Y me bloqueó, así que yo le bloqueé.

Después el me desbloqueó pero yo no le quite el bloqueo.

Unas semanas después (o dos semanas) cuando venía en lunes al instituto, mientras andaba vi a un niño que me estaba mirando.

Le devolví la mirada y mi mente no se creía lo que veía.

Era el Tallo, estaba delante del instituto sentado en uno de los bancos delante de la puerta de entrada.

Nada más cruzarnos, desde donde estaba, incluso con su mascarilla puesta, le podía ver su típica sonrisa burlona. Intercambiamos unas palabras y yo entre.

El no paraba de asomarse por la ventana e incluso de espaldas, había veces en las que podía notar su mirada clavada en mi nuca.

Cuando vino el profe, dije;

—Profe, hay un Yonki en la ventana.

En el recreo el entró al instituto ya que le dejaron (hay covid, nmms) entonces él se acercaba a donde estaba pero entonces vi que estaba suplicándole a una niña con la que estaba hablando (la verdad no sé el que ya que me fui)

Y justo cuando pensé de que se olvidó de mí, ayer recibí una llamada grupal.

Al principio pensé que era Membrillo, ya que los primeros 3 números coincidían. Después yo y mis amigas comprobamos que lo era el ya que una de mis amigas tenía su número.

Entonces me arme de coraje, u le pregunté

Que niño más pesado.

¿Por cuántos números me ha llamado ya? ¿Tres número? ¿Solo se cambia de número para molestarme?

Su puta abuela le va a coger las llamadas, porque yo no.

No me ha contestado, estoy segura de que vio el mensaje.

Ahora, lo que me hace sentir...no se, es que se ha puesto a ver mis estados de WhatsApp...

Pero por alguna razón, siento que una pelea se avecina.

Estoy segura de que le caía mal al Membrillo por culpa del Tallo (ya que a él nunca le hable cuando empezó a decirme cosas, en cambio, era amigo del Tallo)

La verdad no le voy a bloquear.

Tengo curiosidad en saber que piensa hacer esta vez.