La noche anterior estuvo marcada por la emociones.
Jungkook se sentía feliz, como si todo lo que necesitaba para serlo estuviese en su lugar ahora mismo y sabía que se debía al regreso del menor, que había logrado desordenar bastante sus pensamientos y ahora lo tenía con su mente puesta en desifrar que fue todo aquello que sintió la noche anterior.

— Jungkook!

Eunji llevaba algunos minutos tratando de tener la atención de su novio pero no había tenido éxito.

El ni siquiera notó cuando ella entró a la oficina ni mucho menos cuando intento saludarlo.

Eso sín duda alguna había cabreado a la rubia por completo, más aún sabiendo o creyendo saber hacia donde van los pensamientos del pelinegro.

Sabía que el regreso de ese chico le quitaría atención, pero no sé imagino que al punto de ser completamente ignorada por su novio.

— Jungkook, me escuchaste?

Los ojos del hombre se posaron al fin en la chica y vió la molestia que esta tenía, aunque la verdad no fue algo que le importase mucho.

¿Cuando había dejado de interesarse por ella?

¿Como era posible que recién ahora se diese cuenta de ello?

— La verdad es que no Eunji, estaba pensando, perdón.

— No se que sea más importante que pensar en tu linda novia que acaba de llegar y que hoy se vistió para ti.

— Te ves bien— dijo dándole una rápida mirada—

— ¿Solo bien? Llevo tu vestido favorito y me puse bonita para que los dos disfrutemos de nosotros este día.
Organize tu agenda, tienes el día libre y que mejor que pasarlo juntos.

Sus ojos negro por fin la observaron fijos, pero no ornla razón que ella quería, estos desprendían cierto dejo de molestia.

— Eres mi secretaria, recuerda que eso lo hablamos cuando ingresaste a trabajar
aquí.
Dentro de la oficina no somos pareja, lo mantenemos profesional.
Que hayas cambiado mi agenda y pospuesto mis reuniones por tu capricho de estar juntos no es muy profesional de tu parte.

— No debes de ser grosero...soy tu secretaria pero antes de eso soy tu novia y deberías tratarme como tal.
Luego cuando sea tu esposa no seguiré ocupando este puesto mediocre, estaré junto a ti en cada paso y decisión, quiero que todos sepan quien es la dueña y señora de tu vida.

— Yo no he hablado de matrimonio Eunji, no debes mensionarlo, cómo no debiste mensionarlo anoche en casa de Mínho.
No puedes asumir algo en lo que yo no estoy de acuerdo.

— Eventualmente pasará, sabes que soy el amor de tu vida y llévamos mucho tiempo juntos, no serías capaz de tirar todo por la borda, no podrías hacerme eso.
Me necesitas, sabes que soy la única que podría complacerte y hacerte feliz.

Eso último solo lo hizo pensar en Taehyung...no debería, pero por alguna razón pensaba que sería más feliz junto al menor.

— No pasará, no si me estás presionando.
Ahora ve a tu puesto de trabajo, ya tuve mucho de estas discusiones por hoy Eunji, vuelve a tu lugar.

La rubia quería discutir lo recién dicho por Jungkook pero unos toquesitos en la puerta los hicieron a ambos voltear para ver la hermosa cabellera castaña que se asomaba con sigilo y tímidamente.

— Oh perdón...no quise interrumpir, volveré luego...

Antes de terminar de hablar ya tenía al pelinegro junto a el sosteniendo su brazo con delicadeza.

— No interrumpes, ven pasa, que alegría tenerte aquí.

— Jungkook! Estamos en una conversación importante, deja que el niño se vaya y termina de hablar con tu novia.

— Ya terminamos lo que sea que querías discutir, ve a tu lugar de trabajo Eunji y que nadie me moleste, mi osito llegó y merece toda mi atención.

Las mejillas del menor estaban rositas por las palabras dichas por su amor de infancia, no podía creer que le diera toda esta atención aún frente de su novia y para ser sinceros le agradaba ver la cara de enojo de la rubia, que no dejaba de llamarlo niño, como si con eso le hiciera un recordatorio a jeon que era un menor   por quién estaba dejando de lado a su novia.

— Pero Jungkookie...bueno me iré, pero me das un besito así no nos extrañamos tanto.

Se acercó hacia el pelinegro pero este giró su rostro y sus labios fueron a dar a su mejilla.

— Se profesional Eunji, recuerda que dentro de aqui eres mi secretaria, las muestras de afecto están prohibidas entre empleados, que sea el hijo de la jefa no me da ninguna clase de privilegios.
Vuelve a tu escritorio, hablaremos más tarde.

La fémina salió dando un portazo del lugar, completamente molesta por no haber conseguido posicionarse en un lugar superior al que Jungkook le daba a Taehyung.

No lograba entender el poder que tenía ese chico sobre su novio y sabía perfectamente que sería un obstáculo para lograr todo lo que tenía pensado.

— No debiste ser tan gruñón con ella, es tu novia, solo quería pasar tiempo contigo.
Yo fui el imprudente que llegó sin avisar.

— No eres imprudente osito, me alegra mucho tenerte aquí, ¿a qué debo tu hermosa visita?

— Tía Amira me invitó acá porque dijo que tal vez te haría bien verme un ratito.
Solo que no pensó en los problemas que podría ocacionar esto.

— No ocacionas nada, en serio es como un golpe de energía verte, te extrañe tanto estos años que quisiera verte siempre.
Eres una de las personas más importantes en mi vida, por no arriesgarme a decir que eres el primero en mi lista.

— No digas eso...si alguien te escucha podría malinterpretar las cosas, recuerda que tienes a Eunji aquí mismo a unos pasos de tu oficina.
La chica es grosera, pero no por eso quiero que se sienta mal con alguna interacción de nosotros.

— Ella debe acostumbrarse a tu presencia Tae, no está en mis planes alejarme de ti, mucho menos ahora que has vuelto y te tendré tan cerca.

La mejillas del menor estaban rojisas nuevamente, el pelinegro seguía causando ese efecto en taehyung, quien se había tratado de convencer que su enamoramiento había acabado hace mucho, pero teniéndolo frente a el entendía lo equivocado que estaba.

Su corazón seguía latiendo por el mayor y seguía sintiendo ese nerviosismo sofocante cuando lo tenía tan cerca.
El mismo que ahora lo estaba haciendo temblar al encontrarse solos y con jungkook siendo tan dulce con el al hablarle.

— Deb- debería irme...no quiero seguir haciendo que se retrasé tu trabajo...
Además debo ir por algunos materiales para el instituto, papá me llevo a verlo y está genial, me gustó mucho y lo mejor de todo es que entiendo perfecto lo que hablan.

Jungkook soltó una risita por las palabras de tae, entendía lo difícil que debe haber Sido para el acostumbrarse a un idioma y costumbres distintas.

Sin contar que estaba solo, si bien iba con su madre, está no estaba presente y lo hacía sentir tanto enojo al pensar todo por lo que debe haber pasado el menor.

En este momento sentia envidia de Minjae, el había estado con taehyung en todo momento y había Sido el encargado de hacerlo feliz durante varios años.
Algo que el jamás podría permitirse.
Al menos no de esa forma.

Sabía que le gustaba, tenía eso muy claro, pero aún así el pensamiento de que el rubio era el hermano menor de yoongi y además de eso menor de edad, solo hacia que retrocediera unos pasos.
Mismos pasos que ahora  se sentían más pesados, haciendo imposible la acción de crear la distancia entre ellos.

Se acercó lentamente y tomo su mano, acción que llevaba queriendo hacer desde la noche anterior, como lo hacía años atrás y era algo tan natural, sin ninguna intención de por medio.

Ahora se sentía distinto, el tacto de la piel era diferente, provocaba un cosquilleo sobre la suya que estaba seguro que el contrario también estaba sintiendo.

— ¿Estás feliz de volver?

— Muy feliz...

— ¿Extrañas a tu novio?

Taehyung dudo por unos momentos antes de responder, no quería sonar atrevido, pero tampoco quería que jungkook volviese a verlo como el pequeño niño que siempre había visto en el.

— Te extrañe más a ti...—dijo bajando su cabeza por el nerviosismo —

Las palabras ciertamente descolocaron al mayor, no espero que de esos hermosos labios saliera esa frase que estaba haciendo palpitar su corazón de la forma en que jamás lo había hecho.
Haciéndolo sentir eufórico y feliz.

— Fue mucho tiempo— respondió cerrando solo un poco más el espacio que los separaba—

—Tantas cosas cambiaron Kookie....yo ya no soy un niño...tu..tu estás con Eunji...perdón si soy imprudente pero ...¿La amas?

No estaba siendo imprudente a ojos del pelinegro, solo estaba siendo muy directo y esa faceta de Taehyung lo estaba volviendo loco en este momento.

— La quiero, llevamos mucho tiempo juntos...lo cierto es que no estoy enamorado de ella...no me siento...—estubo a punto de decirle que con el se sienta distinto, pero eso no sonaría bien de ninguna forma, no sería correcto— La relación no es la misma de antes y me siento cansado.

— ¿No es más sincero hablarlo?, No sigas con ella si se ve más como una obligación que un placer.
Busca tu felicidad Kookie, a veces se necesita ser un poco egoísta para encontrarla, debes pensar en ti, pensar que es lo que realmente quieres.

— ¿En que momento mi pequeño se volvió tan sabio?— Su mano se movió involuntariamente hacia la mejilla de Tae, dónde acaricio con dulzura— Sigue así y te volverás mi perdición

A penas dijo las palabras, se sintió avergonzado y entendió el error que acaba de cometer.

Había cruzado la línea al decirle eso y solo podía pensar en que su osito se asustase y saliera huyendo de el, lo cual para su sorpresa no pasó.

— Podría volverme tu perdición....podría hacerlo si me dejaras.

Las cosas estaban escalando a un nivel que no se esperaron.

Mientras Jungkook lo observaba fijamente , hasta de forma dominante se podría decir, Taehyung tenía ese toque de coquetería que lo haría perder la cabeza en cualquier momento.

Sus cuerpos se movieron por si solos acortando la distancia hasta  lo mínimo posible y siendo capaz de sentir el calor de los labios contrarios debido a la cercanía.

Jungkook lo habría besado en ese instante.
Jungkook se habría encargado de consumir con sus besos y caricias al menor.
Jungkook habría hecho tantas cosas, todas aquellas que tenía en su mente y que lograban nublar su juicio en ese instante.

Todo hubiese sucedido si Eunji no hubiese entrado en la oficina en ese momento, en el que se separaron tan rápidamente que solo quedó la duda de que algo posiblemente estaba a punto de suceder ahí.

—¿Todo bien?, ¿No estaban como muy cerca ustedes?
No quiero pensar que eres un roba novios pequeño Tae....

Ambos estaban estáticos en su lugar, no había una explicación lógica para lo sucedido y no tenían como justificarse ante la rubia quien los observaba a los dos con desconfianza.

— Estaba jugando— dijo con voz chillona—Claro que no pasaría nada, a mi Jungkookie no le gustan los niños y tú eres como su hermanito.

Eso fue un golpe bajo, recordarle que los separaban muchos años y traerlo a la realidad, a esa dónde el sabía y no tenía dudas de que jungkook lo veía como un niño.

Taehyung salió lo más rápido posible de la oficina dejando a la pareja ahí dentro, mientras la chica lo miraba burlesca por haber conseguido incomodarlo y el pelinegro no podía apartar sus ojos de el aún después de ya no estar en el lugar, estaba por completo fascinado con lo que estuvo a punto de pasar.

No se sentía arrepentido, solo culpable por haberse dado cuenta que su novia ya no ocuparía más sus pensamientos.

Gracia por leer💜
Espero les esté gustando la historia 💚💜