treinta y ocho

"Cambio de planes", pensó Sasuke a las tres de la madrugada, del día jueves.

«Si bien, sé que dije que me daría una semana más de vida pero, me arrepentí. No puedo hacerlo en tan poco tiempo, necesito estar cien por ciento seguro de que Hinata no cometerá una estupidez luego de que yo me vaya. Así que lo he pensado y lo tengo muy claro ahora,, me daré un mes más de vida. Todo octubre será solo de Hinata y yo, no pensaré en nada más relacionado a Itachi o mis padres, no hasta que sea uno de noviembre. Así que Hinata, no puedes odiarme en este mes, por favor...»

...

Ya era la mañana del día jueves, un bello día para estar viva y tener a Sasuke-Kun a su lado, Hinata estaba más que feliz y no quería nada más. Se acurrucó un poco más a Sasuke y éste la abrazo aún estando dormido, y Hinata pensó y pensó, ¿Que podría hacer con Sasuke-Kun hoy? No tenía idea, sólo sabía que quería estar así como estaban ahora, por el resto de su vida.

Así que, así se quedaron cinco largas horas más.

...

Hinata se despertó nuevamente y no vio a Sasuke por ningún lado de la habitación, y ahí fue cuando el pánico se apoderó de su cuerpo.

—¡Sasuke-Kun!

Se levantó rápidamente de la cama y bajo corriendo las escaleras, casi cae por culpa de sus torpes píes y la desesperación, pero no le importo, fue a la habitación de Sasuke y él no estaba ahí, luego al comedor, el living, por último la cocina... Y él, no estaba ahí, joder.

Su corazón estaba demasiado acelerado, tenía mucho miedo, miedo de que Sasuke haya ido nuevamente con sus padres, y sacase el tema del suicidio. No quería eso, no de nuevo.

Escuchó unos pasos en la escalera y miro hacía ella, y ahí estaba él, con una toalla alrededor de su cintura, mirándola extrañamente.

—¿Hinata, pero qué te paso? ¿Éstas bien?— se acerco a ella, quién estaba paralizada, agachó su cabeza para quedarle viendo directamente a los ojos— ¿me estabas buscando?— le sonrió y luego la tomó en brazos.— Pues, ¡Me encontraste!— rió.

Y Hinata lloró.

—¡Sasuke-Kun!— lo abrazó desesperadamente y lloró tranquila ahora.

—Siempre estuve en el baño, ¿Acaso no se te ocurrió buscarme ahí? ¿Eh? Tonta.— La beso ahora, tiernamente.

Hinata dejo de llorar y le sonrió, su Sasuke-Kun estaba justo aquí, con ella en sus brazos y estaba vivo. Su corazón volvió a su lugar.

—Estoy aquí, ¿Si?

Hinata asintió y lo volvió a abrazar, más fuerte. Moviendo su pies, haciendo que la toalla de Sasuke se cayera por completo, sin notarlo se quedaron así varios minutos más, hasta que Hinata, lo notó.

Pero por suerte o para su mala suerte, ah, Sasuke estaba con Bóxer.

—L-lo siento Sasuke-Kun, y-yo...

—Descuida, somos esposos ¿o no?— rió.

—S-si, p-pero...

—Recuerdo una vez en que, pensaste en tener hijos conmigo, ¿lo recuerdas? Bueno, solo lo pensaste porque yo no te iba a dejar que me lo dijeras. Jajaja.

—¡S-Sasuke-Kun!

—Y bueno... Para tener hijos, es necesario que los esposos se conecten el uno con el otro... Y,,

Hinata cubrió la boca de Sasuke con ambas manos, estaba apenada ahora.
Solo pensó en esa vez él tener contactó humano con Sasuke, jamás pensó que pasaría así que nunca más volvió a retomar ese tema pero ahora,, ¡El mismísimo Sasuke lo estaba hablando! ¿Qué debería sentir en éstos momentos?

Sasuke retiró sus manos con delicadeza y habló.

—Pero si tu no quieres, esta bien. Jamás te obligaré a hacer algo que tú no quieras, Hinata.— Le sonrió.

—N-no es que no quiera, e-es que es algo, t-totalmente nuevo para m-mi, q-quiero decir que y-yo aún soy...— cerro sus ojos, y Sasuke la interrumpió.

—Descuida, cariño. Yo también lo soy.

Hinata lo miro impresionada.

—¿E-en serio?

—Si. Pase toda mi vida odiando todo y a todos, que jamás me pare a pensar en tener eso con alguien. Pero ahora, sé que quiero que sea contigo y solo contigo, porque eres la única persona para mí, aquí y para siempre. Porque también, te amo.

Hinata sonrió y asintió.

—E-entonces, yo también quiero que sea sólo contigo p-porque... te amo mucho más.

—Eso lo veremos.— La tomó en brazos nuevamente y comenzó a girar, jugando con Hinata quién estaba nerviosa y feliz al mismo tiempo.

...

Ya era día viernes, Hinata y Sasuke habían hecho una fiesta solo para ellos, querían ser adultos por un día, ah. Así que Sasuke fue a la tiendita y trajo alcohol, Vodka y cerveza, era lo más suave que pudo encontrar. Hinata se encargo de la comida, así que, ya eran las once de la noche y ellos ya estaban alcoholizados.

A Hinata al principio no le gusto el sabor de la cerveza, pero poco a poco la fue tolerando, por otra parte, el vodka no le gusto para nada así que Sasuke tuvo que tomarse la botella entera. Y como sus cuerpos no estaban acostumbrados al alcohol, se embriagaron rápidamente.

Les daba vuelta la cabeza, pero ambos tenían el mismo pensamiento. Y Hinata, ya no estaba tan tímida.

Aún que sonara poco creíble Hinata tomo la iniciativa, se acercó a Sasuke y comenzó a besar su cuello, muy lentamente, pero Sasuke la detuvo.

—Amor, digo, Hinata ¿E-estas segura de esto?

—¿Tienes miedo eh Sasuke-Kun?— le sonrió.

—No. Nena, no estamos consientes, mucho menos tú.

—N-no me importa, mi amor.

—Esta bien, te protegeré.

Hinata le sonrió y Sasuke la beso ahora. Hinata tomo su mano y se levanto temblorosa por el alcohol, y lo llevo hasta su habitación, Sasuke, aun que no sea creíble, estaba más nervioso que Hinata, no quería lastimarla y no quería hacerlo en ésta condición... Pero, no podía decirle que no a Hinata. Y ella lo quería más que nunca.

Pero, en el fondo de ella sabía que si, de alguna forma llegaba a quedar embarazada, Sasuke nunca más volvería a pensar en el suicidio, se quedaría con ella para siempre. Y formarían una linda familia, juntos. Sabía que eso era demasiado egoísta de su parte y estaba mal, pero, el alcohol ya no la dejo pensar más en eso, ahora eran sólo ella y Sasuke, nada más.

Se acostaron en la cama y se siguieron besando por un largo rato, hasta que, Hinata sin previo aviso comenzó a sacar cada prenda de Sasuke, junto con su camiseta, quedando con su pecho desnudo, al igual que Sasuke.

—¿E-estas segura?— él también estaba bajo los efectos del alcohol después de todo.

—Sasuke-Kun, te amo mucho, no tengas miedo.

Sasuke rió, y continuó. Ayudando a Hinata a quitarse su propia camisa, y aferrandola más a él, poco a poco se fueron deshaciendo de cada prenda que ahora les molestaba demasiado, sabían lo que querían, y ya no se detendrían.

Estaban solo en ropa interior, Sasuke comenzó a besar el cuello de Hinata, besándola apasionadamente, a lo que Hinata solo respondía con pequeños gemidos, ya estaba lo suficientemente húmeda, esto se sentía tan bien, Sasuke era tan gentil. Bajando lentamente, hasta llegar a sus pechos, que estaban cubiertos por el sostén de Hinata, tan grandes y tiernos... Sasuke jamás la había visto de esta forma, y se sentía tan excitado y feliz de tenerla, ella era perfecta, esta mujer era la mejor del jodido mundo, la amaba demasiado... Pero sin duda, seguía aterrado de lastimarla. Así que se detuvo.

—Y-yo... Quiero hacerlo pero, tengo miedo.

—Sasuke-Kun, estaré bien, estaremos bien. No te preocupes más por esto, esta bien. S-somos esposos, ¿Si?— le sonrió y Sasuke le devolvió el gesto.

Estaba muy seguro ahora, ya nada lo detendría.

Así que continuó, sacando la penúltima prenda que quedaba en el adorado cuerpo de su amada, y lamió tiernamente el pecho derecho mientras que el izquierdo lo acariciaba, Hinata cada vez gemía con menos timidez, esto se sentía jodidamente bien. Estuvo así por un pequeño tiempo, su cuerpo ya no quería esperar más. Quería estar unido a Hinata, ya le dolía ahí abajo, y ese dolor era algo totalmente nuevo para él, Hinata también, estaba urgida, también quería a Sasuke unido a ella.

Sasuke se saco su bóxer, liberando su miembro erecto y Hinata se saco su braga de Hello Kitty. Ahora si, estaban totalmente desnudos... Y ya no tenían miedo.

Hinata estaba muy húmeda, ambos suponieron que ya era la hora. Pero Sasuke no sabía como hacerlo, pero su gentil cuerpo lo ayudo, su caliente cuerpo sabía que mierda tenía que hacer. ¿Como era eso posible? No le importo.

Busco la entrada virgen de su esposa, la miró tímidamente y ella solamente asintió, se posicionó sobre ella y... Entro, muy pero muy lentamente, pequeñas lágrimas cayeron de los ojos de Hinata. Esto no sabía si le dolía, le ardía o simplemente la satisfacía y no tenía que quejarse porque ella quería esto. Pero Sasuke, «joder» pensó Hinata, se detuvo.

—Hinata, cariño, te duele demasiado, e-es mejor que paremos.

Hinata lo besó y negó.

—Esta todo bien, amor. Me duele un poco, pero es normal, ¿Si?

—Esta bien, no lo haré bruscamente.— Le sonrió y la volvió a besar.

Siguió entrando en ella, a él también le dolía pero la excitación lo podía más. Hinata lo abrazo ahora, y lo beso, cuando finalmente Sasuke entro por completo en ella. Su espalda se arqueo un poco, por el dolor, pero, mierda esto estaba más que bien, le gustaba sentir esto, así que Sasuke comenzó a entrar y salir, la sangre ya había salido por completo, no les importó manchar la cama.

Ahora estaban únicos en cuerpo y alma, finalmente. Y se sentía bien, estaban tan felices en este momento. Todo estaba tan bien... Sonrieron.

Sasuke comenzó a hacerlo un poco más rápido a lo Hinata lo aferro aún más a ella, abrazándolo por completo. Gemidos salían de sus bocas, los gemidos de Hinata eran los sonidos de una diosa a los oídos de Sasuke, eran tan dulces y llenos de temor pero más de mucho amor, la amaba, realmente lo hacía. Y ya no tenía ninguna maldita duda sobre eso.

Sasuke quería más comodidad así que busco otra pose, ahora las piernas de Hinata estaban sobre sus hombros, y con ambas piernas siguió aferrandolo más y más. Ahora eran movimientos más bruscos, con lujuria. Más rápidos, cada vez más rápidos.

Estuvieron en unas tres posiciones más, hasta que finalmente,,

—Hinata, y-yo...

—Esta bien, Sasuke-Kun, hazlo. Y-yo también, estoy apuntó de...

Su interior, se fue llenando lentamente con el esperma de su esposo, tan caliente, realmente caliente,, sus fluidos no tardaron en salir también. Ambos totalmente satisfechos, se detuvieron y Sasuke, aún dentro de Hinata, se recostó en su pecho y se durmió.

Hinata lo miró tiernamente, su esposo estaba realmente agotado... Pero ella aún quería más. Así que lo dejo descansar, por un largo tiempo...

,,,

Cuando ya eran las tres de la mañana, Sasuke se despertó y comenzó a lamer los pechos de Hinata, estaba excitado de nuevo y su esposa no podía estar más feliz de sentirlo.

Iniciándo así, su larga pero satisfactoria noche.

...

Al medio día del sábado, Hinata despertó lentamente, su cabeza le daba vueltas, que jodida molestia. Pero estaba feliz, feliz de no haber olvidado nada de lo que había pasado la noche anterior, y la madrugada, incluso la de las siete de la mañana. Finalmente habían unido su cuerpo y alma, su matrimonio estaba completo. Habían pasado todas las fases, y había hecho a Sasuke tan feliz, que finalmente sintió que todo estaría bien de ahora en adelante.

—Te amo, mucho, demasiado, Sasuke-Kun.— beso su frente— gracias por estar aquí. Gracias por no irte de mi lado,, gracias.

Y Sasuke escuchó eso, sonrió y la aferro aún más a él.

También estaba demasiado feliz.

...

El suicidio, y la muerte, no pasaron por su mente durante las siguientes dos semanas. Todo estaba marchando a la perfección.

Luego de haber tenido relaciones esa noche, habían vuelto a hacerlo unas veces más, pero todas ellas, eran llenas de amor, sin ningún efecto de alcohol en su cuerpo, solo eran ellos mismos, y eso lo hacia mucho más especial, todo era especial ahora.

Se amaban cada vez más.

Incluso después de los diarios vomitos de Hinata, incluso cuando a ella le daba asco todo lo relacionado con comida, incluso cuando a Hinata no le llego su periodo el día estimado, incluso cuando su sentido del olfato fue más fuerte que nunca.

Todo estaba totalmente perfecto, y tenía que ser así durante las semanas que le quedaban de vida.

Si, todo perfecto.

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