❦︎ (ɪɴ)ᴍᴏʀᴛᴀʟ ᴀᴜ ☔︎
La vida de un simple mortal es dolorosa. La vida es dolorosa. Vivir es doloroso.
[🍇]
Su nombre es Purple Orchid. Es un joven, que no le falta mucho a la adultez con 17 años cumplidos hace poco.
Su familia es algo simple, teniendo de integrantes únicamente a su madre, Pink Orchid, la cual se encuentra enferma desde hace algunos años. Purple a empezado a trabajar para poder mantener la y pagar su tratamiento, pero no siempre el trabajo duro es recompensado.
Actualmente está volviendo de las compras. Purple se encontraría caminando por las calle, despeinado y desarreglado; tenía ojeras bajo sus ojos y una mala postura; en su mano llevaba una bolsa de plástico con pocas cosas que darían a entender que prepararía una sopa.
El día estaba nublado y parecería que podría llover, por lo que tampoco había gente caminando.
Solo era el joven Orchid y sus deprimentes compras.
Su caminata parecía eterna, aunque ya se acostumbraba a ir caminando de punto A a punto B, pero no le gustaba demasiado; "lo único bueno es que ocurren cosas interesantes". Pensaba.
Ahora mismo parecía una ciudad fantasma, así que su propio pensamiento estaba erróneo. Nada era interesante.
Siguió sin muchos ánimos de estar allí, lo único que quería era llegar rápido a su hogar para estar con su madre y cuidarla.
Todo iría normal, siguiendo su camino con firmeza; en la calle entre la neblina, se vería algo, parecía un animal atropellado que le daría ciertos escalofríos a nuestro joven, hasta acercarse y notar que no era un animal.... Era una persona.
Esto instantáneamente cambiaría todo el estado de cansancio e ignorancia de Purple, a uno asustado y alterado.
— ¡AH! ¡¿Que diablos?! —
Salió inconsciente de su boca mientras dejaba caer la bolsa de compras del asombro. Rápidamente buscó su celular, dejando de ver aquel cuerpo para llamar a una ambulancia.
Al llamar y regresar su vista a la calle sombría y rota de la ciudad, notaria la ausencia de aquel "cadáver" que iba a reportar. Se quedó atónito, mirando desconcertado hasta que la voz de una mujer lo regresara.
— ¿¿Disculpe...?? ¿¿Hola?? —
Purple al oír aquello, corto y simplemente guardó su teléfono.
Pensó en que solo alucinaba por la falta de sueño y alimentación que llevaba hace tiempo, quizás solo enloquecía. Pero aquella "alucinación" se había visto demasiado real, demasiado como para ser de la simple mente perturbada del joven.
Suspiro, nuevamente con cansancio y se dispuso otra vez a llegar a su casa; no quería que solo por una tonta alucinación tendría que cocinarle más tarde a su madre, aunque fueran unos minutos.
[🏠]
Llegó a su hogar.
Se dirigió rápidamente a la cocina y prendería la hornalla para empezar a preparar una deliciosa y simple sopa.
Mientras la comida se preparaba, este lentamente fue a la habitación de su madre.
Pink Orchid, ella era la mamá del joven.
Se encontraría recostada en la cama, descansado por las pocas fuerzas que tenia. A Purple le dolía verla así y no quería molestarla, pero Pink debía comer algo. Estaba por acercarse y despertarla, pero el sonido de la puerta detuvo sus planes; miro de reojo a su madre y fue a abrir, apenas asomándose.
— ¿Qué necesita...? —
Pregunto seco y sin ánimos. No quería ser interrumpido por nadie en ese momento.
El chico detrás de la puerta parecía normal, era un stick de piel verde y ojos celestes, alegre a la vista.
Purple no tardó en darse cuenta que aquel sujeto lucía exactamente igual a su "alucinación" del cadáver.
Abrió los ojos de repente. Antes de poder decir algo, el chico lo interrumpió.
— ¡Hola! Mi nombre es Green.B, un músico en práctica. —
Se presentó con amabilidad y entusiasmo. Se veía bastante feliz y no parecía saber nada de aquel cuerpo en la calle.
— ... No tengo dinero para comprar tu música de principiante... —
Respondió nuevamente con su actitud del inicio y olvidando el hecho de haberlo visto atropellado. No quería tener nada que ver con ese sujeto.
— Oh. No, no... No vengo a vender nada. —
El nombrado "Green" negó tal cosa con un movimiento de su cabeza y haciendo una cruz con sus brazos.
— Solo pido unos segundos de tu tiempo para que oigas un poco, Purple —
Junto ambas manos y parpadeo dos veces, mirando con una sonrisa al mencionado. Sonrisa que causaba desconfianza.
Por parte del morado, volvería a exaltarse por escuchar su nombre, puesto que nunca se lo había mencionado y, honestamente, no conocía de nada al "músico" que tenia enfrente. Desconfió, obviamente, pero lo vio algo insistente y no quiso cerrarle la puerta en la cara.
Suspiro con cansancio y dejó que pasara, haciendo sonreír al de ojos celeste que pasó agradecido.
— Espérame por allá... Debo hacer algo. Ahora estoy contigo. —
Dijo Orchid luego de cerrar la puerta y señalando la vacía sala con un simple sillón.
Posterior a aquello, se dirigió a la cocina para servir la sopa en un plato y luego dirigirse a la habitación de su madre.
Por otro lado, a Green le llamó la atención lo deprimente que se veía la casa del morado. Se dirigió a la sala como lo habían ordenado y se sentó en el sillón, esperando a su acompañante.
Sacó su pequeño reproductor de música con una de sus mejores canciones.
Al rato de estar esperando, se cansó y decidió buscar al propietario de la casa el mismo. No le costaría mucho, pues era un hogar pequeño.
Camino al pasillo, notando una puerta semi-abierta, la cual no dudaría en acercarse y asomarse par observar.
Estaba Purple junto una stick rosada de cabello corto, claro que sabemos que es su madre, pero Green no.
El morado ayudaba a la mujer a tomar su sopa con lentitud y paciencia.
La escena le pareció tierna a Green, que se quedó mirando hasta que la señora lo notara asomado.
— Oh- Pur, cariño... No me dijiste que había visitas... —
Señalo al músico mientras le hablaba a su hijo, Purple.
— ¿Que-? ¡Ah-! ¡Hey, te dije que me esperaras! —
El mencionado claramente se enojó al ver que Green lo había desobedecido. Se levantó y se acercó con intenciones de echarlo, aunque su madre tenía otros planes.
— Oh... No, no.. hijo, que pase. Je- No estoy vestida para recibir visitas. —
La mujer rió levemente mientras se sentaba en la orilla de la cama para levantarse. Purple se le acercó rápidamente para que no se tratase de levantar por sí sola.
— Soy Pink Orchid, mucho gusto. Soy la madre de este adorable joven. ¿Tu eres su amigo? –
Se presentó con su nombre. La mujer sonrió levemente y miró a su hijo de reojo al preguntar lo último. Green sonrió ante eso y paso a la habitación con más confianza.
– Mucho gusto, Señorita Orchid... Soy Green —
Sonrió y se presentó con confianza, amabilidad.
– Mm. Supongo que puedo decir que soy buen amigo de su hijo. —
Miro a Purple con algo de burla, mientras que el mencionado se cruzaba de brazos.
— Ow. . . Que lindo... Me alegro que mi Purple tenga un amiguito.. ¿Por qué no salen un rato? Hijo, yo puedo sola... —
Pink tocó la mejilla de Purple y sonrió con algo de cansancio, lucía como una dulce madre. Algo que realmente Green no comprendía del todo.
— Pero- mamá- no es necesario, mi.. amigo ya se iba... —
El de cabello revoltoso miro mal a su "invitado".
A pesar de las insistencia de Purple, ambos jóvenes terminaron saliendo.
Pink le había dado una tarjeta a su hijo para que se comprara algo, aunque al salir el joven de ojos rosas no se vio muy emocionado.
Purple quedó muy serio cuando salió con Green, empezando ambos a caminar lentamente por la vereda de su cuadra.
— Bueno.... ¿Esa es tu mamá? —
Green preguntó incómodo por el momento tan callado que estaban pasando ahora mismo.
Purple no respondió.
— Ehh.... No se veía muy bien- ¿Puedo preguntar? —
El músico tocó el hombro de su contrario esperando no ser ignorado.
Purple se enojó y se movió, quitando su mano.
— ¡Déjame! . . . Estoy enloqueciendo... —
Nuestro mortal se sobo los ojos, estresado. Hacerle perder su paciencia era demasiado fácil.
— Ni siquiera puedo decirle a mi mamá que su tarjeta ya no tiene dinero.... —
Purple bajo la mirada y guardó la tarjeta, empezó a hablar de su vida y su madre, respondiendo la pregunta de su contrario.
Pero, Green perdió el hilo enseguida, escuchando la voz suave y directa del de ojos rosados. Se sintió hipnotizado por su voz, sintiendo sus mejillas calentarse a medida de que los segundos pasaban.
Detuvo paso y lo miró fijamente mientras seguían oyendo lo, cada vez más bajo pues Purple seguía su camino.
El menor noto la ausencia del músico y se detuvo, dio la vuelta y lo miro, lucía como una estatua.
— . . . . Idiota, ¡¿Me estás escuchando?! —
Le gritó irritado en el momento.
Green despertó y miró desconcertado.
— ¿Que-? Perdón. Tu bella voz me distrajo —
Respondió sin muchas vueltas y se acercó rápidamente al menor, paso su brazo por detrás del cuello de Purple, acercándolo más a el.
— ¿Qué decías? —
Purple ya no aguantaba más estar con ese sujeto, lo único que quería era volver con su madre y cuidarla. Empujó a su contrario rápidamente y se alejo unos pasos.
— ¡No me toques! ¡No necesito a un idiota que este molestando! Solo.. quiero descansar.... —
Se cubrió la cara y dió un leve grito de estrés. Quería llorar, por una "estupidez", pero solía hacerlo cuando se estresaba o hartaba de algo.
Ahí fue cuando Green entendió, que debía calmarse un poco con su actitud.
— . . . Okay, okay... Ya. Lo siento.. —
Se disculpó el mayor, agachando la cabeza.
— Vamos a sentarnos y te muestro mi música. —
Green rápidamente agarró la mano de Pur y camino hacia una banca que estaba en un pequeño parque. Purple solo se dejó llevar, no tenía demasiada fuerza como para detenerlo.
Llegaron a una banca y se sentaron juntos, el músico sacó su pequeño aparato para reproducir música y unos auriculares.
— . . . . . —
El de ojos rosados miro mal a su acompañante, ni siquiera sabía si podía decir algo.
— Oye. Mi madre está muriendo, no quiero estar aquí...... —
Tardo en hablar pero por fin dijo lo que quería. Purple bajo la mirada y empezó a encorvarse para delante, hasta que su cabeza tocó sus rodillas. Se agarro el pelo y respiro hondo.
Se sentía más ansioso de lo normal y no quería demostrarlo, le avergonzaba estar así enfrente de alguien que acababa de conocer hace unos minutos.
Aquellas palabras sorprendieron al mencionado, no se esperaba que le dijera algo así en ese momento. Al menos tenía su respuesta, verdad?
Noto rápidamente su acción, sintiéndose mal por su actitud estúpida y molesta. Tocó la espalda de Purple lentamente.
— . . . ¿¿Muriendo..?? ¿Ella puede.... Morir-? —
Acaricio su espalda con lentitud en consuelo. Green parecía no entender demasiado sobre "la muerte". Purple aún no notaba aquello.
— . . . Claro que- si.... Cómo todos...... Solo que ella será antes.. —
Purple se volvió a sentar bien y desvío su mirada, avergonzado. No podía creer que estaba diciéndole esto a un completo desconocido que se había metido a su casa.
— . . Sabes, hoy creí verte muerto en la calle. Estoy loco.. —
Se sobo sus ojos cansado.
— Ehh....... ¡Bueno! Quizas no tanto —
Respondió el oji-azul con algo de nerviosismo. Purple se extraño por aquella respuesta, pero hasta este punto Green se le hacia algo raro y no le sorprendería si dijera alguna estupidez, pero no creia que fuera el momento de decir alguna babosada.
— Me presento bien, me llamo Green y soy un ser incapaz de morir —
Habló con toda la calma del jodido mundo. Purple se lo tomó como una broma, mala broma.
— . . . . . . Te detesto tanto —
Purple tardo en responder, estaba claro que aquello no lo tomaría enserio.
Le pareció una burla hacia la muerte y para ser más personal, una burla a su madre.
— ¿No me crees? Bueno, estaba claro. ¡Te lo demostraré! —
Con más tranquilidad, el músico se levantó de su asiento y se acercó a un puente que daba camino a una de las salidas del parque.
Obtuvo atención del joven deprimido, que creía que no sería capaz de hacer nada estúpido, o quizás si?
Green salto.
Nuevamente Purple se había alterado. ¿Que mierda le sucedía a este sujeto?
Se levantó de su asiento y se acercó a la orilla del puente con rapidez, no podía creer que un tipo con tanta energías acabara de suicidarse enfrente suyo como si fuera deportivo. Estaba en shock, tal vez también estaba destinado a sufrir estos sucesos, tal vez el que debería saltar ahora era el. Así funcionaba, no?
Obviamente no lo hizo, al menos no lo haría mientras su madre este con vida.
En su cabeza le apareció el rostro de Green, su sonrisa tan característica y sus ojos azules tan llamativos. Diría que era un chico lindo, un chico lindo que acababa de quitarse la vida enfrente suyo.
Lamentable. Purple se sintió angustiado y cuando menos se dió cuenta, el cuerpo de Green ya no se vería. Le pareció extraño, pero el shock de ver cómo se tiraba no lo dejo pensar mucho en eso.
Ahora que estaba solo, con un nuevo reproductor de música, solo quedaba regresar a casa con su madre y decirle que si "amigo" tuvo que irse.... Para siempre.
O no.
— . . Dicen que las personas alegres son las más deprimidas. Supongo... —
Purple suspiro pesadamente y se dió la vuelta, dándose un susto por lo que sus ojos verían a continuación.
— ¡AH! ¡¿Que-?!! —
— ¡¡Hey, Orchid!! —
El cuerpo intacto y con un corazón latiendo de Green acababa de aparecer alejado de el solo una calle. Lo saludaba con normalidad y con su corriente sonrisa.
Purple se espanto, ¿Ahora alucinaba? ¿Ahora debería tirarse el para olvidar todo esto? ¿Y si Green nunca estuvo y su mamá solo fingió por la soledad de Purple? ¡¿Que significa esto?!
— Que- no- tu- acabas de- yo te vi- —
La confusión no tardó en aparecer en palabras. Acababa de ver a alguien morir y al minuto aparecer como si hubiera ganado una entrada a Disneyland.
Purple terminó aceptando que la inmortalidad quizás existía, y que quizás el músico no era un drogadicto con depresión.
— ¡Te lo dije! Cuando me viste atropellado yo te estaba siguiendo, Purple —
Green siguió con su tranquilidad de siempre mientras colocaba ambas manos en su cadera propia.
— . . Eres un acosador - inmortal- . . . . —
El de ojos rosados se alejó unos pasos de Green, su presencia ahora lo angustiaba
— ¿Por qué tanta obsesión conmigo-? —
Las dudas no quedaban solo en "como eres inmortal", las palabras de que lo seguían lo descolocó y aterró más. Estaba siendo acosado por una deidad. El. Un simple joven deprimido.
— Oh. Pur..Pur... —
Rio levemente y se acercó al más bajo, con confianza.
— Yo no e nacido con un propósito fijo, realmente soy bueno en todo lo que hago.. pero cuando llegue y te vi. Llamaste completamente mi atención... —
Un leve sonrojo apareció en sus mejillas. Hacía algún tiempo que había observado a Purple y le había agarrado cariño, a pesar de que el mencionado lo había conocido apenas hoy. Estaba quedando como un pervertido acechador.
— . . . Que malos gustos tienes.... —
Respondió con sinceridad. Terminó por darse la vuelta y empezar a caminar, algo rápido para huir.
Le costaba procesar tal información y ahora sabiendo que lo perseguían, no se quedaría tranquilo. Probablemente trataría de seguir su vida normal hasta que su subconsciente quiera desechar este día.
. . .
Frustrado, regreso a su hogar con su linda madre. Se quedó cuidando la sin saber nada de su querido "amigo."
A la hora de dormir, simplemente no pudo. La culpa de no poder pagar el tratamiento de su madre lo carcomía, quería ayudarla pero no podía, no encontraba manera para ayudarla.. estaba en la miseria.
[🎵]
En los siguientes días, Green volvía a aparecer en la puerta del joven deprimido. Solía esperarlo afuera de su hogar para que cuando saliera el pudiera acompañarlo o incluso directamente invitarlo a caminar y salir.
— ¿Otra vez aquí? Solo voy a comprar fideos instantáneos.. —
Purple salió de casa, sin detenerse a ver bien a su contrario. Camino a un paso normal.
— ¡Hey-! ¿Pasaras de mi nada mas? —
Green procedió a seguirlo a su misma velocidad. Planeaba acompañarlo todo el camino hasta que volvieran a la casa o muriera por un accidente, otra vez.
Así solían ser ahora los días de Purple, salir a comprar y ser acompañado por un ser inmortal que, de vez en cuando, terminaba muriendo enfrente del morado.
Lo asustaba aquello, obviamente, pero tenia guardado en su cabeza que Green era un ser inmortal y que no debía preocuparse...
"Ojalá mi madre fuera así..."
Pasaron pocos días para que Purple empezará a agarrarle cariño al músico enamorado. Su mamá lo alentaba a salir con él estando feliz de que Purple al fin tuviera un amigo con quien pasar el rato.
Su acompañamiento a las compras se convirtió en alguien cercano con el que de vez en cuando salían a pasear o tomar algo en algún lugar. Purple dejando lentamente aquella tristeza y angustia de que su madre podría morir y ahora viviendo un poco más como una persona real.
— Mi niño.. Yo puedo prepararme una sopa sola... Ve con tu amiguito, se ve que le tienes cariño.. —
Insistió Pink a su hijo, a ella tampoco le gustaba que Purple estuviera siempre encima.. Quería que su hijo tuviera una vida propia.
Ante aquella insistencia de parte de su madre, Purple decidió hacerle caso y salir nuevamente con Green.
Ahora que era amigos, el morado solía contar algunas partes de su vida... Como que su padre lo había abandonado, que nunca había sido muy sociable por lo que no tenía amigos, que a pesar de tener 17 años el ya no estudiaba y que en su lugar trabajaba de vez en cuando como un cartero con mala suerte.
— Wow... Siento que hayas tenido que dejar el colegio, Pur.. —
Dijo Green algo triste por aquello que le contaban.
— Oh. No te preocupes... No me iba tan bien de todas maneras... —
El menor respondió algo agotado, pensar en el colegio no le gustaba demasiado. Sus notas eran malas y estaba solo, no tenía motivos para ir si no le daban las oportunidades que necesitaba.
Se sentía un verdadero fracasado.
— . . Tu mamá que piensa de aquello? —
Preguntó con curiosidad Green. Como una madre enferma podría reaccionar a el aban dono de su hijo a la escuela.
— . . . —
Purple se quedó en silencio unos segundos. Esos temas era algo del que ni pensando creería que hablaría con alguien, menos con una persona como Green.
Dio un suspiro y respondió con un suave:
— No quiero hablar de eso... —
Green entendería aquellas palabras y no preguntaria mas.
Otra cosa bastante notable eran los sentimientos del músico hacia el otro muchacho. Purple ya le había agarrado algo de "cariño" y no era tonto, se daba cuenta de los sentimientos y los intentos de ligue que Green hacia; su actitud era graciosa.
Se había acostumbrado tanto que ya sabía que responderle a sus piropos, también a aceptarle sus salidas y de vez en cuando una "pequeña cita" como Green solía llamarlas.
Purple se sentía más iluminado, sus vacíos ojos rosados ahora brillaban; su cara alargada ahora soltaba una sonrisa.
Nunca creyó que lo que necesitaba era al menos un solo amigo.
Aunque claro, esto tampoco era tanto. Purple podría verse algo más decente con Green, pero seguía siendo el mismo. Aún seguía estresado con el dinero, seguía sin saber cómo ayudar a su madre, como trabajar sin ser perseguido por una jauría de perros en el camino. Ahora con Green, a veces sentía que estaba descuidando a su madre y eso no lo hacía sentir mucho mejor.
Justo cuando aquella puerta se cerraba, la soledad y preocupación de Purple volvía a aparecer.
A veces pensaba en que quizás había sido un mal hijo, cabe aclarar que nunca superó el abandono de su padre y que uno de sus pensamientos era "Si hubiera sido más masculino el estaría aquí para ayudarme", creía bobamente en que su padre siempre tuvo razón con el y que no estaba bien ser tan "afeminado".
A Green le contó sobre su padre, pero nunca le habló con tanto detalle, dejando todo con un "no me importa" a pesar de ser de sus preocupaciones. Extrañaba a Navy.
A pesar de todo, Purple tenía una chispa de felicidad gracias al músico. Aquella chispa la cual Green trataba de mantener encendida y quizás aumentar, pero no era fácil, nada fácil conociendo las preocupaciones del morado.
Green confiaba en que, todo se mejoraría, porque Dios no dejaría que un joven tan bueno como Purple sufriera tanto, verdad? Había esperanzas.
El inmortal no dejaría que la vida de su amado se derrumbara.
Así es como llegamos a aquel martes en la mañana, un día exacto antes del cumpleaños del morado. Purple se había despertado para hacer el desayuno y luego irse a trabajar, como de costumbre.
Reviso su celular mientras preparaba algo simple, al instante una llamada sonó.
— ¿Hola...? —
Pregunto al teléfono mientras seguía en su cocina.
La llamada parecía normal, era su jefe, algo que lo desconcertó pero prefirió escuchar
El primer golpe bajo fue cuando le dijeron que estaba despedido por ineficiencia en el trabajo. Purple quedó helado.
No pudo seguir escuchando, simplemente corto y dejo caer su teléfono; se rompió.
Pocos segundos pasaron antes de que se diera cuenta de lo que hizo, desesperando se por su teléfono; estaban bastante caros y no podía romperlo así nada más.
El estrés no tardó en llegar, las lágrimas cayeron rápidamente por el enojo que sintió; quería gritar y obviamente no lo haría.
Con su vista borrosa termino de preparar su desayuno y luego empezar a comerlo con lentitud, y decepción hacia el mismo. Ahora que no tenía trabajo, que se suponía que haría? Por qué justo hoy?
Su llanto silencioso fue interrumpido por el sonido de dos suaves golpes en la puerta. Purple tragó con dolor y fue a abrir, sabiendo quien sería su "visita inesperada"; Green.
— ¡Hola! Oh-- ¿Pur estás bien? —
La amable y energética voz del músico cambiaría drásticamente al ver el estado de su amado, se preocupo e instintivamente toco su mejilla por consuelo.
— Perfecto... Pasa.. debo prepararle comida a mi mamá y saldré contigo.... —
Purple hablo desanimado, apartó la mano de Green y se alejó de la puerta dirigiéndose de nuevo a la cocina.
Preparo algo simple, otra vez y fue a la habitación de su madre para que comiera.
Green espero con paciencia a Purple, sabía que podría tardar unos minutos porque el morado ayudaba a Pink. Sorpresivamente Purple volvió más rápido de lo que creía, pero con la comida aún en manos.
El más joven guardó el plato y regreso con Green, sin verse aún muy animado.
— Solo vamonos, Green... —
Y así ambos stickmans salieron a caminar juntos.
Green estaba algo preocupado por Purple, pero el de ojos rosados no parecía querer responder sus dudas, así que no insistiría.
Mas adelante seria que se enteraría del despido de Purple, a lo que reaccionaría con un abrazo y mas lagrimas de parte del más joven.
Paso el dia, ambos estuvieron todo el dia juntos afuera, paseando por lugares ya recorridos y escuchando la música narcisista de Green, como era costumbre. Ahora estaban de camino a la casa del morado nuevamente, escuchando música en bajo volumen mientras sacaban alguna corta charla de vez en cuando.
— Estoy escribiendo una canción sobre ti.. Sabías?? —
Mencionó inesperadamente Green con su sonrisa boba y enamorada.
— Mmm.. Que? ¿Por qué? —
Eso hizo ruborizar levemente a Purple, quien para nada se esperaba aquello. No se creía merecedor de una canción.
— Estás demasiado embobado conmigo, Green-.... —
No le daba miedo decírselo, era verdad, Green estaba idiota por lo enamorado.
— ¡Hey! Es un lindo gesto... Te quiero mucho, Purple. —
Aún más bobo que antes, se ruborizo y miro alegre a su contrario.
— Aunque- claro que no la acabaré si es que no quieres.. Tú eliges —
Por supuesto que Green no lo haría sin el permiso de su inspiración, no quería que Purple se enojara.
— Mmm.. Haz lo que sea.... —
Y así de simple acabó la conversación. Siguieron caminando a su destino.
Al llegar a casa, ambos se despidieron amablemente como siempre.
— Adiós, Green.. —
Pero aquellas dos simples palabras, serían lo último que Green llegaría a oír de Purple.
[🎈📌]
Miércoles, Purple cumplia 18.
Hoy se suponia que era el mejor dia del cumplañero.
Se levantó otra vez temprano para, quizás, prepararse algo especial por este dia.
Pensó en hacer algo más dinámico, quizas alguna forma con la comida o lo que sea. Lo que sea que haya preparado le gustó y quiso enseñarle a su madre.
Se dirigió a la habitación con su plato de comida, se acercó a la cama de su madre y toco suavemente su hombro queriendo despertarla.
— . . . Mami.. —
No hubo ningún tipo de respuesta. Purple no quiso exagerar, quizás su madre solo tenia el sueño pesado.
— Mamá... Hey- ya es de dia.. —
Le hablo con una tranquilidad que rápidamente se iría.
— Hey- Mamá-- Despierta--... —
Sin dudar mucho, dejo el plato y se acercó a su madre, trato de sentir su pulso, pero no había nada.
No lo podía creer.
Ella se había ido.
Se había ido sin poder despedirse antes, ni siquiera se había dado cuenta en qué tan grave estaba el estado de Pink.
Las lágrimas volvieron a caer, como si de una cascada se tratase. Su madre había muerto, su ser mas preciado había fallecido sin dolor.
— Mamá-... No- NO-- M-Mamá-.... Tu no--....... —
Sin mucho que hacer, la abrazo mientras lloraba desconsoladamente. Ya no aguantaba esto, era su cumpleaños y todo estaba saliendo mal.
Ya no aguantaba su vida.
Quien sabe por cuánto tiempo estuvo ahí, gastando el agua de su cuerpo. Pudo haber estado minutos, ignorando el sonido de la puerta tocando repetidas veces; pudo haber estado horas ignorando el ejército de hormigas que se acercaban a comer el desayuno que había preparado para él y su madre. Había estado horas allí, quedándose dormido hasta las 4:30 de la tarde.
Despertó desconcertado, había olvidado mínimamente todo hasta volver a ver a su madre; no le quedaba agua a su cuerpo para seguir llorando. Se levanto, miro unos segundos a su madre y salió de la habitación.
Se dirigió a su habitación, sacando de allí un cuaderno y un lápiz. Posteriormente salió de su casa, ignorando todo su alrededor y concentrándose en lo que escribió en aquel cuaderno, débilmente mientras caminaba.
Luego de bastante caminata, llegó a aquel parque con el que fue con Green la primera vez, aquel que tenía un puente.
Purple camino por aquel puente, terminó caminando en círculos mientras escribía, o trataba de escribir, algo en aquel libro. Solo le tomó unos minutos para luego dejar la libreta y acercarse a la orilla del puente, mirando la altura. ¿En serio iba a saltar? ¿Tal mal estaba su cabeza como para considerar aquello?
Creía que su muerte era su culpa, Pink estaba a su cuidado y el como todo mal hijo la dejó morir.
"No fui lo suficientemente atento" "Debí trabajar más, tal vez dejar de comer pero ahorrar más dinero" "No debí salir tanto con..."
— . . . Green... —
Su amigo apareció en su cabeza, su única compañía, su amigo inmortal.
A pesar de tenerlo en su cabeza, los pensamientos intrusivos de Purple ya no se podían revertir, no podía vivir sin su madre... Si causaba tal acto no llegaría con ella al cielo, pero no tendría que soportar su miserable vida.
Se subió al barandal y miro para abajo, era aterrador.
— Y-yo... Lo siento...- pero sabíamos que esto podría pasar-.... —
Cerró los ojos con fuerza mientras tomaba aire. Habló consigo mismo recitando lo último escrito en su cuaderno.
— Veamos si yo tambien soy inmortal... —
. . .
[El cuerpo de un joven con aproximadamente 17-18 años es encontrado debajo de un puente. El chico fue identificado como Purple Orchid y que al parecer pudo haber atentado contra su vida un Miércoles ##/## a las 5 y punto. En el barandal fue encontrado una libreta con aparentemente "una carta" dirigida al cantante poco conocido, Green.B. Se está investigando el caso.]
Purple lo había hecho. La soledad lo había ganado y simplemente no pudo aguantar más de lo que ya aguantaba. Pero, no, no estaba completamente solo.
Green miró las noticias, alterado al escuchar que el nombre del fallecido era el del chico que tanto apreciaba, sus ojos color cielo empezaron a soltar lágrimas. No lo podía creer.
Su atención al televisor volvió cuando mencionaron su nombre, una carta para el? No podía perderlo. Sin pensarlo se levantó y fue corriendo al parque, sabiendo de que puente se trataba.
Tardó pocos minutos en llegar y ver cómo estaba todo en VIVO. Lentamente se acercó para pedir la libreta de Purple, aún con más lágrimas en sus ojos.
Tardaron en darle la libreta, pero terminaron cediendo. Ahora estaba en manos de Green.
— Pur- por qué-. . . ? —
Abrazo el cuaderno con fuerza sin parar de llorar terminó por alejarse un poco del puente, sentándose en aquella banca donde hablaron alguna vez. Miró el cuaderno y lo abrió tembloroso, ¿Que podría haber escrito ahí para el? Green no había sigo capaz de entender al 100% las emociones de Purple, pero ahora ya no estaba. Solo quedaba una última página para cerrar su vida.
«Green. Lo siento
Mi madre murió hoy a la mañana, estuve llorando hasta desmayarme y despertar a la tarde. No puedo con esto y lo sabes.
Mi mamá lo era todo para mí, sufrí tanto para tratar de salvarla y simplemente no parece que hice suficiente.
Lo siento.
Fuiste una gran compañía en mis últimos días, pero mis problemas no se fueron. Lo siento.
Lo siento. Lo siento. Lo siento. Lo siento. Lo siento tanto.
Se que tú me amabas, pero no merecías estar con alguien como yo. Lamento hacer esto en mi cumpleaños.
Lo siento. Pero sabíamos que esto podría suceder, al menos yo creí que era obvio.
Ahora, veamos si yo también soy inmortal.»
— Lo siento por no entenderte-... Perdón- Purple-... No merecias acabar así.... —
Volvió a abrazar el cuaderno y a aferrarse, sin dejar el llanto de un joven enamorado que perdió a su amado. Ahora el estaba solo.
Pero no. No tomaría el mismo camino que su amigo.
Lo unico que tenia para recordarlo era ese cuaderno con aquel deprimente texto que le dejaron.
Ese cuaderno era especial, no lo desecharía pero tampoco volvería a abrirlo.
Pensaba acabar aquella canción que quería dedicarle, darle un homenaje a su enamorado, liberar sus sentimientos hacia el.
[🎵📝]
Quería contar esta historia para tratar de hacer consciencia sobre estos casos, inmortalizar a mi amigo para no olvidarlo aunque dudo poder hacerlo alguna vez. La vida es una y no hay que desperdiciarla. Ahora me doy cuenta de lo importante de cuidarse a uno mismo y pedir ayuda si es necesario, todo se puede mejorar.
Ha pasado algún tiempo desde su muerte, los noticieros ya olvidaron lo sucedido pero yo obviamente no, no puedo olvidarlo, lo que tuve con él es inolvidable (a pesar de que nunca fuimos nada más que amigos). No me deprimire por aquello, Purple me ha inspirado para disfrutar más la vida. Seguiré sacando canciones, haré un álbum dedicado a aquel amor que no pudo ser posible, incluyendo la canción que quería dedicarle a Purple, y espero que a la gente le guste.
Mi primera canción del álbum se titula: 「Inmortalizado por el internet」
═ Green .B
0:58 ━━❍─────── 3:35
ᴠᴏʟᴜᴍᴇ : ▮▮▮▮▮▮▯▯▯
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top