Apenas llegó el fin de semana Max aprovecho para ir a casa y hablar con su padre de forma sería respecto a su nueva decisión sobre el rumbo que desea tomar en su vida.

Cuando llegó a casa, el olor y el humo proveniente del patio trasero le dejo en claro que su padre se encontraba con Pedro en otra parrillada.

Luego de un profundo suspiro camina hacia allá y los encuentra a ambos charlando tranquilos y contentos. El chico, al darse cuenta de que el mayor no noto su presencia con una sonrisa lo llamó.

— ¿Ya no saludas a tu hijo cuando viene a visitarte? — preguntó de forma bromista

Goofy captó su presencia y lleno de alegría fue a abrazar a su muchacho. Invitándolo a comer los cuatro, incluyendo a Silvia que apenas llegaba luego de terminar de preparar una ensalada complementaria para la comida, se sientan en la mesa que tenían para comer al aire libre. Luego de comer un poco, la conversación comienza.

— Me alegra mucho que estés aquí Maxie, pero si quisiera saber ¿A qué se debe tu visita? — preguntó con curiosidad

— Ammm bueno... Es que quisiera hablar con ustedes sobre un tema importante, más contigo papá.

Muerto de miedo Max respiro profundo, una vez más, y hablo de forma directa.

— Quiero dejar la universidad.

Los tres mayores se quedaron en silencio, no esperaban esas palabras de parte del chico. Goofy, en especial no sabía que decir. El apoyaba incondicionalmente todo lo que a su hijo lo hacía feliz, pero eso en especial no estaba tan seguro de aceptarlo. Más que nada por su propia experiencia, sin un título no podría tener un trabajo serio y era algo de lo que Max no estaba seguro por completo podría traerle problemas en el futuro. Prácticamente tenía su felicidad y su bienestar acorralando lo.

— ¿Por qué decidiste eso Max? ¿La escuela te estará trayendo problemas?

— No es eso, es solo que eh estado pensando mucho en mi futuro y a lo que quiero dedicarme. La verdad tener un trabajo simple y monótona no me atrae, me gustaría dedicarme a algo mucho más grande.

— ¿Algo como qué pequeño? — preguntó Silvia con un tono de dulzura

— Quiero dedicarme a la música — respondió Max entusiasmado

Goofy no tuvo tiempo de responder a eso, pues las fuertes carcajadas de Pedro interrumpieron sus palabras evitando que si quiera pudieran salir de su boca. Su reacción confundió a todos y más aún a Max.

— No comprendo ¿Qué es tan gracioso para ti?

— Max, no hay peor manera de arruinar tu vida qué dedicar tu vida a la música. Terminará en un gran fracaso.

— ¿Por qué dices algo así Pedro? Muchos han dedicado su vida a la música y han triunfado, como los BeeGees — dijo Goofy mirando a su esposa en las últimas palabras debido a su gusto compartido

— Y Powerline — complemento Max sonriente

— Si pero más cosas no son como antes, ya no es tan sencillo brillar en el mundo de la música. Solo subes a la cima si tienes un gran talento, chicos como tú — dijo Pedro señalando al chico — solo terminarán tocando la guitarrita en las calles, es muy complicado lograr hacer algo así. Yo diría que mejor fueras por un futuro seguro. Claro, a menos que quieras que tú padre siga cuidando de ti y de tus gastos aún siendo un adulto.

Goofy y Silvia hablaron con Pedro respecto a su comentario. Obviamente les parecía poco amable y creían que Max tenia lo más importante para triunfar, corazón.

Pero Max era ajeno a esa discusión, las palabras de Pedro entraron a su cabeza y ahora no sabía que pensar. No sabía si la decisión que había tomado era la correcta, el solo deseaba un futuro donde pudiera sostenerse a si mismo y al mismo tiempo ser feliz.

Al llegar la noche Max estaba a punto de irse de regreso al campus, pero Goofy intervino tocando su hombro para hablar con él.

— Max... Solo quiero que me digas una cosa ¿Si pensaste bien esta decisión? ¿Es lo que realmente te hace feliz?

— Si pa. Mira, la verdad vivir años atado a un escritorio no es exactamente lo que quiero para mí. Se que tal vez estoy siendo un poco egoísta contigo pero no quiero seguir mintiéndome a mi mismo.

— Bueno... ¿Qué te parece si hacemos algo al respecto?

— ¿Cómo que? — preguntó Max confundido

Pasaron algunos días y luego de unos cuantos trámites Max termino por darse de baja de la carrera. Claro que cuando muchos de los amigos que había hecho ahí se enteraron dijeron que les entristecía la noticia pero aún así estaban felices porque tuviera una meta clara sobre lo que quería lograr en la vida y le deseaban el mayor éxito. El chico llegó a la universidad, hizo historia y se fue.

Ya solo le quedaba recoger sus cosas en su habitación de la fraternidad que compartía con Bobby y Pj.

— No puedo creer que te vayas viejo, no será lo mismo sin ti — dijo Pj entristecido de ver a su amigo partir

— Si Max, eres parte fundamental del gru u po.

— Tranquilos, nos seguiremos viendo.  No tanto como antes pero siempre seremos amigos. Solamente que ahora me toca independizarme en serio.

— ¿Cómo convenciste a tu papá para que te dejará hacer eso? — preguntó Pj con curiosidad

— Bueno, me dijo que creía en mi potencial y el mismo sermón de que siempre tengo que tener mi objetivo fijo con la metáfora de la erradura, finalmente llegamos al acuerdo de que me ayudara a vivir por mi cuenta e intentar suerte en el medio. Pero que si no lo logro en un mes tendré que volver a los estudios.

— ¿Solo un mes? — preguntó Bobby — ¿No es poco tiempo?

— Quizás pero entiendanlo, se preocupa mucho por mi y si no tengo éxito el título si o si será crucial en el futuro — explico Max mientras seguía empacando — como sea, me voy mañana por la mañana así que ¿Por qué no faltan a clases y mejor vamos a pasarla bien una última vez? No se, podríamos ir a patinar o al arcade.

— Si, es buen plan.

— Me gusta la idea.

Dijeron sus dos amigos al mismo tiempo.

🎻

La siguiente hora la clase comenzó y Bradley de inmediato noto que ninguno de los dos llegó al aula. Confundido miro a su amigo tanque y este levanto los hombros dando a entender que el tampoco tenía idea de porque era así. Por curiosidad hablo con la chica rubia que estaba sentada en frente.

— Pss oye ¿No sabes que paso con Max? — preguntó en forma de susurró para evitar ser escuchado por el profesor

— ¿No lo supiste? — dijo impresionada, pues el que Max se fuera era la noticia del momento — Max se dio de baja de la carrera para dedicarse a la música

El castaño se sorprendió, no se esperaba tal noticia y mucho menos por parte de Max. El creía que iba a tener que soportarlo hasta que se graduaran pero ahora parecía que abría más silencio de lo que esperaba. Aunque, por alguna razón que no lograba comprender, esto no lo hacía del todo feliz.

— Buena esa ¿O no Bradley? Al fin tenemos el camino libre en los juegos extremos.

— ¿Eh? Si, tal parece que otra vez seremos los únicos campeones baby — concordó sonriéndole con su distinguible confianza de siempre

🎸

Max y sus amigos pasaron una tarde muy agradable, disfrutaron de patinar cuánto quisieran en parques, las calles e inclusive las pistas de patinaje de la misma universidad. Esto hasta que terminaron agotados por tanto movimiento y decidieron tomarse un momento para relajarse y charlar en la cafetería.

Al rededor de las 7 p.m los tres ya estaban ahí incluyendo a Poet en la conversación debido a que la chica ya se encontraba ahí, como siempre, por su trabajo.

— Max, déjame decirte que lo que haces es algo de admirar, dar un salto hacia lo improbable buscando una vida llena de felicidad y rayos de luz iluminando tu camino hasta el final de los días aún cuando todo señala a ser lo contrario. Eso es algo de valientes.

— ¿En serio crees que si fue buena idea?

— Por supuesto que sí, no siempre es fácil pero cuando tú corazón se entrega a la aventura y tienes el ojo fijo en lo que quieres. El éxito es la consecuencia de mayor probabilidad.

— Pues eso espero, porque si me da miedo.

Max le dio un sorbo a su café y Bobby, mirando a la banda sobre el escenario, tiene una idea. Con entusiasmo el pelirrojo le da una palmada a su amigo ocasionando que el café se derrame un poco y su expresión sea de molestia.

— ¿Por qué no subes a tocar algo?

Max confundido miro el escenario y la banda se quedó en silencio al escuchar aquellas palabras.

— ¡Si! Es una fantástica idea Max ¿Por qué nos demuestras tu talento? — alentó Poet con una gran sonrisa

— No lo se... — respondió el moreno dudoso

— Max, con esa actitud no conseguirás el éxito que deseas. Debes aprender a ser más atrevido, seguir riesgos, salir de tu zona de confort y aventurarte a las experiencias que te da la vida. Además, siempre se da un primer pequeño paso. En este caso, comenzarás en un pequeño escenario con una cafetería semi vacía — insistió Pj

Max riendo por las palabras insistentes de sus amigos termino aceptando y camino hacia el escenario pidiéndole permiso a la banda para unirse. Los chicos aceptaron y le dieron una guitarra prestada. Luego de discutir sobre que canción tocarían comenzaron con la música, que era algo diferente de lo que se solía tocar en el lugar pero para ser la primera tocada de Max decidieron darle el pase.

Nightrain - Guns n' roses

En ese momento Bradley entro a la cafetería en busca de un café, aún a pesar del ruido que se lograba escuchar desde afuera el deseo de un café era más grande.

Cuando sus azules ojos notaron la presencia de Max sobre el escenario en su mejor momento de la canción con la guitarra sus ojos quedaron imnotizados. Miro al muchacho con gran asombro mientras esté vivía su momento acompañado de aplausos y algunos gritos de parte de las personas que poco a poco comenzaban a llegar al lugar haciendo casi una multitud vuelta loca por él.

Cuando la canción termino los aplausos se intensificaron. Max devolvió la guitarra a su respectivo dueño y bajo del escenario para ser alabado por sus amigos. Bradley ya no se encontraba en el lugar.

— ¡Max! ¡Eso estuvo increíble! — exclamó Pj muy feliz

— ¡Deberías llamarte má a ximo! — dijo Bobby igual en voz alta

— Gracias pero no fue para tanto chicos— respondió Max algo avergonzado

— ¿Qué no fue para tanto? Max, desde la secundaria haz tenido un talento nato para el escenario. Eres increíble amigo — respondió Pj

— Tu aura es increíblemente brillante Max, tu talento reluce con la misma fuerza que el poder el amado sol — dijo Poet con su voz suave de siempre

Avergonzado de cumplidos pidió que volvieran a lo que hacían. Simplemente charlar mientras tomaban un buen café.

🎸🎻

Llegando la mañana del día siguiente Max  se encontraba subiendo su equipaje a la van de Bobby hasta que escucho una voz familiar detrás de él.

— Así que era cierto, ya te vas.

Dándose la vuelta para ver de quién se trataba, era Bradley quién lo miraba de forma neutral y con los brazos cruzados.

— ¿Brad? — ríe un poco — no sabía que querías venir a despedirte

— Solo confirmo sospechas, no te hagas ilusiones novato.

En ese momento las nubes comenzaron a notarse grises, lo que era común en esas tardes de noviembre. Por lo que ambos supieron que su conversación no sería muy extensa.

— Bueno, fue un placer conocerte Bradley, me causaste muchos dolores de cabeza pero fue divertido también interactuar fuera de las competencias.

— A mi también me alegra saber que finalmente podré respirar en paz.

— ¿A poco te robo el aire? — bromeo

Bradley levanto una ceja con seriedad haciendo reír al moreno.

— Fue un placer conocerlo señor Bradley Cremanata Tercero — dijo Max extendiendo su mano

Bradley se negó a darle la mano, tal y como había pasado la última vez que se conocieron.

— Espero que tengas buen viaje, para que así no tengas motivos para volver.

Max negó con la cabeza riendo, los truenos de lluvia comenzaron a presentarse junto con algunas gotas. Bobby saco su mano de la ventana del piloto del auto y golpeó la puerta para llamar a Max.

— ¡Amigo si no nos vamos ya, nos inundamos!

Max rodeo los ojos y abrió la puerta para subir al auto.

— Adiós Brad

Cerro la puerta y el auto avanzo alejándose poco a poco.

— Adiós... galán.

Lo que ambos no sabían es que si se volverían a ver, pero pasaría mucho tiempo para eso.

Fue un largo recorrido para llegar a lo que era la gran ciudad y el nuevo departamento de Max. Departamento el cual su padre le ayudo a obtener pagando el primer alquiler, parte de su trato era que si en un mes no lograba su cometido volvería a los estudios. Así que, si lo lograba Max podría pagarse el departamento, si no, por ambas razones tendría que dejarlo.

Con ayuda de sus amigos llevo sus cosas al departamento en el cuarto piso del edificio. Un departamento que no era de gran lujo pero se podía vivir de forma decente.

Luego de dejar las cosas en su lugar ambos le dieron un fuerte abrazo a Max.

— ¡Harás falta amigo! — exclamó Bobby con un llanto exagerado

— Bobby cálmate, no me voy a morir — dijo Max entre risas

— Es como si fuera así — respondió Bobby haciéndolo reír aún más

— Que tengas mucha suerte amigo — le deseo Pj finalmente separándose del abrazo junto con el pelirrojo

Cuando ambos se fueron Max camino hacia su ventana y admiro su nuevo paisaje que, a pesar de la lluvia, disfrutaba. Era un nuevo comienzo, el comienzo de lo que podría ser algo muy grande.