Tiffany se puso en cuclillas, móvil en mano y con el flash en on, dispuesta a realizar una rápida sesión de fotos a sus adorables sobrinos.

—¿Se puede ser más adorable? —dijo mientras pulsaba una y otra vez el botón de la cámara, haciendo que sonasen numerosos clicks de forma seguida. Yixing se sonrojó un poco; todavía no se acostumbraba a los cumplidos provenientes de Tiffany ni de Taeyeon.

¡Era 31 de octubre! Y aquello significaba que Halloween por fin había llegado. Chanyeol, Baekhyun, Jongdae y Yixing no habían podido ocultar su felicidad. Le contaron a sus padres que en el centro, cada 31 de octubre, enfermeros y enfermeras (además de voluntarios) traían deliciosas chucherías y chocolates.

Porque... Si todos los niños tenían derecho a disfrazarse y a comer chuches hasta que sus estómagos doliesen, ¿por qué los chibis no?

Sin embargo, los cuatro después notaron la curiosa y avergonzada mirada por parte de Minseok, quién no sabía qué era "Halloween" y por qué sus hermanos estaban tan felices de que aquella fecha se acercase. Así que cuando los cuatro le pidieron a su padres si podían disfrazarse y celebrar Halloween "¡porque Minseok no sabe lo que es!" Suho y Kris no pudieron decir que no, ¿quién le negaría algo así a aquellos bebés tan tiernos?

De tal modo que un viernes que Suho y Kris tuvieron libre, volvieron a "Chibiworld". La tienda había cambiado drásticamente desde la última vez que fueron: nada más entrar se encontraron con una variedad de productos de Halloween apilados junto a los grandes carteles. Los chibis quedaron maravillados ante todos los disfraces y, por consecuente, estuvieron toda la tarde en aquella tienda. ¡Nunca antes elegir un disfraz había sido tan difícil! Al final, después de probarse numerosos trajes, Chanyeol acabó eligiendo uno de Iron Man (quizá, y tan solo quizá, lo había elegido por la insistencia de Baekhyun en que le quedaba genial aquel disfraz), Yixing escogió uno de vampiro diciendo que iba a morder a todos cuando en realidad solo se trataba de una excusa para repartir besos. Jongdae, por su parte, optó por uno de una adorable abeja puesto que le gustaban mucho las alas y bueno... "¡Papá mira! ¡Puedo pinchar a Baekhyun con mi culo!" había dicho con una maliciosa sonrisa en su rostro mientras perseguía a su hermano, quién había decidido disfrazarse de perrito. El de pelo rosa llevaba unas grandes y suaves orejas de perro colgando de su pelo, haciendo conjunto con la cola del mismo color y el maquillaje de perro que Taeyeon le había hecho esa misma tarde. Por último y no por ello menos importante Minseok se había decantado finalmente por un sencillo pero tierno disfraz de fantasma. A pesar de que sólo se podían ver sus ojitos a través de la blanca tela, la figura que se movía debajo de esta de forma tosca y adorable hacia que el disfraz delatase al pequeño que se encontraba debajo.

Taeyeon ayudó a su novia a levantarse (porque con aquellos altos tacones rojos que llevaba era imposible que lo pudiera hacer ella sola) y le dio un beso en la mejilla derecha, tiñiendola de rojo oscuro por el fuerte pintalabios que llevaba.

Semanas antes, mientras Suho y Tiffany hablaban por teléfono, esta le había preguntado si planeaba hacer algo aquel 31 de octubre. El rubio tuvo que reconocer que no había pensando en nada, así que cuando su hermana le propuso que podría hacer el famoso "truco o trato" con algunos de sus vecinos en el edificio, Junmyeon no pudo negar que aquello era una buena idea. Así que la semana siguiente, con una sonrisa tímida y las orejas rojas de la vergüenza, habló con varios vecinos con los que tenía relación y cierta confianza y les contó acerca de sus planes para celebrar aquel día con sus pequeños. Todos aceptaron encantados puesto que todos conocían a sus pequeños chibis, quiénes habían ganado cierta fama en aquel edificio y el cariño de muchos.

Obviamente, Tiffany y Taeyeon no podían dejar pasar aquel día sin tomar cientos de fotos a sus sobrinos, por lo que antes de que los niños saliesen a pedir golosinas, ambas se habían pasado por el apartamento de la pareja.

Aunque Suho no se esperaba verlas disfrazadas enteras de rojo.

"Después de esto nos vamos directas a una fiesta a la que nos han invitado, pero ni de broma nos íbamos a perder ver a nuestros bebés disfrazados", había dicho Taeyeon cuando entró al apartamento con aquellas botas burdeos que le llegaban hasta la rodilla.

Cuando Kris le preguntó acerca de sus extravagantes disfraces, las chicas sonrieron y dijeron a la vez:

"¡Vamos vestidas de demonios!", a lo que Taeyeon respondió: "Como Nayeon de Twice en el MV de TT"

Ante la confusa mirada de la pareja y la curiosa de los niños, Tiffany tomó el portátil de su hermano y buscó en Youtube el grupo del que hablaban. Los pequeños no pudieron cerrar la boca ante lo bonitas que eran aquellas chicas luciendo todos esos disfraces y colores diferentes. Suho, por su parte, pensó que la canción era pegajosa y que no estaba del todo mal, aunque era obvio que estaba dedicada a un público más joven.

—¿Y qué significa del todo TT? —preguntó Yifan curioso más que nada.

—Pues no tengo ni idea —respondió entre risas Tiffany—. Pero Tae y yo lo hemos adaptado a nuestra versión.

Tras decir aquello señaló la T escrita en negro en su camiseta, la cual se encontraba también en el vestido de la rubia. Ambas se levantaron he hicieron el icónico signo de las dos T.

—Ves, TT, como las siglas de nuestros nombres: ¡Taeyeon y Tiffany!

Ambas rieron ante su ingeniosa idea y Junmyeon solo pudo pensar en cómo estaban hechas la una para la otra.

~❀~

Después de que la pareja se despidieran rumbo a aquella fiesta, Kris les preguntó a los chibis si estaban listos para ir a pedir chuches. A lo que los niños respondieron con saltos y gritos de alegría.

Minutos después se encontraban delante de la puerta del apartamento de enfrente, el cual pertenecía ni nada más ni nada menos que a Onew. Tras llamar el chico no tardó en abrir la puerta con una bolsa llena de caramelos entre sus manos (Suho podría jurar que el joven había estado esperando aquel momento). De hecho Onew había sido el primero al que Suho le había propuesto la idea de Halloween. El chico era un muchacho joven, probablemente debería de estar terminando sus estudios universitarios y no tardó en ganarse el agrado de los vecinos al mudarse. No hacía ruido y siempre era muy respetuoso, por lo que no había tardado en entablar una relación amistosa con la pareja. A Suho el muchacho le generaba tranquilidad, por lo que no había dudado en haberle dejado a sus pequeños a su cargo en varias ocasiones.

—Chanyeol, ¿vas disfrazado de Iron man? ¡Es mi superhéroe favorito! —dijo causando una sonrisa en el peliblanco. Después de dirigió a Minseok—: ¿Y quién es el que está debajo de este fantasma?

Tras decir aquello, Minseok levantó su disfraz enseñando la cabeza, la cual estaba adoranada con una preciosa sonrisa enseñando todos sus dientes y encías. Tras esto empezó a reír inocentemente haciendo que sus abultadas mejillas se tornasen rojas y, debido a la vergüenza, se escondió detrás de Jongdae.

Tras complementar los disfraces de todos los pequeños, Onew repartió todos los dulces y caramelos entre los chibis, llenando de chucherías las bolsas que cargaban, las cuales hasta entonces habían estado vacías.

—¿Qué se dice chicos? —dijo Kris con una sonrisa ladeada, mirando a sus cinco niños totalmente centrados en todos los tipos de caramelos.

—¡Muchas gracias! —dijeron todos al unísono, haciendo una pequeña reverencia como sus padres bien les habían enseñado.

Los dos adultos también se inclinaron y le agradecieron al joven por los caramelos, después se despidieron y siguieron su camino para conseguir más dulces.

La siguiente parada era el apartamento de la señora Choi, una mujer mayor respetada por todos en el edificio. Su alma altruista y su amor por los niños habían hecho que todos la admirasen y la conociesen. Tanto Junmyeon como Yifan habían compartido conversaciones con ella e incluso el chino en ocasiones le había ayudado a cargar con las bolsas de la compra. Por lo tanto, cuando el rubio le propuso aquella idea la anciana dio un pequeño saltito y con una sonrisa exclamó:

"¡No regalaba caramelos desde que los hijos de los Park eran pequeños!"

Por lo tanto no fue sorpresa cuando al llegar a la cuarta planta la mujer los esperaba en el pasillo con una cesta llena hasta arriba de una gran variedad de caramelos y chocolates. Los niños se acercaron un poco vergonzosos puesto que no habían pasado tanto tiempo con la señora Choi como con Onew, pero la cálida sonrisa que les dedicó hizo que su timidez se esfumase y todos corriesen a por los caramelos.

—Que pequeños más tiernos, ojalá estás criaturitas hubieran existido cuando era más joven, son tan adorables —dijo la anciana tras repartir los dulces. Yifan y Junmyeon asistieron interesados en sus palabras.

Todos los pequeños dejaron que la señora Choi les diese un beso a cambio de sus chucherías y pronto se encontraban subiendo al séptimo piso donde el matrimonio Lee les esperaba.

El matrimonio consistía en una pareja en sus últimos treinta y sus dos hijas pequeñas, las cuales no deberían de superar la edad de los siete años. La relación entre ambas familias había empezado a partir de un suceso algo triste, pero a Suho no le importaba aquello porque al menos tenían el apoyo de aquel matrimonio.

Cuando Junmyeon y Yifan compraron aquel apartamento juntos, ambos tenían 24 y 25 años respectivamente y muchos vecinos pensaron que simplemente se trataba de unos chicos compañeros de piso. Sin embargo, y de alguna manera que ninguno de los dos llegó a descubrir, alguien se enteró de que no se trataba de unos amigos, si no de una pareja homosexual. Aquello asustó demasiado al rubio, quién siempre había intentado ser cuidadoso y reservar todo cariño para cuando estuviesen solos. Sabía que las mentes más jóvenes aceptaban en su mayoría aquello y no tenían problema alguno con la homosexualidad, pero aún así quería evitar cualquier tipo de incidente. Pensó lo peor, justo al contrario que su novio, quién pensaba que estaba exagerando un poco y que no había razón para preocuparse puesto que no hacían nada de ruido y cumplían con todas las normas que la comunidad de vecinos imponía.

Junmyeon no se tranquilizó hasta que el matrimonio Lee apareció un día en su puerta con un bollo recién hecho, explicando los rumores que habían oído y como, en caso de estos fueran ciertos, contaban con todo su apoyo y que si algún día tuviesen cualquier incidente ellos estarían allí.

Suho aún seguía agradeciéndoles tres años después.

—¡Hola! —exclamó la señora Lee. Su rostro joven reveló algunas arrugas escondidas al sonreír—. ¡Qué cositas más tiernas!

Sacaron los chocolates que tenían preparados y los metieron en las bolsas (dándole el resto a los adultos porque ya no entraban más en las bolsas que los pequeños arrastraban). Yifan notó como dos cabezas curiosas se asomaban por la puerta para ver qué era aquello tan tierno y dijo:

—Hyeshin, Eunah, no habéis conocido todavía a nuestros chibis, ¿verdad? ¿Los queréis conocer?

Eunah, la mayor de las dos, asintió tímidamente y se acercó con cuidado a los chibis mientras que su hermana se quedó abrazada a la pierna de su madre.

—¡Qué pequeñitos son! —exclamó la niña.

Tras decir aquello los cinco corrieron hacia ella e hicieron un corro cerca de su mano, después, con algo más de confianza, Eunah se animó a acariciar las orejas de perro que llevaba Baekhyun.

—¿Papá? ¿¡Podemos adoptar a un chibi!?

~❀~

Tras visitar dos apartamentos más —uno de una pareja de ancianos y otro de unas chicas que compartían piso— volvieron a su apartamento con las bolsas llenas de caramelos y chocolates. Lay y Minseok habían empezado a endormecerse a mitad del camino de vuelta así que nada más llegar el rubio les ayudó a ponerse el pijama y en cuestión de minutos los metió en la cama, no sin antes prometerles que protegería las chuches de las garras de sus hermanos.

Chanyeol, Baekhyun y Jongdae fueron otra historia. Cómo era de esperar no tardaron más de dos segundos en sacar todos los dulces y empezar a zampárselos. Kris, sabiendo que los niños iban a acabar con dolor de tripa si no les paraba a tiempo, les quitó los caramelos y les dijo que era hora de lavarse los dientes, a lo que los niños respondieron con numerosos quejidos.

Pero como eran niños buenos y hacían caso a sus padres, fueron a lavarse los dientes y a cambiar sus disfraces por los pijamas.

Una vez Suho terminó de arropar a todos, les dio un beso de buenas noches y les aseguró que al día siguiente podrían tomar más golosinas, pero que ahora tocaba dormir.

Cuando salió de la habitación y cerró la puerta —no del todo, puesto que a los chibis les daba miedo la oscuridad— el rubio volvió al salón dónde su novio volvía a meter todas las chuches en la bolsa en la que correspondían. No obstante, robó un bombón y, tras quitar el envoltorio, se lo metió con cuidado en la boca a Suho, quién se sonrojó ante la acción provocadora por parte de su novio.

—Está rico pero preferiría un beso —dijo Junmyeon.

Kris no pudo evitar reír ante lo cursi y empalagoso que había sonado aquello, mas no se opuso, plantando un último beso en los labios de su novio.

っ・ω・)っ

Holo beibis~
Primero que todo
*saca un megáfono*

¡Por favor votad por EXO en MAMA y en AAA!
Si tenéis 5 minutos libres votad por favor, no lleva nada y se puede votar desde muchas redes sociales (Instagram, Facebook, Google, Tumblr... etc).
Un solo voto diario ayuda mucho más de lo que pensáis, si los 4 millones de fans registrados votasen una vez al día sería mayoría absoluta.
¡Gracias!

{❀}

Después, segundo, espero que os haya gustado el capítulo, siendo haber tardado (otra vez, que pesada) pero tuve exámenes y esas cosas. Técnicamente este capítulo lo iba a subir el lunes de la semana pasada y lo he acabado subiendo el día de Halloween, si es que soy una genio (jk).
En parte me puso triste que no hubiesen apenas fotos de la fiesta de Halloween... ¡Maldita SM!
Y por cierto lo de TT (Truco o Trato + Tiffany y Taeyeon) lo tenía planeado para el especial de Halloween vamos desde verano JAJAJAJ

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Y por último, el pelo rubio de Suho dios mío es tan hermoso ese hombre ha nacido para el pelo rubio, me da igual que sea una peluca o no igual le queda hermoso (π-π)

Y el collab de 10cm con Chen lo neCESITO OÍR YA DE YA AAAH. Estoy súper orgullosa de Jongdae y de que esté cumpliendo sus sueños y colaborando con artistas que admira ay, que bonico es mi bebé precioso.

Mañana por la mañana responderé todos los comentarios que me dejásteis en el capítulo anterior, ¡fueron tantos! Muchísimas gracias por dejar comentarios tan bonitos, ahora me tengo que ir pero mañana los respondo sí o sí.

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Y bueeeno, ¡eso es todo!
Gracias por leer y aguantarme, espero de todo corazón que el capítulo os haya gustado~

¡Hasta la próxima!