pasaba cuando ambos estaban juntos y se dejaban atrapar en su propia burbuja, no le prestaba atención a nada ni nadie más. San y su grupo de amigos veían la escena con curiosidad, en el tiempo que tenían de conocer a Jungkook y su grupo de amigos jamás los habían visto llegar con alguien o interesarse por nadie que no fuera solo para un rato.
Cuando Jimin y Jungkook se vieron obligados a poner atención a los demás, charlaron un rato conociéndose un poco más, San les dijo que era el dueño de un hipódromo de carreras legales, pero que hacer esa clase de eventos era bastante aburrido a diferencia de encuentro clandestinos como ese.
Todos estaban pasando un buen rato, y no fue hasta que Lee Taemin llegó que Jimin vio como Jungkook se tensaba, y expedia oleadas de enojo hacia ese tipo.
—¿Listo para perder Jeon? —preguntó Taemin con la burla habitual en su voz.
—Eso deberías de preguntartelo a ti mismo, aunque ya deberías de estar acostumbrado, nunca me has podido ganar.
—Esta vez es diferente, ya lo veras, vas a morder la pista y tú cara de niño bonito es la que va a pagar las consecuencias —respondió Taemin fijándose por primera vez en el rubio que estaba parado al lado de su eterno rival.
—Si estás tan seguro de que me vas a ganar apuesta algo más que dinero Lee, ¿qué te parece tú moto?
—Y si yo ganó, ¿qué me darás a cambio? Mmmm… ¿Qué te parece si me das a ese lindo juguete que está colgado de tu brazo?
—¡Vete a la mierda! —gritó Jungkook.
Jimin sonrió con burla, se soltó del brazo del pelinegro y caminó hacia Taemin.
—Yo no soy alguien que puedas ganar tan fácilmente, y creeme que no tienes nada que pueda interesarme, yo me doy el lujo de escoger con quién acostarme, pero si tanto estás interesado en mi, la apuesta te la propongo yo. Si tan seguro estás de que puedes ganar me acostaré contigo si cruzas la meta antes que Jungkook, pero si no lo haces, te voy a cortar lo que te cuelga entre las piernas —le dijo Jimin que estaba tan cerca de Taemin que podía sentir el tibio aliento del rubio.
Yoongi, Jin y Taehyung sonreían tratando de contener la risa, el pobre imbécil no sabía en la que se estaba metiendo, una vez más subestimaban a Jimin por su apariencia linda e inocente.
—Por un momento pensé que hablabas en serio muñeco, pero es más que obvio que en tu vida has tocado algo filoso, pero como no quiero humillarte aceptaré, solo para darme el placer de quitarle a Jeon algo más que su dinero.
Jungkook estaba que echaba humo, no dudaba de que iba a ganar y por eso sabía que Taemin se quedaría con las ganas, y se sentía complacido de que Jimin haya depositado su confianza en él al hacer esa clase de apuesta, pero lo que lo estaba jodiendo es que el imbécil de Lee, pensará siquiera en tocar lo que era suyo.
Jimin solo sonrió y volteó a ver a San que al igual que todos lo que estaban a su alrededor habían escuchado todo.
—Espero que hayas escuchado perfectamente que este idiota aceptó la apuesta y no quiero problemas al final —dijo y San asintió.
Había algo en la mirada del rubio que le decía que no estaba jugando, y sentía lástima de lo que le esperaba a Lee Taemin.
La multitud se dispersó y Jimin se abrazó a Jungkook, que de inmediato lo rodeó con sus brazos.
—¿A qué estás jugando precioso?
—Estoy aburrido hace mucho que no me divierto, déjame jugar un rato, ya que me ví obligado a subirme a tu moto y tendré que morir de angustia al verte correr. Solo prométeme una cosa.
—Lo que quieras.
—No te lastimes. No te pido que ganes porque se que lo harás, pero si lo haces te voy a dar un premio que se que te va a encantar —terminó pasando su lengua por los delgados labios de Jungkook que sonrió antes de devorar su boca con desespero.
A lo lejos Shownu veía la escena ardiendo en rabia, y si no mataba a es imbécil en ese momento, solo era porque pensaba disfrutar de torturarlo lentamente mientras Jimin veía, así entendería la lección.
Las apuestas se cerraron y todos los competidores se enfilaron a la línea de salida. La primera carrera daría inicio, Namjoon sería el primero, una voluptuosa chica se paró frente a los dos competidores contó hasta tres y dejó caer un pañuelo, las dos motos salieron disparadas, ante los gritos eufóricos de los espectadores.
Jin se mordía las uñas con nervios, Taehyung gritaba emocionado al igual que Yoongi, Jimin por su parte no podía dejar de sentirse observado, no sabía si era por qué el imbécil de Lee Taemin lo veía desde la pista o su mente le esperaba jugando una mala pasada gracias a los mensajes con la muerte.
Dos minutos después los gritos aumentaron cuando la moto roja de Namjoon cruzó la línea de meta con una notable diferencia sobre su rival. Jin corrió emocionado hacia su novio y le saltó encima antes de besarlo. San le entregó el dinero ganado al moreno que de inmediato se lo dió a su primo, que se rió y lo tomó, después todos despejaron la pista para dar paso a la siguiente.
Jackson corrió en la segunda y obtuvo el mismo resultado que el moreno, al igual que Hoseok, todos estaban eufóricos cuando llegó el momento de la última carrera, aquella donde se enfrentaría Jungkook contra Lee Taemin.
Jimin se acercó al pelinegro que ya estaba en posición, sin dejar de sonreír, levantó su casco como si fuera a quitárselo pero solo dejó al descubierto la mitad de su rostro, se acercó a su boca y lo besó con pasión.
—Para la buena suerte —dijo y se dió la vuelta para salir de la pista.
Jungkook sonreía complacido, ajustó su casco y aceleró la moto haciendo rugir el motor por sobre los gritos enardecidos de los espectadores, ignoró a su rival apostado a su lado, su vista se mantuvo clavada en el camino al frente, conocía perfectamente a Taemin y sabía que no dudaría en hacer trampa, y no dejaría que lo distrajera antes de comenzar.
San se colocó en medio de ambos, tomando por la cintura a la bella chica que se encargaba de darles salida, la chica elevó las manos y San contó comenzando del cinco hacia atrás, al llegar a dos la chica bajó las manos y ambos salieron disparados.
No pasó mucho antes de que Jungkook se pusiera al frente, en la primer curva Taemin trató de colarse por un costado sin éxito, los segundos pasaban y sus maniobras de evasión no daban resultados, al llegar a la segunda vuelta, decidió que tenía que ganar a como diera lugar, embisto hacia la moto del pelinegro, pero este logró esquivarlo, aceleró y cruzó la curva a toda velocidad, y Taemin maldijo cuando Jungkook cruzó la meta.
La gente se abalanzó a la pista, gritos eufóricos resonando con mayor intensidad, Jungkook se bajó de la moto se quitó el casco y volteó hacia él con esa maldita sonrisa arrogante en su rostro, cuando bajó de la suya aventó el casco con furia, y se acercó a él con la intención de golpearlo, pero su camino se vio interrumpido por el rubio que se plantó frente a él.
—Ni con trampas pudiste ganar, eres patético, y es hora de que cobre mi deuda —le dijo y en un movimiento rápido, sacó una pequeña navaja y la clavó sobre su pierna, un grito de dolor salió de su garganta y cayó al piso.
Todos veían sorprendidos, nadie vio venir eso, Jimin se puso de cuclillas frente a él y sacó la afilada hoja de su muslo.
—Espero que esto te sirva de lección imbécil —dijo antes de ponerse de pie y tomar a Jungkook de la mano alejándolo de la multitud.
—Eso fue… —comenzó a decir Jungkook cuando estuvieron lo suficiente lejos.
Jimin lo llevó hasta el costado de una caseta que suponía era una especie de oficina improvisada y lo empujó contra la pared.
—Callate, y besame — fue lo único que dijo Jimin antes de atacar su boca con desespero.
Después de la sorpresa inicial Jungkook correspondió al beso y abrazo la pequeña cintura del rubio intensificando el beso, las manos de Jimin se movían ansiosas sobre el pantalón del pelinegro hasta que logró soltar el cinturón y desabrochar su pantalón.
—Eso fue tan malditamente caliente, quiero que me folles ahora Jungkook.
—¿Aquí?
—Si aquí —corroboro Jimin antes de liberar la ya dura polla de Jungkook envolviendola en sus manos.
Jungkook sonrió y cambió de posición, colocando a Jimin de cara a la pared, mientras sus manos se abrieron camino dentro de sus apretados pantalones, los desabrochó y bajo solo lo suficiente para dejar a la vista ese precioso culo que tanto le encantaba.
—No te voy a preparar cariño, si te lastimo me tienes que pedir que pare, ¿okey? —le dijo entre besos en su cuello.
—Sí, ahora hazlo, te necesito dentro Jungkook —jadeo Jimin.
La necesidad que sentía unida a la adrenalina por ser descubierto, lo tenía ardiendo en deseo, Jungkook separó sus nalgas, y alineó la cabeza de su polla, beso a Jimin en su cuello, mordiendo la blanca piel en el proceso, mientras empujaba sus caderas al frente, enterrándose en el apretado agujero, Jimin grito y movió su trasero hacia atrás buscando más.
Los movimientos eran rápidos, desesperados, ambos gemían, una de las manos de Jungkook lo sostenían de la cintura manteniéndolo quiero mientras la otra se encargaba de masturbar su miembro, lanzándolos en poco tiempo al clímax.
—Sé mío Jimin, no solo con tu cuerpo, dame también tu corazón, se mi novio.
—Sí, si, soy tuyo Jungkook —jadeó el rubio en respuesta, en el momento en que su orgasmo llegaba.
Su liberación manchó la mano de Jungkook y sus paredes apretaban el duro miembro que se clavaba con fuerza en su trasero, Jungkook gruño en satisfacción mientras llenaba con su semilla el trasero de Jimin.
La experiencia fue rápida y placentera, Jimin apoyó su frente en la fría pared, respirando agitadamente, mientras Jungkook dejaba suaves besos en su nuca.
—Te amo Jimin.
—Yo también Kook.
Cuando su respiración se reguló, el pelinegro salió de Jimin, ambos acomodaron su ropa, volviéndose a besar, ignorantes de que toda la escena y su declaración de amor había sido vista y escuchada por Shownu, los ojos del asesino brillaban con furia.
—Estás muerto hijo de puta —declaró mientras veía alejarse a la pareja.
Dejo esto aquí y me voy lentamente.
Nos leemos bellezas...
Besitos 😘😘😘
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top