Ayer me peleé con la única persona del grupillo que demostró haber cambiado.

Adivinad quién es.

Es Membrillo

JAJAJA Nha, mentira 😂 Es Siles

Os explicaré un poco por encima por qué a mi parecer, demostró haber cambiado.

Cuando Siles y yo nos empezamos a sentar juntos (cuando reecolocaron los sitios, ya lo mencioné en el blog) no nos hablábamos.

Bueno, más bien yo no le hablaba, por todo lo que pasó el curso pasado.

Pero él a mí sí me hablaba, para preguntarme cosas triviales como la fecha y tal. Cuando preguntaba algo a Edu (un niño se mi clase que se sienta delante mía) Siles me contestaba y no notaba ni un gramo de maldad o vacile en sus respuestas.

¿Os acordáis de Alexandra? Ella y Siles se llevaban como gato y perro.

Cada vez que hablaban se acababan peleando, pero en algún punto de este curso, Siles y Alexandra se hicieron amigos. Hubo una vez en la que Siles le envió una nota de papel arrugada (7w7), hablaban juntos, solían bromear.

Antes del puente se sentaron juntos.

Yo los emparejaba para molestar a Alexandra, y estaba en plan: Mi Shipp se está haciendo realidad 🤩

En matemáticas no estaba prestando atención por lo que no me enteré de los ejercicios que habían que hacer.

Pude haberle preguntado a Edu (como casi siempre) pero decidí que le preguntaría a Siles.

Sería como una prueba a él XD

—Oye Siles ¿Que ejercicios hay que hacer? —le pregunté, viendo que él estaba con el móvil.

—El 5 y el 6 de la página 73 —me contestó.

—Como que este curso estás más majo que el curso pasado ¿No?

—Hombre, si quieres, te contesto borde. —y él tenía razón, pudo haberme contestado borde. El Siles del curso pasado o me habría contestado mal o simplemente me hubiera ignorado.

En parte supongo que era porque ya no estaban ni Capolla, ni Membrillo (los dos van a premar), ni Maka, que se cambió de clase

Pensé que era verdad eso de que las personas podían cambiar, porque para mí, los del grupillo nunca iban a cambiar.

Pero tal vez Siles podía ser la excepción.

—Sí, tienes razón —le contesté a Siles, y desde ese día nos empezamos a llevar bien.

No era de mis mejores amigos, ni mucho menos. Mis mejores amigas son y siempre serán las que estuvieron conmigo el curso pasado, pero de vez en cuando, bromeaba con él.

Al pasar de los días me di cuenta de que Siles no es que sea un trozo de mierda, tal y como pensaba.

Sino que es un lameculos.

Delante de Membrillo me ignoraba y volvía a ser como el del curso pasado, pero cuando él se iba, volvía a ser igual de majo que este curso.

Me parecen muy patéticas las personas que tratan de conseguir aprobación de esa manera. Por eso, me caen muy mal los lameculos.

Pero como Siles estaba siendo muy majo este curso, decidí ahorrarme una guerra.

Si hay algo de él que al parecer nunca va a cambiar, es su gusto por los chistes racistas.

En matemáticas la semana pasada, le amemazé muy enserio.

Le dije que esos chistes no me hacían gracia, y que el día que le pegue, ya va a saber por qué, a lo que Siles no hizo más que reírse, y siguió con esos chistes que no me hacían ninguna gracia.

Pero yo mi palabra siempre la cumplo, y eso fue la razón por la que me pusieron un parte.

Hoy era el cambio de clase de Valores éticos a Geografía. Estaba sentada en mi sitio.

Ariadne y Siles siempre solían bromear, Arianne le daba zapes a Siles, y Siles hacia bromas bastante inocentes, como esconderle las cosas, cogerle el estuche y guardarlo, cuando Arianne estaba con el móvil en clase, Siles decía cosas tipo "Ese objeto que está sosteniendo entre sus manos no será un móvil ¿Verdad?" Diciéndolo con palabras finas para sonar gracioso.

Lo dicho, Arianne y Siles solían bromear, pero esta vez Arianne se pasó con su fuerza.

Yo estaba en mi sitio siendo testigo de todo.

Arianne vino por detrás de Siles y le dio un zape en el cuello pasándose con la fuerza, tan así que cuando acabamos Geografía, por dónde Arianne le había pegado, lo tenía rojo.

Arianne no lo había echo con mala intención, solo estaba jugando pero se había pasado.

Lorena (otra niña que empezó a ir a mi clase este curso) hizo lo mismo, jugando con Siles, se pasó con su fuerza a lo que Siles se levantó la empujó muy fuerte contra las taquillas.

Aunque hasta a mí me había dolido, fue comprensible la reacción de Siles.

Pero ahora que lo pienso, Siles es un hipócrita.

A mí en economía me empujó contra una mesa para hacerse el gracioso delante de sus amigos, así que cuando tocaba física, fui y le empujé contra la mesa al igual que hizo él. Siles se enfadó muchísimo, de la misma manera en la que se enfadó con Lorena, y él trató de empujarme de la misma manera en la que lo hizo con Lorena, pero como soy más fuerte que él, por supuesto que no pudo 💪

Bueno, a lo que iba.

Siles se levantó inmediatamente después de que Arianne le diera el Zape.

Arianne se reía mientras retrocedía pensando que solo estaban jugando, detrás suya estaba Alexandra con el móvil, sin enterarse de nada.

Siles le dió un empujón, haciéndola retroceder. Le dio otro empujón tirándola encima de Alexandra, y cuando Arianne se iba a quitar de encima de Alexandra, Siles le dió tal guantazo que le cruzó la cara.

Entonces Alexandra se metió.

Usó sus dos manos para agarrar a Siles de las muñecas, pero Siles era más fuerte y más alto. Le sacaba dos cabezas a Alexandra.

Siles se estaba pasando, así que decidí intervenir.

Me levanté de mi sitio y separé a Alexandra y a Siles, agarrándole a él de los brazos para que no me pudiera empujar.

—¿¡Has visto lo que me a echo!? —exclamó rojo de la ira.

—Sí, lo e visto, pero te estás pasando.

Y antes de que dijera algo más, Siles ya me estaba insultando.

—Quitaté a tu país, negra de mierda —entre otras cosas.

Y la paciencia que le estuve teniendo todo el curso, se acabó.

Ya os imagináis lo que pasó después.

Lo empezé a empujar, harta de sus mierdas.

Si no paraba por las buenas, pararía por las malas.

Le empujé y se cayó encima de una tal Paula (otra niña de mi clase), al final Almudena vino a separarnos, y le grité que no me tocara.

De repente llegó la seño, que estaba escuchando la pelea desde fuera, pero no pudo venir porque a Álvaro (el que me cae bien) le dolía el corazón.

Tuvimos que ir hasta la mesa de la profesora, Arianne, Siles y yo. Siles empezó diciendo que Arianne le había dado un zape super grande y que después yo le empezé a pegar.

Vaya, si no le toqué ni un pelo, solo le empujé.

—No me toques — dijo Siles a lo que yo le toqué el hombro —¡No me toques! —repitió Siles a lo que le toque sensualmente la cara. Ahre XD

David se estaba meando de la risa por esa escena.

Yo le dije a la seño el por qué empezé a empujarlo, y le dije a Siles que si me volvía a decir algo así que le iba a pegar, a lo que él me contestó.

—¿Tú que me vas a pegar, si no tienes papeles?

Me daba igual si la seño estaba delante, empezé a empujar a Siles.

De verdad que quería que Siles me diera un golpe para poder pegarle, pero como sabe que no me gana, no lo hizo.

Encima la seño que es una sorda de mierda, que rabia, diciendo que no escucho a Siles diciendo eso.

Y Siles diciendo que eso era mentira y que no dijo eso.

Después la seño nos bajó hasta donde el directo, y el director le encasquetó el problema al jefe de estudios.

Después cuando nos metieron a Jefatura Siles se puso a mentir, Arianne solo contó que le dio el Zape, omitiendo el echo de que Siles le dió un guantazo (supongo que fue para que no se repitiera lo del año pasado, porque Arianne la pasó mal) y yo conté todo lo que os he contado aquí.

—Bueno, a mi esos temas sobre el racismo, no soy yo quien se encarga de eso. Eso se denuncia al juzgado que hay aquí al lado  —y de manera indirecta, me volvió a decir lo que me dijo la Jefa de estudios el curso pasado, cuando nos mandaron a mí y a Maka a Jefatura— ellos juzgarán si es delito de odio bla bla bla

Finalmente volvimos a clase. Siles dijo un montón de mentiras, diciendo que en ningún momento empujó a Arianne y que tampoco la golpeó en la cara, que nunca me dijo nada racista, victimizándose.

Después de toda esa sarta de mentiras, no le volveré a hablar en mucho tiempo.

Pero si os soy sincera, me he quedado agusto, aunque mi reacción no fue la mejor y me merezco el parte que me pusieron, me hizo sentir genial, y liberé todos los golpes que le quería dar.

No me arrepiento de nada, y el parte que me han puesto, me da exactamente igual.

De todos modos mi madre no me va a hacer nada, porque ella vivió el racismo de una forma muchísimo más intensa que yo, cuando ella estaba trabajando en un almacén donde la sobreexplotaban y la maltrataban por su color de piel y jamás pudo denunciar.

Seguro hasta me felicita por no haberme callado.

Al llegar a la clase, la seño dijo que ella si nos hubiera puesto un parte a mí y a Arianne. (Y al final nos lo puso)

—La agresión nunca está justificada, independientemente de lo que te diga. —me dijo a mí después de que le explicará porqué reaccione así.

—Bueno, pues ya está —me limité a contesta.

—No digo que lo que te diga esté bien lo que te dijo, en el caso de que te lo haya dicho

Y bla bla bla.

Pero esta experiencia tuvo algo de bueno, porque apartir de hoy no me voy a callar cuando me digan algo racista o un chiste racista dirigido hacía mí.

Porque como cualquier tipo de violencia no está justificada, insultaré sin tapujos.

Insultaré de la misma manera en la que insultan ellos, incluso si ello implica cagarme en sus muertos, porque se lo merecen.

Y si los profes no van a hacer nada, no queda nada más que defenderse.